Tú y yo en la cocina en tres partes. Parte 3.

Culminamos nuestro gran encuentro en la cocina de la manera más morbosa posible

Parte 3

Te tiro al suelo con violencia. Tu caes de rodillas. Te digo que te tumbes boca abajo y que no te muevas. Te vuelves a asustar un poco, pero tu excitación puede más y al final haces lo que te digo. Estás prácticamente desnuda tumbada boca abajo en el suelo de la cocina a merced de mí. Me quito las zapatillas y los calcetines y te piso la cara, —Joder!! cómo te voy a follar!!! Sentirte tan sumisa hace que el coño se te vuelva a inundar de fluidos. Tienes los pezones erectos y duros como piedras por la excitación y el contacto frío de los baldosines. Yo aprovecho para desnudarme por completo y arrojar mi ropa junto a ti. Un momento después me tienes detrás completamente encima tuyo.

Mi cara está casi pegada a ti. Puedes sentir mi respiración. Te beso suavemente en la mejilla y luego por todo el cuello. Los pelos se te ponen de punta. Acerco mi mano a tu cara  y ves que todavía sujeto el platano con el que te acabo de follar. Lo pongo a unos centímetros de tus labios. —Chupa puta!!! Quiero ver como te comes una polla!! Te digo y te lo meto en la boca. Comienzas a chuparlo con ganas. Está empapado con tu flujo y tu corrida. Tragártelo todo de esa manera te hace sentir muy zorra de nuevo. Yo no paro de observarte a unos céntimos de tu cara con la mirada medio poseída por el deseo, estoy como loco metiéndote y sacándote el platano de la boca. Empiezas a sentir mi polla contra tu culo y eso hace que mames con más intensidad el platano, ya incluso metiéndotelo hasta la garganta muchas veces. —Me encanta verte chupar así!! Te digo al oído mientras voy  acomodando mi polla en la entrada de tu culo. Comienzo a empujar y tu ano se empieza a abrir ante mi polla dura.

Al principio te duele un poco, pero nada que no puedas soportar, de todas formas tu sigues concentrada en el platano y en lo cachondo que me estoy poniendo al verte chupar así. Estás deseando que te meta mi rabo entero en el culo. Lo imaginas e inmediatamente todo tu recto se relaja. Sientes como mi polla dura se va abriendo camino por tu interior. Te encanta sentirte tan rellena de rabo. La visión de ti misma tumbada desnuda en el suelo de la cocina, conmigo encima tuya follandote la boca con un platano y mi polla entera dentro de tu culo, hace que te empapes como nunca. Tu coño está dejando un charco en el suelo de la cocina. Te sientes super cerda y eso te vuelve loca.

Cuando mi rabo te llena por completo comienzo a follarte el culo. Primero despacio, con movimientos de cadera circulares, y poco después con más intensidad y con golpes de pelvis más bestias. —Toma pedazo de cerda!!! Cómete una polla mientras te follo!! Te digo mientras acompaso los movimientos del platano en tu boca con los de mi polla en tu culo. Y joder! Cómo te encanta que haga eso. Piensas en lo guarro que soy y en lo mucho que te gusta. En un momento imaginas que el platano es la polla de otro y que te estamos follando los dos. Eso te hace sentir más puta aún y, metiendo tu mano por un hueco de tu cadera, comienzas a masturbarte. Cuanto más fuerte te doy por detras más te gusta. Tu culo te arde. Pareciera que te fuera a atravesar con mi polla. Nunca te habían dado tan salvajemente. Piensas incluso que quizá te lo esté haciendo sangrar. El placer que sientes es tan intenso, que todo tu cuerpo se arquea y se tensa sin parar. En tu mente yo y otro tío no paramos de follarte la boca y el culo. Nos encanta verte así de puta. —Dármelo todo!! —Gritas en tu interior. Piensas en nuestras dos corridas dentro de ti, e inmediatamente te invade un increíble placer que se apodera de todo tu ser. Te corres como una cerda. Aunque el platano te lo impide, igual sueltas varios alaridos de placer. —Qué gusto, joder!! - Grita tu mente en pleno orgasmo. —Mira que zorra soy para ti!! Yo mientras sigo disfrutando de tu culo como un poseso.

De pronto, en un gesto rápido, saco mi polla de tu recto y la meto en tu coño con fuerza. Aunque tu orgasmo ya se estaba debilitando al hacer eso sientes como si te corrieras otra vez. Y más,  cuando acto seguido empiezas a notar toda mi leche derramandose en tu interior. Puedes sentir perfectamente lo espesa y caliente que está. No paro de llenarte el coño. Te vuelves a frotar el clitoris e inmediatamente comienzas a correrte de nuevo esta vez  junto a mí. Los espasmos de mi polla estimulan los tuyos. —Joder! —Qué corridas!, —piensas. No dejas de empujar tus caderas contra mí, intentando que todo mi semen te llene hasta lo más profundo de tu ser. —Toma mi leche puta!! —Grito. Ahhhhhh! No paramos de corrernos juntos. Yo todavía empujando contra tus nalgas con toda mi polla en tu interior y tú masturbando tu clitoris como una cerda.

Terminamos de corrernos. Sientes el culo super dilatado y el coño lleno de polla y corrida. Tus labios están muy hinchados de tanto chupar. Casi no te puedes ni mover. Saco mi polla de tu coño, te pones de lado y comienza a salir todo mi semen a borbotones. Me incorporo a tu lado, recojo de tus muslos parte de mi leche con mis dedos y te los doy de comer. —Toma más corrida!! Está rica? Te encanta lo cerdo que soy. Saboreas mis dedos llenos de semen y te lo tragas todo mientras me miras con cara de zorra. Sabes que eso me vuelve loco. Te cojo del pelo, te levanto hasta ponerte a cuatro patas, te giro sobre ti misma, acerco tu cara hasta el resto de corrida y flujo que hay derramada en el suelo y te digo que te lo comas todo. —No dejes nada cerda!! Quiero ver como te comportas como una perra salida!... —Joder! Como me está poniendo otra vez —piensas. Sacas la lengua y comienzas a lamer el suelo tragandote toda la corrida que encuentras. Nunca te habías sentido tan sucia y depravada. Estás deseando que te folle otra vez, que haga contigo lo que quiera. —Soy toda tuya!!!! Para siempre!!!!