Un dia con mi vecina (2)

Me hablo de un restaurante italiano en el centro al que había ido bastante veces y que estaba muy bien, así que paramos un taxi y fuimos directamente allí. Cuando llegamos había mucha gente pero había una mesa libre. Cuando llevábamos un rato cenando sentí como algo me tocaba la entrepierna, si bien me lleve un susto al principio, descubrí que se había quitado una zapato y me lo estaba frotando por todo el miembro con una sonrisa dulce en su boca y guiñándome un ojo.

Acabamos de cenar( yo seguía empalmado por la fregada anterior y ella parecía darse cuenta)y después de pagar decidimos ir a un garito cercano al restaurante. Cual fue mi sorpresa cuando me agarro de la mano y me llevo a un rincón oscuro detrás de una tienda.

-" Voy a bajarte este bultito de aquí"-me dijo agarrandome con una mano la polla por encima del pantalón.

Me senté en el suelo apoyado en la pared y ella me bajó el pantalón, al retirarme los calzoncillos mi polla salió disparada totalmente erecta, lo que provoco una carcajada. Me la cogió con fuerza y empezó a juguetear con ella con su mano, se recogió el pelo hacia atrás e introdujo su boca en mi nabo. Empezó con movimientos suaves mientras yo la sujetaba la cabeza con mi mano, después acelero el ritmo. Arriba y abajo, arriba y abajo, arriba y abajo cada vez con un ritmo más rápido, yo me mordía el labio y echaba la cabeza hacia atrás cerrando los ojos para que no me oyeran la gente que pasaba enfrente. Cuando ya estaba a punto de correrme, con ella a un ritmo atroz, freno el ritmo hasta que toda mi leche fue a para dentro de su boca tragándosela. Yo me quede tirado en el suelo un rato mientras ella se levantó saco un pañuelo de papel de su bolso y se limpio las gotas de leche que le habían caído en la cara y el pintalabios para pintarse la boca.

Conseguí levantarme y nos fuimos de marcha. Cerca de la una de la madrugada nos encontramos con una chica rubia que era una antigua compañera de trabajo suya, así que ya éramos tres personas para irnos de copas. La verdad es que la chica estaba bastante bien, con unas tetas enormes y un gran culo, y cuando mi vecina me contó que una noche en un viaje de trabajo en Valencia se liaron las dos "por probar como era" me dijo, y la imagen de las dos desnudas en una cama ¡¡¡me puso a cien!!!. Estuvimos los tres durante un par de horas mas tomando copas, hasta que decidimos volver a casa. La amiga de mi vecina había traído el coche, dijo que nos llevaba, así que mintamos y en unos minutos ya estábamos en casa de mi vecina. Nos despedimos de su amiga y entramos en su casa.

"Desnúdate"- me pidió ella tumbada en el sofá y haciendo remolinos con su pelo.

Me fui quitando la ropa mientras ella me miraba, cuando ya estaba desnudo cogió mi nabo y se lo volvió a meter en la boca, así estuvo unos minutos antes de cambiar. Me arrodillé y metí mi cabeza dentro del vestido y le fui retirando las bragas con la boca hasta las rodillas para luego meter mi cara dentro de su conejo y comerle el clítoris y repasar con mi lengua todo el coño y la cara interior de los muslos. Mientras hacia esto ella se iba desnudando, para acabar bajándose el vestido. Después de una caricias estando de pie(ella tocándome la polla y el torso, y yo ella las rajas del culo y del coño) me senté en el sofá, el cual era de color blanco y muy cómodo, ella se sentó encima de mí dándome la espalda, cogiendo mi polla con la mano e introducírsela ella sola por el coño, y empezó a botar haciendo ruido cada vez que mi polla entraba por su raja. Ella echaba el cuerpo hacia atrás par que yo le agarraba los pechos mientras estos botaban y botaban. Mas tarde echa se tumbo de lado abriendo las piernas con las manos en el suelo, y yo la penetre con mas ganas que nunca mientras le agarraba las tetas y mordia su cuello. Para llegar mejor al orgasmo ella se puso a cuatro patas con la cabeza en el reposabrazos, yo agarre su pelo y volví a meter mi polla dentro de ella pero esta vez con más fuerza que nunca. Al terminar caímos agotados por el esfuerzo, pero yo me quede un rato acariciando sus enormes pechos.

Nos fuimos a su cama y dormidos abrazados el resto de la noche.

CONTINUARA...