Un brusco cambio de vida (4)

Continúa el relato de Gerardo en Madrid con sus primas. Cuarta entrega

Continuo con la historia, espero que haya alguien que aun la siga, es la cuarta entrega, si sienten curiosidad de que ha es lo que pasa pues pueden leer las tres entregas anteriores……………..

A la mañana siguiente y no se a que hora pero entraron las gemelas a despertarnos, nos encontraron aun entrelazados y desnudos, se acercaron a la cama, se quitaron las pijamas y se acorrucaron con nosotros comenzando a juguetear Paula con Paty y Paulina conmigo, me besó, tomo mi flácido pene entre sus manos y se lo llevó a la boca – condenado Grillo, tu pene tiene un rico sabor a Paty- dijo pícaramente la gemela, en eso Paula separó las piernas de mi pequeña e introdujo la lengua en su vagina- mmmm y aquí sabe a Grillo- las dos rieron alegremente yo me ruborice y Paty empujo a Paola que cayó al suelo sin dejar de reír, jaló una almohada y golpeo a Paty con ella quien se levantó y regresó el golpe al tiempo en que Paulina tomo otra almohada y me golpeo a mi.

Comenzó la batalla de almohadas mas divertida en la que he participado, los cuatro riendo desnudos corriendo por toda la habitación los cuatro contra los cuatro aunque Paty y yo evitábamos pegarnos ya exhaustos tiramos las almohadas, corrimos a la alberca privada y nos aventamos a la fresca agua, chapoteamos y chapoteamos durante un rato después nos abrazamos todos dentro del agua y nos besamos uno al otro, Paula a mi, Paty a Paulina, luego las Paus y Paty y yo y así durante unos minutos, a continuación las Paus me sacaron a empujones de la alberca y me tiraron en le piso Paula me acariciaba los huevos y Paulina frotaba mis nalgas – Paty ya te disfruto sola toda la noche y nosotras tuvimos que atendernos una a la otra, ahora te toca a ti darnos todo el placer que nosotras no podemos darnos, además recibimos llamada de mamá y avisó que llega por la tarde y papá por la noche así es que se acabó la diversión.

Paty se acerco a mi y me besó en los labios acostada pecho abajo tras de mi poniendo su cabeza de cabeza sobre mi cabeza, ella me besaba al revés y las Paus buscaban mi erección que por supuesto no tardó en llegar, primero Paulina se subió en mi y deslizó mi verga poco a poco dentro de ella mientras Paula acaricia y besa mis piernas, y Paty continua besándome en los labios. – No te lo acabes todo- dice Paula, Paulina mueve negativamente la cabeza mordiéndose los labios sin dejar de subir y bajar encima de mi, cuando comienza a gemir las hermanas dejan de besarme acercándose a Paulina, cada una mordisquea un pezón de la gemela que arranca a gritar de placer y a acelerar el ritmo, acostado disfruto gozoso de verlas y de sentir el ímpetu de Paulina en mi procurando concentrarme para no tener un orgasmo antes de que toque el turno a Paula, cuando aumenta el ritmo de Paulina ella misma se deja caer y las hermanas se lanzan sobre ella, Paty a su vagina introduciendo la lengua y Paula a sus senos para ayudarla a explotar en un fuerte grito de placer, toca el turno a Paula quien me pide que ahora sea yo quien me monte en ella, cosa que me agrado pues si ella se hubiera montado no hubiera podido resistir su ritmo así que llevaba yo el control en esta ocasión, Paty acariciaba y besaba a Paulina mientras se recuperaba y en unos minutos estaban acariciando a Paula, Paty en su cara y en sus senos y Paulina tocando con un dedo y luego dos alrededor de su diminuto ano que aun no había sido mancillado.

Esto provocó que no resistiera más y comenzó a explotar corriéndose bajo mi peso, no tuve la misma suerte así que me retire de entre sus piernas y atraje a mi a Paty a quien separe con cuidado sus muslos y cariñosamente me acomodé dentro de sus labios fundiéndome nuevamente en un abrazo, las Paus nos acariciaban nalgas espalda pecho pero nosotros dos nos sentíamos solos como la noche anterior aunque no puedo negar que mis primas hicieron que el orgasmo se alargara al lamer y morder nuestras pompas, disfrutamos al llegar juntos al clímax y nos dejamos caer uno junto al otro y las Paus una a lado de cada uno.

Así paso ese día, y los siguientes hasta que regresamos a Madrid aunque mas tranquilos nos buscamos los momentos en que a escondidas nos encontrábamos, a veces los cuatro, en otras ocasiones unas distraían a mis tíos mientras las otras estaban conmigo.

Regresamos a Madrid y todo siguió normal, es decir con nuestras constantes travesuras cada ves que los tíos salían, Josechu como siempre salía de vuelo y mi tía con su trabajo en el museo había comenzado un proyecto el cual la llevaba constantemente a las islas griegas, en una ocasión estuvo casi treinta días fuera y aunque mi tío Josechu procuró no salir tanto en esas fechas, no podía evitar al cien por ciento algún vuelo y a la hermana de mi tío la transfirieron a Badajoz, pequeño poblado en la frontera con Portugal así es que los tíos no tuvieron mas remedio que dejarnos solos.

  • Grillo ya eres de confianza en la familia, y por ser el hombre y el mayor te quedas como responsable de la casa y de las niñitas- nos dijo mi tío cuando se fue mi tía y el tuvo que volar a Buenos Aires, comentario que al parecer no les agrado a las gemelas por el gesto y la mirada de desaprobación que me echaron.

Fueron días en que aprovechamos para darle rienda suelta a nuestra erótica imaginación, uno de esos días, de hecho un fin de semana completo me tocó a mi solo servir a mis primas, comenzamos el viernes regresando del colegio, al llegar a casa las tres ya tenían un plan para ese fin de semana, entre sus planes estaba que ahora Paula quería perder su trasera virginidad, y lo demás no me lo quisieron decir, al terminar de comer me pidieron que fuera a tomar un largo baño de tina a la habitación de sus padres, que como ya comenté con anterioridad cada vez que ellos salían me pedían que dejara mi palomar y durmiera en la habitación principal para estar mas cerca de las habitaciones de las niñas y poder "cuidarlas" mejor, - si así van a ser las ordenes pueden darme las que quieran- les dije alegremente pero sin imaginar lo que planeaban, que como me di cuenta mas tarde ya desde varios días atrás lo habían maquinado.

Después de un rato al salir de la tina descubrí que mi ropa que deje sobre la cama no estaba, en su lugar estaba una nota que decía:

" Gerardo a partir de este momento y hasta el domingo en la noche se te prohíbe el uso de cualquier tipo de ropa", me quede perplejo por el mensaje decidí ignorarlo y subir en toalla a mi alcoba por mas ropa pero en la puerta de la recamara de mis tíos estaba la siguiente nota " ni se te ocurra querer ir por otra muda, tu habitación esta cerrada con llave y la llave la tiene Paulina, así que obedece o si no las consecuencias serán peores, no se vuelva a tocar el punto, pronto recibirás mas instrucciones"

  • ahora sí que se han pasado – pensé,- pero si me opongo Paulina es capaz de algo peor, mejor obedezco y ya me desquitare- baje las escaleras envuelto en mi toalla, pero de repente de no se que lugar salió la mano de Paula y sin que lo pudiera evitar me arranco el paño y me dejo totalmente desnudo, no es que no me conocieran pero la sensación de desnudez ante ellas normalmente vestidas me hacía sentir desprotegido, indefenso, no se explicar la sensación pero hacía en mi sentirme totalmente expuesto.

Así pues baje y les dije que seguiría su juego, que me dijeran a continuación que seguiría, antes de terminar mi frase, mas bien creo que antes de comenzarla ya estaba rodeado por las tres fierecillas que traían consigo cuatro gruesas cuerdas y fue cuando me di cuenta que en la sala pusieron fuertes aldabones dos de ellos empotrados en el techo y otros dos en el suelo así supe que fue lo que paso mientras me bañaba, al parecer llamaron a un albañil para que colocara estos aditamentos de tal manera que fuera imposible arrancarlos, pasaron las cuerdas por mis muñecas y tobillos, estaba tan impresionado con los arreglos que no opuse resistencia, cosa que por supuesto hubiera yo hecho si solo me hubiera imaginado que se les había ocurrido, ya fuertemente amarrado e inmovilizado comencé a apanicarme sobretodo al percatarme que los arillos de el techo y del suelo estaban sujetados a su vez a unas poleas que permitían que las cuerdas se pudieran correr un par de metros.

-Dios mío que se traían entre manos estas locas – no tardé mucho en descubrirlo, Paty se acercó a mi y me dijo al oído que sus hermanas estaban desquiciadas, y que si ella se oponía seguiría mi misma suerte así que tuvo que ceder, a continuación Paulina se dirigió a la mesa del comedor y desenrolló un pergamino y con voz de juez al emitir una sentencia comenzó a leer: " Por unanimidad y para cumplir la sentencia que te hemos impuesto...." – de que se me acusa – inquirí nerviosamente, sin hacer caso de mi comentario Paulina continuó con la lectura " por sentirte muy macho y aceptar que nuestro padre nos rebajaran machistamente a solo unas niñitas que seremos cuidadas por ti, y para demostrarte que no solo no hacen falta tus cuidados sino que nosotras las niñitas te podemos someter a nuestro antojo, se te condena a permanecer atado y desnudo todo el fin de semana" –¡Que¡- reñí ya molesto, eso no es justo, el que dijo eso fue tu padre y no yo- disputé casi gritando,-si, pero tu no te opusiste- comentó Paula, -pero como voy a contradecir a tu padre- supliqué.

Sabía que no lograría nada, se agarraron de ese episodio para poder hacer esto que por lo visto las gemelas tenían planeado desde mucho antes de ese suceso que por cierto les cayo como anillo al dedo para utilizarlo como pretexto, el caso es que comencé a poner pretextos , que la comida, - nosotras te alimentaremos- dijo Paty, que como voy a dormir, - pondremos un jergón y podrás acostarte por las noches - comento Paula, -¿y el baño?- dije nervioso temiendo la respuesta que recibí cuando Paulina me señaló con el dedo hacia atrás de mí donde estaba una bacinilla de peltre blanca, lo mas seguro es que vieron mi cara de susto, como creían que haría mis necesidades fisiológicas allí y frente a ellas – no eso no por favor, va mas allá de cualquier broma o cualquier otro castigo que nos hemos puesto, no lo voy a permitir- suplique nuevamente- que vas ha hacer, le vas a decir a mis papas- dijo amenazante Paulina - ¿como vas a explicar estos meses de sexo y placer?, que les dirás....- si continúan con esto les juro que me regreso a México, esto va fuera de toda lógica- interrumpí fúrico, Paty negó y puso cara de asombro y de dolor – no te preocupes- le dijo Paula a Paty – el no se va a ir a ningún lado- Paulina se acercó a mi y tomó entre sus manos mi pene y con voz tranquila me dijo – el domingo por la noche que te soltemos tu decidirás si te quieres ir o te quedas- me soltó y sin mas llamó a sus hermanas con una seña y las tres se dirigieron a la habitación de las gemelas, era seguro que hablarían con Paty y la tranquilizarían.

Por lo pronto yo no sabía como actuar, no me dieron opción, me quedé muy molesto y decidido a largarme de esa casa en cuanto me pudiera liberar, revisé mis ataduras y maldije el día en que mis primas entraron a formar parte de las niñas exploradoras del barrio ya que entre otras muchas cosas resultaron expertas en hacer nudos, no encontré forma de deshacerlos, jalé fuertemente las cuerdas para tratar de arrancarlas del techo comprobando que quien los puso sabía perfectamente lo que hacía, la opción de gritar para pedir ayuda estaba totalmente descartada por mas que deliberé no encontré ninguna explicación para tal escena, así que la única solución viable que pensé fue en convencer a Paty que me ayudara aunque tampoco sería fácil ya que al irme yo ella se quedaría sola ante la venganza inminente de sus trastornadas hermanas, pero no encontré otra salida trataría de convencerla.

A los pocos minutos las escuché reír alegremente salieron de el cuarto y bailando en fila india con Paulina a la cabeza se acercaron a donde yo estaba, - lo hemos pensado y si prometes no escapar te dejaremos ir al baño solamente una vez al día- dijo Paulina con una sonrisa coqueta- pero tendremos que confiar en ti, y que ante todo sabemos que una promesa tuya es de fiar decidimos aceptarla, que opinas- continuo diciendo Paula, ellas saben muy bien que por lo general solo voy a defecar una vez diaria, lo comentamos seguido ya que a ellas le asombra el control que tengo de mis intestinos, a demás de que saben que jamás incumpliría mi palabra sea la circunstancia que sea, pero no podía aceptar, pues eso dejaría como precedente de que pueden hacer lo que se les de la gana- no estoy de acuerdo- trate de defenderme – pues no te queda otra, o aceptas o te quedas todo el tiempo atado y te cagas en la bacinilla, tu decides- dijo burlonamente Paulina-

Por favor grillito, te prometo que no la vas a pasar tan mal- dijo Paty cuando Paulina la interrumpió violentamente- tu ya cállate no tienes que darle mas información, no tiene opción. –Pero que será cuando quiera hacer pipí- agregue nervioso – eso si voy varias veces al día. Ya lo tenemos contemplado, nosotras te ayudaremos una por vez- dijo sensualmente Paula tomando mis testículos con una mano y sacudiendo mi pene con la otra, - ya se que son tres sacudiditas- concluyo Paula sonriente y picara. No me quedó otra salida que aceptar la oferta y convencer a Paty más tarde de soltarme, ya que no podré romper mi promesa de regresar a mi castigo después de ir al sanitario, -de acuerdo, pero estando atado buscaré la forma de escapar, y no me volverán a ver, así que ustedes le explicarán a sus padres por que razón me fui- reclamé resignado, nuevamente con una indicación de Paulina subieron al cuarto de las Paus regresando cinco minutos después las tres completamente desnudas y en la misma actitud despreocupada y alegre que la ocasión anterior.

Paulina venía cargando un colchoneta de pluma de ganso del tamaño matrimonial- aquí está tu colchón donde dormirás- me dijo poniéndolo a un metro aproximadamente de mí, las tres hermanas se acostaron en la colchoneta y comenzaron a acariciarse y besarse, yo me voltee para no presenciar y fingir indiferencia, ellas continuaron con sus arrumacos, entre las gemelas pusieron a mi Paty acostada boca abajo y comenzaron una en un pie y la otra en el otro a besarlos tomándolos con ambas manos y subían lentamente acariciando las pantorrillas mordisqueando los muslos rítmicamente chupando mordiendo acariciando, yo solo veía de reojo, pero cuando Paty comenzó a emitir soniditos de placer no pude resistir

y puse atención a lo que sucedía, cada gemela tomó una preciosa nalga de la hermana la mordieron y abrieron los pliegues perdiendo las dos lenguas en el interior, Paty se comenzó a encorvar de un verdadero placer y en mi se comenzó a presentar un intento de erección, pero ellas ni lo notaron ya que estaban absortas en su trabajo, la mano izquierda de Paulina y la derecha de Paula se perdieron bajo los glúteos de Paty acariciando su monte de Venus y sus muslos e introduciendo cada una un dedo en el interior de los labios vaginales y con la otra mano acariciaban su espalda sin dejar de morder y lengüetear su ano, de un costado del colchón Paulina sacó un consolador de mas de treinta centímetros de largo y como dos pulgadas de diámetro y comenzó a acariciar el ano de la pequeña con ese aparato, en ese momento me asusté y les pedí que se detuvieran- no por favor que así no sea su primera vez por atrás, quedamos en que lo haría yo primero con las tres- les dije y al fin me pusieron atención, para ese momento yo ya tenía una erección casi total- ¿pues no dijiste que ya te vas? Que regresaras a México y nos abandonarías, entonces que te importa lo que hagamos ahora- dijo la canija de Paulina y continuaron en lo suyo, lamió el falo de plástico y ella misma se lo llevó a su culo y picaramente se lo introdujo lentamente dejando escapar una lagrimita y un sonido entre dolor y placer.

Paula sin dejar de besar las nalgas de Paty de reojo me veía y luego veía a Paulina que se auto sodomizaba no me perdía detalle de las dos escenas a cual más excitantes, sin poder hacer nada, Paulina con el consolador dentro se acercó a mi y tomo mi pene en su boca, yo solo pude cerrar los ojos y disfrutar el placer de la lengua de mi prima ya que atado de pies y manos no me dejaron mucha acción, cuando estaba a punto de explotar Paulina se apartó de mí y se sacó el aparato poniéndolo a mis espaldas, se separaron mis otras primas y se acercaron a mi espalda, Paty me tomó de una pierna y Paula de la otra obligándome a separarlas, yo me resistí pero en eso Paulina jaló de una cuerda y me obligo por medio de una polea a separar mis piernas grité de impotencia, cuando la fiera de mi prima introdujo el Pene de plástico en un bote con crema y lo acercó a mi ano, ya sentía la punta de ese objeto seguro de una violación inminente cuando Paty tomó mi pene con su boca y mordisqueo el glande haciéndome chillar de placer, Paulina metió hasta el fondo el falo por mi ano y se confundieron mis gritos entre placer y dolor, Paula me acariciaba las nalgas hasta que ya no puse resistencia a la envestida soltando lagrimas de confusión entre odio, placer, dolor, asco, placer, placer, gemí me encorvé y de un fuerte orgasmo llené la boca de mi primita y grité inconscientemente, Paulina retiró el artefacto y me besó cariñosamente la cara y la boca, yo quedé exhausto colgando literalmente en mis ataduras, las tres se unieron a mi en besos y caricias, Paulina aflojo las cuerdas dejando que cayera sobre el colchón, mis primas se dejaron caer a mi lado e inconscientemente comencé a acariciarlas y besarlas, cuando vieron esto sonrieron y continuaron sus caricias entre ellas, Paula tomo el consolador y se lo metió por el recto a su gemela que comenzó a mover rítmicamente la cadera en tanto Paty introducía su lengua en la vagina de Paulina a los pocos segundos Paulina explotó en un gemido y un fuerte éxtasis recorrió su cuerpo, se dejó caer junto a mí y siguió el turno a Paula que fue rodeada por sus hermanas Paty lamiendo su culo y Paulina su vagina hasta lograr el mismo efecto que fue la explosión en una embriaguez total, el turno era para la pequeña a quien le introdujeron el falo neumático por entre sus piernas lentamente ya que nunca había recibido nada mas que mi propio pene, y este aparato es considerablemente mayor que mi instrumento.

Ella no se resistió y llena de deleite lo engullo completo ocasionando un derroche de placer, no pude mas que acercar mi cara a sus nalgas y lamer su hendidura con vehemencia substituyendo de ves en ves mi lengua con un dedo tocando por el frente el tubo con mis manos y cuidando que las envestidas de Paulina no fueran demasiado bruscas y no lastimaran a mi niña que emocionada apretaba el consolador que sin miramientos pego en el fondo de el sexo de la niña, varias lagrimas derramó Paty antes de explotar en un grito agudo e infantil, estaba hecho, los cuatro caímos exhaustos y plenos de placeres y de sentimientos encontrados, por mi parte ya no sabía ni que hacer, quedarme, huir, recurrir al auxilio de mis tíos, el caso es que a pesar de todo mis primas continuaron manteniéndome desnudo y prisionero.

Después de unas horas que reposamos en mi colchón, Paula se paró a la cocina y después de un rato trajo cena para los cuatro así como una botella de vino, en una caja plana una enorme pizza y unos chocolates amargos, encendió la TV y continuamos acostados hasta entrada la noche en que las tres se fueron a sus respectivas habitaciones, me dejaron la bacinilla, una almohada y unos cobertores.

No se que hora era pero de repente sentí que alguien se metía entre mis cobijas y me abrazaba, me di cuenta de inmediato que se trataba de Paty que desnuda se quedó a mi lado, me besó en la mejilla y sin decir palabras deslizó sus labios por mi cuello, por mi pecho y finalmente tomó en su boca mi pene chupando ávidamente mi miembro hasta que logro de nuevo una fuerte erección, continuó en su tarea por varios minutos, acaricié su pelo y su espalda desnuda sin decir palabras, ella succionaba yo me estremecía ella arañando mis nalgas yo acariciando su cuello yo eyaculé retorciéndome de placer, ella tragó hasta la ultima gota de mi semen, me dio un beso en la frente e igual como llegó en silencio se retiro a su cama, todo quedó oscuro, en silencio como si nada hubiera pasado, dudé de que fuera cierto lo sucedido sería mas bien un sueño húmedo o mi calenturienta imaginación, pero el olor a Paty no podía engañarme ella estuvo conmigo.

Me quedé profundamente dormido, no se a que hora de la mañana me desperté y me halle con la sorpresa de que ya no estaba encadenado, mis ataduras colgaban del techo de la estancia y completamente desnudo me levante, me estiré y recordé todo lo sucedido al sentir un desagradable dolor en las nalgas, no escuché ningún sonido, todo se encontraba en calma, subí a el cuarto de las gemelas, estaban profundamente dormidas, Paty en la cama de Paula las dos entrelazadas y Paulina en su cama acostada boca arriba destapada y desnuda, jamás dejaré de admirar tanta belleza en una adolescente, observé el reloj despertador encima del tocador de entre las camas, las 7:30 AM, quien me habrá soltado, seguramente Paulina ya que es la que guardaba la llave de los candados, subí a mi habitación y me dirigí a darme un duchazo para relajarme y pensar que es lo que tengo que hacer, eso no podía quedar así, tenía que hacer algo, por supuesto no voy a regresarme a México, ni abandonar la casa de mis tíos, no soy tan tonto, pero tengo que buscar una revancha para darme a respetar y que no vuelvan a hacer algo así sin mi consentimiento.

Recordé a Lilia, la bella sobrecargo amiga de mi tío que me trajo a casa cuando llegué de México, (Primera entrega de esta Historia) donde deje su tarjeta?

Mi tío regresa en tres días, tiempo suficiente para un escarmiento, busque la tarjeta y le llamé a su casa, no estaba pero también tengo el numero de su móvil, le llamé y afortunadamente la localicé iba llegando de Nueva York, a ella le dio mucho gusto saber de mí, le dije que tenía un problemita y que quería platicarle para ver si me podía ayudar – coincidentemente voy llegando y tengo tiempo libre, paso por ti en una hora- me dijo, mejor nos vemos en la estación de Atocha ya que necesito salir antes de que mis primas se despierten, le comente, pues no quería que se enteraran de donde estaba- OK, me dijo en hora y media nos vemos en la entrada principal.

De inmediato hice una rápida carta avisándoles mi decisión de regresar a México, que luego mandaría a alguien por mis cosas y que más tarde escribiría una carta de explicación a sus padres, con eso tendrán para sufrir un par de días.

Me vestí, puse algo de ropa en una maleta, dinero suficiente y salí silenciosamente, tomé el tren, en menos de el tiempo acordado estaba esperando a la Azafata en Atocha, ella llego muy puntual fuimos a un restaurante a desayunar, le conté una historia muy lejos de la realidad ya que ni de loco le platico lo que he vivido con mis primas desde la primera y última ves que estuvimos juntos.

Le dije que me estaban tratando con mucha indiferencia y que me sentía mal por ello, que lo único que yo deseo es darles una lección y si con eso no me extrañan que efectivamente me regresaría a México, Lilia me apoyo, me dijo que si yo quería me podía quedar en su casa ya que ella estaría una semana sin trabajo y que podría atenderme, creo que se dio cuenta que me ruboricé pues me dijo que en estos días tendría mucho que enseñarme, me guiñó el ojo y concluyó con picardía... Museos, Parques y rió burlonamente.-pero que haremos, como le explicamos a mis tíos?

  • eso déjamelo a mí, le hablo a tu tío y le digo que mis padres te invitaron a pasar el fin de semana a Toledo, mis papas estiman mucho a tu tío, les he platicado de ti han insistido en que te lleve a su casa entonces ahora le das un pequeño susto a las niñas y te quedas conmigo y el domingo vamos a Toledo así cumplimos con todo-.

Salimos del restaurante y en su coche fuimos al departamento de su padre, aquel al que la acompañé cuando llegue a Madrid hace ya algunos meses, al entrar nos recibió una vocecita que le gritaba alegremente a Lilia saludándola, ya que mi amiga tenía casi un mes de no llegar al piso de Paseo de la Castellana.

Grillo, te presento a Zinva, es mi "ama de llaves" me dijo guiñándome el ojo, Zinva me sonrió enseñando su blanca dentadura que se acentuaba mucho más por su negro rostro, parecía recién bañada ya que su cabeza estaba cubierta por una toalla, ella es de Zambia, en África, aunque ha vivido en España casi desde que nació y vive con nosotros desde que sus padres murieron en un atentado en su país- aclaro Lilia- se la pasa casi siempre en Toledo pero mi padre la trajo ayer y la dejo aquí para que me tuviera la casa lista pues hace tiempo que nadie viene.

Zinva es una niña que no le calcule más de 13 años, de aproximadamente 1.60m su piel negro profundo casi color ébano, al igual que sus ojos, de su cuerpo solo se apreciaban unas nalgas redondas y muy firmes a trabes de su vestido amplio y colorido que le cubría hasta debajo de las rodillas- tiene apenas 11 años pero como puedes apreciar se ve mas grande, acercándose a mi oído y en vos muy baja – las mujeres negras se desarrollan muy de prisa- Zinva el es Gerardo, al saludarme se quitó la toalla de la cabeza pude ver una cabellera muy corta en finos rizos del mismo color que su piel, se quedará con nosotras hasta el domingo que te lleve a casa, arregla el cuarto de visitas para él pues se va a dormir un rato ya que a pasado una noche muy difícil, más tarde saldremos los tres a caminar por el Retiro, Lilia se retiro a su habitación y me dijo que nos veríamos en unas horas pues ella también estaba muy cansada por los últimos cambios de horario, seguí a la niña a la habitación que me iba a preparar , me dijo que dejara mis cosas sobre la cama y que mientras yo pasaba al tocador a asearme ella guardaría mis cosas y prepararía la cama.

Saque los artículos de aseo de mi maleta y me metí en el baño, unos minutos después salí y ya estaba todo listo para descansar un rato.

No se cuanto tiempo después Zinva me despertó acariciando mi frente, me sorprendió un poco pues dormí tan profundo que olvide en donde estaba, a los pocos segundos me despabile y aprecié que la niña se había cambiado de ropa y que tenía nuevamente el pelo húmedo- ya es tarde, Lilia esta lista para salir, vamos apúrate no seas flojo, me estire un poco me puse los zapatos y salí a la sala, - Hola Grillo espero que hayas descansado- mi protectora se había bañado y quitado el uniforme de la aerolínea- he hablado ya con Josechu, puedes estar tranquilo, le comenté todo lo sucedido y le va a pedir a su hermana que se vaya a su casa con tus primas- pero ella no está en Madrid

-le dije preocupado- mira Gerardo tu ya no te preocupes, eso es problema de el si dijo que su hermana va, pues irá, y no te preocupes por tus primas, Josechu entendió el plan y le pareció muy buena idea, esta con nosotros y no habrá represalias para ellas. Ya no toque el tema, los tres salimos al Retiro y después a comer a un restaurante de unos amigos de Lilia de comida cantábrica, ya como a las nueve de la noche regresamos al departamento.