Trio inesperado para mi mujer (2° parte)
Segunda parte de como se desarrollaron nuestras vacaciones. Ahora totalmente desinhibidos. (Relato real, recomiendo leer la primera parte)
Pasamos a contaros lo sucesivo a nuestro primer trío ya que muchos lectores nos piden correo que lo hagamos y nos satisface compartir nuestra experiencia.
Recogimos nuestras cosas en la playa y nos fuimos, ya empezaba a hacerse tarde, no sin antes intercambiar numeros de teléfono para más adelante. Al ir en coche al hotel, Sofía y yo empezamos a comentar la experiencia, estábamos un poco descolocados, confundidos...
cielo, te ha gustado? Me preguntó.
si, de verdad, todavía tengo una mezcla de excitación y nerviosismo, pero te he visto disfrutar como nunca, además, casi me corro solo de miraros, y cuando empecé a follarte, encontrar el chocho completamente abierto, y lleno de semen, me puso tan cachondo que hizo que me corriera como hacía años que no lo hacía.
A todo esto, deciral lector que usamos la píldora, pero hablamos de la locura del momento de no usar condones, y que si hubiese una próxima vez, los tendríamos preparados. El caso es que sin darnos cuenta, estábamos haciendo planes sobre el tema, ya lo empezábamos a tomar como algo necesario y normal. El cuerpo nos pedía más guerra. Nos calentamos de tal forma durante la cena recordando el episodio, que subimos a la habitación y volvimos a follar como locos y nos dormimos.
Al día siguiente salimos y decidimos ir a pasar el día en Las Canteras. Unas compras, comer... vueltas, un poco de sol en la playa y a media tarde, me armé de valor y ya que el tema no salía, y pensaba que nunca más lo haríamos ni hablaríamos de ello, le espeté de golpe a Sofi:
que será de tus admiradores? No quieres saber nada de ellos?
dios! Creí que nunca más me darías el gusto!
Me contestó rápidamente para mi sorpresa. Creo que aquello nos ocupaba el pensamiento al 100% a los dos todo el rato y ya lo teníamos claro, necesitábamos quedar otra vez con ellos. Sin perder tiempo, saqué el móvil y envié un mensaje. Sofi me preguntó a quién se lo había enviado y le dije que a Carlos.
- al fin y al cabo es el que consiguió dejarte agusto. Te conozco y no soy tonto, tu lo que quieres es un buen rabazo como ese, que no lo tienes en casa y quieres aprovecharlo...
Me miró de reojo y no dijo nada, al momento, sonó el móvil, pero era una llamada. Era el chico , sin perder tiempo quedamos para tomar algo después de cenar en el sur, ya que tanto el como nosotros estábamos allí. Confirmamos hora y lugar y salimos corriendo. Nos dimos una ducha, cenamos y llegamos al sitio acordado casi justos pero lo vimos esperando en la calle. Estaba con Yerai. Paramos a su lado y les dijimos que subieran, que íbamos a aparcar y ya buscábamos dónde ir. Se subieron a nuestro coche, una Volkswagen Multivan, iban detrás, nos saludamos, se dieron unos besos con Sofi y continuamos.
a dónde podemos ir? Pregunté.
buf, somos de esta zona, dijo uno de ellos, como dando a entender que les daba corte dejarse ver y que estarían cohibidos.
-venga, subimos a Las Palmas, dije yo. Ok, respondieron todos.
Cogimos autopista, atravesando del sur al norte la isla, un buen rato, y empezamos a hablar, al rato ya era distendido y con mucha confianza. En un instante, Sofi dijo;
- chicos, me paso atrás, que es más cómodo para hablar... y se deslizó desde el asiento del copiloto a la fila de sientos trasera y se sentó en medio.
Me vino a la mente la imagen de la playa otra vez, y ahora yo iba conduciendo un monovolumen con los cristales oscuros y en la parte trasera mi mujer cachonda perdida con dos pibitos que tenían las hormonas disparadas. Mi mujer iba vestida con un tanga y minifalda a medio muslo, y una camiseta blanca. Cuando acomodé el retrovisor y pude verlos, ya estaba sobándoles los paquetes y morreándose con Yerai y Carlos sobándole las tetas. Joder, que panorama! Y yo de chófer cogiendo un empalme del copón.
Rápidamente cogí un desvío y salimos en Vecindario, nos metimos en la calle principal y aparqué rápido frente al hotel Vecindario Aeropuerto. Era una calle transitada pero no había peatones del lado de la autopista y era ideal. Cuando apagué la furgo y puce mirar hacia atrás, mi mujer sólo tenía puesto el tanga y ellos estaban en pelota, menos Carlos, que tenía la camiseta puesta. Sofi estaba de rodillas chupando las pollas alternadamente y podía ver su culo pegado a los asientos delanteros, cosa que aproveché para acariciarle el coño y empezar a lubricarla. Giré un poco el asiento y me acomodé mejor. Giré también el del copiloto e hice un hueco cómodo y ya me arrodillé detrás de ella y me quité los pantalones y los calzoncillos. Ya tenía un buen empalme, y acariciaba el clítoris con una mano y una teta con la otra. Los chicos ya estaban a cien, les chupaba profundo y muy lento, como ella sabe, y cambiaba de uno a otro cada 4 o 5 chupetones para que no se corriesen rápido.
- hoy no va a ser como ayer, no me vais a follar ninguno, os voy a follar yo y váis a hacer lo que yo diga, ok?
Mi mujer parecía poseída, nunca la había escuchado de esa manera, se giró, y mordiéndome la oreja, me dijo al oído: - primero tú, y acomodó el culo en pompa contra mi polla y la metió de golpe. Entró fácilmente y empecé a bombear, hasta que se apartó y me hizo seña de quedarme quieto. Le puso un condón a Yerai y girándose de cara a mi, fue bajando el culo con las piernas cerradas y guiando la polla del chico hasta que quedó totalmente sentada, empezó un suave ritmo, moviendo la cadera adelante y atrás, sin sacar ni un milímetro la polla, abrió las piernas, apoyó las manos en las rodillas del chico y se hechó totalmente hacia atrás, apoyándose en el pecho de él. Yo ahora veía los huevos totalmente pegados al clítoris y empezó de nuevo el mismo movimiento. Se movía muy lentamente, y le dijo que la avisara cuando se fuese a correr. Al minuto la avisó y ella se quedó inmóvil unos instantes... volvió a empezar mas lento aún... el se volvía a tensar y ella volvía a parar... así lo tuvo unos 15 minutos, mientras Carlos y yo nos pajeábamos y disfrutábamos mirando. Se levantó muy le tamente para que no se corriera, se giró y quitándole el condón con mucho cuidado;
cielo, esto es de lo mejor que te puedo hacer, verás... dejó el condón en el suelo y metió la polla hasta la garganta. Chupando fuerte, empezó a subir y bajar lentamente y mover la cabeza como ella sabe y en 10 segundos Yerai se tensó, Sofia la metió todo lo que pudo en la boca y apretó fuerte... se movía rápidamente y él descargaba su leche en la boca y se escapaban algunas gotas por las esquinas de los labios. Chupó fuerte hasta que el chico se retiró de golpe por la sensibilidad y girándose y mirándome se puso encima de Carlos a repetir la misma operación, le puso un condón apretadísimo y que sólo llegaba hasta la mitad de la polla y empezó a bajar el culazo en su barriga.
ahhhhh.. diooossss!
empezaba a jadear, y solo estaba la punta metida. Me puse delante suyo para que se apoyara en mis hombros y pude ver la operación a escasos centímetros de mi cara. Empezó poco a poco y a los cinco minutos ya se empezó a dejar caer metiéndola entera. Subía y bajaba lentamente, y hechándose hacia atrás, como antes, con la inmensa polla dd Carlos metida dentro le dijo:
para ti tengo algo diferente, quieres correrte dentro o te la chupo?
chúpamela como a él (por Yerai), porfa...
pues va a ser que quiero otra cosa, semental... y se levantó, se giró y se dejó caer apretando la tetas contra el pecho del muchacho.
Yo veía subir y bajar ese culo, desapareciendo totalmente un pollón de 20 cm entre los labios vaginales de mi mujer y volver a salir, casi hasta la punta, y así sucesivamente, muy lento. Paró, se chupó un dedo y empezó a lubricar la entrada de su culo. Cogía restos de fluidos de alrededor de la polla y se lubricaba. Se metió un dedo y empezó a moverlo, hasta que me hizo la señal y entendí que hoy me tocaba a mi darle placer por detrás. Al tercer intento conseguí meter la punta y noté la extraña sensación de otra polla al lado de la mía. Era increíble. Empezamos un ritmo muy lento, y ella empezó a jadear con nosotros.
- ummmhh, uuummmhhh... seguir, cabrones, no paréis, no paréis, correos dentro, cabrones....
seguimos unos minutos hasta que Carlos estaba a punto de correrse y Sofía se quitó rápidamente. Nos pilló por sorpresa, rápidamente se giró, se sentó y metió la polla del chico otra vez en el coño pero dándole la espalda y viendo yo el pollón totalmente entrar y salir abriendo el coño de mi mujer. Empezó a botar rápidamente y el agarrándola de las caderas fuertemente:
- me corroooo, me corooooo, ohhhhh!
y mi mujer aceleró el ritmo hasta que el pobre chico explotó y le dieron unos cuantos espasmos mientras mi mujer no paraba de botar.
- yo también.... me corro, cielo, aguántala dentro, que me estoy corriendo.... dioossss!!! No me la saques, que bueeenooo...
Vi a mi mujer en uno de los mejores orgasmos que tuvo delante de mí hasta la fecha, y el pobre chico, que se había corrido, estaba agarrando la polla apretando fuertemente la base para nk perder la erección y que Sofía se corriera a gusto. Se separaron, se puso a 4 patas y yo me la follé tranquilamente hasta correrme dentro. Mientras ya le estaba chupando la polla a Yerai y lo fenía a 100. El caso que me corri como un animal y seguimos follando de todas las maneras posibles, llenando todos los agujeros a la vez en algún momento. Así unas 2 horas con algún descanso.
Yo me corri tres veces y quedé hecho polvo. Ellos no lo se pero se gastaron con 7 u 8 condones, no se exacto. Y cuando llegamos al hotel y nos duchamos, Sofía me dijo que se había corrido 4 veces, y no podía casi ni mear, tenía el coño dolorido y dilatado todavía.
Pero ya habíamos quedado para el día siguiente ir al centro comercial y pasear....
Saludos