Un día más que pienso en ti
A casi un año de haber terminado una relación larga no dejo de pensar en él.
En esta ocación tengo algo que realmente no revisé muy bien, en febrero de 2018 terminó mi relación de casi 6 años y dejando a un lado la etapa triste, en los últimos meses me encuentro pensando en el pero no enonajada, ni triste sino con mucho deseo, y esque después de el no he vuelto a sentir un orgasmo intenso. Decidí no revisar tanto la redacción por que es como mi mente lo piensa, con ideas que saltan de una cosa a otra. Espero lo disfruten.
Otro día más que yo pienso en ti. No debería, lo sé y sin embargo tu recuerdo aparece una vez más en mi memoria. No se trata de tu sonrisa y tus hermosos ojos al verme llegar aunque ahora que lo menciono claro que los recuerdo. Tenía tanto tiempo que no lo hacía.
Pero lo que ahora recuerdo se trata de que otra vez te extraño recostado a mi lado, sintiendo la calidez de tu cuerpo desnudo, el bello en tu pecho, tus brazos, tu barba rozando mi piel. Extraño sentir el peso de tu cabeza sobre mis senos al estar abrazados, y tus enormes manos sobre ellos, rodeándolos acariciándolos, apretándolos sumamente pero firme y ver como no caben en tus manos a pesar de su tamaño, son tan grandes no logran abarcarlos todos, sentir como es tan rico que mis pezones reaccionan ante las caricias y se van endureciendo un poco, y un poco más, hasta que finalmente quedan paraditos. Me piden tu boca, sentir la humedad de tus labios y como los aprisionas y succionas, mi piel también reacciona, se pone chinita. Un escalofrío recorre mi cuerpo y esa sensación es más intensa en la amiguita, mi respiración comienza a ser más acelerada y siento la humedad en mi entrepierna correr.
Por otro lado, siento como tu rico pene va creciendo y rosa contra mis piernas, mis manos lo encuentran y comienzo a aprisionarlo, siento como se moja también, y como aumentando de tamaño mientras sigues jugando con mis pezones, yo lo aprieto un poco, mientras subo y bajo mi mano lentamente, que rico crece… también pide mi boca y mi boca quiere probarlo, sentir su tamaño, su textura, mi lengua quiere probar su sabor.
Te pido que te recuestes, mientras te digo no pasa nada, me inclino sobre ti, mi cabello se desliza un poco para enfrente y me vuelvo acomodarlo, quiero que me veas. Me acerco al amiguito que esta enorme como siempre; poso mis labios en la puntita; comienzo jugando con mi lengua con la cabecita, es delicioso, con su sabor saladito; lo introduzco un poco mas mientras mis manos juegan con tus testículos, recordar su aroma mmm…entonces saco tu pene de mi boca y comienzo a lamer a los testículos, y olerlos que deliciosos, mientras mis manos no dejan de masturbarte, siento como lo disfrutas, veo tu cara de placer, tus ojos se entrecierran, es mucho, los lamo y meto ligeramente a mi boca, sientes como los aprisiono un poco y los vuelvo a sacar, los huelo y lamo una última vez para regresar a meterme todo tu rico pene a la boca; esta comienzo meterlo y sacarlo, más profundo en mi boca, siento como llegas a mi garganta, es tan grande que podría ahogarme, pero ver como lo disfrutas, como se pone más dura, y quiere más así que comienzo a moverme más rápido más rápido quisiera sentir como terminas en mi y que me des de tu leche de nuevo.
Continuo comiéndolo todo lo que puedo y aumento el ritmo un poco, un poco más y más mientras aprieto mis labios para que sientas más presión, y no dejo de acariciarte con mis uñitas largas los huevos y tu aprovechas para tocar mis senos ves como rebotan por el movimiento, tengo los pezones muy duros, estoy muy excitada, como quisiera sentirte adentro, pero pueden más mi ganas de tomarme tu leche. Entonces siento que comienzas a bombear, siento que vas a terminar y lo hago más rápido no quiero que se desperdicie nada, sigo rápido, no me detengo quiero que te vacíes en mí, que me des todo, que me llenes bien, voy más y más rápido, finalmente siento como explotas, toda tu leche dentro de mi boca. Es demasiado y casi me hago, pero me la paso, aunque trato de disfrutarla. Que rico has terminado, sé que necesitas un momento para descansar, me recuesto a tu lado mientras no dejas de acariciarme y yo no dejo de disfrutar de tus brazos y pecho velludos…
Aprovecho que te has dormido un poco para pararme de la cama, cuando despiertas ya estoy cambiada, traigo un babydoll rojo de tela de satín suave, con un encaje negro en los senos, y un liguero sencillo, medias negras que quedan a juego, y unos zapatos de tacón de 9 cm, he estado practicando así que tengo ahora buen equilibrio. Te gusta lo que ves y la reacción es evidente tu rica y enorme verga comienza a crecer. Me acerco seductoramente y tu te levantas para apreciar mejor… te beso apasionadamente, que encantador es el sabor de tu boca y la manera en que nos besamos, me muerdes ligeramente el labio, sabes que eso me fascina y mientras aprovechas para bajar tu mano por mi espalda, sentir la tela que apenas me cubre, me tienes, me das una nalgada fuerte y firme, con lo que provocas que suelte un gemidito de placer, bajas mas hasta mis piernas, acaricias y vas a mi entrepierna, estoy muy húmeda, metes un dedo, mmm que rico y vuelves a recostarte te acomodas otra vez y yo me poso sobre ti, tu pene está muy húmedo y yo siento muchas ansias de sentirte, se ha puesto muy duro, es tan grande. Lo acomodo y siento como entra, pero aunque húmeda, estoy algo apretadita, duele un poco por el gran tamaño pero es delicioso y comienzo a moverme despacio, mientras te vuelvo a besar un poco, después me levanto y remueves la parte superior del babydoll para liberar mis senos , y los vuelves a comer, primero uno y luego otros, cada vez estoy más excitada, finalmente entra toda y dejo escapar otro gemido, mi movimientos son más rápidos, me incorporo para sentir más adentro, que delicioso estás, siento como tu carne me llena toda, mis senos no dejan de rebotar, una y otra y otra vez, tu no dejas acariciarlos y de acariciar mis piernas, y yo no puedo dejar de gemir de placer es delicioso saber que te estoy comiendo todo y aprietas mi pezones con fuerza siento que no puedo más, me das una nalgada y gimo más fuerte, entonces me das otra, voy a terminar, siento como se aproxima, me dices que te encanta que sea tu putita y no puedo más siento como el orgasmo recorre mi cuerpo y exploto en placer…
Mi respiración es muy acelerada y me recuesto en tu pecho, Me agarras de la cabeza, me dices que no pasa nada y sigues moviéndote rápido, a penas y puedo sostenerme…. Pero aprovechas para cambiarme de posición me recuestas y quedo frente a ti estoy agotada pero tu vuelves a penetrarme, subes mis piernas a tus hombros y puedes apreciar muy bien los tacones yo solo estoy flotando en el placer mientras tu aceleras cada vez más y más, mis senos se salen de la fuerza con que lo haces… siento que vas a terminar pero te detienes, me volteas, ves que me he recuperado un poco y pides que me pare, me sostengo de la pared y vuelves a penetrarme, llegas hasta adentro un leve gemido vuelve a escaparse y tu penetras cada vez mas fuerte, me jalas un poco del cabello pero también me das nalgadas, aprietas mi pechos me desases toda. Estoy tan excitada que de nuevo siento que voy a terminar te digo que me des un poco más, más, más.. que rico, por favor no te detengas…. Y lo siento como creces dentro de mí listo para vaciarte. Y mi amiguita te aprisiona con un poco más de fuerza, vamos a termina,…. Si, más, si…. Siento como te vacías dentro, tu pene no deja de bombear dentro de mí y yo vuelvo a explicar mientras grito, no me puedo sostenerme, pero quiero que disfrutes, que te vacíes por completo… recuperas el aliento y sacas tu rica verga. Entonces siento como todo escurre, que rico, tenía tanto sin sentir eso, no quiero limpiarme quiero sentir como se enfría y como queda en mi piel. Finalmente nos recostamos en la cama, yo debajo de tu brazo te doy un beso rápido y nos quedamos dormido sabiendo que al despertar lo haremos otra vez…
Pero no, eso no pasa, despierto y estoy sola en mi cama, todo quedó en mi mente, si pudiera pedir algo sería una noche más vez contigo, y una noche no me alcanzaría, tendría que ser un día, quisiera tener el poder para convencerte, el valor si quiera para decirte que me vuelvo loca pensándote, deseándote y se que no debería, que no esta bien, pero mi cuerpo no entiende, mi piel te reclama mi boca tiene sed de ti…pero Dios que importa! Sólo es otro día más que pienso en ti, ¿Cuántos van?