Un desayuno con la abuela

Estando ya los dos en la cocina preparando el desayuno, como su ayudante nos pusimos para que cuando bajaran mis padres con mi hermana estuviera todo listo. En esos minutos mi abuela aprovechó que estábamos solos y soltaba indirectas...

-Pues la leche de anoche estaba mejor... - Dejó caer en el caldeado ambiente que manteníamos ambos para dirigirse desde el banco de la cocina a la silla para sentarse a escasos metros de donde lo estaba un joven, que con lo sucedido esa noche estaba más que revolucionado.

-Jajajaja....ya sabes lo que tienes que ordeñar - Afirmé con una risa nerviosa con mi mano dirigiéndose inocentemente a su carnosa pierna y empezar acariciarla lentamente, arrastrando pausadamente mi pulgar haciéndole pequeñas circuferencias.

-Jajajajaja.....¿El qué, esto? - Preguntó dirigiendo su mano a mi entrepierna y sujetar mi fofo pene a través de mi fino pantalón...

De repente empezamos a oír pasos en la parte superior de la casa que se dirigían a las escaleras, mi abuela ante el aviso de que alguien bajaba quitó su mano de mi entrepierna, pegó un pequeño salto de la silla y fue en busca de vasos y platos para sacar el desayuno. Mi madre apareció por la puerta de la cocina...

-Buenos días! - Exclamó con una voz alegre a la vez que se dirigía donde mi abuela preparaba el desayuno..

-Buenos días hija - Contestó mi abuela dándole un beso a mi madre un beso en la mejilla..

-Buenos días mamá - Contesté intimidado ante la presencia de dos hermosas hembras y con el rabo casi erecto por culpa de la mano de mi abuela, que instantes antes me lo acarició por encima..

-Nosotros desayunamos arriba, mamá, que mi marido quiere desayuno en la cama - Dijo mi madre a mi abuela mientras se acercaba a mi para darme un beso..

-¿Cómo ha dormido mi príncipe? - Terminó de preguntarme mamá sentándose brevemente en una silla al lado mía...

-Muy bien, mamá ¿y tu? - Contesté a mamá con mi mirada perdiéndose por la espalda para posteriormente acabar mirando con deseo el culo de mi abuela...

-Bien hijo - Contestó levantándose de la silla y volviendo a dirigirse donde mi abuela para coger la bandeja que le había preparado en un momento.

-Bueno, luego bajamos, recogemos esto y vamos a comprar, ¿vale mamá? - Terminó de añadir mi madre cuando cogió la bandeja y se disponía a salir de la cocina...

-Si, hija, ya me avisas - Contestó mi abuela dándose la vuelta y dirigiéndose a mi se sentó otra vez a mi lado...

Mi madre subía las escaleras de casa de la yaya, mi abuela no tardó en acercarse a mi y ponerse a mi lado, con un ambiente que por unas simples miradas con deseo iba en aumento haciendo que por mi cuerpo recorriera unos escalofríos cada vez que la yaya, sentada en su silla, se acercaba a mi en busca de mi cuello para posteriormente empezar a darle unos delicados besos. Su mano la posó sobre mi pierna para enseguida ir en busca de mi pene y empezar acariciarme por encima del pantalón, pasando su mano de un lado a otro con unos movimientos alternativos llegando por momentos a coger con su mano toda mi entrepierna. No tardé en ir en busca de sus labios, girando mi cabeza levemente encontré la de mi abuela, empezando a comerle la boca apasionadamente con mi mano subiendo por su pierna arrastrando a su paso su camisón. La yaya no llevaba bragas, sorprendido, fui en busca de su vieja vagina y, estirando mi dedo índice, alcancé la pelambrera de mi abuela abriéndose paso para toca su clítoris y empezar a masajearselo y posteriormente descender mi dedo por su rica vagina. Mi abuela, al paso de mi dedo, abría poco a poco sus piernas decayendo la hermosa grasa que le hacían tener unas piernas, “piernacas”, deliciosas. Retrocedió con la silla unos centímetros, dejando su hermosa vagina más abierta, mi dedo índice empezó a abrirse paso por sus viejas paredes vaginales....

-Ahhhh.... - Susurró levemente al aire con mi dedo entrando y saliendo de su vagina, masturbando a la yaya me levanté, sin sacar mi dedo, de mi silla y me arrodillé delante de ella para empezar a dedearla bruscamente.

-¿Te gusta yaya? - Pregunté excitado con la visión de mi dedo entrando y saliendo con gran ritmo de la vagina de mi abuela...

-Sii...sii cariño, si...sigue así - Contestó con su linda voz entrecortada incorporándose para ver como su nieto le comía su abultada y vieja vagina..

Pasé un buen rato dedeando a mi abuela, hasta que un impulso voluntario por mi parte empece acercar mi cabeza, con la lengua fuera como un poseso, a su entrepierna que empezaba a lubricar...

-Buuufffff....ahhhh - Susurró excitada al aire contrayendo su cuerpo y haciéndome prisionero entre sus piernas con mi boca tragándose su derretido coño...

Introduje una mano, abriendo las piernas de la abuela y empezar otra vez con mi lengua a subir y bajar por su vagina, desde la entrada a su vagina a su clítoris para acabar entreteniéndome con él....

-Ahhh...aahhhhh - Salía excitada solamente de su boca y deslizando sus brazos sobre mi cabeza, para con sus manos introducir más mi lengua sobre su jugosa vagina y empezar unos bruscos movimientos con sus caderas como si se estuviera follando mi lengua, haciendo que la yaya se retorciera en la silla...

Estuve comiéndole la vagina ricamente durante un largo tiempo, mi abuela empezaba a hacer movimientos raros y posando sus gemelos sobre mis hombros y alejando mi cabeza a unos centímetros de su vagina.....

-Me corroo, cielo....me corro - Dijo echando la parte superior de su cuerpo hacia delante y ver como un chorro de su rica vagina inundaba la boca de su nieto y caía al suelo después de deslizarse por mi barbilla.

Se quedó como muerta en la silla, dejando caer las piernas aún lado y con sus manos bajar levemente su camisón. Me incorpore como pude, tragándome lo que pude de la yaya, y dándole un beso en la frente fui al fregadero a limpiarme los restos desperdiciados por mi rostro....

-Has visto como ordeñando bien puedes conseguir leche calentita - Afirmé secándome el rostro y volviendo a sentarme al lado de la yaya...

-Jajajaja... si cariño, más que ver lo he comprobado - Contestó incorporándose sobre su silla, deslizando la parte superior de su dedo índice por el perfil de mi boca y limpiarme lo mínimo que quedaba ya, quizás fue más una acaricia a la boca que le había echo correrse..

Al rato de estar en la cocina como dos tontos enamorados haciendo manitas, gestos y todo tipo de carantoñas, mis padres no tardaron en volver a bajar y mi madre se puso con mi abuela a fregar los platos sucios de esa mañana. Mi padre por el contrario salió de casa sin pasar por donde estábamos para irse a caminar un rato pero despidiéndose desde la puerta. Por el contrario, un servidor seguía en la cocina observando, con unos ojos a punto de salirse de su órbita, a mi abuela que hacia movimientos y gestos provocativos pues más de una vez mis ojos se fijaban en su culo y vagina cada vez que se ponía en pompa, dejando ver a través de su camisón su rica vagina negra por la pelambrera que abultaba y transparentando su hermoso culo.

Cuando acabaron de limpiar todo, tanto mi madre como mi abuela subieron a sus respectivos cuartos para asearse y cambiarse para ir a comprar a un cercano centro comercial. Sin embargo, uno se quedaba solo en casa, así que no tarde en ir a la ducha del primer piso para asearme y hacerme unas ricas pajas pensando en la comida de coño que le había metido a la abuela para posteriormente verme unas películas hasta que llegaran de comprar.....Continuará

PepeVLC