Un cornudo sumiso (2)

Esta es la continuacion a un relato publicado el 27-10-2006

Digamos que esta es la continuación a un relato enviado el 27-10-2006 con el titulo

"Un Cornudo Sumiso" por lo que sería interesante leerlo antes para poneros en situación.

Aquella relación duró casi un año y fue muy intensiva.

A los tres días de aquel encuentro me llamó por teléfono y me preguntó si le había comprado la

Botella de Cardhú, le dije que si, me comunicó que el próximo viernes quería que lo invitase a cenar para ver que tal iba todo, que tenia algo preparado para el fin de semana pero antes quería probarme para no hacer el ridículo el fin de semana.

Llegó el viernes y se presentó con una bolsa que entregó a mi mujer, la entrada fue cómo la vez anterior se besaron como dos enamorados y me saludó:

¿Que tal cabrón, lo llevas bien, te gusta sentirte así?

A todo respondí con un Si señor

-Bien pues sírveme una copa-

Se sentaron en el sofá ignorándome por completo, hablando con mí mujer le dijo que traía los pies destrozados, que había tenido un día muy duro, mi mujer se ofreció a darle un masaje pero él dijo que no se molestara y dirigiéndose a mi me ordenó que le quitara los zapatos y los calcetines y le diera yo el masaje mientras ellos seguían conversando y acariciándose.

Allí estaba yo de rodillas ante ellos masajeándole los pies al chulo de mi mujer.

Se fueron calentando se besaban se fueron desnudando y me ordenó besarle y lamerle los pies,

Ella empezó a chuparle la polla y cuando le apeteció al amo le ordeno que se montara sobre él,

Me dijo: Cabrón haz de mamporrero –

Y sujetándole la polla por la base, mi mujer se la fue clavando hasta el fondo, cabalgaba sobre ella mientras yo por indicación del amo le lamía los huevos y el culo de mi mujer, al rato se levantó y poniéndose ella de rodillas en el sofá le folló el culo mientras yo le chupaba el suyo a el.

Cuando se corrió en el culo de mi mujer me cogió del pelo y me dijo

  • Lámeselo bien perrito, déjalo bien lustrado –

Y me fui comiendo todo el semen que brotaba del ano de mi mujer, mientras ella le limpiaba la polla con la boca.

Después durante la comida, hicieron muchas guarradas; él masticaba un trozo del solomillo y se lo pasaba a la boca de Mari y ella lo tragaba con gusto, también le pasaba el vino de su boca; le dijo

-No comas mucho te quiero con hambre que después te daré a comer algo que te gusta mucho. –

Ya en los postres mientras el comía le ordenó que se pusiera bajo la mesa a chupársela hasta que me ordenó que le sirviera mas cava, fui a llenar las copas de Mari y la mía pero él me lo impidió, se levantó y meó en nuestras copas y brindamos por nosotros y bebimos los tres a la vez.

Al terminar de comer se fueron ellos al dormitorio y a mi me ordenaron mientras tanto recoger la mesa y lavar los platos; mientras lo hacia me llamaron para que les sirviera mas cava, cuando entré no estaban en el dormitorio, estaban en el cuarto de baño, ella tumbada en el suelo y él en cunclillas sobre su cara, ella le chupaba el culo.

  • Llena las copas – me dijo

  • Tienes hambre verdad perra, te quieres comer mi mierda, dime –

Ella dijo un si muy bajito

-No te oigo, vamos pídemelo mas fuerte-

-Si dame tu mierda por favor-

-Mas fuerte grítalo so guarra, que se entere todo el vecindario lo puta y guarra que eres, vamos-

-Dame tu mierda, cágate en mi boca por favor, me la quiero comer toda-

Yo alucinaba, sospechaba que lo había hecho anteriormente pero no quiso que habláramos de ello seria para que llegara este momento, yo estaba empalmado a tope.

-Desnúdate cabrón y arrodíllate detrás, que aún no sabes bien lo guarra que es tu esposa-

Me desnude velozmente y me arrodillé detrás y pude ver como empezó a cagarse en su cara y boca

-Méteme la lengua vamos –

Ella introducía la lengua en su ano abierto llenándose la boca de sus excrementos le rebosaba y caía por su cara se sentaba sobre ella y restregaba todo su culo por toda la cara se incorporó y con la mano le restregó por toda la cara dejándosela como una mascarilla, entonces me dijo que la follara y así lo hice.

-Vamos besaros saborear la mierda de vuestro amo esclavos-

Sacó su bote de Poper y nos lo puso en la nariz, respiré profundamente y la excitación fue terrible

Perdí la cabeza nos dábamos la lengua, él metió su pie pisando la cara de mi mujer

y con todo el pie embadurnado entre nuestras bocas nos obligó a lamérselo.

Después nos metía su polla entre nuestras bocas y la estuvimos chupando hasta que se corrió y nos hizo tragar su leche mientras mi mujer y yo también nos corrimos.

Estaba satisfecho con mi actitud y procedió a contarnos lo que tenía previsto para el día siguiente.

Nos puntualizó como deberíamos de comportarnos, como ir vestidos y hasta el más mínimo detalle.

Nos mentalizamos, sobre todo yo, lo estuvimos hablando por la noche y con la incertidumbre de lo desconocido nos preparamos para la fiesta que nos aguardaba.

Llegamos a las cinco en punto a la dirección que nos dio, era un cortijo en el campo, allí estaba el amo con cuatro señores mas dos de unos cuarenta y pico, otro de unos 70 gordo baboso sudoriento (habían estado todo el día de caza y de barbacoa) y el cuarto era un joven de 19 años un poquito retrasado, muy grande con una boca medio abierta y torcida labios muy grandes y dientes deformados.

-Ya está aquí el postre – Dijo el amo, y procedió a las presentaciones:

-Bueno a Carlos y Rafa ya los conoces- Se refería a los de 40 y pico.

Estaba claro, con estos ya habría hecho una orgía.

Acercándose a ellos le dio un beso en la boca a cada uno.

-Hola putita- dijo uno, y otro –Hola guarrona, vendrás hambrienta como siempre ¿no?-

Risas y comentarios.

-Este señor es D. Luis- Presentó el amo,

y el señor muy galante le cogió la mano y la beso haciéndole una reverencia con la cabeza.

-Me han hablado maravillas de vos, señora, espero tener el honor de comprobarlo esta tarde-

Increpó el amo:-No te das cuenta que este señor es un noble,

-Inclínate al saludarlo y trátalo de Excelencia-

A lo que ella obedeció y como si se tratara de un rey se inclino diciéndole

-Encantada Excelencia-

Risas generales, cachondeo total.

-Y este es Paquito. Vamos no te cortes, dale un beso en la boca-

-Je je- Se avergonzaba el tonto.

Y a ella se le revolvió el estomago pensar que aquella boca la iba a besar.

Menos mal que el tonto se cortó y no quiso.

El amo comenzó a desnudarla de espaldas a ella frente a todos los demás, dejándola solamente con medias y ligueros y un sujetador con dos orificios por donde asomaban sus grandes aureolas con los pezones ya erectos por la excitación de la situación. Todos se fueron sacando sus pollas excepto Don Luis que permanecía sentado en un sillón contemplando la escena. El amo la arrodilló y fue chupándosela a Carlos a Rafa que se fueron alternando en follarle la boca con dos buenas pollas que le provocaron un sin fin de arcadas.

La cogían del pelo, de la nuca de las orejas o le apretaban el cuello para que abriera la boca y tragara las pollas por completo, lamía huevos o cuando mas caliente estaba tragando con gula se la sacaban y le pegaban algunas hostias que la ponían mas caliente y abría mas la boca

si cabe, de vez en cuando alguno se giraba y se abría el culo para que ella lo lamiera chupara e introdujera su lengua, al rato animaron a Paquito que se saco su polla enorme grande gorda doblada fea como el, aterradora, la llevaron hasta donde estaba el y le instigaron a que chupara, le dio una arcada de asco por lo mal que olía y la cantidad de requesón que tenía alrededor del glande, pero fue tragando hasta meterse todo lo que pudo pues aquello no entraba mas, demasiado gorda. Mientras permanecía de rodillas a cuatro patitas, chupándole la polla a Paquito, Carlos y Rafa se fueron alternando en follarle el coño o el culo.

Hasta que la cambiaron de postura y la tumbaron de espaldas sobre una colchoneta de agua cada uno le cogió de una pierna tirando de ella para dejarle bien abiertos sus orificios para que Paquito se la metiera y así lo hizo comenzó por su coño hasta metérsela entera y después por su culo, ahí le dolió pero entró toda era increíble ver como entraba y salía semejante polla por su culo, se desparramó por completo sobre ella sin dejar de bombearla y comenzó a besarla, ella apartó la cara le daba realmente asco esa boca,

uno le sujeto la cabeza para que pudiera besarle la boca el tonto, que reía mientras follaba y la baba le goteaba y caía directamente en la boca cerrada de Mari, le dio algunos besos y lametones pero ella a pesar de las ordenes que le daba Carlos no la abría..

El amo y D. Luis permanecían de meros espectadores y no intervinieron.

Animaban a Paquito para que se corriera y así lo hizo en todo su culo

al sacarla otro ocupo su lugar inmediatamente y al rato también se corrió y como de algo acordado fue salir este y entrar el otro también en su culo y al instante correrse también y al sacarla, el otro estaba preparado con un dildo extraño, en forma de tapón y se lo colocó en el ano para que se quedara bien dentro el semen de los tres que se habían corrido seguidos en su ano.

Mientras se corría el último, D. Luis se fue desnudando quedando su barriga sudorosa al aire y los enormes muslos, era gordísimo y sudoroso, permanecía sentado en su sillón tocándose la polla con una mano sin soltar de la otra ese bastón que llevaba que más bien era una vara con mango de bastón.

Una vez le colocaron el tapón le colocaron un collar de perro con su cadena y tirándole de ella y a cuatro patitas la llevaron hasta D. Luis, le dieron la cadena y este increpó a la perrita:

-¡Lámeme los pies como una perra salida, que es lo que eres, así con la lengua, chupa los dedos, todos dentro de tu boca, lame la planta de arriba abajo, así, la lengua entre los dedos , lávamelos bien , perra ¡-

De repente la cogió del pelo y la atrajo sobre su barriga peluda y sudorosa y restregó su cara por toda la barriga, ordenándole que lamiera y tragara todo el sudor que encontraba.

¡Vamos perra límpiame bien, déjame seco, puta de mierda!

A la vez que le atizó en el culo con la vara, dejándole marcada una línea roja; el grito fue inesperado, ella con los ojos y la boca abierta miró al seboso y después al amo que estaba sentado a la izquierda mirándola fijamente sonriendo sádicamente, que habría acordado con este tío que empezaba con un latigazo tan fuerte, ella comprendió y se puso a lamerle desesperadamente toda la barriga, los pechos los chupaba, el continuaba dándole con la vara mas suavemente, alguno algo mas fuerte cada vez que le ordenaba algo.

¡Ahora los sobacos!¡Zás! ¡Chúpame los pechos, sácame leche! ¡Zas!

Aunque no tan fuerte como el primero. De repente la cogió del pelo y la atrajo hasta su cara, tirándole del pelo hacia atrás le ordeno que abriera la boca.

¡Abre la boca, saca esa lengua de perra que tienes. Mas!

Y haciéndose un pollo en la garganta se lo escupió en toda la lengua, y comenzó a morrearla lamiéndole la cara, mordiéndole los labios, a la vez que le daba con la vara suave, menos cuando le ordenaba algo

¡Hazlo como yo! Zas ¡Comete mi lengua! Zas.

Hasta que empezó a chuparle los pechos de ella, a morderlos, la inclinó sobre la mesa y el siguió lamiéndola por las espaldas hasta llegar a su culo, entonces le abrió bien los muslos y me llamó, hasta ahora me habían ignorado por completo.

–Que se acerque el cabrón, ven, ábrele bien las nalgas –

De pie pero inclinado le abrí fuertemente el culo a mi mujer, mientras el baboso estaba de rodillas tras de ella.

–Esto es lo que te gustaría hacer a ti ahora, verdad cabronazo, maricón.

Pues a mi también, jajaja –

Y le quitó el tapón que sonó como el de una botella de cava, ella ventoseó y comenzó a expulsar la leche de todo tipo liquida transparente y chorreante, algunos grumos aunque marroncillos

y el tío se puso a lamerlo a meter su hocico dentro y la lengua, a morderle y chuparle loco perdido hasta que se cansó, se incorporó y cogiéndola del pelo la giró y la morreó compartiendo todo lo que tenia en su boca a la vez que se masturbaba y cuando se fue a correr la arrodilló y le metió la polla en la boca corriéndose totalmente dentro ordenándole que tragara, siguió follándole la boca un rato hasta que la sacó le ordenó que abriera la boca le escupió abundantemente en la boca.

–Traga guarra-

y le pegó una bofetada tan fuerte que la tiró al suelo.

–Asquerosa, que inmunda la puta guarra-

Todos se rieron.

-Quédate en el suelo, túmbate y abre la boca, venga tíos vamos a mearla todos –

Y rodeándola se fueron meando todos sobre ella, en su boca, cara, pechos, cuerpo, coño….

Y más o menos así acabó aquella sesión donde conocimos a D.Luís.

Al cabo de unos días se presentó el amo en casa para felicitar a mi mujer y a mí también me dijo que me porté. Nos dijo que D. Luis quería pasar con ella sola el próximo sábado toda la noche, yo puse alguna pega y mi mujer se extraño también, pero el amo se enojó y le gritó:

-Mira tu eres mi puta perra y harás lo que te ordene,

y tu cabrón de mierda no tienes ni que abrir la boca –

Cuando se marchó y los siguientes días estuvimos hablando seriamente mi mujer y yo

y tomamos una decisión, pero eso es otra historia.