Un dia en el Shopping by Perla_de_4RS

Todo sea por mantener mi empleo

Me llamo Sofía, trabajo como secretaria en una importante empresa de créditos. Mi jefe se llama Juan Scorza, es un señor de unos 60 años, bien parecido pero sumamente exigente con todo el personal de la empresa. Para mi desgracia hacía ya unos días había sido advertida por Don Juan ante reiterados olvidos de mi parte para con órdenes o recados que me había dado.

"Sofía, confío en vos pero ya van varias fallas consecutivas, o prestas atención o ante la próxima dejarás de pertenecer a la empresa". Así de directo fué. "Una falla más y se acabó".

Obviamente eso me hizo prestar más atención y dedicar mayor esfuerzo a mi trabajo, es más, horas extras hacía cada semana para reparar mis errores. Es a raiz de esto que deseo contar lo que me ocurrió la semana pasada.

Viernes por la mañana Don Juan me cita en su oficina para darme las directivas y órdenes de fin de semana y principio de la entrante, se supone que ante sus pedidos yo anote cada uno de ellos. Así comenzó con llamados telefónicos, facturas, presupuestos, y un pedido especial:

-Mi esposa cumple años y quiero que te vayas al shopping de las luces, segundo piso, y en la tienda de Karma, le compres una blusa como regalo, que sea de buen precio, que sea rosa y elegante en talle como para ti, sabes que mi esposa tiene tu contextura. Quiero que sea de allí, entendido? A ella le encanta esa tienda. Que te la envuelvan de regalo y me la traes a última hora para yo mañana entregársela en su fiesta.

-Si señor Juan, todo comprendido.

-Bien, haz todo y luego te marchas al shopping de las luces.

-Bien señor, enseguida.

Así salí de la oficina, tomé un café y me puse a resolver cada una de las tareas.

Sin darme cuenta me llevaron más tiempo de lo pensado y fue así como al mirar el reloj ya eran las 6 de la tarde!!! Las 6!!! A las 9.30 Don Juan se retiraba y debía llevarse el regalo!!! Tenía los minutos justos como para ir y regresar antes de esa hora.

Me puse el abrigo, apague la pc y me fuí a la calle a tomar un taxi.

Para mi desgracia no lograba parar un maldito taxi!!! Estuve como 10 minutos para poder subir a uno. Al fin uno hace caso a mi llamado.

-Buenas tardes. Al shopping de las luces por avenida de los senderos.

-Bien, hacia allí vamos.

El taxi marchaba a buen ritmo, estaba yo más tranquila y confiaba en poder llegar a tiempo. Mientras pensaba en esto y en lo que descansaría el fin de semana el taxi comenzó a ir más lento… más lento hasta que frenó.

-Parece que algo ocurre!!! Sabe usted que puede ser??

-No señorita, seguramente en breve se descongestionará.

-Tengo mucho apuro!!! Mi trabajo depende de esto!!!

Parecía que los planetas se complotaban en mi contra!!! Todo lo que podía pasar pasaba. Me estaba poniendo nerviosa, cada vez que miraba el reloj las agujas se clavaban en mi pecho y me daba un espasmo en mi estómago que me volvía loca.

Avanzábamos casi a paso de hombre, por la radio escuchamos de un derrumbe a una cuadra del shopping de las luces que estaba interfiriendo el tráfico de toda esa zona y comprendimos los motivos de semejante lío. Avanzábamos lento, pero avanzábamos. Aún estoy lejos. Ya son las 7!!! Una hora y ni siquiera estoy en el maldito shopping!!! Pensaba para mis adentros.

De repente otra vez paramos, un oficial se nos acerca y nos dice que deberemos estar estacionados allí por 15 minutos hasta que logren despejar el camino.

15 minutos????, 15 minutos!!!! Una barbaridad!!! No podía esperar semejante tiempo allí varada.

-Sírvase, cóbreme que me bajo aquí.

-Pero señorita, faltan varias cuadras… seguro desea bajarse??

-Si!! No puedo esperar más!!!

Pagué, le dejé el poco vuelto como propina y raudamente me baje del coche para salir disparada como una loca por las calles. A pesar de los tacos lo hacía bastante rápido. Con cada cuadra que hacía miraba las agujas del reloj tratando de detenerlas, pero era imposible. Y para colmo entre que miraba el reloj y lo que los bomberos hacían en el derrumbe, ZAS!! Pisé un pozo y se me rompió el taco!!! Si!!! Justo ahora!!! Justo a mi!!! Que hago!! Por dios!!! Solo atiné a sacarme el otro zapato y descalza hacer la última cuadra hasta llegar al shopping.

Miro el reloj, son las 7:20 , mi tiempo se acorta. No puedo ir descalza por la vida, así que entro en la primer tienda de calzados que veo y solicito al vendedor unas sandalias que vi en vidriera numero 37. Se demora en buscar y al regresar me dice que ese modelo en 37 no hay más!!!

-Como no hay más?? Como no hay más?? Estoy apurada y me dice que no hay más??? Me está cargando???

-No señorita, me quedan sólo en amarillo o rosa, no negras ni blancas.

-Pues deme las rosas!!! En 37 y me voy.

Yo como loca de furia e impotencia y el vendedor sin poder creer lo que me pasaba.

Me calcé las sandalias, pagué y me retiré. Miro el reloj… 7:45. Mi corazón late a mil, no me alcanzará el tiempo… me echarán!!! Eso pensaba para mis adentros mientras salía del local de calzados hacia la escalera que me conduce al segundo piso.

Finalmente llegué a la tienda. Entro, sólo una clienta y el vendedor. Al fin una a mi favor.

-Hola

-Hola.

-Estoy buscando una blusa, rosa, de buen precio y calidad. Es un encargo. Debe ser elegante y en talle como para mi.

-Bien, las blusas elegantes están en esa zona, puede usted elegir y buscar lo que le agrade, los probadores a su izquierda.

Yo estaba desesperada, a contrareloj y encima debía elegir friamente algo que le agradara a la esposa de mi jefe.

-Por favor, estoy muy apurada, podría usted ayudarme y mostrarme las que sean rosas?

-Bien, como no, no hay mucho sólo quedan tres modelos.

-Ok. No importa, quisiera verlas.

Sobre el mostrador pone las tres. Las veo, una no me agrada para nada pero las otras dos si. La que más me gusta es de satén rosado, con mangas largas y bolados en sus muñecas, escote algo pronunciado y con bolados también allí. Se veía elegante y sexy.

-Me probaré esta, permiso.

-Adelante, es hermosa. Me dijo el vendedor.

Me dirijo a vestidores, me pruebo la blusa y se la muestro al vendedor… me quedaba hermosa y resaltaba mi busto. El vendedor no podía dejar de sacarme la mirada de mis senos.

-Me gusta y calza justo, no le parece??

-Maravillosa!! Le queda muy sexy. Me dijo.

-Me la llevo, envuélvala para regalo por favor.

-Enseguida.

Finalmente había cumplido con mi tarea y ahora sólo faltaría pagar y regresar a la oficina. Por un segundo respiré aliviada. Son las 8:10, hasta me alcanza el tiempo para tomarme un café, pensé.

Me dirijo a la caja.

-Ha hecho una excelente compra señorita!!

-Gracias, eso creo.

-Son 200 dólares.

-Qué?? Cómo?? 200 dólares?? Se ha equivocado!!!

-No señorita, ese es el precio.

-Y la otra blusa??

-Esa cuesta 225 dólares.

No puede ser!!! No tengo ese dinero!!! En el apuro por salir de la oficina olvidé pedirle al contador el dinero pensando que con lo que tenía me alcanzaría.

Incrédula miraba dentro de mi cartera. Era desesperante. Busqué mis tarjetas, pero no estaban!!! A la mañana las había sacado de la cartera y dejado en la cómoda de mi habitación para no extraviarlas con algún descuido.

-Qué ocurre señorita?? Pregunta el vendedor

-No poseo ese dinero!!! No cuento con esa suma!!! Olvidé el dinero!!!

-No se preocupe, yo se la reservo hasta mañana.

-Imposible!!! Debo llevar esa blusa hoy antes de las 9.30 pues sino perderé mi empleo!!!. No puede usted dejar que me la lleve y mañana vengo a pagarle el saldo?.

-No señorita eso es imposible. Este cuento ya me lo han hecho varias veces!!! Sin dinero, no hay blusa.

No salía de mi asombro. Me salía todo mal.

El tiempo corría. No tenía el dinero y no podía llevar otra cosa.

De repente el vendedor me mira a los ojos y me dice:

-Pero para chicas como vos… tengo alternativas de pago.

-Cómo dice?

-Como escuchastes, me puedes pagar de otra manera. Sin necesidad de dinero.

-Puede ser más específico señor?? Dije yo.

-Si. Quieres la blusa verdad?, perderás tu trabajo si no la llevas, verdad?? Pues bien, me gustan tus senos y tu culo desde que entrastes. Si me permites jugar con ellos un ratito… te llevas la prenda. Que dices?

No podía creerlo! Me estaba sobornando! Me quería coger a cambio de la blusa!

Pero que otra alternativa me quedaba?, sin tiempo para más y yo entre la espada y la pared. Era o la verga del vendedor o el despido de mi jefe.

-Acepto, le dije. Pero debe ser rápido ya que mi jefe me espera con el regalo.

-A ver, los tiempos los pongo yo y tu harás lo que diga, de acuerdo?

-Si señor, pero se lo ruego. Mi vida depende de este encargo.

-Eso es problema tuyo. Te voy a coger, pero no vestida asi, pareces una vieja y con unas sandalias rosa que te quedan muy feas!!! Donde las comprastes??

No sólo me iba a coger sino que además me humillaba y mandaba, yo estaba inmóvil, sin poder creerlo.

Fue a un armario y de allí me da una bolsa de papel con ropa en su interior. Y mirándome a los ojos me ordena:

-Póntelo! Ahora y por completo, sin dejar nada. Rápido.

Entre nervios, temor y asombro yo no lo podía creer, estaba paralizada.

Me dirijo al probador y luego de sacarme la ropa veo el contenido de la bolsa, un conjunto completo de colegiala, una camisa blanca de seda, una falda tableada muy cortita, un brassiere y un braga hilo dental rosas, medias blancas a media caña, unos tacos medianos de plataforma de unos 7 cm negros y un par de mitones blancos de encaje mas un par de lazos de satén rosados con moños que seguramente eran para mi cabello. Al ver la ropa me excite!! Me encantaba la fantasia de ser la colegiala, pero hubiera esperado poder cumplirla en otro contexto.

Me cambie lo más rápido posible. Dejando sin ponerme los lazos en el pelo.

Al salir del probador miro al vendedor y me responde con una mirada de excitación, inmediatamente me dice:

-Hermosa!! Una belleza, pero te faltan las colitas! Dije que te pusieras todo! Anda, póntelas.

Debía obedecer, y así lo hice regresé al vestidor y me hice las coletas. Estaba para el infarto!! Una verdadera putita!!! El espejo me devolvía aquella imagen de una nenita deseosa de ser cogida y desvirgada por su hombre.

-Listo, asi le parece mejor? Alcanzo a decirle.

-Si mucho mejor me responde. Pero por haber sido una nenita desobediente serás castigada!!! A cinco locales de aquí hay una farmacia, vas allí y me compras unos preservativos.

-Pero… por favor! No me haga hacer eso!

-Cállate, quieres la blusa?

-Si, bien sabe que si

-Bien, pues ya sabes que tienes que hacer!! Y apúrate que el tiempo corre! Jajaja, esbozó una pequeña sonrisa.

Que más, debía obedecer. Salí del local y ante la mirada todas las personas presentes en el Shopping me dirigí a la farmacia a comprar los preservativos. Me sentía humillada, avergonzada, caliente, una puta y sabía que eso mismo pensaban todos lo que me veían y eso incluía al farmaceútico.

A pesar de la mirada asombrada y exitada del hombre de la famacia, le pido el recado y el me los vende pero luego de recibir mi dinero me dice casi susurrando:

-Que esa colita los difrute! Te di los super lubricados!

No supe que decir!! Solo atiné a salir de allí y que esta tortura excitante se acabara.

Entro nuevamente a la tienda de ropa luego de pasar por el pasillo del Shopping y recibir todas y cada una de las miradas, y algún que otro comentario, de las personas que allí se hallaban. Pero había otra mujer comprando. Eso me puso muy neviosa!!!

No será que el maldito vendedor me quisiera coger ante la vista de sus clientas? Pensé.

Me acerqué a el:

-Aquí tiene señor su pedido.

-Gracias, has sido muy obediente y amable, ahora te daré lo prometido. Te ves hermosa!

Ven te presentaré a Rocío, la otra vendedora.

Rocío, mira te presento a …como te llamas?

-Sofía

-Lindo nombre, verdad? Sofía la dulce colegiala, jajajaja. Nuevamente aquella risa burlona sonó en su boca y retumbó en mis oidos como una puñalada humillante y degradante que me hacía sentir una rara sensación de morbo.

-Pero que linda nenita!!!, y que dulce se ve con esa ropita!!

-Verdad que si?, Sofía tiene una deuda conmigo y ahora viene a saldarla. Encargate del local que enseguida regreso.

-Bien, no te preocupes, yo me encargo. Dice ella.

Me toma fuertemente de la mano y casi literalmente me arrastra hacia una puerta atrás del mostrador. Un lugar algo reducido donde sólo se hallaba un colchón y unas cuantas cajas.

-Bien Sofía, la hora ha llegado, tu boquita y tu colita son mias. Cuanto antes lo hagamos más rápido saldrás de aquí con tu blusa.

-De acuerdo papito.

Me arrodille y con sutileza comencé a bajar su cremallera, metí mi mano y saqué una verga que ya se comenzaba a parar, de buen tamaño.

Comencé a acariciar su miembro para luego meterlo de lleno en mi boca. Me gustaba, sabia rico!, bah!! No era la primera vez que me comía una polla, pero si en semejantes términos. Empecé a acelerar el ritmo, de repente me olvidé del reloj y del tiempo, me empezaba a agradar aquella situación y aquella verga!!!

Su miembro crecía, yo más chupaba y el más gemía. Le gustaba mi trabajo.

-Bien!, lo haces muy bien! Putita!!!, mira la perrita que encontré aquí!, de haberlo sabido antes!

-Si señor, soy su dulce colegiala.

-Mmmm, si, seguí sacale a papito toda su lechita!!

-Si papito dale a esta nenita toda tu lechita.

-Mmmmm, si sigue y la tendrás!!!, sigue no pares hasta que te diga, disfruta que recién empezamos.

Me tomaba de las coletas y me empujaba contra aquella verga que ahora si ya tenía un tamaño bastante grande!, al menos era la más grande que había entrado a mi boca.

Yo seguía, me ahogaba, pero sentía aquella verga y aquella situación cada vez más excitante, de hecho ya me comenzaba a mojar sobre aquella diminuta tanga rosada que llevaba. Cada vez empujaba más fuerte y cada vez aquel miembro estaba más duro y cuando estaba casi a punto de explotar, se detiene.

-Ahora papito quiere esa colita, esa hermosa colita de puta.

-Si papito, la nena Sofía quiere que se la des por el culito.

-Mmmm que puta que resultastes!!! Date vuelta.

Me toma con dureza y me pone en cuatro patas sobre aquel colchón algo duro.

Inmediatamente siento como corre mi tanga y se comienza a abrir camino con aquel miembro duro que hasta hace instantes estaba en mis labios. Aquel miembro que cogía mi boca ahora cogería mi culo.

Yo ya estaba mojada, el se dió cuenta y empezó a empujar con firmeza para entrar por mi culo, empujaba, yo gemía, y empujó hasta que entro por completo!!!

Mi culo explotaba de ardor!! Nunca algo tan grande había estado allí!

-Si!!!, mirá que lindo culo!!, te gusta putita???, verdad que si???

-Si papito, si papito, muchoooooo, muchooooo.

-Aaaahhhh, aaayyyyy, aaaaahhhhhhh, aayyyyyy

-Mmmmm, siiii asiiii putita!!! Pedimela! Pedime que te de verga!!

-Si papito… dame verga!, dame mucha verga! Mucha leche! Sigueeeeee, no pares, sigue por favor!!!!

-Tomá puta!!! Tomá puta!!!

-Másssss, siiii mássssss.

Bombeaba fuertemente, sus huevos en mi culo eran un placer! El dolor y ardor se transformaron en placer y yo estaba a mil, super excitada al ser casi violada por un completo desconocido. Bombeaba con fuerza, yo gemía, casi gritaba, sentía que esa leche ya saldría y no quería perdermela. Me dí vuelta y tomando su verga en mis manos la froté y metiéndola en mi boca recibí toda su leche.

-Tragá puta! Eres una puta de verdad!! Eres una verdadera puta!

Ahhhhh, uuuuuuuu.

Toda la leche entro en mi boca y fue tragada por mi sin derramar nada.

-Mmmm que rica lechita me has dado papito!, mmmm sabe deliciosa!

-Seguro que si! Y seguro no es la primera lechita que has tomado, pero seguro que si ha sido la primera verga que entró en ese culito, verdad? Jajajaja. Esa risa otra vez, una risa que no hizo más que hacerme nuevamente sentir cual era mi lugar allí y en que condiciones estaba.

-Si papito, es la primera que entró allí.

-Y seguro que te encanto, verdad?, las nenitas como tu son todas iguales. Jajajaja.

-Si somos todas iguales, zorritas de papito. Mmmm. Dame más! Dame más!

-No! Basta por hoy! Demasiado por una blusa como esa. Acaso olvidastes que debes entregar un regalo a tu jefe?

-No, no lo olvidé, pero mi colita aún está calentita y deseosa de ese miembro.

-No!!! Dije que no!!!

Era increíble aquella situación, me sobornó, me humilló, me cogió, me lleno la boca de su leche y yo encima le pedía que siguiera!!! Pero la verdad es que estaba tan excitada que con todo aquello que viví no me había alcanzado, quería sentirlo más, más y más, diría que casi por siempre!!!

Nos acomodamos las ropas y salimos de aquella habitación. Afuera Rocío nos miraba con poco asombro como si eso ya lo hubiese visto otras veces.

Le pido mi ropa, la que había quedado en el vestidor cuando me puse la de colegiala, a lo cual me responde:

-No nenita!!! Qué ropa? Esa ropa de vieja que trajistes??, pues ya la hemos tirado, verdad Rocío?

-Si, ella asintió agregando, ya la tiré, era horrible. Ese conjunto te queda mejor.

-Pero no puedo salir asi a la calle, préstame algo tu, por favor, te lo ruego!

-No Sofía, no insistas la nenita de papá debe vestir como la nenita que es, así que vete ya a llevar el regalo porque aparte de todo perderás tu trabajo.

Vamos!!! Apúrate, acaso has visto la hora?

Miro el reloj, eran las 9. En sólo media hora debía llegar a la oficina y dejar el regalo.

Ya no podía esperar más. Me acomodé, me miré en el espejo del vestidor y acomodé mis coletas y falda tableada y salí de la tienda con la blusa de regalo.

Nuevamente las miradas y comentarios los sentía sobre mi, pero ahora aparte de la vergüenza y la humillación de tener que recorrer todo el Shopping vestida de putita colegiala había en mi interior un morbo placentero por aquella cogida recibida.

Salí a la calle e inmediatamente conseguí un taxi. Llegué a la oficina, saludé al portero, que como muchos tampoco podía creer lo que veía y ante la ausencia de gente ingresé a la oficina de Don Juan a dejarle la blusa justo en el momento en el que se metía al baño. A través de la puerta le digo que allí le dejo el regalo y que me retiro rápidamente pues no me siento bien.

Llegué a mi casa y me saqué aquél conjunto de colegiala, pero no lo tiré, al contrario, lo guardé como recuerdo de una tarde inolvidablemente excitante y adrenalínica. Fiel testigo de nuevas sensaciones en mi vida.

Hoy es sábado, estoy yendo a Karma a comprar un vestido. Por supuesto que no llevo dinero.