Un arnes y una llamada
Estaba en casa y mi amante me ordeno que me comiera un arnes.
Un arnés y una llamada.
Todo empezó una noche cuando volvía a casa, me llamo Emilio tengo 24 años, soy delgado, cabello largo, piernudo y tengo buen trasero.
Llegando a mi cuarto recibí una llamada, era ella. Zuzan bien broceada, con un rico culo que he probado varias veces y unas hermosas tetas.
Me pidió que me bajara el pantalón y frotara mi mano sobre mi pené debajo de mis calzoncillos, paso por mi mente que sería una sección de sexo vía telefónica pero fue mas de lo que esperaba, baje mi ropa interior para masturbarme, fue cuando ella dijo: apriétate tus nalgas mientras te masturbas papi. Tiempo después me pidió que me chupara un dedo sin parar de tocarme, fue cuando una voz casi hipnótica me dijo mete el dedito en tu rico culito papi, en ese momento sentí que el deseo se apoderaba de mi, sin dudarlo lo coloque en mi ano y lo introduje sin dejar de masturbarse.
Zuzan me preguntaba como me sentía y era riquísimo ser poseído por mi novia a kilómetros de distancia.
Zuzan fue cuando me pidió que sacara un arnés que compramos entre los dos para jugar, los busque como desesperado en una caja, regrese con el en una mano y en la otra un gel lubricante, ya sabia lo que me susurraría al oído, dicho y hecho.
Zuzan: Papi comételo con tu culito papi, hazlo yo se que te gusta mucho.
Llene mi ano del lubricante así como unos de mis dedos, ya tenia casi adentro tres. Coloque el arnés en una silla que tengo en mi cuarto, me abrí bien las nalgas con ambas manos y me lo comió todo, desaprecio dentro de mi ano sin ningún problemas.
Al tenerlo todo adentro Zuzan pidió que moviera mis caderas sobre la silla para ensártame yo solo umm que rico, seguía masturbándome y sintiendo como salía un poco y luego regresaba a su lugar la verga de goma. Ella me decía guarradas como te voy a coger por tu culito papi, te gusta como te doy y quieres mas verguita papi. Eso solo me volvía loco, me ponía mas caliente. Fue en ese momento cuando me vine, chorreando mi mano izquierda con semen.
Le dije que me había venido, Zuzan me pidió que caminara con el arnés dentro de mi me pare y di unas vueltas en mi habitación se sentía riquísimo tener ese miembro en mi cola.
Se volvió a poner duro era una mezcla de excitación y de morbo. Se lo informe a Zuzan, me pidió que lo sacara un poco y luego lo empujara, repetí varias veces la operación, sentía como mi culito se cerraba al salir el miembro de Zuzan y al entrar era abrazado por los músculos de mi ano. Ella me repetía que quería repetir lo que le había contado pero que ellas estuviera ahí, eso me ponía aun mas loquito y con ganas de comer mas verguita.
Zuzan papi te voy a meter el arnés en tu anito papi, antes te lo voy a chupar y cuando este adentro me voy a sentar en tu pené así vamos a gozar los dos.
Me pidió que me recargara el arnés ahora contra mi escritorio y que repitiera lo de sacarlo un poco y volverlo a meter, fue riquísimo al entrar todo sentía que me moría, solo gemía, ella me dijo te gusta putito, eso me éxito muchísimo, en ese momento deseé que estuviera detrás de mi chuleándome con el arnés. No paraba de decirlo yo estaba envuelto en el placer de estar empalado por el arnés, escuchar a Zuzan decir te gusta putito, así te voy a dar putito, que rico culito, no podía respirar.
Sentía que estaba próximo a venirme así que me hinque, seguía con la verga clavada en mi ano y escuchando a Zuzan me seguía moviendo, dando pequeños saltitos y devorando ese pedazo de carne sintético, no tenia casi palabras, moje el suelo de mi cuarto con un chorro de semen.
Desde ese día y hasta la fecha tengo ganas de que Zuzan me ponga las piernas en los hombros y me clave rico el arnés en mi anito. Mi amante me hizo un culo goloso.