Un día en la piscina
Un sueño más que tuve el placer de disfrutar...Hoy nos vamos a la piscina
Éramos compañeros de piso, estábamos en la piscina pública, yo llevaba un bikini rojo con la parte de abajo tipo tanga, cada vez que me sumerjo para bucear, siento que me miras el culo y cuando salgo a la superficie, me giro, ahí estás observándome, con cara de querer hacer algo más que solamente mirar.
Al instante vamos a los toboganes y mientras hacemos fila, tú estás detrás de mí, me apetece jugar, así que sin darme la vuelta, te pongo la mano sobre tu bañador mojado y te empiezo a acariciar suavemente, paro y me giro
-He visto como me mirabas, ¿Este bikini me hace buen culo?-
Al oído entre suspiros, me dices -Te hace un culo increíble-.
Más tarde en la barra del bar, mientras esperamos a pedir, me preguntas que es lo que quiero comer, pero no puedo apartar la mirada de tu boca, quiero morderla; mientras me sigues hablando, me acerco despacio y te rozo con mis labios solo un poco, se te ha vuelto a poner esa cara de querer algo más, me encanta.
Volvemos a casa, me estoy duchando y cuando salgo oigo un ruido que viene del salón.
Me asomo despacio y veo que te estás masturbando. Yo me acerco sin decir nada, me quito el albornoz delante de ti, me siento en tus piernas y empiezo a tocarte con mis manos tu miembro viril, está muy duro.
Pongo tus manos en mi pecho, te rodeo el cuello con mis brazos para empezar a tocarte sin manos, sin que entres en mí, solo me rozo contigo, cada vez estás más duro y mojado por mis labios, pero no los de la boca, sigo hasta casi llegar a correrme, cuando estoy a punto, paro y te digo
–Cómetelo y haz que acabe en tu boca-