Un encuentro por casualidad
Paula, una chica extremanente sexy en unos de sus sábados en la discoteca sin demasiadas emociones, tuvo su mejor orgasmo...
UN ENCUENTRO POR CASUALIDAD
Paula, como todos los sábados salía con sus amigos, iban a la discoteca, o al cine, en fin, se divertían juntos y nunca ocurrió nada fuera de lo normal.
Como de costumbre Paula se arreglaba mucho para salir, tocó el timbré y ya eran sus amigos que le esperaban en la puerta. Salió, a prisas, cogió su bolso, su móvil y su cigarrillo.
Ya en la discoteca, busco un asiento en el bar, y encendió un cigarrillo. Ella estaba muy sexy, llevaba una minifalda negra, y una blusa que mostraba buena parte de sus senos, pero como a ella siempre le gustaba la discreción, llevaba una chaqueta por encima, llevaba botas negras hasta la rodilla.
Después de haber encendido un cigarrillo, ella como en este momento estaba sin pareja para bailar, pidió una copa. Y se quedó ahí, mirando a la gente, pero su parada se detuvo cuando vio a una mujer, al otro lado de la discoteca. La mujer era muy guapa, pero Paula, intentó borrar lo que estaba pensando en el momento en que la miraba, la imaginaba en ropa interior.
No quiso aceptar lo que estaba pensando y salió al medio de la gente para encontrar alguien con quién bailar, y encontró, un chico muy guapo, se llamaba Patrick, y parecía ser el sueño de todas las chicas, tenía el cuerpo perfecto, una sonrisa Empezaran a bailar de una manera sexy, cada vez estaban más cerca uno el otro, entonces Paula vio que la mujer a la que le había llamado la atención, le estaba mirando fijamente, en la manera como bailaba, como se movía, y sus miradas se cruzaron, Paula intentó disfrazar, pero no pudo, su mirada era como un imán, la mujer era inmensamente bella.
Pero Paula siguió bailando con Patrick y mirando a la mujer que tanto le llamaba la atención por su belleza.
Al término de la música que bailaban, Paula se dirigió al bar y bebió un sorbo de su bebida. Se sentó y en cuanto encendía un nuevo cigarrillo la mujer, si esta, se acercó a su oído por detrás, y pronunció, vagarosamente, con una voz muy sexy - ¿puedo sentarme a tu lado? - Paula sin poder decir q no le dijo q si. La mujer le preguntó su nombre, y Paula respondió turbada. Y antes de que Paula pudiera preguntar como se llamaba aquella belleza, la mujer dijo - yo soy Danielle. Y así empezaron una conversación, que hizo Paula perder la noción del tiempo. Sus amigos volvieron de la pista de baile y preguntaron si Paula no quería bailar y dijo que no. Presentó a Danielle a sus amigos, y estés le dijeron a Paula que se iban a otra discoteca, y le preguntaron si ella quería venir, y apresuradamente miró a Danielle, la cuál le miró fijamente en los ojos, lo cuál hizo a Paula tener escalofríos. Dijo a sus amigos que no quería ir, y que no se preocupasen por ella, que para volver a casa iba a coger un taxi.
Volvió la mirada a Danielle, la cual le miraba con deseo de poseerla. En el rato que estuvieron hablando Paula se quedó sorprendida por la maravilla de mujer, no solo físicamente, que acababa de conocer. Y entonces Danielle se acercó a su oído, y le dijo - voy al baño, quieres venir - Paula ya sabiendo de sus intenciones, le cogió la mano a Danielle y fueron al baño.
Ya en el baño, Paula se encostó en la pared al cerrar la puerta. Danielle le miraba con deseo. Se acercó, le tocó el rostro, su boca con la punta de su dedo indicador, lo bajó por el cuello, por sus senos y se detuvo ahí. Empezó a besarla, suavemente, mordiéndole los labios, tan delicadamente q el cuerpo de Paula estremecía de deseo, solo en pensar lo que Danielle era capaz de hacer.
Danielle empezó a besar su cuello, fue bajando, sacó la blusa a Paula y le besó los senos, y los tocó como ningún hombre lo había hecho hasta ahora.
Entonces Danielle le tumbó en el suelo y empezó a lamer su ombligo, lo que le encantaba a Paula. Sacó su falda, sin prisas, sus bragas, besando la parte interior de los muslos de Paula, lo que le excitaba mucho.
Empezó a besar su órgano, y Paula ya estremecía de placer, pues Danielle con simples toques le excitaba mucho. Danielle levantó un poco la pierna de Paula, para que se quedase doblada, hizo lo mismo con la otra.
Y empezó a lamer los labios superiores de Paula, y esta cada vez se excitaba más y más, entonces Danielle, después de tiempo lamiendo y besando los labios superiores y inferiores, cuando vio que Paula estaba a punto de tener un orgasmo, empezó a chupar el clítoris, lo que hizo Paula delirar, tuvo el primero orgasmo, del cuál vinieron muchos seguidos, Danielle no paraba ante las suplicas de Paula, siguió, y Paula tuvo su mejor orgasmo, una sensación inexplicable, y finalmente Danielle se salió de ente medio de sus piernas y se tumbó al lado de Paula, que estaba aún sintiendo la sensación del mejor orgasmo que había tenido. Danielle le miraba, con cara de satisfacción, y Paula en ese momento le dio las gracias, fue solo lo que consiguió decir en ese momento.
Pasado unos minutos Paula ya recuperada se levantó, se vistió, Danielle estaba encostada en la pared mirándola con deseo, y entonces Paula, le sujetó la cabeza y le dio un beso largo.
Y salieron del baño y se dirigieron al bar nuevamente, como si nada hubiese ocurrido, solo había pasado 10 minutos desde que habían entrado en el baño.
En el bar, Danielle encendió un cigarrillo, le dio una pitada y le ofreció a Paula, ella lo cogió, tocando en sus dedos, que por más simples que parezcan le producían un deseo enorme.
Paula cogió la mano de Danielle y salieron a la pista a bailar, y bailaban de una manera que todos las miraban, pues también se tocaban .
Bailaran durante un rato y decidieron irse .lo que pasó en seguida les contaré otro día
besitos!