Un cambio de vida (5)

Un periodo oscuro y depre.

Un cambio de vida V

Pese a todo lo bueno que esperaba entre en un pésimo período de mi vida. Se acercaba noviembre e iba a cumplir mis 30 años, Jorge no tenía nunca tiempo en el trabajo, y en alguna charla caliente que intente con él franeleando en su oficina, se ofendió con la idea de incorporar algún amigo.

Mi relación con el se fue enfriando, cambie mi vestimenta y ya no me vestia provocativamente. Mi marido tenía cara de preocupado todo el tiempo y trataba de saber que me pasaba.

Como las vacaciones estaban cerca me propuso que eligiera: si prefería Brasil, Uruguay, o Gesell. En realidad le dije que me gustaria volver a una casita que tenían mis abuelos en Mar de Ajo. Se quedo mirandome, pero arreglo todo y pudimos al fin ir.

Las vacaciones fueron de lo más normales y aburridas, pero en la casa vecina que era de los descendientes de mi tía abuela, estaba una prima de mi padre, Norma, de unos 55 años, de muy buen ver. Encontre en ella alguien con quien hablar y que me ayudo a ordenarme, el día antes de que terminaran las vacaciones me dijo: Por lo que me contaste se ve que tu marido te ama, y aunque sufra, le encanta que lo humilles y lo sometas, se siente vivo, y por lo que se ve a vos tambien porque no te excita tener relaciones si no está el presente.

Luego hablando de mi carrera, y por lo que le había contado, me sugirió porque no empezaba de nuevo la carrera de medicina, y agrego en tono jugeton además vas a estar rodeada de muchachitos, muy calientes, muy jocosos y muy manejables; no son hombres como te gustan pero dan mucha leche y se manejan facil.

Al día siguiente volvimos a la ciudad, otra vez mi cabeza estaba clara y me sentía plena, las fichas cayeron, pense. Pasaron cuatro meses de oscuridad, otra vez a la ruta.

LLegamos a la noche a casa me bañe y me vesti muy sensual, al ir a la cocina mi marido que estaba en slip cocinado, se dio vuelta, y al verme se le ilumino el rostro. Me acerque a él lo hice girar y lo apoye en la mesa, me arrodillé y empece a acariciar su pija sobre el slip, su cabeza sobresalia y empece a jugar con la lengüita en la parte de atras de su cabecita.

Que mala que soy mi amor, Norma me sugirio que vuelva a estudiar y ya estoy pensando en todas las pijas llenas de leche que me esperan; en cuantos polvos se pueden echar en una noche;

Le baje el slip en la parte delantera, su pija quedo sacudiendose en el aire, ademas me da bronca, porque me puse el DIU, y a todos esos guachos los voy a dejar que me llenen de leche y vos me vas a seguir cogiendo con forro; Su pija saltaba cada vez más loca, me la trague hasta el fondo la mame un buen rato y volví al ataque. Encima me muero por saborear la lechita de esas pijas y a vos no te dejo... ves que soy muy mala... Me la metí de nuevo en la boca, cuando sentí que estaba por acabar, la saque y la apoye sobre su pelvis haciendo que se acabara en el mismo. Mi marido grito y gimió y su cuerpo se sacudió, me miro a los ojos y me dijo cuanto hacía que no me hacías disfrutar así, pensé que no me amabas más.

Esa noche nos dormimos abrazados....continuará

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