Tu desden

Como trato a sammy su desvirgador.

Tu Desden.

El desden que sufrí por un mal querer.

-0-0-0-0-0-0-0-0-0-

"Dile a tu nuevo querer

Que no hay nada que temer

Porque hace mucho tiempo

Que te borre de mi mente."

Hola soy Sammy (Samanta) quiero decirles mi historia en este breve relato, espero me comprendan y entiendan.

Soy una mujer de 25 años, matriculada como Contador Publico, mi historia comenzó cuando tenía yo como 13 años. Se cambio al barrio de donde soy, un muchacho de lo mas divino, Samuel es su nombre, chico como de 18 o 20 años, la cosa es que desde el primer día que lo vi, no se que pasaba en mi pancita, sentía yo como mariposas volar en mi estomago, el es rubio con ojos como avellanados, de un color café claros, tirando a miel, con unos brazos, que te apachurraban hasta el espíritu cada que me abrazaba, con unos pectorales marcados, yo digo que por el ejercicio.

Cada que salía yo de la escuela, el regresaba de la suya y prácticamente era inevitable el encontrarnos en la parada del urbano.

El se me quedaba mirando con unos ojos insistentes no sabía que mirada era, hasta que lo supe, era una mirada llena de lujuria, de deseo, pero déjenme continuar mi relato. Al mirar sus ojos le pregunte -¡¿que tanto miras?-

Cínicamente me respondió, -Tu hermoso culito, bebe-

Yo encolerizada no tanto por la respuesta sino por el trato de "bebe" que me dio, le espete -¿Bebe?, si ya tengo casi 14 años- a lo que el con una risita sardónica me contesto –por eso, si apenas eres una Bebe- y yo en el paroxismo de la indignación levante la colita y saque mi pechito lo mas que pude y me subí al transporte que en ese momento llegaba.

"y no me acuerdo de ti

Pues toda mi atención

La tengo puesta en alguien,

Que lo merece en verdad

Al saberme mimar tal como lo soñé"

Al momento de subir el subió tras de mi, pasando a la parte trasera del bus, que para variar estaba hasta el tope de gente, esto provoco que el con toda la malicia del mundo, pegara su enorme paquete en medio de la raja de mi colita. –Quieta nada pasa- me dijo, yo como paralizada por la sensación y por la sorpresa, no atine a moverme, el dio comienzo un vaivén de acuerdo al movimiento del bus, lo que hacia que su paquete de pegara de forma por demás deliciosa en mi culito, tomado de la barandilla del bus, y con la otra mano sobando en forma casi descarada, mis tetitas que ya eran una talla mediana, (herencia de mi madre) , todo esto pues logro que mi vagina se humedeciera sin yo saber que pasaba, ya que un calor se me iba y otro se me venia, provocando ligeros desmayos en mis piernas, que apenas lograban sostenerme, gracias a que Samuel me tenia agarrada ahora desde mi vientre que jalaba hacia su parada verga, -mmmmmmhmmm- soltaba yo en pequeños quejiditos, como para que el resto de la gente no lo notara, dando fin a este martirio, llegamos a nuestra parada,-¿te bajas con migo Sammy?- -Si- conteste yo con las pocas fuerzas que aun tenia en mi cuerpo.

Tomándome de la cintura me condujo hasta la puerta de mi casa, -Te espero a las siete en la esquina de mi casa- yo solo asentí con la cabeza.

No sabía que pasaba, pero me esmere en mi arreglo, termine mis cosas para no tener ninguna negativa por parte de mis padres de salir a esa hora.

Salí con un minuto de retraso, Samuel ya me esperaba, en la puerta de su casa, -pasa, te mostrare algo que se te interesara- pase sin preguntarme nada.

Entramos a su casa, en la cual estaba su mamá a la cual salude, pasamos a la sala de su casa, y me mostró su nuevo aparato Wii. De videojuegos. El cual me enseño a usar y jugamos un rato.

Pasado el tiempo su mamá salio a comprar pan, dejándonos solos, que fue la oportunidad, que creo ya tenia planeada mi vecino. No salía totalmente la mamá de la casa, cuando sentí la mano de el, en el inicio de mis ricas pompas, no es que lo diga yo, ya que el, era el que me lo decía, pegado a mi oído -Que ricas y duritas nalgas tienes Sammy-

Reaccionando intente quitarme de su lado, pero me tenia firmemente agarrada de la cintura lo cual provocaba que mi culito se pegara como lapa a su pene.

Levanto mi faldita. Y tocando mi conchita que estaba durita por la excitación, me decía-si que estas rica mami, te voy a coger- esto me lo decía pegando su linda boca a mi orejita y mejilla, lo que hacia que se me enchinara todo el cuerpo, que sintiera escalofríos. Bajando un poco mi calzón, metió su mano hasta mi chochito calientito y húmedo, metió un dedo en mi abertura, lo sacaba lento, y lo regresaba de la misma manera, en un arrebato de pasión termino de bajarme mi calzón el cual se deslizo hasta los tobillos, el lo recogió y en esa posición solo levantó su cara y me dio una pequeña lengüeteada en mi rajita que me hizo sentir las estrellas, y que una de ellas estallaba en mi vientre llenando de fluido mi entrepierna.

Solo fue que el levanto una de mis piernas para que pusiera su parada verga en mi chochito, y yo le cooperé dándome un empujo, que hizo que su verga se metiera hasta la mitad, provocando un repentino dolor en mi vagina, nadie me había dicho de esto.

El se quedo parado sin moverse, solo sintiendo supongo las contracciones de mi vagina que parecía que tenia vida propia ya que mordía literalmente el pene de Samuel, no lo hacia yo, era mi vagina, después del primer dolor y ya acostumbrada al mismo. Dio otro empujón y termino de meter el resto.

En ese momento dio el inicio a un mete y saca de dimensiones colosales, entraba muy rápido y lo sacaba de igual manera, había momentos que se quedaba estático y yo (mi vagina) le proporcionaba pequeñas mordidas, en su verga, -huuuuuuuuffff- hermoso sentía yo, y el supongo, porque solo de mirar su cara estaba en otro mundo, sin saber que pasaba. Dando unos bufidos se retiro de mí y tomando su parado miembro lo apunto contra mi vientre y soltó unos chorros de blanco esperma, que caían por mi vientre hasta mi monte de Venus, inicio de mi vagina, la cosa más loca que hasta ese día hubiera yo realizado o pensado realizar. Que tiempo duro este maravilloso suplicio, no lo se, pudieron ser como 15 minutos.

Terminado lo que hacíamos me llevo al baño de su casa, y me dijo –lávate y sécate para que no sospeche nada mi mamá- y salio dejándome sola con mi adolorido chochito lo lave y seque con una toalla, al buscar mi ropa interior no la encontré por lo que le pregunte a Samuel, -¿Y mi calzón?-, el como con cierto aire de superioridad me dijo –no te lo daré, lo guardare como un recuerdo de una zorra-

-¿Yo una zorra?-

-Pues claro quien es la mujer que se entrega a la primera con cualquier desconocido-

Sintiendo que la tierra me tragaba me retire a mi casa y en el camino me encontré a su mamá, la cual solo me miro y movió la cabeza.

"me cuida, le cuido, me besa, le beso,

Compartimos nuestro cariño

Y no me queda ni un instante disponible

Para ocuparme de quien

No respeto nunca mi amor"

Al llegar a mi casa me dice mi mama

-¿Qué tienes hija?-

-Nada, solo es el vecino Samuel-

Y ella tratando de entender lo que me pasaba solo atino a decir.

-Así son los hombres, cuando una los quiere, ellos no, ya encontraras algún muchacho que te merezca-

Eso fue precisamente lo que me paso, después pero esa será otra historia que contar si me decido.

"He perdido el tiempo pensando, creyendo,

Las falsas promesas que hacías

Ojala puedas hacerle muy feliz

y así no tengas que sufrir

la decepción que yo sufrí."

P:D este relato me lo mando una amiga de Sinaloa MX. Yo solo lo formatee.