Un excelente regalo de cumpleaños

El enloquecedor olor a perfume intimo.

UN EXCELENTE REGALO DE CUMPLEAÑOS, PARA UNA CUCHI-BARBIE (I)

Lo que les voy a contar en el día de hoy me pasó hace un año aproximadamente, yo vivía en la capital de mi país, y desde hace unos meses regresé a vivir con mi familia (mis padres) en una ciudad pequeña. Mi madre me comentaba de una amiga de ella llamada Alicia, que era buena amiga que era separada y tenia un hijo de escaso 8 años, el cual era bastante consentido y mal criado.

Cuando llegue a la casa de mis padres a vivir un día llegó la famosa Alicia, era una mujer de nos 40 años bastante conservada, de ojos claros, con unas curvas bien definidas y hacia unos meses atrás que acababa de operarse las tetas porque según ella las tenia escurridas, lo que si sé y me consta que le quedaron como las de una quinceañera.

Desde que la vi esta mujer me impactó y me llamó bastante la atención. Desde que nos conocimos ella sólo sabia desfilarme en frente sus definidas curvas y provocarme con ese redondo culo atravesado por un pequeño hilo dental; desde que veía como se le marcaba me despertaba los más bajos instintos.

Llegó el día de su cumpleaños y me invitó a su casa a una cena de celebración, esta con pantalón bastante ajustado a su cuerpo y con una camisa transparente y mostraba sus bellos seños atrapados en un maldito brasier media copa. Ah, y no faltaba la pequeña tanga seda dental; en medio de la reunión le dijo que me indicara donde quedaba el baño (ya que había tomado algunas cervezas y esta que me reventaba), cuando me indicó donde era el baño la cojí por la cintura y muy disimuladamente le pase mi "monstruo de la cavernas humadas y peludas" por su culo y lo único que escuché fue un UMMMMMM, el cual me significo que le había gustado lo que le había hecho.

Ya dentro del baño oriné como un caballo, cuando estaba terminado ví una pequeña tanga sobre el sanitario y me puse a desenrollarla y era un panty de ella de seguro el que usó durante el día porque tenía impregnado el delicioso perfume intimo de las mujeres y luego de excitarme con su olor y unos delicados vellos en su pequeña prenda intima, eso fue la mecha para que mi mostruo de me parara y fue cuando me masturbe y me vine con abundante leche caliente en su pequeña tanga, ese sería mi regalo de cumpleaños para esa mujer arrecha.

Pasaron los días y muestra amiga estaba perdida no venia a casa no llamaba, etc., un día decidí ir a su casa cuando llegue me recibió muy bien y tenia una pequeña minifalda que dejaba ver el triangulo de su hermosa tanga blanca transparente con fondo negro por sus vellos pubicos. Hablamos y de un momento a otro me dijo: Tu fuiste el del regalo en mi ropa interior, Yo le dije que Si.

Y al mismo tiempo de pregunte que como le había parecido: me dijo que nunca le habían dado un regalo como ese, que la había enloquecido y que aun lo conservaba cerca de ella, y lo guardaba bajo su almohada porque le olor a leche de macho la enloquecía; además me dijo que el regalo me lo aceptaba a medias, ya que quería de le llenara el cochito en vivo y en directo. Le dije que cuando ella le apeteciera, la complacería con el mayor de los gustos.

Fue así como empezó la faena, me le acerque, empecé besándola apasionadamente es sus labios carnosos, luego vino el juego de la lengua mientras yo exploraba cada centímetro de su cuerpo, fue cuando llegué hasta sus piernas y toque las delicadas panty medias que llevaba puestas y fui abriendo sus contorneadas piernas hasta ver en el fondo del cañón un hermoso panty transparente blanco y un perfume que hace algunos días me había enloquecido, empecé a besarle las piernas y me fui metiendo hasta llegar al objetivo su cochito, respiré profundamente y se me despertó más el monstruo que llevo colgando y fue así como aparte los delicado pantys y empecé a lamer su protuberante vulva como un niño cuando como un helado.

Estaba bastante húmeda y su olor se había acentuado, le lamí el clítoris y empecé a morderle los labios vaginales y a estirarlos, yo solo escuchaba lamentos de placer, fue así cuando de un solo jalonazo le quite el pequeño panty y me abalancé a la conquista de esa humada caverna la cual estaba sin un vello.

Mientras me encargada de meter mi miembro en su caverna le chupe sus tetas de quinceañera, son hermosas, paraditas, y con unos pezones rosaditos que parecen una cereza de coctail. Solo se escuchaba en medio del silencio el mete y saca de mi verga y los gemidos de la mujercita. En medio de la batalla me dijo que ve viniera en el culo, fue así cuando estaba ya a punto de venirme le dí una vuelta y le llené el culo de una ración de leche caliente.

Me dijo, que no había quedado satisfecha, fue así como decidimos a hacer el amor por el culo, empecé acariciarle al año para dilatarlo, pero tenía un culo bastante estrecho y tomamos la posición del perrito y con la ayuda de ella y un poco de saliva le metí la verga por su hermoso hueco en forma de asterisco (*), cuando mi monstruo ingresaba a su ano, esta mujer gritaba no se si era de dolor o de placer. Cuando ya lo había metido todo, dejo de quejarse; y solo decía que se lo metiera más y solo es escuchaba el golpe de mis bolas en sus nalgas, cuando ya estaba por venirme ella se volteo y me vine en su cara y lamió de mi leche hasta no decir más.

Luego de esta inagotable faena nos acostamos descansamos me bañe y me fui de nuevo a mi casa como si no hubiera pasado nada de extraño. Nos seguimos comiendo mutuamente, cuando tenemos deseos de buen sexo. En próxima oportunidad les contaré otro encuentro con mi cuchi-barbie (Este termino se utiliza para aquellas mujeres cuarentonas o cincuentonas que visten y arreglan como una de 15 años, pobrecitas). Hasta pronto.