Un amor de verano (Love, Víctor) / Capítulo 2

Capítulo 2: Mañana me llama - Tras lo ocurrido en el baile del instituto, no solo Víctor tiene que poner sus cosas en orden. La vida de Benji también ha cambiado en apenas unos minutos.

IMPORTANTE  - SPOILERS DE LA SERIE DE TV "CON AMOR, VICTOR"

Entiendo que si estás leyendo este capítulo ya habrás pasado por el primero donde lo aviso, no obstante, recuerdo, este relato se enmarca entre la 1ª y 2ª temporada de la serie de TV de Disney+ / Hulu "Con Amor, Víctor" (Love, Victor). Si no has visto el final de la primera temporada es mejor que no leas este relato hasta que llegues al capítulo 10 :)

Gracias!


CAPÍTULO 2:

MAÑANA ME LLAMA

Llevo 15 minutos sentado en este banco asimilando todo lo que ha ocurrido, o no, más bien estoy atontado con la mente en blanco. No reacciono hasta que una fina lluvia comienza a caer sobre mí y empieza a mojarme. Me levanto lentamente y comienzo a caminar sin rumbo fijo, pero adonde narices voy a ir. Bueno sí, a casa. No voy a entrar al baile porque no pinto nada ahí yo solo y menos si tengo que ver al chico con el que me acabo de besar bailando con su falsa novia.

Camino despacio dejando poco a poco el instituto a mis espaldas. La lluvia moja mi cara y me refresca las ideas. Tomo aire, resoplo y comienzo a pensar en todo lo que ha ocurrido hoy. Desde que esta mañana he visto esa carta en mi taquilla mi vida es prácticamente otra.

Está claro que después de un año saliendo con Derek quería luchar y tirar por nuestra relación, pero llega un momento que es imposible. Hay cosas por las que no puedo pasar y es que manda cojones… le preparo una cena hecha por mi por nuestro aniversario y el imbécil de él no calla con irse a un puto concierto. ¿No podía quedarse conmigo? ¿No podíamos tener esa noche para nosotros dos? Teníamos la puta cafetería montada para él y para mí. Ah claro y luego está el tema de seguir la “línea heteronormativa que nos impone la sociedad” por celebrar nuestro aniversario, ¡Manda huevos!. Subnormal profundo y yo todavía tirando del carro. No, no y no. Y joder, que ha sido mi única relación seria, y he tenido buenos momentos, pero se ha vuelto otra persona y yo no soy el tipo de chico al que él aspira, ni de coña. En estos momentos no sé si lo que moja mi cara son las finas gotas de lluvia o alguna lágrima perdida.

Pero sinceramente, ¿esa lágrima es de pena o de rabia? ¿o de ilusión por lo que tengo por delante? Creo que la primera opción puedo descartarla, esa relación funcionaba porque yo hacía que funcionase, pero una relación es cosa de dos y si yo hubiera dejado de pelear, este final hubiera ocurrido mucho antes.

Pena quizás sí, por… ¿el tiempo perdido? ¿por dejarle? ¿Quizás porque ha sido mi primer chico? Vale, pero ahora que lo pienso también por el tiempo perdido teniendo un chico más increíble delante de mis ojos y con él que hasta hace una hora o así quería poner tierra de por medio.

  • Hostia, joder, joder, joder… - Tengo que empezar a dejar de poner tierra de por medio. Cojo mi móvil y aunque es tarde, es viernes, así que supongo que Sara seguirá en la cafetería. Llamo rápido: Un tono, dos tonos, tres tonos… y así hasta que cae la llamada. Joder.

Vuelvo a intentarlo. Y esta vez cuando estoy a punto de desistir, alguien coge el teléfono:

  • Sí, ¿dígame?

  • Sara.

  • ¿Sí? ¿Quién es? Ya estamos cerrados.

  • Sara, sé de sobra los horarios. Hasta ayer mismo era tu subencargado.

  • ¿Benji?

  • El mismo.

  • Dime, ¿qué ocurre?

  • Esto… a ver… Espero que no estés enfadada conmigo, pero…

  • ¿Cómo no voy a estar enfadada? Ahora sí que estoy alterada, he perdido a mi mejor camarero y el que sabe hacer funcionar esto si yo no estoy, como quieres que esté.

  • ¿Has encontrado a alguien?

  • No, pero mañana viene un chaval a hacer una entrevista y una prueba. Aunque claro empezará desde abajo y no sé si dejaré a Victor coger más responsabilidad mientras aprende. Mientras tanto aquí la que va a pringar el doble de horas, ya sabes quién va a ser, ¿no? La tonta.

  • ¿Y si te doy una solución?

  • Benji, es muy tarde y estoy muy cansada. Experimentos los justos.

  • ¿Aceptas de nuevo a tu subencargado en plantilla?

  • ¿Cómo?

  • Que me quedo en el Brasstown, si quieres claro.

  • No puedo subirte más el sueldo si es lo que pretendes.

  • Creo que me quedaría hasta por la mitad…

  • ¿Qué?

  • Nada, nada, no he dicho nada.

  • Entonces, ¿te quedas?

  • Sí.

  • Que alegría acabas de darme, iba a acabar loca perdida.

  • Bueno, pues no hace falta que acabes histérica.

  • Vale, mañana pásate por aquí y organizamos la rota de nuevo. Bueno seguiremos con la antigua, pero pásate por aquí.

  • Puedo… ¿pedirte un favor?

  • Uy… ya empezamos.

  • Déjame por favor este fin de semana libre y a Víctor si puede ser también.

  • ¿A qué viene esto Benji?

  • Cosas mías. Vuelvo a mi puesto, no te pido más sueldo, solo este fin de semana. Total conmigo no contabas…

  • Está bien, está bien.

  • Gracias Sara.

  • De nada. Te veo la próxima semana, el lunes sí, eh.

  • Ahí estaré.

  • Y gracias Benji. No sé que iba a ser de mí hasta encontrarte un sustituto.

  • Gracias a ti.

Cierro el móvil y resoplo con alivio mientras una sonrisa estúpida se me dibuja en la cara. No puedo dejar la cafetería y menos ahora que parece que voy a ¿empezar algo? con Víctor.  Bueno, voy  a empezar no, vamos.

Mi único miedo ahora mismo con todo esto es lanzarme a la piscina con un chico que ¿tiene novia? y que está más que claro que hasta hace al menos un par de semanas no tenía claras las cosas. Aunque por el beso que me ha dado hace un rato está más que claro que se le han aclarado… ¡y que bien besa el cabrón! En fin, voy a tener que ayudarle en todo y mas… Solo espero que no se raje y no quiera que estemos "escondidos al fondo del armario" todos los días. A fin de cuentas me ha dicho que está preparado para dar el paso y como le dije, confío en él.

Diez minutos más tarde estoy entrando por la puerta de casa. Mis padres están en el salón y obviamente me ven entrar. Es ridículo porque veo como mi madre esconde una botella de vino tras el sofá.

  • Benjamin, ¿qué haces aquí tan pronto? Con lo guapo que te has puesto para el baile.

  • Mamá, ya. Vale. - La fulmino con la mirada - Sabes que odio que me llames así.

  • Es tu nombre.

  • Puedes llamarme Benji, ¿por favor?

  • Uy, ese tono, estas horas habiendo un baile. Problemas.

  • ¿Todo bien hijo? - Pregunta mi padre.

  • Sí papá. Y bueno para evitar más preguntas y charlas, solamente informaros que Derek y yo lo hemos dejado. - En ese momento mi madre se levanta y pone cara de circunstancia. No sé si está forzando los ojos para ponerse a llorar y parece algo patético y vergonzoso a partes iguales.

  • Ay, lo siento mucho hijo… Que pena por dios.

  • Mamá, vale. Le he dejado yo.

  • ¿Y eso?

  • Pues porque sí. No tengo gana de hablar de ello.

  • Hijo, ya sabes que te han dicho que tienes que expresar tus problemas para… bueno ya sabes. - Justo cuando dice eso estoy a punto de explotar. Me empieza a hervir la sangre. Resoplo sonoramente y el aire que sale de mi boca levanta mi flequillo.

  • Cariño, déjalo a su aire. - La corta mi padre al ver mi cara de cabreo.

  • Ya sabes que me preocupo por él.

  • Mamá, me voy a ir a la habitación y no, no me voy a encerrar a beber. Quizás le haya dejado porque tengo otras ilusiones. Así que no te preocupes por mí, que no estoy tan mal. ¿Vale?

Subo las escaleras, paso por el baño para aclararme la cara y despejarme un poco y me encierro en mi habitación. Sé que lo que he dicho puede implicar una charla mañana y empiecen a preguntarme mil cosas, pero es mejor dejar intuir que puede que empiece a salir con otro chico a que piensen que estoy deprimido y me dé por recuperar viejos vicios. Entonces la charla sería peor y mañana son capaces de llevarme al psicólogo. Bufff que movida… Prefiero ni pensarlo.

Me quito la corbata, la americana y empiezo a desabrochar mi camisa y tras ello me dejo caer sobre la cama. Estoy agotado, pero no físicamente, más bien mentalmente. Demasiadas cosas en muy pocas horas. Tirado desde la cama miro el escritorio y coronándolo sobre el… ¡oh, joder! - ¿en serio? - Es curioso que me sorprenda cuando ese marco con una foto mía junto con Derek la puse yo ahí. Pero no me acordaba de ella, de hecho creo que hace semanas que no reparaba en ella. Pero ahora sí que la veo, entre otras cosas porque no debe de ocupar ya ese espacio.

Me levanto, cojo el marco y le saco la foto. La miro y sin pensarlo más la rompo y la tiro a la papelera. Era una foto bonita, pero no con el chico adecuado. Ya que estoy de pie aprovecho para quitarme los pantalones y los calcetines. Solamente me queda un bóxer negro bastante ajustado que según Derek me hace muy buen culo. Espero que a Víctor le guste igualmente mi culo. Dios que gilipolleces se me pasan por la cabeza. Cojo una camiseta cualquiera y me tiro en la cama.

Dejo la mente en blanco, no sé cuánto tiempo pasa, pero en mi cabeza solo hay una cosa. El beso que nos hemos dado Víctor y yo esta noche. Quizás el beso más sincero que he dado en mi vida… Además en mi cabeza se repite una y otra vez esa especie de “declaración” que hizo delante de mí y de Derek antes de “quitarse del medio”. Nunca nadie me dijo cosas tan bonitas, joder, si es que este chico es… bufffff…

No me aguanto, cojo el móvil y necesito enviarle un mensaje. Sé que me dijo que mañana me llamaba, pero, no me aguanto.

Para: Víctor

Hora: 1:31

Hola Víctor. ¿Qué tal ha acabado el baile? Yo después de estar contigo me he ido para casa. Y bueno llevo un rato en la cama pensando en… mejor no te voy a rallar con mis cosas desde el primer día. Bueno creo que me iré a dormir ya. Espero que lo hayas pasado bien lo que restaba de baile. Ya me contarás qué tal.

Descansa y duerme bien. Un beso.

PD: Me llamas mañana, ¿no? ; )

Apago la luz y dejo el teléfono sobre la mesita. Intento cerrar los ojos, pero no hay manera. Estoy nervioso, doy una vuelta, y otra, otra más. He perdido la cuenta y van pasando las horas y Víctor no me ha respondido al mensaje. Quizás soy demasiado impaciente, no lo sé, pero viendo todo lo que se le puede venir encima me aterra la idea de que se arrepienta de lanzarse a esta aventura conmigo.

Estoy a punto de dormirme, no sé ni la hora que es, cuando noto como mi móvil vibra. No pasa más de un segundo hasta que lo tengo en mi mano y leo el mensaje.

De: Víctor

Hora: 3:27

Hola Benji. Pues, digamos que ha sido la noche más extraña de mi vida. Han pasado demasiadas cosas. Creo que todo lo que ha pasado no puedo contártelo en un mensaje y será mejor que te lo cuente directamente. No te asustes tampoco han pasado cosas malas, o eso creo, hay un poco de todo. Pero lo dicho… Mañana te llamo o bueno, en unas horas te llamo, ¿vale?

Un beso y espero que duermas bien también.

Mañana me llama y no puedo evitar esbozar una enorme sonrisa. Ahora solo espero que no haya tenido ningún problema, pero mejor no confabular y esperar a mañana y que me lo cuente todo. Estoy un rato pensando que contestarle, y creo que seré escueto, para no liarle más, parece que todos hemos tenido un día muy largo…

Para: Víctor

Hora: 3:31

Me creeré eso de que no hay nada malo. Gracias por contestar.

De: Víctor

Hora: 3:31

¿Qué haces despierto aún? ¿Pensabas que no te contestaría?

Para: Víctor

Hora: 3:32

Hay mucha gente que se asusta y desaparece, pero sé que tú no eres de esos, lo sé desde el primer día, tonto. No podía dormir. Dices que te han pasado cosas, ¿Sólo a ti? ; ) Creo que estoy demasiado nervioso como para dormir. Muchas emociones, pero sabiendo que ya estás en casa, creo que ahora sí que al menos podré descansar. Mañana lo hablamos todo!

Un beso. Buenas noches.

De: Víctor

Hora: 3:32

Sí será mejor que descansemos. Creo que mañana al menos para mí va a ser un día muy largo. Y llevo en casa ya unas cuantas horas, pero bueno, las cosas se han enredado de una manera un poco… “a mí manera”. Hablamos mañana. Buenas noches. Otro beso para ti.

Es una pena que solo pueda darle un beso de forma virtual. Dejo el móvil sobre la mesita, cierro los ojos e intento descansar. Si alguien me dijera esta mañana como iba a acabar el día de hoy le diría que me dejase de tomar el pelo… pero de una carta en la taquilla, he pasado a tener algo con Víctor, aún no sé el qué, pero estoy ilusionado. Sonrío mientras me dejo caer en un profundo sueño pensando en que mañana me llama...


Quiero dar públicamente las gracias a aquellas personas que leyeron el primer capítulo del relato y a las recomendaciones que han sugerido y que iré aplicando en futuros capítulos. Dadme un poco de tiempo para aplicar ciertos temas más "calientes", hay que encauzar a los chavales, pero sus momentos tendrán también!

Y como dije en el primer capítulo, toda sugerencia y crítica constructiva es más que bienvenida.

Gracias a todos!