Un chico con mucho que contar XI

Este relato va dedicado a Jonathan M. G.(te lo debía jeje)

Hola, aquí estoy de nuevo con esta historia, que hace más de un mes deje de relatar, como recordaran deje la situación en el punto en que Ángel y yo comenzamos una relación, esto en noviembre del año pasado, y como algunos sabrán, después de eso aún quedo mucho que contar.

Les conté en la parte 10 del relato, que la relación que mantenía con Ángel, ni el regreso de Adrián la pudo romper… bueno les contaré qué sucedió.

Cuando mi cuarto semestre de bachillerato empezaba, esto el 16 de enero de este año (2012), regresó Adrián, en el primer día de clases llegue, como casi siempre, antes que todos, entre al salón de clases con mi celular en la mano, sin prestar atención a lo que había dentro del aula, o más bien a quien estaba dentro., cerré la puerta para que no se colara el frío y me dirigí a sentarme en una butaca, cuando estaba dejando mi mochila en la mesa levante mi vista y una 2 filas más atrás estaba él, Adrián, se me quedó viendo como nervioso y algo… temeroso?

Yo no podía creer lo que estaba viendo, en mi vida me imagine que Adrián volvería, que yo volvería a verlo. No supe que decir… no dije nada, me giré hacia el frente sentándome y dándole a él la espalda… unos segundos después diento como me toca la espalda y ahí me habló por primera vez… pro primera vez desde hacía 10 meses.

-hola Santi… ¿ya… ya no me hablas?- me dijo algo tímido

-hola Adrián, que sorpresa, creí que ya no nos volveríamos a ver- dije yo girándome para verlo

-¿recuerdas que me fui a Sonora por cuestiones de la empresa de mi papá?- yo asentí con la cabeza –pues hace unas semanas murió la que era gerente de la sucursal de aquí, así que colocaron a mi papá en su puesto y aquí estoy de nuevo.

-que bien –sonreí –me alegra verte de nuevo

-Cuéntame Santiago, ¿me hiciste caso en lo que te dije la última vez?- yo puse una cara de así como de no entender a lo que se refería y el pareció entender porque continuó –sí, te dije que fueras feliz con alguien… ¿lo hiciste?- yo no supe que contestarle, solo me quedé mirándolo como dándole a entender la respuesta con la mirada, y tan inteligente que es la cachó enseguida –oh entiendo Santi, que bien que encontraras a alguien, ojala que te esté haciendo muy feliz- yo seguí callado y mirándolo, enseguida entró una compañera al salón y el volvió a su lugar

Cuando terminó la primera clase, a las 8:00am, salimos del salón Luz, Camilo y yo, y cuando estábamos ya unos pasos afuera del salón llegó a unírsenos Adrián y empezó a hablar con Luz y Camilo del porque había regresado, y de que había hecho el tiempo que estuvo en Hermosillo, yo permanecía callado mientras hablaban y andábamos dando vueltas por todos lados, cuando pasamos por el patio central de la escuela vi a lo lejos a Ángel, que enseguida notó la presencia de Adrián, pues hizo un cabeceo como preguntándome que qué pasaba, yo solo levanté los hombros, luego, nuevamente con la cabeza, me indico la salida de la escuela y dejando ahí a sus amigos (Lizet, Joaquín y otros) camino hacía afuera.

Luego de un momento, les dije a mis amigos que tenía que ir a comprar algo a la papelería, que iba a salir, Luz me miro como diciéndome “no te hagas, vi salir a Ángel”, luego se miro con Camilo y Adrián se quedo como preguntándose que pasaba.

Cuando salí me fijé para ambos lados en la calle y del lado de la acera de la escuela, un poco lejos de la entrada, estaba Ángel, caminé hacía él y cuando llegué lo primero que hizo fue preguntar por Adrián.

-¿y que hace ese aquí?- pregunto algo… molesto?

-se llama Adrián y regresó por el trabajo de su papá- le contesté yo tranquilamente

-ja’ Adrián…- movía la cabeza y se pasaba la lengua por los labios

-¿qué pasa? No me vas a decir que tienes celos- dije yo divertido por la situación

-pues aunque lo digas en ese tono Santiago sí, los tengo… ¿que mierda quiere ahora, porque anda con ustedes… contigo?

-es nuestro amigo desde siempre Ángel, no vas a querer que lo hagamos a un lado- contesté yo cambiando mi tono divertido por uno serio –escúchame, yo estoy muy seguro de lo que siento por ti, y a menos que tu no quieras, yo deseo seguir contigo, no importa que Adrián este de nuevo aquí.

-es que tu lo quisiste mucho, tengo… miedo, de que aún sientas algo por él.

-ya, no seas tonto, anda vamos a adentro que ya empieza mi otra clase- le dije yo mientras me disponía a caminar hacía la escuela, de repente sentí como me tomaba del braza y me giró rápido, dándome un pequeño beso. Yo solo sonreí y miré para todos lados para comprobar que nadie había visto

Cuando entramos, entramos juntos hablando de un partido de futbol que tenía para el día siguiente, en el pasillo de entrada de la escuela hay una banca y ahí estaban sentados Luz, Camilo y Adrián, todos se nos quedaron viendo y yo me avergoncé un poco, en ese momento intuí que seguro Adrián ya sabía de lo de Ángel, le dije a mi novio que me quedaba ahí y él se siguió a su salón.

Me acerque a mis amigos y enseguida que legué Adrián pregunto algo que de momento no supe que contestar.

-¿y las cosas de la papelería?

-em, es que… es que no había lo que fui a buscar- dije finalmente

-aaah, será- dijo Adrián serio y claramente convencido de que yo estaba mintiendo

-bueno, ya entró la maestra al salón… vámonos- dijo Camilo poniéndose de pie.

El resto del día fue normal, exceptuando cuando Adrián y yo estábamos cerca, ya que se podía sentir tensión en los dos,  las clases no fueron clases, solo se nos decía como se iba a trabajar durante el semestre que comenzaba.

A la hora de la salida cada quien se fue a su casa.

Por la tarde, como todas las tardes desde que empezamos la relación, Ángel me hablo por teléfono y hablamos de lo que habíamos hecho desde que salimos de la escuela y cosas así.

Como a eso de las 10:00pm me metí a Facebook, y cuando entré a ver el muro de Ángel leí algo que si me dejo como… no se como… su amiguita Lizet le publico algo… (Buscando en sus publicaciones antiguas lo encontré y lo pondré tal como se lo escribió)

“Aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa Esta hermosaa la canción… no paro de escucharla te lo juroo... ♥.... Te adoro mil.... Cariño ♥....y no lo olvidoo OBVIOO NOO”

Yo me quedé así de   :S   L  esa noche ni pude dormir de estar pensando en esa publicación.

Al otro día me levante como siempre a las 6:00am para prepararme  e ir a la escuela, lo único que tenía en mente era preguntarle a Ángel que significaba o el porqué de la publicación de Lizet, pero tendría que esperar ya que ese día las clases para él empezaban a las 9:00am.

Ese día parece que todo estaba en mi contra… perdí me celular camino a la escuela, tome el autobús equivocado por lo cual llegué tarde a la primera clase y no me dejaron entrar, Luz me dijo que se había echo novia de Joaquín, el mejor amigo de Ángel y que me odiaba, en la tarde atropellaron a mi perro (que apenas tenía como un mes con él) y se murió :( bueno fue uno de los peores días de mi vida, solo faltó que me diera diarrea o que me orinara un perro.

Cuando Ángel llegó, yo estaba solo, sentado en la banca cercana a la puerta de entrada a la escuela, me quería morir cuando lo vi que llegó muuuuuuy sonriente con Lizet, un poco cohibido me acerque a él, a ellos.

-oye Ángel ¿podemos hablar un momento?, algo corto- le dije yo

-es que ya voy tarde para la clase, luego te veo y hablamos- me dijo sin siquiera detenerse, se siguió con Lizet, dejándome ahí parado, solo.

Me sentí como perro apaleado, no supe ni que hacer, solo me fui lento a donde estaba sentado y ahí me quedé… ni siquiera entre a la clase que me tocaba, ya dos clases a las que no entraba y apenas era el segundo día de clases.

Total, ya cuando se llegaron las 2:00pm me despedí de mis amigos y me quedé esperando a Ángel afuera de la escuela, al lado de su auto.

Cuando llegó, llegó con Lizet y ella ni me volteó a ver solo me dio un “leve” empujón y sin más se subió en el asiento del copiloto, yo, aunque con mucho coraje y con ganas de matarle ahí mismo, no dije nada y me dirigí hacía la perta del chofer donde estaba parado Ángel.

-tenemos que hablar- dije algo fastidiado

-¿qué pasa amor?- preguntó Ángel con un tono de voz muy bajo

-¿qué te traes con esa vieja?- pregunte sin rodeos y claramente molesto

-¿perdón?- me cuestionó él algo sorprendido por mi actitud

-vi lo felices que entraron a la escuela, ni caso me hiciste por estar con ella, me habías dicho que solo como una amiga la veías.

-y lo sostengo, solo es mi amiga, además hace rato tenía prisa por llegar a la clase no por otra cosa.

-si como no, por lo menos te hubieras detenido un segundo, al menos me hubieras visto cunado me dabas tu excusas para no hablar conmigo… además ya vi lo que te publicó en el Facebook.

-¿de que hablas, qué publicó?

-algo de una canción, que no paraba de escucharla y que obvio no te olvidaba- dije yo recriminándole, él giró su cabeza para mirar al interior, para ver a Lizet quien solo sonrió sínica, él le movió la cabeza de un lado a otro. -¿qué pasa, tienes algo con ella?- pregunté yo y hubo un momento de silencio –respóndeme- le dije alzando un poco le tono de voz.

-Santiago, tengo que irme, más tarde paso por ti a tu casa y hablamos de esto- dijo eso y ni oportunidad de responder me dio porque se subió enseguida al auto y me dejo ahí, con un coraje que casi se me derrama la bilis.

Cuando llegué a mi casa me encontré con lo de mi perro atropellado y muerto, unos minutos después me habló Luz para decirme que había empezado una relación con Joaquín y a eso de las 6:00pm llegó Ángel a mi casa y salí un rato para que habláramos, fuimos a un jardín en el centro de la ciudad y nos dentamos bajo un árbol a hablar.

-¿ahora si me vas a decir que esta pasando?- pregunté yo

-escucha… yo… me bese con Lizet en un juego de la botella… ella confundió las cosas- decía él mientras mantenía la mirada en el suelo –y te juro que no fue cosa mía… me toco hacer eso… fue la presión de todos y… esta bien, no hay justificación-

-pues no, no la hay Ángel… además ¿qué fue eso de la canción, le dedicaste una canción? Y si no fuera cosa tuya y ella fue la que se confundió entonces porque andas tan feliz con ella por todos lados, ni me haces caso a mí por andar con Lizet… y no digas que no es cierto porque lo es.

-Santiago, perdóname, mira, lo de la canción fue también ese día de la botella, me toco cantarle, además ella es mi amiga, no quiero que se moleste por decirle que se aleje para que tu no pienses mal, a pesar del beso y todo ella esta consiente de yo estoy contigo como pareja.

-veamos, yo no te digo que la ales de ti, pero si que le digas que no debe hacer lo que hace de andarte poniendo cosas como la de la canción, ¿cómo crees que me sentí al leer eso? Y luego peor al ver que andabas tan feliz con ella que ni caso me hiciste.

-ya Santi, perdóname, vamos a olvidarnos de todo y te prometo que nunca más va a pasar algo así… no te quiero  perder por una tontería así-dijo viéndome a los ojos con una mirada algo triste

-a mí no me parece una tontería como tu dices pero… esta bien, voy a confiar en ti Ángel , confiaré en que nunca se dará algo así de nuevo, vamos a olvidarnos de lo que pasó y ya, todo bien ¿va?- dije finalizando con una sonrisa, que tengo que admitir fue fingida.

-dale- me sonrió y se puso de pie extendiéndome una mano para ayudarme a levantar –vamos a ver que hacemos por ahí ¿te parece?- dijo al tiempo que empezábamos a caminar y me pasaba un brazo por el hombro, amistosamente

Caminamos hacía el coche y él lo encendió y fuimos al cine, vimos la película “Sherlock Holmes: juego de sombras” que yo quería ver desde diciembre, pero no había tenido oportunidad.

La verdad es que aunque aún tenía algo de coraje por lo que había sucedido, pues me la pase muy bien con él. Cuando salimos del cine eran como las 9:00pm o un poco más, nos fuimos directo al coche, y comenzamos el regreso a mi casa.

-¿tus papás estarán en tu casa?- pregunto él, así de repente, yo lo miré extrañado por su pregunta y le contesté

-pues si, ¿dónde quieres que estén?

-mmmm no lo sé… dónde sea pero que nos dejen solos jajaja- dijo él riendo al último

-jajaja ¿Qué estas pensando angelito?

-na’ bueno nada,  lo que pasa es que… ¿hace cuanto tiempo que no estamos asi… solos?- preguntó mientras seguía conduciendo

-pues hace ya algún tiempo, pero hoy no será eh, por si eso pensabas- le dije sonriendo sin poder evitarlo

-pues yo recuerdo que fue hace como tres semanas… es mucho tiempo, pero bueno, ya, tranquilo, hoy no habrá nada- dijo lo último bajando un momento la mirada a su paquete como si le estuviera diciendo a él y no a mí… no pude evitar reír al ver aquello, de hecho ahora que lo estoy escribiendo y lo recuerdo, aún no puedo evitar reír, pero bueno ya sigo….

Cuando llegamos a mi casa se bajo y me pidió que me quedara allí dentro, se dirigió a la puerta del copiloto y la abrió para que yo bajara (muy caballeroso jajaja).

-órale que amable puedes llegar a ser- le dije yo riéndome

-jajaja con lo que quiero siempre soy amable, es un don natural en mí jajaja- contestó –oye Santiago.

-dime.

-¿puedo entrar a tu casa?- pregunto poniendo una cara como de niño bueno

-jajaja claro que sí, aunque las veces que has entrado no hay nadie… ¿seguro quieres entrar?- le pregunte dudando de que quisiera

-sí, quiero entrar, para estar un ratito más contigo- me dijo sonriendo complacido

Abrí la puerta que da a la calle y pasamos el jardín para llegar a la puerta para entrar a la casa, cuando entramos enseguida vi a mi mamá y mi papá que estaban platicando en la sala con mis padrinos de bautismo.

-buenas noches- saludé yo en general pero después mi mamá me miró como diciendo “no seas mal educado” y ya fui a saludar de mano y todo, luego me distancié y presenté a Ángel –él es Ángel, un compañero de la escuela, vino para ayudarme con algo de la computadora que… salió mal algo- dije sin saber bien que excusa dar para su visita.

-hola buenas noches- saludó Ángel un poco apenado

-¿no eras tú el que vino hace unas horas a recoger a Santiago?- preguntó mi mamá y Ángel asintió -¿por qué no arreglaron el problema cuando viniste antes?-preguntó mi mamá nuevamente –creo que es ya es muy noche para eso.

-es que no recordaba el desperfecto mamá, hasta hace un rato, le platiqué a Ángel y me dijo que él podía ayudarme- dije yo respondiendo a mi madre

-sí, así es señora y pues quisimos aprovechar para ver de una vez- complementó Ángel

-¿van en la misma escuela? Te ves más grande de edad tú Ángel… y de tamaño ni se diga- dijo mi madrina provocando algunas risas por lo del tamaño

-es que si vamos en la misma escuela, pero no en el mismo semestre madrina, él va en sexto y yo en cuarto- contesté yo –bueno si nos disculpan vamos a mi cuarto para ver lo del problema de la computadora- finalicé mientras los demás asentían.

Dirigí a Ángel, que se hacía como si no supiera dónde era mi cuarto “para no levantar sospechas de que ya había venido antes” me dijo luego.

Cuando entramos cerré la puerta y el inmediatamente me abrazó y me dio un beso, luego se separó de mí y se tumbó sobre la cama, yo me coloque al lado de él, también sobre la cama pero sentado.

Después de un rato se alzó y me dio un beso tierno en los labios, luego se puso de pie y se dirigió a la puerta, yo lo miraba para ver que es lo que iba a hacer y al llegar a la puerta puso el seguro.

-Ángel no haremos…- dije yo sin poder terminar ya que él me interrumpió

-nada malo va a pasar amor- dijo sensualmente acercándose a mí para besarme de nuevo, yo me separé un poco y hablé

-están mis papás y mis padrinos abajo, nos pueden oír o algo.

-mejor… ¿no te excita el peligro? Me dijo sonriéndome mientras se colocaba justo delante mí, para besarme, yo ya no dije más y me dejé… poco a poco se iba recargando más en mí hasta que quedé recostado en la cama y él encima mió y podía sentir todo su cuerpo sobre mí, después de unos minutos así ya sentía algo muy particular sobresaliendo de su pantalón… cosa que la verdad me ponía a mil.

El me dejo de besarme la boca, y colocando sus labios al lado de mi oído me dijo muy bajito “te amo como no tienes idea”. Yo que ya estaba súper caliente no dije nada solo puse mis manos sobre su cinturón, y comencé a maniobrar para quitarlo. El miro para abajo y después me miró sonriendo mientras movía las caderas de una forma muy provocativa.

El por el momento se limitaba a darme besos y abrazarme… yo ya le había zafado el cinturón y luego él se levantó un poco, desabotonó su pantalón y bajo poco a poco el zipper mientras me miraba sonriendo, y yo lo miraba a él de la misma manera. Después de un rato logro bajar totalmente el zipper y yo lo jalé hacia mi para besarlo de nuevo, después  hice que se acomodara debajo de mí.

Le baje un poco el pantalón, Ángel empezó a quitarme la camisa, se trababa con los botones y yo me la quite por completo, entonces la cosa estaba así, yo sin camisa, únicamente con el pantalón y Ángel con la playera puesta pero levantada mostrando su abdomen, y su pantalón casi por las rodillas. Obviamente tenía aun puesto su bóxer, pues aun no podía ver con claridad y explicites ese bulto que se traía y que estuve tocando por encima del bóxer varios minutos a la par que intercambiábamos besos,  pude notar como palpitaba ya de excitación. Yo debo admitir que desde hacia rato, yo estaba ya con una erección tremenda, quizás Ángel no se había dado cuenta porque solo me tocaba la espalda y los brazos, pero bueno, la cosa es que empecé a darle besos en el pecho mientras miraba la cara de Ángel que solo cerraba los ojos… seguro que le estaba gustando, (tres semanas sin nada lo debían haber estado matando jaja), seguí bajando a su abdomen, luego a su ombligo y seguí hacia su pelvis.

Aun tenía sus bóxer puestos, por lo que me limite a recorrer el borde de estos… metía mis manos debajo del elástico y las pasaba por encima de la base del pene… baje aun más el elástico y subí un poco mi cara para darle unos cuantos besos debajo del ombligo. Podía notar a Ángel sumido en la casi completa excitación, ya queme trataba de bajar la cabeza. Ya estábamos que jadeábamos de la excitación.

Yo la verdad ya no podía más así que levante el elástico del bóxer, después de esto metí mi mano y lo primero que le toque fue su escroto y lentamente subí a su pene, lo masturbaba poco para evitar que se corriera. Me decidí ya por quitarle su bóxer, lo baje por donde estaban sus pantalones.

Yo solo me quede viendo ese cuerpo tan atlético, tan atractivo, tan… desnudo jeje. Podía ver cada una de sus partes, podía tocarlo como yo quisiera. La verdad que a pesar de que ya habíamos tenido varios encuentros sexuales desde que empezamos nuestra relación, aun no podía creer todo aquello, me quede como en shock. Ángel observó que yo me había puesto pensativo

-¿pasa algo Santi?- preguntó algo descolocado.

-nada es solo que… nada- contesté sonriéndole y me le abalance sobre su pelvis y comencé a masturbarlo.

Me quede viendo su pene muy de cerca, suspiré, mientras abría mi boca, cuando me lo introduje Ángel lanzó un gemido cuando hice esto y cerro completamente sus ojos.

-shhh, nos van a oír- le dije yo dejando de mamar su polla, el solo dijo “aja” y tomó mi cabeza para que yo volviera a meterme su pene en la boca, y así lo hice, mientras yo hacía esa mamada, podía agarrar su pene con una mano mientras le acariciaba sus testículos con la otra.

Me esmeré en la mamada, por una parte quería terminar ya para ser yo ahora el que disfrute, pero por otra quería seguir así, haciéndolo disfrutar a él.

Luego de unos minutos Ángel, aun conteniendo y ahogando sus gemidos me dijo que ya se iba a correr, yo separé mi boca de su pene y seguí masturbándolo hasta que eyaculó, su semen cayó en mi mano, sus piernas, su tableta… por todos lados… terminó respirando profundamente y luego se alzó sobre sus cocos y me acerqué para besarnos, el sin limpiarse el abdomen ni nada se colocó sobre de mi y en ese momento… ¡mierda! Tocan la puerta

-Santiago, ya se van tus padrinos, baja a despedirte ahora- dijo mi mamá del otro lado de la puerta

-si, ya bajo… voy enseguida- dije yo mientras me levantaba rápidamente y sentía como me latía a mil el corazón… ni siquiera había yo disfrutado… pero del susto que me llevé mi erección se bajo en un dos por tres.

Rápido me comencé a poner la camisa mientras Ángel se limpiaba con papel y se subía bóxer y pantalón y acomodaba bien la playera. Bajamos rápidamente, dándonos un beso al salir de mi habitación y mostrándonos una mirada cómplice al llegar a la sala.

Me despedí de mis padrinos y cuando estos se fueron mi mamá dijo que ya era demasiado noche, que sería mejor que siguiéramos mañana con lo que estábamos haciendo… Ángel y yo nos volteamos a ver y sonreímos.

Ambos aceptamos que ya Ángel se fuera a descansar y todo, así que esa noche yo me conformé con hacerme una paja mientras me bañaba pensando en todo lo que le había hecho a mi novio.

Todo continuó normal en nuestra relación desde ahí hasta finales de febrero…