Un cambio en mi vida

Mal momento anímico, me ayudo a descubrir nuevas y fuertes experiencias sexuales.

Estaba pasando por un momento difícil, y la verdad que me abandone totalmente, al punto que ni salía con mis amigos. El motivo de mi bajón era, mi separación y sentí que se me termino la vida. En la oficina, tengo una amiga, que siempre fue centro de bromas, por que ella a pesar de no ser lo que se dice una mima linda y con buen cuerpo, siempre se las arreglo, para tener sus alegrías. Como me veía, de lo mas deprimida, me invito un café y hablándome me sugirió, que tenia que dar un cambio a mi vida y que ese cambio debía empezar por mi aspecto, por lo que me paso la dirección de un centro de belleza, del que me aclaro que era muy especial, y que preguntara por Carla, que era la persona que me iba a cambiar mi aspecto y humor, que dejara en manos de ella mi estancia en el centro. La verdad, que no estaba convencida, pero se venia el fin de semana y si bien no tenia nada armado para salir, me acorde de la recomendación y me encamine a ponerme en manos de Carla. Carla me recibió y me dijo que me estaba esperando, así que me invito con café mientras ordenaba, toda la rutina. Me hizo pasar a un gabinete privado, Carla es una mujer espectacular, con un cuerpo envidiable, piernas largas y bien torneadas, una cola que se insinuaba bajo su túnica, y hermosas tetas que para nada disimulaba, pelo corto, ojos marrones y una voz por demás encantadora. Me explico que al terminar el día, iba a ser una nueva mujer, y que me relajara, para poder disfrutar lo que tenia por delante. Primero, un buen baño relajante con sales, belleza del cuerpo y por ultimo masajes. Me acompaño, al  jacuzzi, para indicarme todo, mientras me ayudaba a desvestirme. Al principio no me gusto la idea, pero creo que la sola mirada de Carla, que intuyo mi incomodidad, basto para que volvieran a mi cabeza las palabras, de mi amiga, para que dejara todo en manos de Carla. Lo de las manos fue, muy cierto, cada vez que me tocaba con sus manos, sentía una sensación única y nueva ya que nunca había estado en una situación así con otra mujer y además tampoco se me había pasado por la cabeza. Desnuda ya, y en el agua, Carla, dejo su túnica y se metió conmigo, haciendo que su cuerpo rozara el mío, y empezó a tocarme y acariciarme, diciéndome que iba a hacer de mi una nueva mujer, sin limites y sin prejuicios. A pesar de mi incomodidad, aceptaba la situación y además sentía que me gustaba. Manos por mis tetas, mi concha y mi culito, que nunca deje que fuera penetrado, su boca busco la mía y suavemente me beso y lamió mi cara, mordía mis tetas y sus dedos empezaron a colarse en mi concha, jugando mucho en el culo que me resistía a dejar que invadiera. Sentía que los jugos de mi concha me llenaban y que quería mas, así que le pedí a Carla que me ayudara a acabarme, pedido que gusto mucho, e hizo que trajera un consolador bien grande que me metió bien adentro, y que me ayudo a sentir como me corría la leche que hacia tanto no conseguía disfrutar. Me intrigaba, lo que vendría, ya que no me esperaba nada de lo que me estaba pasando, pero quería seguir, y fue esa la respuesta a  Carla, cuando pregunto si seguíamos. Me ayudo a salir, me envolvió con un gran y suave toallon, y me llevo a una camilla, donde me recostó, y me anuncio que lo que seguía era depilación, para que pudiera lucir una bikini bien cavada en el verano. Siempre muy dulce conmigo, no dejaba momento sin acariciarme y tocarme, cuando entra en el privado un tipo, que me puso los pelos de punta, por que no me lo esperaba y por que además estaba rebueno. Me lo presento como el estilista y me recostó a la camilla para abrirme la toalla y comenzar a trabajar, guau, mi cuerpo estaba confundido, pero no renunciaba a dejar que las cosas siguieran pasando, por que la verdad la estaba pasando muy bien, y quería pasarla mejor aun. Comenzó con mis pelos de la concha, que tocaba una y otra vez, mientras me depilaba, yo estaba tan caliente que no pude detenerme y comencé a mover mi cadera, mientras el me tocaba. Los dos se dieron cuenta que estaba muy caliente y que les estaba pidiendo que hicieran gozar todo lo mas posible. Carla, le dijo al tipo que se pusiera junto a mi, de manera que mi boca quedara justo a la altura de la pija de el, que se veía como un buen bulto, y que como si me leyera el pensamiento, saco y comenzó a jugar con ella, recorriendo mi cara y mi boca sin dejar que pudiera chuparla, cosa que me calentaba aun mas, además que Carla abrió mis piernas suaves y recién depiladas, para empezar a chuparme la concha con mucha delicadeza. Necesitaba la pija en mi boca, así que le pedí por favor que me la diera, me dijo que era muy puta, y me la clavo en la boca, tanto que la sentí en la garganta con un placer enorme, cual si me la hubiera clavado en la concha. La leche se me escapo, mi cuerpo se encorvo en la camilla, la concha bien mojada y la pija dura y a punto de darme lo mejor, de su jugo en mi boca, cuando se acabo, y la leche me corrió por la garganta y la cara, mientras el jugaba y paseaba su pija lechosa por mis tetas y cara. No salía de mi asombro, había ido con la idea de un cambio de look y me estaba cambiando la vida, frente a situaciones que nunca había vivido y que no pensé jamás que me iba a permitir. Agotada por lo intenso de lo que me estaba pasando, con orgasmos bien profundos, y con intrigas, me prepare mentalmente para lo que yo me imaginaba como el postre. Carla se acerco a mi y me dijo que ella se tenia que ir y que me dejaba con su compañero que me iba a llevar a la sala de masajes, me sentí con bronca pero me calentó mas que me dejara con flor de macho y allá fuimos... Lugar cómodo, con colchonetas en el piso, y luz tenue, música muy suave y ahora no uno sino dos muchachotes, que se los veía tan buenos como el primero que por suerte para mi no se había ido. Me recostaron en la colchoneta y empezaron a frotarme con un aceite aromático que me relajo todavía mas, las manos recorrían mi cuerpo de punta a punta, con mucha suavidad, llegando a todos los rincones, mis tetas estaban duras , los pezones parados, mi concha siempre mojada y cada vez mas las caricias iban para mi cola. Yo estaba boca arriba, recogieron mis piernas y pusieron un almohadón bajo mi cintura, dejando así mi culo a merced de ellos, para  poder llegar mejor a el. Tenia tres tipos, soñados alrededor mío, con sus pijas duras listas , para llenarme y yo dejarme coger por ellos sin limites...sin limites?? si ya estaba muy caliente y cuando quise acordar ya tenia a uno de ellos con sus dedos metidos en mi virgen culo, que los aceptaba aunque con dolor, con mucho placer, ahí empezó todo, entregada mi cola, mi boca se lleno con la pija de uno de ellos mientras los otros dos me aprontaban para coger como nunca antes. Se me hecho uno primero y me daba fuertes pijazos que me retumbaban en el cuerpo, yo gozaba y mas leche les daba, no paraba de acabar. Viendo que no había limites, se tendió a mi lado al que le chupe primero la pija y me sentó en ella, mientras los otros dos me franeleaban y ponían sus pijas en mi boca, así estuvimos hasta que me agarro del cuello, me bajo hacia el, teniéndome bien sujeta mientras me mordía las orejas y el cuello, otro de ellos con la pija bien parada, la puso en mi orto y empezó a empujar para meterla. Fue un momento de locura, ya que me dolió y quería llorar, pero era tanto el placer que sentía que yo misma me movía y pedía mas y mas pija, así que el aceite ayudo a que me la pusiera toda y sentía los huevos que me pegaban en la cola cada vez que me la ponía y sacaba. Yo no se cuantas veces pude acabar por que perdí la cuenta y creo que la noción, pero entre los dos que me cogian por la concha y por mi virgen culito y el otro que me ponía su pija en la boca, me llenaron de leche como nunca antes. Agotada, y sin fuerzas, me dejaron para que descansara y me bañara. Salí, luego de una tarde nunca soñada, buscando a Carla, que me esperaba, y le agradecí, despidiéndome con un hasta muy pronto. Me olvide contarles, que mi amiga tenia razón, siempre hay algo que vale la pena para gozar, de la vida, si queres saber mas escribime y te cuento Julieta

enrosk2@yahoo.com