Triologia la vampiresa y nuestro sexo
Poesia
LA VAMPIRESA Oh belleza mía,
Belleza maldecida
Que a mi corazón
Yergue y seduce
Con los encantos
De dioses castigos
De infernales demonios.
Oh criatura nocturna
Oh vida consumida
En tu belleza mi cuerpo
Sucumbe y mi alma
Su destruyes y secuestras
De la calma.
Tu mi vampiresa
Clavas con presteza
Tus colmillos con certeza
En mi garganta palpitante,
De mi cuello
Salta la sangre abundante
Y la bebes deleitándote
Que corre por montones
En tu boca y pecho
Chorrea inmenso.
Mis huesos se deshacen
Cuando caigo preso de tu desnudez
Que harto de embriaguez
Me incita a los instintos animales
Más bajos y carnales,
Yago ahora muerto,
Estos instintos, los que me desesperan
Los que me torturan
Para siempre mi agonizado corazón.
LA VAMPIRESA II -A ti mi criatura nocturna
Ven hazme tuya;
Descubierto tengo el cuello
Y mi corazón deseando ser tuyo.
Belleza oscura
Doncella perseguida
Ya mi vida no es mía
Han matado mi vida.
-¡Oh! Quieres se mía
Pero recuerda las noches serán en adelante tu vida,
Las tinieblas tu guarida
Y tu sierva mía.
Deseo no solo tu cuerpo
Deseo tu corazón niña mía,
Tu cuerpo, tu mente
Y así frotarnos y amarnos eternamente.
-¡Bien oh! Ven a mí
Amada y dueña mía
Tengo sed de ti
De tu sangre, y tu armonía.
Ven, ven por mí
Te quiero, te quiero solo a ti
Entre tumbas me entrego
Hazme tuya y tú serás mía.
LA VAMPIRESA III Fue esa noche, fue una noche,
Cuando en el cielo estrellado
La luna se asomaba
En ese firmamento azul marino.
Fue el momento mi amada
Fue el momento en que tu hechizo alcanzo mi alma;
Cuando joven y entre tumbas vi tus bellos ojos
Cuando tu mirada penetro hondo en mi espíritu
Cuando tuve cercana mi muerte.
En esa noche, esa oscura noche
Cuando entre fúnebres cipreses,
Despertaste en mí
Una llama, una obsesión
Una psicosis por poseerte y que me poseyeras.
Una ilusión se elevó en mi espíritu:
Fue tu rostro pálido, pálido y mortal
Fue tu sonrisa, macabra y fría
Pero a la final bella sonrisa.
¡Sí! Entre tumbas me entregué mi alma
Si es entre tumbas que desee tus colmillos en mi cuello
Desee fundir en ti;
Y sentir mi tibia sangre correr por mi pecho
Fundir mi esencia con la tuya.
Sé que es un poco de dolor;
Que debo pagar por tu alma,
Que debo pagar por ti Clemencia.
Nuestro sexo
Oh, sublime pacto
que con besos sellamos
y con caricias firmamos
oh amada mía.
Que glorioso momento
cuando nuestro amos consumamos
con delicias de la carne
con instintos carnales.
Oh que aliento
tu flujo y alimento
tu mirada y tus besos
tus dedos y mis pechos.
Glorioso placer
en tu carne y tus huesos
tu lengua en mis labios
y tus dedos en mi sexo.
Tu placer, oh mi amada
tus gemidos en mi cama
tus orgasmos en mi cara
tus pechos en mi lecho.
Oh amada mía
de mi cuerpo
tú sientes mis sensaciones
de placeres carnales.
Oh tus senos en mi boca
mi boca en tus labios
mis dedos en lo más profundo de ti
gloriosos cascadas de flujo y alimentos.
Oh, amada mía
nuestro amor en el tiempo
mis orgasmos en tu cama
nuestro encuentro
nuestro acto de sexo