Un chico con mucho que contar V
¿Les han tocado de esos días en los que creen que nada puede ir peor y milagrosamente... las cosas empeoran?
Este relato va dedicado a un lector: Fede Santisteban…
Cuando me desperté Adrián aún estaba dormido, me levanté con cuidado para no despertarlo, tome mi pantalón para ver mi celular y tenía ¡¡¡15 llamada perdidas!!! Como estaba en modo silencio no escuche cuando llamaron. 4 eran de mi casa seguro mi papá o mi mamá, 2 eran de Luz, 1 de Camilo y 8 de… Ismael… ¿cuándo se cansará de fastidiarme? Pensé.
Cuando se despertó Adrián eran ya las 11:30, nos vestimos y le pedí que nos fuéramos lo más pronto posible
- Adrián ya tenemos que irnos debo llegar a mi casa ¡ya! Ahora.
-amor tenemos todo el día para estar solos aquí.
-no, yo tengo que regresar a mi casa.
-¿no te gusto lo de anoche?- pregunto con un tono de tristeza
- Adrián, como crees eso, claro que me gustó, me encantó, fue lo más maravilloso que he vivido.
-ammmm- hizo un puchero –demuéstramelo
-¿Cómo?- pregunte mirándolo de reojo y con una sonrisa
-emmm no se ¿cómo podrá ser?... ah quizá… CON UN BESO!- gritó lo último y me beso, solo fue un “piquito” y ya
-bueno señor Díaz creo que ya está demostrado ahora lléveme a mi casa jajaja.
Salimos de la cabaña y tomamos carretera rumbo a mi casa, tardamos como media hora en llegar a mi casa.
-¡listo! Llegamos- dijo Adrián apagando el carro y colocando sus manos detrás de su cabeza
-muchas gracias- le di un beso rápido y me baje del auto. –Ahora a aguantar los regaños de mi papás, si salgo vivo te llamo más tarde ¿ok?- le dije recargado en la ventanilla cuando ya había salido del auto
-ok, espero tu llamada- me lanzo un beso, luego encendió el auto y se fue
Yo entre a mi casa y mis papás estaban sentados en un sofá de la sala, me senté en frente de ellos y ya se imaginarán como me fue, en fin salí bien librado de eso y me dirigí a mi cuarto a realizar tareas de todas la materias que no había hecho por andar de “ligue”, comencé a hacer las tareas a las 2:00pm y terminé a las 9:30pm!!! Acabé muerto! Pero supongo que yo tuve la culpa por hacer otras cosas… pero no me arrepiento y lo volvería a hacer jeje
A eso de las diez llamé a Adrián estuvimos hablando de cosas tribales hasta que ya no pude más con el sueño y nos despedimos.
A las 6:00am sonó la maldita alarma de mi celular, en ese momento me dieron ganas de azotarlo contra el piso, pero bueno no tenía más remedio que levantarme y alistarme para irme a la escuela.
Llegué a mi salón de clases faltando 10 minutos para las 7:00am, como siempre fui el primero, unos minutos después llegó Adrián.
-buenos días mi Santi- dijo muy sonriente y mirando alrededor se acerco para besarme
-hola, oye aquí alguien nos puede ver- dije yo después del beso
-pero nadie nos vio, no te preocupes, no seas estresado cariño jajaja.
- Adrián, eres un tonto… pero así te quiero.
-lo que pasa es que sin mí no puedes vivir acéptalo- me miro con cara y sonrisa de triunfo
-no, sin ti no vivo- le dije yo y nos besamos de nuevo
Escuchamos que la puerta se abrió y nos separamos rápidamente y volteamos al mismo tiempo a ver quién entraba
-hola… que sorpresa!!!- dijo Camilo abriendo los ojos sorprendido al ver a Adrián –de Santi no me extraña, pero de ti Adrián??? Cómo es eso de que llegas temprano???
-ya ves, me quiero regenerar ahora seré el más estudioso de todos, entraré a todas las clases y llegaré temprano- respondió mi novio mirándome de reojo
-y eso a qué se debe? Qué ya te pegó el amor o qué onda?
-oh pues ya ves mi estimado Camilo, ya ves…
Ellos siguieron hablando y yo me mantuve al margen de su conversación, en ratos cuando Camilo se distraía Adrián me miraba y me lanzaba besos, yo solo reía divertido, luego cuando comenzó a llegar más gente decidí ir al baño.
Cuando estaba caminando por la plaza central de la escuela hacia el baño sentí como se clavaba en mí una mirada y empezó a incomodarme me giré rápidamente hacia donde provenía y ahí estaba Ángel, un chico de de 5º (un año mayor que yo, alto como de 1.93mts. moreno claro, con un cuerpo muuuuy bien, y una cara que bueno… en conclusión le hacía honor a su nombre “Ángel”… y como todo tiene un pero, él no podía ser la excepción, era un pesado, sangrón, creído y todo lo que se puedan imaginar ) era amigo de Joaquín, el chico que organizó la fiesta a la que fui cuando Adrián me habló.
Cuando me giré y lo mire (a Ángel), él se quedó mirándome a los ojos un mínimo instante y luego desvió la mirada, yo seguí mi camino al baño.
El día transcurrió normal aunque lento, con clases súper pesadas e inentendibles para mí como las de matemáticas y química. Solo deseaba salir ya, pero el reloj parece que se estaba tardando más de lo normal en avanzar, se me hizo una eternidad para que se llegaran las 2:00pm. Cuando por fin llegó esa hora, todos comenzamos a salir.
Yo me fui platicando hacía la salida de la escuela con Adrián, Luz y Camilo íbamos caminando lento, y hablando amenamente.
-como ves Camilo que Adrián y Santiago ya tienen pareja?- preguntó Luz con un tono divertido.
Adrián y yo nos giramos a verla con una cara de enfado los dos.
-sí algo sospeché de eso, bueno con Adrián, lo de Santi no lo sabía… a ver cuéntame pequeñuelo- dijo Camilo mirándome.
Yo no supe que decir, así que lo único que se me ocurrió comentar fue
-este… si, pero es muy largo, te cuento mañana que haya más tiempo.
-bueno, pero de que me contarás, me contarás eh- fue la respuesta de Camilo
Cuando estábamos a punto de llegar a la puerta estábamos formados en una fila, en un extremo iba Camilo, al lado Luz, y después de ésta Adrián, yo al lado de él en el otro extremo.
De repente sentí un empujón y una voz muy gruesa y varonil dijo detrás de mí
-quítate, no estorbes pendejo.
Yo me volví para ver quién había dicho eso y ahí estaba Ángel
-oye que te pasa? Más respeto no?- dijo Adrián defendiéndome
-tú no te metas, la bronca no es contigo.
-¿y con él sí?- le respondió mi novio un poco molesto
-ya Adrián, vámonos no vale la pena- dije yo tomando a Adrián de un hombro tratando de que me hiciera caso.
Yo no podía permitir que se pelearan pues era seguro que Ángel le ganaría a mi novio. Adrián no hizo caso a mi comentario y siguieron discutiendo
-mira amigo- continuó diciendo Ángel – yo no tengo la culpa de tu amiguito sea un pendejo que solo estorbe.
-me estas cansando, así que deja de ofender, ¿crees que porque estad muy alto no te puedo romper la cara?- dijo Adrián acercándose peligrosamente a Ángel, quien respondió acercándose aún más
-Adrián por favor vámonos- le volví a insistir yo
-huy necesitan defenderse el uno al otro- dijo Ángel burlonamente –parecen noviecitos… ¿lo son?- pregunto finalmente
-¿te importa? eso a ti te vale madres ¿no?, entonces deja de estar chingándonos- dijo mi novio mirando a su contrario a los ojos.
Pronto una multitud se formó alrededor de nosotros y… Ángel soltó el primer puñetazo.
Mi Adrián no se quedó atrás y sorprendentemente logro conectarle 2 golpes en la cara a Ángel, eso me sorprendió pues Adrián mide 1.77 contra el 1.93 del otro, y pues aunque Adrián no está nada mal de cuerpo, era notorio que Ángel estaba mejor que mi novio en ese sentido.
La tanda de golpes siguió uno de aquí, otro de allá y así hasta que los vigilantes los separaron, el piso ya estaba manchado con algunas gotas de sangre, temí enserio por Adrián pero cuando se acercó a mi puede notar que no era muy grave y me tranquilicé un poco.
Todos comenzaron a dispersarse. Ángel, Joaquín y sus demás amigos se sentaron en una banca cercana; Luz, Camilo, Adrián y yo nos quedamos ahí parados
- Adrián vamos a la enfermería a que te revisen ahora no se ve tan mal pero puede resultar algo grave después- le dije yo mirando un golpe en du nariz
-no te preocupes Santi estoy bien, enserio- me dijo tratando de tranquilizarme
-Chicos han de decir que soy mala onda por dejarlos solos pero es que me tengo que ir- dijo Luz
-y yo- repuso Camilo
-no se preocupen, no pasa nada- dijo Adrián mostrándose comprensivo
Luz y Camilo se fueron y Adrián y yo nos quedamos ahí solos. Después de mucho insistir logré convencer a mi Adrián de que fuéramos a la enfermería.
Para llegar a allá tuvimos que pasar por donde estaba sentado Ángel y pude notar como éste y Adrián intercambiaban miradas que denotaban furia.
Cuando llegamos a la enfermería Adrián pasó y estuvo ahí como 15 minutos, yo a lo lejos pude notar como Ángel y sus amigos se levantaban de donde estaban sentado y se fueron.
Cuando Adrián salió me miro sonriente
-ves? Te dije que no pasaba nada… tú te preocupas de más cariñito- dijo dándome tocándome la nariz con su dedo índice
-sí, pero de todas formas no está de más… bueno ya vámonos- lo miré directo a los ojos y le sonreí
Cuando salimos de la escuela hacía la calle no pude creer lo que mis ojos vieron… ahí frente a donde estaba el coche de Adrián estaba parado Ismael… “lo único que faltaba” pensé yo
-y ahora este wey que?- me dijo Adrián por lo bajo
-no lo sé, Adrián prométeme que no le harás caso a lo que diga.
-no, no puedo prometerte eso, ya me calentó el otro pendejo y no sé si me pueda contener.
Terminando de hablar Adrián ya estábamos frente al coche y con Ismael al lado
-vaya cuanto te tardas para salir mi amor- dijo el sínico de Ismael mirándome
-¿qué diablos haces aquí? El sábado me dijiste que saldrías de la ciudad- le dije yo en un tono de molestia
-a mí también me da gusto verte- dijo haciendo de lado lo que le dije –mi querido Adrián gracias por acompañarlo hasta aquí, ahora se vendrá conmigo.
-estas drogado o que madre te pasa?- dijo Adrián muy molesto y tomando a Ismael de cuello
-hey tranquilo, tranquilo- dijo Ismael claramente asustado y tratando de quitar las manos de Adrián de su cuello
-mira más te vale que nos dejes en paz mequetrefe, ¿por qué no te metes en la cabeza que Santiago no quiere nada contigo?
-ya Adrián por favor déjalo, no vale la pena pelearse por alguien así
-tienes razón Santi no vale la pena- de un empujón lanzó a Ismael haciendo que cayera al piso
Nos subimos al coche y nos fuimos. Adrián comenzó a manejar muy deprisa y le dije que la hiciera más despacio pero fue inútil, no me hizo caso. Al doblar en una esquina se atravesó un perro y Adrián hizo el intento de frenar pero no lo logró y atropello al perrito, era un pastor alemán. Rápidamente nos bajamos del auto y el perro estaba ya parado aullando de dolor y no caminaba bien pues había quedado herido de una pata.
Adrián alzó al perro y lo subió al coche, lo llevamos a un veterinario.
Cuando llegamos a la primera veterinaria que encontramos Adrián alzo y bajó al perro y entramos en el lugar
-buenas tardes jóvenes, díganme ¿qué se les ofrece?- preguntó amablemente el veterinario, un hombre como de unos 45 años
-mire lo que pasa es que no mire bien por el camino y atropelle accidentalmente al perro, creo que esta herido de una pata- explico Adrián
-a ver vamos a revisar- dijo el hombre mientras tomaba al perro de una pata
Luego de cómo 15 minutos nos dijo que un hueso estaba roto y que debíamos cuidar al perro como él nos había dicho para que sanará pronto, luego nos dio la opción de dejar al perro ahí hasta que se recuperará, lo que nosotros aceptamos.
Adrián dio sus datos para que el veterinario nos hablara para reportarnos cómo iba el perro en su recuperación, ya nos estábamos despidiendo cuando…
-ya llegué papá- dijeron a nuestras espaldas, en la entrada del lugar, yo enseguida conocí la voz y me giré a la par de Adrián para confirmar quien había hablado y sí era él…. Ángel, mierda!!!
Hola de nuevo espero hayan disfrutado del relato :) un saludo y un fuerte abrazo... J.M.