Un amor prohibido (1)

UN AMOR PROHIBIDO (1)

Mi nombre es Andrea, tengo 40 años, soy rubia, ojos verdes, pelo lacio hasta mis hombros. Soy abogada, hago pilotes, algo de gimnasia, y por las tardes salgo a correr por un parque cercano a casa. Como verán no descuido mi cuerpo y mis medidas son 95-62-92. Divorciada hace 6 años, nunca quise volver a convivir con alguno, aunque tengo encuentros amorosos cuando yo quiero, de acuerdo a mis necesidades. He recibido también y rechazado gentilmente "salidas" con mujeres. No tengo nada contra las lesbianas, pero a mi gusta, digamos, el trozo.

Con mi ex tuvimos a Martín, de 19 años. No quiere estudiar, pese a ser muy capaz. Tampoco le gusta mucho trabajar. Vive conmigo y trabaja con el padre, también abogado.

Los fines de semana que esta con el padre, los aprovecho para ir al club a jugar al tenis con amigas. Les aclaro que soy horrible jugando y por las noches a bailar salsa, aunque sea una o dos veces al mes.

Pero últimamente no salgo los fines de semana, porque a Martín, se le ha dado por estar conmigo. No se si mi ex .tiene alguna mujer, no me interesa tampoco, y sale con ella.

Muchas veces le pregunte a Martín el porque, aunque sea, salir a pasear con amigos y siempre contestaba que prefiere quedarse a escuchar música o ver películas alquiladas.

La cuestión es ya son muchos sábados que no voy, que hoy me decidí a ir, aunque tenga que dejarlo solo en casa.

Estaba contenta, tarareaba canciones pensando en la noche. A la mañana fui a la peluquería, me hice las manos, los pies y me hice prolijar el pelo en las puntas, que siempre florecen.

Después entre en el gabinete de depilación a que me hicieran axilas, piernas y mi hermanita, como le decía yo, a la conchita.

Volví a casa, prepare la comida incluso la cena para Martín. Lo llame para almorzar, pero siempre igual con música a todo volumen no escucha nada. Fui a su cuarto, golpee antes de entrar y lo encuentro hasta con auriculares, le toque el hombro e hice el clásico gesto de a comer. Asintió y volvía la cocina.

Y: te lavaste las manos.

M: si, no ves que vengo del baño!

Y: che, a mi contéstame bien, yo no soy ni tu hermana, ni tu mujer para que me

contestes de esa forma

M: esta bien, disculpa

Serví milanesas con puré, estaban riquísimas y una gaseosa de litro. No tomamos bebidas alcohólicas, salvo en fiesta o en restaurantes.

M: veo, como por como te arreglaste, que vas salir

Y: Si, pero a la noche, ahora voy a dormir un rato la siesta

M: y a donde pensas ir?

Y: voy con mis amigas a bailar salsa al "salsero". Hace varios sábados que no salgo

y esta vez se van a sorprender que voy

M: te gusta ir a bailar no?

Y: si, es bueno sacudir el cuerpo y te alegra el espíritu. Vos tendrías que ir, así sales con chicas y te diviertes.

M: crees que porque no salga con chicas soy gay

Y: no para nada, yo no pensé ni dije eso, pero un chico de 19 años, atlético, que

Practica varios deportes, tendría que tener varias revoloteando a su alrededor.

M: a mi no me gustan tan pendejas de edad y de mente

Y: mira vos

M: te burlas?, porque lo dices con sorna

Y: no fue mi intención, entonces que mujeres te gustan.

M: de 28 o 30 años para arriba. Minas ya hechas y que saben hacerlo en la cama no tilingas que cuando las apuras un poco salen corriendo.

Y: (me dejo boquiabierta) y tenes experiencia con ese tipo de mujeres?

M: Si bastante, he salido con algunas casadas y divorciadas.

Y: la verdad me sorprendes hijo. Me ayudas con los platos?

M: SI

Y: yo lavo y tú secas

M: bueno

Y: ya esta, este es el ultimo.

M: bueno

Y: la verdad, hijo, me sorprendes.

M: si dialogáramos mas te darías cuenta de muchas cosas, y además estas siempre corriendo cuando no es el laburo es la peluquería o ir a jugar al tenis.

Y: me estas juzgando?

M: no para nada, por todo eso no tenemos dialogo.

Y: bueno yo te prometo que vamos a tener muchas charlas como estas, mi amor

M: no prometas algo, si no sabes si podrás cumplirlo.

Y: Martín tan mala madre me consideras.

M: no, pero es la realidad, no paras un minuto. Tienes una muy buena posición

económica y no paras nunca.

Y: bueno Martín, mañana seguimos, quiero dormir unas horas, sino esta noche

Voy a parecer una robots

M: OK. Voy a escuchar música, te molesta si la pongo fuerte

Y: no, me pongo tapones en los oídos y listo.

Fui a mi dormitorio y me tire en la cama grande que tengo, me puse los tapones en mis oídos, sin dejar de pensar en Martín, como ha crecido y yo no me di cuenta. Pero voy a cambiar, a tener mas dialogo con el. Cerré mis ojos para dormir.

Pero no podía dormir, pensaba en Martín. Como maduro, si hasta parece me cuestiona.

Me levante a las 19 hs., bañe, me puse una salida de baño. Mi pelo aun muy húmedo, pensé en secarlo con el secador, pero me dije, dejare se seque solo así no se daña, me senté en el sillón grande del living. Sola pensando.

Como no lo vi., fui a su cuarto, toque la puerta y al no responder, como siempre, entre y estaba sentado, con auriculares puestos mirando la televisión. Me acerco para hablarle y vi., con estupor, que veía en una película porno, como una mujer le chupaba el pene a un

hombre. Como yo estaba escasa de sexo, últimamente, la verdad me hizo cimbrar.

Di media vuelta para salir y el se percato de mi presencia.

M: necesitas algo madre.

Y: no, te vi. tan ocupado que no quise molestarte.

M: estaba mirando una porno, no me digas que nunca viste una.

Y: (aun turbada) muy poco

M: quieres ver?

Y: Martín, como me dices eso, soy tu madre.

M: querías hablar algo.

Y: no, solo decirte que en la heladera tienes milanesas hechas y en la mesada una ensalada mixta.

M: (acercándose a mi) OK, que mas querías

Y: (seguía muy turbada) no, solo eso

M: (tomando la solapa de mi bata) estas sonrojada

Y: debe ser el calor

M: (tomando con sus manos las dos solapas) sales a buscar un hombre?

Y: (queriendo apartarme, las tenia firmes) como te atreves

M: mira en club comentan y yo escuche

Y: que comentan, si nunca me acosté con alguno de ahí, y eso que no faltaron oportunidades. Que pueden comentar, alguna calumnia.

M: ninguno de ellos ha comentado que se acostó con vos. Ellos no saben que soy hijo, y que si alguno contase alguna intimidad contigo, le rompería la boca.

Y: (tomándome la punta del cinturón de mi bata) entonces que pueden decir?

M: que eres hermosa, inteligente

Y: (mi cinturón colgando, yo estaba inmóvil) pero eso normal, que piensen eso de cualquier mujer.

M: que en cama debes ser una yegua hambrienta de amor.

Y: (hirviendo de calor) que guachos?

M: que necesitas a tu lado un hombre al que respetes, que te quiera, te proteja, te mime y sobre todo te sientas bien cogida.

Martín aprovechado la situación, abrió la bata de par en par, contemplando mi desnudez total.

Y: Martín esto es una locura, eres mi hijo

El tomando mi bata por los hombros, la deslizo, cayendo al suelo.

Y: Martín, basta por favor, eres mí

Tapo mi frase con un beso, primero suave, luego intenso, que me hizo vibrar y me deje llevar, por mis instintos.

Me acostó sobre su cama, se tiro a mi lado, me beso y penetro su lengua en mi boca, respondí con todo.

Bajo con sus besos por mi cuello, me daba chupones que luego dejarían su marca, pero que importaba ya. Beso y chupones en mis pechos. Lengüeteo mis pezones, arrancadome suspiros, los mordió y succiono a su gusto. Yo ya estaba en otra galaxia.

Siguió bajando hasta mi concha, abrió los labios vaginales y recorrió con su lengua toda mi concha

Tuve un incontrolable orgasmo en su boca

Mmmmm,siiii, no pares por favor.

Llego a mi clítoris y le paso su lengua a su gusto

Yo tuve ahí mi segundo orgasmos.

Subió sobre mí, con su mano acomodo su pija en la puerta de mi concha y me penetro suavemente. Luego comenzó el ir y venir de su pija dentro mió. Yo respondía con todo a sus movientos y todo se hizo frenético, descontrolado y acabamos juntos

Mmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm mi amor mmmmmm

Quedamos tendidos en la cama y le susurre al oído que nunca me había cojido como hoy. Me beso en mis labios y nos dormimos abrazados.