Un extraño en mi probador
Todo empezó un sábado por la tarde cuando mi novio y yo decidimos salir de compras y acabamos 3 en el probador....
Todo empezó un sábado por la tarde cuando mi novio y yo decidimos salir de compras a unos grandes almacenes en la ciudad.
Hacía mucho calor y mi vestimenta era muy ligerita y atrevida, un top escotado cubría mis grandes pechos firmes y duros, una faldita corta que dejaba al aire mis estupendas y largas piernas y que tapaba levemente mi culito redondito y bien formado y unas sandalias verdes de tacón muy bonitas.
Llegamos al centro comercial y estuvimos eligiendo unas prendas para probar, entre las que vimos escogimos unos conjuntos de lencería y nos metimos en los probadores.
Hasta ahí todo normal. Me metí en el probador y empecé a probarme toda mi ropita. Mi novio estaba fuera esperando para traerme otras prendas a medida que me las fuera probando para elegir bien las tallas. Le dí unos vaqueros para que me trajera otra talla y al ver que no venía me asomé por la puerta del probador.
Había un hombre al otro lado de la puerta, un atractivo y guapo hombre de unos 40 años me miraba. Yo estaba desnuda, tan solo mi diminuta ropa interior cubría mi cuerpo esbelto. Nos miramos un rato, una descarga recorrió mi cuerpo excitado y el sugerente hombre pasó dentro de mi probador, me cogió por las nalgas y me empotró en la pared, empezó a masturbarme con sus dedos grandes y largos y me besaba intensamente.
Me bajó y sacó su polla firme ante mi. Era grande y larga y estaba dura y preparada para follarme con deseo. La cogí entre mis manos y pude comprobar su gran tamaño y los latidos de ésta.
Me puso de espaldas a el, apoyada en la pared y penetró mi encharcado coño, me folló con ganas, sus gemidos de placer se unían a los míos. Notaba su maravillosa polla dura dentro de mi coño y cada movimiento de sus caderas me llevaba al séptimo cielo.
Me folló hasta la saciedad, me volvía loca de placer aquel desconocido que había entrado en el probador y que me estaba follando. Sus manos apretaban mis tetas, mis pezones estaban cachondos y los agarraba con fuerza.
De repente alguien llamó a la puerta, era mi novio. El desconocido me dijo que abriera y que le dijera a mi novio que pasara dentro, que los tres lo pasaríamos bien. Así hice, abrí la puerta y pude ver la cara de asombro de mi novio cuando lo cuando cogí y lo introduje dentro del probador, le dije que se relajara y le bajé los pantalones y los calzoncillos, su polla empezó a ponerse dura, me puse a cuatro patas y se la empecé a chupar con mucho vicio, mi lengua recorría su duro y excitado pene y mi boca lo saboreaba con gusto.
El desconocido se colocó detrás de mí y empezó a follarme por detrás, introdujo su polla en mi coño cada vez mas excitado y me metió un dedo por el culo. Yo creía que iba a explotar de placer. Dos hombres para mi sola, uno follándome y el otro deseando hacerlo, estaba muy excitada y noté un líquido caliente sobre mi espalda, el hombre desconocido se estaba corriendo sobre mi, sobre mi culo y mi coño acabando en mi espalda.
Mi novio también empezó a correrse en mi boca y yo saboreaba su semen como quien saborea el triunfo .
Nos vestimos los tres y salimos del probador. El desconocido se despidió de nosotros y dijo que estaba encantado de conocernos, se fué y nunca mas lo volvimos a ver. Al final no compré nada pero la verdad es que no desaprovechamos la tarde .