Un acto de magia
La esposa hacía magia mejor que su marido...
Con mi primo Ezequiel y su esposa Gabriela habíamos cubierto todos los rincones y paredes del salón de fiestas con muñecos, piñatas, cuadros infantiles y demás cosas de interés y diversión para los chicos, aquél tenía que ser el cumpleaños perfecto para Tomy, hijo de mis primos y mimadísimo ahijado mío, por lo que, había colaborado estrechamente con ellos para que a mi querido sobrinito no le faltara nada en ese importante día en el que cumplía sus primeros seis años.
Entre otras atracciones, contratamos a un mago, que nos había sido recomendado por un amigo en común, con referencias que hablaban muy bien de el, había también payasos y una animadora que haría entretener a los chicos con distintos juegos didácticos, en resumen, estaba todo preparado para que Tomy no se aburriera ni un segundo en su fiesta.
Finalmente, amansamos nuestra ansiedad, ya que eran muchas las cosas que habíamos organizado, y llegó el día esperado, mis primos y yo fuimos al salón por la tarde temprano, ya que nos íbamos a reunir con toda la gente que participaría de los distintos espectáculos, para acordar cuanto duraría el set de cada uno y ese tipo de cosas, por ejemplo, los payasos harían una actuación cercana a la hora de duración, unos malabaristas que actuarían media hora, la animadora conduciría los espacios libres durante toda la fiesta y el mago tendría a los chicos cautivos por poco mas de una hora.
Allí aparece la cuestión de interés, ya que el susodicho mago, nos preguntó si no había inconveniente en que su esposa lo acompañara a la fiesta, por lo poco que nos dijo, estaba teniendo problemas conyugales y sospechaba de algún desliz de su esposa, por lo que quería tenerla cerca, algo extrañados, le dijimos que no había problema y que la podía traer.
Cuando todo estuvo arreglado, fui a buscar a Tomy y lo llevé al salón de fiestas, cuando llegamos ya había muchos de sus compañeritos de colegio y amigos del barrio, muchos de ellos jugando en un pelotero que estaba instalado en el lugar, de allí en más tuvieron lugar todos los consabidos juegos de niños en este tipo de fiestas, la actuación de cada artista contratado, algunos con mas y otros con menos interés por parte de los chicos, pero en fin, se desarrolló, tal como esperábamos, una alegre fiesta en que Tomy y sus amigos tuvieron diversión, golosinas y regalos.
En el lugar había una pequeña cocinita en la planta baja, una pista de mini fútbol de reducidas dimensiones y en la planta superior, los baños y una especie de living para los padres o parientes de los chicos que quisieran tomar un café con tranquilidad.
Aproximadamente unos diez minutos luego de iniciado el set del mago, subimos a tomar un café con Javier, un amigo personal que es el padre de uno de los chiquitos invitados al cumpleaños, llegamos al living, nos servimos un par de cafés y nos sentamos cada uno en un sillón, casi inmediatamente, entró la esposa del mago que resultó ser una mujer muy agraciada y de magníficas cualidades físicas, ella nos saludó, se sirvió un café y se sentó en un sofá frente a nosotros, como obligada a sacar tema por nuestro silencio, nos dijo;
´ Por Dios, que calor!, encima con todos esos chicos y la manía de mi marido de tenerme a su lado, no aguanto más, necesitaba un break, ja ja ´
Javier y yo sonreímos asintiendo, aunque algo sorprendidos por la desenvoltura de la mujer, ella continuó;
´ Uds son padres de alguno de los chicos? ´
Javier levantó la mano sonriendo y dijo;
´ Yo sí, tengo un hijo que anda correteando por ahí, mi nombre es Javier, encantado. ´
´ Aha, encantada de conocerte, mi nombre es Ursula y soy la esposa del pesado del mago que han contratado. ´
Y dirigiéndose a mí, preguntó;
´ Y vos, sos padre de alguno de los chicos? ´
Le respondí;
´ No, soy el padrino del cumpleañero solamente ´
´ Ah, bueno, encantada de conocerte también a vos .´
En ese instante llevó su mano hasta los botones de su camisa y desprendió dos de ellos sumándolos al que ya estaba abierto, esto dio como resultado una agradable visión, ya que la línea que separaba sus perfectos senos se dejaba entrever claramente, tomó un cuaderno que había sobre una mesita y comenzó a apantallarse dando muestras de tener mucho calor, sacó de un bolsillo de su cartera una hebilla, tomó su abundante cabello colorado en una gran cola por sobre la parte trasera de su cabeza y dejó así al descubierto su blanco cuello que despertó mi deseo.
Un poco para no perder la conversación y otro tanto para averiguar más de esa apetecible dama, le pregunté;
´ Si no te molesta, porque decís que tu marido es un pesado, no se llevan bien? ´
Ella me respondió;
´ Mirá, yo soy muy liberada, y cuando un tipo me gusta, por lo general trato de tener algo con el para sacarme esas ganas, mi marido me pescó en una de esas aventuras y a partir de ahí no me deja ni a sol ni a sombra ´
Con Javier nos miramos asombrados, como no dando crédito a que una casi desconocida nos estuviera contando ese tipo de intimidades, pero ella continuó;
´ Yo soy una hembra multiorgásmica que no podría jamás conformarse con un sólo tipo, eso es lo que el no entiende.´
Nos reímos con ganas, ya que era inverosímil tener esa conversación entre personas que recién acabábamos de conocernos, pero previendo que el calor de esa mujer era mas interno que debido al clima, continuamos con la casi risueña charla, por lo que le dije;
´ Aha, y decíme, con cuantos te conformás? ´
´ Y, tienen que ser dos o tres por semana. ´
´ Porque no lo dejás a tu marido directamente en vez de vivir engañandolo? ´
´ Que se yo, me mantiene y yo me divierto, no sé, hay cierto morbo en la situación que me encanta .´
´ Así que con dos o tres distintos por semana te conformás? ´
´ Y, suena a poco, pero sí, está bastante bien, aunque podría cubrir mi cuota de dos ahora mismo ja ja ´
´ Como quieras, estamos disponibles, no Javier? ´
´ Si, ja ja, por mí no hay problema ´
Todo iba en tren de broma, ya que la liviandad con que ella hablaba de esos temas, nos daba vía libre para decir ese tipo de pavadas, pero en ese momento, ella se paró y dirigiéndose a la puerta dijo;
´ Uyyy como me voy a divertir! ´
Trabó la puerta y apoyó su espalda contra la misma, mirándonos, comenzó a tocar sus pechos sobre la ropa, con Javier nos quedamos quietos en nuestros sillones esperando el espectáculo que se nos estaba por brindar, ninguno de los dos podíamos creer que ese pedazo de hembra se nos estuviera regalando así, sin ningún esfuerzo por nuestra parte para tratar de convencerla.
´ Ahora chiquitos, van a aprender lo que es una buena puta en celo, no crean que me van a conformar con un polvito cada uno, les voy a exprimir sus vergas hasta dejarlos secos, mi concha tiene fiebre y necesito de sus barras de carne para calmarla, hoy van a conocer a una hembra de verdad, prepárense .´
´ Vaya presentación y autoestima ´ pensé.
Ella continuó refregando sus tetazas sobre la camisa, de a poco fué desprendiendo los botones que quedaban, abrió su camisa completamente y dejándola así de par en par, fue recogiendo su pollera hacia arriba, por lo que finalmente quedó con toda la prenda en la cintura, se quitó del todo la camisa y allí pudimos apreciar en toda su magnitud el glorioso cuerpo de ese pedazo de hembra, su piel era muy blanca pero saludable, su cara hermosa tenía pómulos bien marcados, cejas abundantes, pestañas largas y sensuales, sus ojos entre verdosos y miel eran una invitación a soñar con ellos, una boca carnosa de labios prominentes e hiper atractivos y una barbilla orgullosa, cerraban el marco de una cara perfecta, digamos que medía 1.70, cabello rojizo, tetas grandes y macizas, perfectas diría, parecían de piedra y eso que eran completamente naturales, como mas tarde pude verificar, piernas finas y largas, bien torneadas con muestras de trabajo de gimnasio y un culo como dibujado, redondo, parado, atractivo por donde se lo mire, tenía esa posición de patito ( el pechito bien salido y el culito respingón ) que tanto me calienta, sus curvas eran un delirio para la vista, en resumen, una de esas poderosas, bellísimas e increíbles hembras que uno solo ve como promotoras en las carreras o en una exposición y jamás piensa que podría llegar a posar si quiera una mano sobre semejante humanidad.
Llevaba un conjunto de ropa interior negro con encajes que resaltaba sus increíbles atributos, poco a poco, metió una de sus manos dentro de las bragas y tocó su sexo entrecerrando los ojos, para luego llevar la mano a su boca y chupar con deseo sus dedos, tocaba sus tetas y su concha y nos miraba con deseo, nosotros continuábamos incrédulos regocijándonos en la observación de ese fenomenal regalo.
Ella se acercó a nosotros y poniéndose de espaldas delante mío, me pidió con un gesto que le desprendiera el soutien, lo hice y al instante estaba bajando su tanga dejando al descubierto unas carnes firmes y atractivas, quedó completamente desnuda aunque con la pollera hecha una faja enrollada en su cintura, por un momento llevo su dedo índice a la boca, una actitud con una buena mezcla sexy de ingenuidad y lujuria, la di vuelta poniéndola de frente a mí, la atraje desnuda hacia mi cuerpo y comencé a besar su boca con deseo y pasión, mordiendo tiernamente sus labios y su deliciosa lengua, apreté con firmeza sus duros pechos, los pezones parecían querer estallar totalmente erectos, tentaban a mi boca, por lo que bajé hasta sus tetas y se las mordí y besé con ganas, dejando visibles rastros de mi saliva sobre ellas, mientras me comía sus melones, Ursula suspiraba y gemía sensualmente, Javier se levantó de su sillón, se colocó detrás de ella en cuclillas y comenzó a besar su culo primero y su vulva mas tarde, cuando metió la lengua en su concha, ella hizo evidente el placer haciendo mucho mas intenso su beso conmigo, que había vuelto a su boca, ella comenzó a refregar sus manos por mi pecho y comenzó a abrir mi camisa con apuro, una vez abierta completamente besó y mordió mis tetillas para luego desprender de un tirón mi cinto y bajar rápidamente el pantalón.
Me quité los zapatos para poder sacar el pantalón y quedé solo con el slip, mientras Javier continuaba arrancando gritos ahogados de Ursula con la chupada de concha que le estaba dando, se iba desnudando el también como podía, entonces ella me dijo;
´ Que buen bulto papi, sentáte en el sofá que voy a mamarte la verga como nunca te lo hicieron, te voy a dejar los huevos secos, perro ´
Hice lo que me indicó, ella tiró de mis calzoncillos dándole libertad a mi pija super erecta, se inclinó delante mío y abriendo su boca de ensueño, se engulló la mitad de mi tranca, la presión de sus labios era deliciosa, subía y bajaba mientras con la mano parecía querer arrancar mi verga de cuajo, con el filo de los dientes repasaba el glande como queriendo morderlo suavemente, para luego volver a tragar todo lo posible, yo estaba extasiado, deliraba con esa magnífica y gloriosa chupada, en ese momento le grité;
´ Tu boca es la que hace magia, pedazo de puta, como chupás por Diossss!!!, Javier, clavála a esta perra que necesita tener los agujeros bien llenos!!! ´
En ese instante, mi amigo peló su considerable poronga, venosa y erecta y la introdujo de un saque en el lubricado y amplio conducto de su vagina, ella dió un saltito, acusando la embestida de ese garrote de carne hirviendo en su cueva, cuando Javier se puso a bombear como poseso, ella volvió al ritmo normal de chupada y continuó comiéndose mi pija con ansias, cuando me hubo mamado un buen rato, sacó mi pija de su boca que chorreaba saliva y la puso entre sus dos enormes pechos, comenzó a realizar movimientos sincronizándose con las estocadas de Javier, por lo que pajeaba mi verga con sus duras gomas, en cuestión de un par de minutos, le anuncié que estaba por acabar, no podía más;
´ Nena, acabo, te lleno de lecheeeee!!! ´
Y ahí nomás le solté un par de espesos y nutridos chorros de lefa que inundaron sus perfectísimas tetas y su cuello, ella comenzó a desparramar la leche cubriendo sus pechos, se llevó un poco a la boca y lo tragó con ganas, luego tomó mi verga y la mamó con furia hasta arrancarle los últimos borbotones de guasca caliente que quedaban en ella, al par de minutos, Javier le anunció también que se corría y terminó llenando su vulva caliente con abundantes cargas de leche hirviendo, ella acababa a cada instante con espasmódicos movimientos y poniéndose cada vez mas cachonda, como si cada acabada, en lugar de aplacarla, hiciera que se calentase aún mas
En ese momento, alguien golpeó a la puerta y Ursula, fingiendo una voz un tanto graciosa, dijo que no se podía pasar porque estaban limpiando, al parecer, la persona del otro lado de la puerta se lo creyó, ya que no volvió a insistir.
Nos tomamos cinco minutos de descanso, tras los cuales retomé la grata tarea de masajear esos pechos divinos, pellizcar y apretar esos tremendos melones me ponía como loco, unas tetas que no me cansaría nunca de elogiar, como ya habrán apreciado, chupé nuevamente sus pezones y sus enormes areolas, dejándolas empapadas, brillantes por la saliva, terriblemente excitantes, con esos pequeños granitos que tienen las areolas perfectamente visibles, la rugosidad de esa piel me alucinaba y me dediqué a eso durante un buen rato, mientras Javier, al ver como yo movía esas tetazas de un lado para el otro, ya mostraba una buena erección, al ver esto, Ursula se abalanzó sobre su creciente aparato y empezó a pasarle la lengua como si de un helado se tratara.
Como ella estaba absorta en la tarea de tragarse esa magnífica polla, yo comencé con la mía a darle golpecitos en el culo, haciéndola crecer paulatinamente, lo que no me costó mucho, sobre todo teniendo una posición privilegiada para observar la lujuriosa y terrible mamada que le estaba propinando a mi amigo, los ojos de Javier estaban en blanco del placer que experimentaba, el mismo que yo había sentido unos minutos atrás, esa mujer si que sabía como utilizar sus labios, lengua y dientes sobre una verga, en ese momento, lo tenía como transportado a otro mundo.
Cuando mi pija alcanzó su esplendor, separé un poco las cachas de Ursula y le fuí inyectando mi carne de a poco en esa concha que se encontraba bastante lubricada por la acabada anterior de mi amigo, cuando clavé toda mi verga en ella, la empecé a bombear duro y parejo, agarrándome con firmeza de sus tetas, las cuales trataba de abarcar inutilmente con mis manos pero con el dedo índice libre, recorría sus pezones erectos, esto me excitaba sobremanera, demasiada excitación, la chupada que estaba presenciando, la cogida que le daba a esa bestia puta y el refregar así esas tetas de película, hicieron que en cuestión de minutos, casi estalle en otro orgasmo, pero saqué con prisa mi pija de su vagina y me tranquilicé un poco, esperando que la excitación me abandonara un poco para volver a la carga, me gusta contenerme y tratar de retrasar un poco el placer final, esperé unos breves momentos, sin mirar la escena, sino hubiera acabado de todas maneras, creo yo, entonces volví a la carga, pero escupiendo uno de mis dedos, lo colé por su agujero trasero, entró facilmente y lo empecé a mover con soltura dentro de ese ojete por lo visto más que acostumbrado a recibir vergas, una vez lo hube dilatado un poco más, apoyé mi chota en su entrada y empujando suavemente, se la fuí introduciendo palmo a palmo.
Ella dejó de chupar a mi amigo y lo masturbaba mientras aguantaba mi entrada por su retaguardia, cuando mi pubis chocó con su culo, gritó salvajemente;
´ Enculáme bien, dejame el orto a la miseria, quiero que me rompas toda como una puta mugrosa que soy, denme pija, necesito verga para vivir, si, si, asi, asiiiiiiiiii!!!!!! ´
Solté una risa por tamaña declaración ( la calentura hace decir y hacer cosas inauditas ) y me dediqué a bombearle el culo con esmero, ella volvió a meter el pijón de Javier en su boca y continuaba chupándolo con maestría, era muy excitante ver y oír como continuaba gimiendo con la boca llena de polla;
´ Mmmm gghhhffff ahhh smmm iiii agfffh, que dos lindas vergas, si si, culeáme, si si, ahhhhh slurrppp, ahhhh ahhgggg ´
Volví a tomar sus gomas preciosas y apretándolas, me aferré a ellas y le dí bomba por el orto con violencia, Javier anunció nuevamente que acababa, por lo que aceleré mis movimientos y en unos segundos, mientras el llenaba la boca de la puta viciosa con su leche, yo retiraba mi verga de su culo, y pajeándola velozmente, logré acabar casi al mismo tiempo en su cara que quedó completamente embadurnada por la lefa de nuestros dos miembros.
Ursula entonces, se metió al pequeño baño y salió a los cinco minutos, habiendo limpiado todos los restos de semen de su cara y de su cuerpo, nos vestimos los tres, aunque antes la toqueteamos un poco más, yo sobre todo me entretuve un instante besando sus fascinantes tetas y mordiendo una vez mas sus pezones, al terminar de vestirnos, ella destrabó la puerta, cuando salimos, el show de magia de su marido estaba entrando en su parte final, el miró hacia arriba en medio de uno de sus trucos, la vió salir de allí con Javier y yo detrás y un atisbo de pena cruzó su expresión, ella lo miró y sonrió con ganas.
Sin duda alguna el show de esta lujuriosa hembra, había sido mucho más entretenido que el del mago, aunque claro, no apto para menores .