Un amor imposible (final)

Ofelia había posado sus labios en los míos. Todo me lo estoy imaginando, de seguro .

No, allí estaba, y yo sentía su respiración, sus manos buscando las mías, el detalle de sus finos párpados ya cerrados podía ser apreciado por mí. Y me dejé llevar, entrecerrando mis ojos, apegando nuestros cuerpos como tantas veces lo había creado entre sueños y fantasías. Y ahora que lo pienso, sus besos eran más cautivadores de lo que me esperaba, su calor y fragancia me envolvían y recordaban los momentos en los cuales la fui conociendo y la fui amando.

Pasaron algunos minutos, y nos despegamos con suavidad. Aún no lo creía, me aterraba la idea de que se tratara simplemente de una alusinación y pudiera despertar sumida en la soledad, sin ella. Y no, para mi fortuna Eros estaba de mi parte y aquello era tangible.

-¿Y...eso? -me atreví a preguntar, confundida sin duda.. Tenía nervios y miedo también de que mis palabras tomaran otro sentido para ella, uno nunca sabe lo que puede pasar.

Otra sonrisa apareció en su semblante, una sonrisa que me movía el tapete y me hacía quererle más.- Pues es lo que verdaderamente pienso sobre tu confesión.- expuso dejando a un lado su timidez, todo esto me dejó conmovida y curada de las heridas.

Y partimos por el camino tomadas de la mano, sin pedir más explicaciones, sin necesitar de más palabras, y me encantó que no nos despegaramos, que dejara que la gente se nos quedara viendo por la calle, que siguiera firme y no se fuera más.

Al día siguiente no le ví. No le ví, no fue...¿cómo no le voy a ver? Si ella asistía todos los días. Se oprimió mi ser, y la esperé el resto de las clases, sin poner atención a los profesores, revisando su asiento, dejando la vista fija en la puerta por si se abría y me la encontraba entrando. Tampoco respondía los llamados y mensajes a su celular.

Nada, y yo gritaba y me volvía loca, mis amigos me trataban de tranquilizar pero no podían.

Mi mente me enfermaba más al creer que todo le pudo pasar. ¿En su camión tuvo problemas?¿Ya no quiere verme? Más y más cosas, cada vez más terribles y perturbadoras que pasaban y me hacían estallar. Debía de buscarle, ir si era necesario hasta su casa y preguntar por ella.

¡Su casa! Y me puse a recordar algunos datos que me había dado anteriormente, estaba algo lejos, pero si me iba justo en ese momento no llegaría tarde. Tomé mis cosas, y me retiré sin poder avisar. Corrí al camión como nunca lo había hecho, y aún con la falta de aire y el pecho comprimido pude recorrer todo el trayecto.

Me perdí después entre las calles, y estaba asustada por quedarme allí y no encontrar salida. El ir en vano no estaba dentro de mis planes. Pregunté a quien se me hizo conveniente, y después de desviarme otro poco le encontré.

Esa era, sin duda, su casa. Toqué varias veces a la puerta desesperada ¿y si realmente aquí no vive? ¿si me he equivocado?

Me sacó de los pensamientos una pequeña niña que abría la puerta asomándose con algo de desconfianza.- ¿Quién?

-Busco a Ofelia, soy Ivonne, su...amiga, no sé si aquí sea su...- no me dio tiempo para seguir, ya estaba gritando su nombre "Que te bajes, te han venido a buscar" Vaya chiquilla, la pequeña hermana de la cual me había hablado muchas veces.

Después de una espera apareció en ropa deportiva, con los pelos alborotados, sus ojos lagañosos.- ¿Ivonne?...-preguntó tratando de abrir más los ojos, y parecía que le dolía hacerlo.- ¿qué haces aquí?

-Yo...bueno, vine a verte porque estaba preocupada por ti.- me rasqué la cabeza algo apenada.- ¿te encuentras bien?

-Pues, tuve una indigestión...y, bueno, simplemente digamos que me enfermé.- Salió un poco para quedarse viendo mis ojos que estaban atraídos por ella.- ¿Cómo has podido venir hasta mi casa para sólo preguntar cómo me encuentro?

Reí levemente, mi pequeña aún no sabía que por ella podía darlo todo.- pues simplemente me importas más que nada...- su respuesta fue un abrazo.

.....

Queridos lectores: ya que me pidieron que continuara mi historia aquí se las dejo. Realmente hubiera sido muy hermoso que se hiciera realidad, pero no todo se puede en la vida.

:D Ojalá que les haya gustado.

Atte: Ivonne