Un día de entrenamiento

Hola,

Mi nombre es Guille. Soy un chico deportista de 26 años. Tengo buen cuerpo, de hecho voy al gym mínimo 4 días a la semana además de entrenar (fútbol) dos días a la semana. Me considero bisexual.

Un miércoles de hace unos meses me dispuse a ir a entrenar. Preparé la mochila y me fui hacia el campo. Estaba lloviendo muchisimo, hacía aire, frio...un día muy desagradable. Llegué al campo de entrenamiento y solo habíamos llegado 4 jugadores además del entrenador. Como no éramos gente el mister decidió entrenar en el gimnasio del club.

Tras una sesión de abdominales, flexiones, pesas...fuimos al polideportivo y comenzamos unos juegos corriendo. Tras unos 20 minutos corriendo el mister dijo que se iba. Dos de mis compañeros le siguieron y ahí nos quedamos estirando Carlos y yo. Carlos es un chaval de mi edad, más alto y más fuerte, moreno, con rasgos algo árabes...y un muy bien cuerpo.

Nos quedamos charlando yhaciéndonos bromas. Cuando decidimos irnos al vestuario ibamos empujandonos como niños...al llegar al vestuario estaba todo el suelo mojado del agua que había caido de las duchas cuando habían estado mis otros dos compañeros. Al segundo empujón nos caimos al suelo y empezamos a forcejear. En un segundo Carlos estaba encima de mi y me tenía totalmente inmovilizado. Su paquete estaba contra mi culo y note que estaba duro.

-Ey Carlos que tienes ahí?. (Le pregunté)

-Que pasa que te asustas de un buen paquete??, bien que te gusta

Lleve mi mano hacia su paquete y en el momento que lo toqué Carlos me giró y quedé bocarriba en el suelo del vestuario. Carlos se levantó (creí que se había molestado) fue hacia la puerta y cerró con llave. Según venía hacia a mi veía una gran polla marcándose en su pantalón corto.

Me incorporé y fuí hasta Carlos. Cuando estaba a escasos centímetros de él en cogió por los hombros y me hizo ponerme de rodillas. Delante de mi quedaba un paquete descomunal dentro de un pantalón corto oliendo a sudor. Sin dudar le bajé el pantalón y los boxers. GUAU que pedazo de polla. Gorda larga, morena ummmm. Me quedé atontado mirándola...

-Vamos tio, a qué esperas? Abre la boca y chupa (dijo Carlos con la respiración algo acelerada)

Sin esperar más metí esa verga en mi boca..ummm q sabor a macho. Cada centimetro rozaba contra mis labios...uffff casi imposible tenerla entera en la boca. La sacaba y pasaba mi lengua desde la punta hasta sus huevos, enormes, y la volvía a meter en mi boca.

Tras un rato mamandosela Carlos me agarró la cabeza y empezó a follarme la boca. Entró en una especie de locura y empezó a gemir a gritar -Traga, siii, vamos cabrón enteraaaa, siiii,ummmmm

Me sacó la polla de la boca me levantó y me agarró el culo -Vamos a ver como traga este culito (me dijo con la voz entrecortada)

Me llevó al medio del vestuario y me puso a cuatro patas. Se escupió en la mano y empezó a frotar uno de sus dedazos por mi culo y a meterlo despacio. Pese a hacerlo despacio...sus dedos eran enormes y me abrían el culo en canal.

Tras un rato de jugueteo por fín Carlos se decidió a follarme. Noté su tranca apollada en mi culo y poco a poco empezó a empujar. Era una polla muy gorda y cada milimetro q entraba en mi culo costaba mucho. Carlos me agarró de las caderas y de un golpe acabó por metermela entera. Ufff que dolor, sentí que me había roto en dos. Lejos de dejarme recuperarme empezó un metesaca fuerte, de estos q mis nalgas suenan en cada embestida.

• Te gusta eh cabrón? Vaya culo que tienes...te lo voy a destrozar, siiiiii (decía carlos una y otra vez)

Yo apenas podía hablar, en cada embestida estaba a punto de caerme al suelo por la fuerza de cada embite y por el placer que m producía ese vergón dentro de mi culo.

Estaba en la gloria, y Carlos estaba apunto de correrse cuando sacó su polla de mi culo y me hizo volver a tumbarme bocarriba en el suelo del vestuario. Esperaba su leche en mi boca o en mi cara, pero para mi sorpresa Carlos decidió sentarse en mi cara, apretar mi cara con sus fuertes piernas y hacerme comerle el culo. Mientras jugueteaba con mi lengua en su agujero...él se pajeaba mientras jadeaba cada vez más y más y más hasta q se corrió como un auténtico toro sobre mi pecho. Noté que al salir cada chorro de leche carlos apretaba mi cara con sus muslo ummmmm.

Nos levantamos, yo con el pecho literalmente lleno de semen. Fuimos juntos a la ducha y.... (eso ya continuará en otro relato)