Trio con pierre y su chica

Esta es la narración verídica de lo que sucedió una vez que Pierre volvió de la Argentina con una mina. Algunas fotos de esa época las incluí para que además de leer lo que sucedió también lo vean.

TRIO CON PIERRE Y SU CHICA

Hace como cuatro años me llamó un amigo del cual hacia mucho tiempo que no tenía noticias suyas, después de los saludos de cortesía me dijo que había estado trabajando en la Argentina y que por eso no me había llamado más.

Mirá Omar, allá me enganché con una mina... quiero presentártela y que nos veas como cogemos, ella no sabe nada de lo que nosotros hacíamos antes de irme para allá...

-Y para eso me llamás!!! Para que te vea coger!!

-No te enojés Omar, vos podés pajearte mientras nosotros lo hacemos y a lo mejor cuando ella se caliente bien podés hacer algo con ella...

La idea no me entusiasmó para nada, pero verle la verga a mí amigo y quizás poder tocársela o chupársela, eso sí me atraía.

-Vos no digas nada mientras mirás nosotros hacemos algo y te pajeas yo me la voy "trabajando" hasta que puedas sacarte la ropa y vemos que más nos deja hacer....

No muy convencido fui a ser mero espectador, porque lo que más me interesaba era ver esa verga que en algún momento de esta narración incluiré las fotos que tengo de algunos encuentros del pasado y de su bellos culo que me gustaría volver a besar, lamer y por qué no chupar como lo hacía antes de su desaparición.

La "mina" era regular tipo aindiada de esa que abundan mucho en las provincias argentinas que tienen una mezcla indefinida de genes en sus sangre que se haría imposible hacer un rastreo de sus orígenes ancestrales.

Era bastante tímida, por supuesto yo era un desconocido para ella y la propuesta de su compañero no creo que fuese muy de su agrado, pero como realmente estaba "metida" con él había aceptado complacerlo.

Después de la presentaciones Pierre empezó a besarle el cuello y a tironear de su remera, hasta que logró vencer su resistencia y comenzó a besarle las tetas por entre el soutien que las contenía.

Dos tetas muy redonditas y bien formadas aparecieron por la abertura del soutien que con tanto forcejeo y besuqueos que mi amigo les estaba haciendo a esos pechos estos no pudieron seguir protegidos dentro dela tela calada del pequeño levanta-tetas quedando esas dos bolas de carne fuera de el.

Se puso a chuparle los pezones sin importarle la poca resistencia que ella ponía tratando de cubrirse esa parte de su anatomía, rápidamente esos pezones adquieron una longitud, una dureza y un grosor dignos de un buen pintor de desnudos del renacimiento.

Pierre hizo un alto en su labor de excitar esos pezones, se sacó la remera y el pantalón quedando solamente en slip, mientras ella lo miraba con muy pocas ganas fue ayudada por él apara sacarle la pollera quedando ella también con una minúscula tanga de encaje por la cual se asomaban sus renegridos pendejos.

Yo no aguantaba más, me tocaba la pija por encima el pantalón sin atreverme a hacer ora cosa esperando la orden de mi amigo que me permitiese hacer algo más que un simple manoseo por encima de la tela de mi pantalón, estaba ansioso por volver a ver esa verga que en el pasado me había dado tantas satisfacciones, mientras seguía cubierta por el slip y ellos se besaban la visualicé en mi mente.

Lamentablemente en la única foto que tengo no está en estado de erección pero con muy buena imaginación se puede adivinar el tamaño que adquiere cuando se excita por alguna boca o por cualquier cosa que le pueda provocar un cambio de estado y de tamaño.

Inmediatamente después que yo visualizaba su hermosa verga, la tuve delante de mis ojos con un poco más de erección que la vez que le había tomado esa fotografía.

Él le tomó la mano a la muchacha y la llevó hacia allí para que lo pajease mientras él seguía chupándole las tetas las cuales ya no tenían ni rastros del soutien que un rato antes la s cubrían.

Me encantó volver a ver esa pija que en un tiempo pretérito me había hecho gozar muchísimo con las pajas y mamadas que le había hecho en los furtivos encuentros que tuvimos en los lugares más insólitos.

Pierre la desatendió un momento me miró y me dijo:

-Qué esperás boludo, queremos verte la pija!!!

Por un momento quedé petrificado porque su propuesta había sido de que fuese allí a mirar y recién cuando la mina se calentase haría algo más si ella lo permitía, pero tan rápido no creo que ella estuviese en las condiciones que él me había planteado cuando me había llamado para invitarme.

Ella se agachó, se introdujo esa veintena de centímetros de carne pulsante y empapada por el precum dentro de su boca y sin ninguna dificultad se puso a chuparla ante mi mirada de envidia porque era yo él que quería disfrutar de esa verga como tantas veces lo había hecho en otros tiempos.

Mi amigo le agarró la cabeza para guiar los movimientos de succión y al hacerlo se puso de espaldas a mí dejándome el maravilloso panorama de su orto lampiño antes mis ojos.

No sabía que hacer, quería abalanzarme sobre ese culo que se ve arriba, besarlo, lamerlo y explorar su hoyo, pero no me animé porque según mi amigo su chica ignoraba lo que estábamos a hacer en el pasado.

Ellos se ocupaban de lo suyo mientras muy lentamente me fui quitando la ropa a la vez que miraba ese culo sin poder ver la verga de mi amigo que estaba totalmente perdida dentro de la boca de ella, pero como estaba de espaldas solamente podía oír los sonidos de lamidas y succiones que esa chica golosa le hacía con mucha maestría.

Al quedar totalmente desnudo me tapé la pija con la mano, empecé a sobarla como si eso fuese necesario para que tuviese más erección de la que demostraba.

Ella abrió los ojos, al verme dejó de chuparle la pija a mi amigo, él se dio cuenta de que algo sucedía porque se dio vuelta y al verme me dijo:

-La tenés igual que antes... parece más colorada...

El no hizo más comentarios, se llevó a la mina para arriba de una colchoneta que había sobre el piso y se pusieron a hacer un tremendo 69 en el que ninguno de los dos culos quedo olvidado por las largas lamidas que se hicieron frente a mi atenta mirada y mi verga cada vez chorreando más precum entre mis dedos.

Ella se tragaba la pija de mi amigo, como si ésta fuese una caramelo, no tenía ninguna dificultad engullir esos 20 o 21 cms. de verga caliente y chorreante de precum, haciéndome envidiarla porque yo no estaba en su lugar.

A Pierre la morbosidad de esos encuentros siempre lo estimulan y se excita más que cuando está con una sola persona por eso su verga se había puesto muy dura y con los agasajos de la lengua de esa mina ésta había comenzado a desbordar el precum que sus glándulas secretoras producían a gran velocidad.

Mientras le lamía la concha de reojo me miraba como diciéndome "Oís como gime la puta esta", como ella estaba tan entretenida con la verga de Pierre alojada en su garganta dejando asomar por algunos lugares recónditos de su boca gemidos de placer por la estimulación que recibía su clítoris que esa traviesa y juguetona lengua le estaba haciendo no se dio cuenta de que mi amigo me hacía señas con un dedo para que me acercase y tocase el lugar donde el tenía su lengua.

Mis dedos tocaron ese lugar temiendo la resistencia de ella, pero por suerte no fue así, gimió mas fuerte al sentir que mi dedo tocaba su clítoris y que la lengua de mi amigo lo lamía por debajo.

Por un momento dejó de chuparle la pija besándome deliciosamente por el gusto a pija que tenía su saliva entreverada con precum, cosa que me hizo calentar muchísimo y mi verga se levantase más de lo que ya estaba.

Pierre abandono la concha de su mina para empujar mi cabeza hacia las tetas de ella, mientras se las chupaba mi pija fue pajeada por mi amigo aprovechando que mi cabeza le ocultaba la visión ella no sé dio cuenta de lo que sucedía más abajo.

Pude sentir un líquido muy viscoso y caliente sobre mi verga y me di cuenta de que Pierre además de pajearme me estaba refregando su pija sobre la mía empapándola con su precum.

Después él tomó la mano de ella y le hizo apretar las dos pijas para que ella mezclase con sus dedos nuestros jugos dejándonos las vergas totalmente empapadas y brillantes.

A continuación de eso, sucedió de todo porque la mina ya estaba conquistada por la excitación y no se opuso a nada de lo que Pierre intentaba hacerle.

Lo primero que hizo fue ponerse sobre ella con las piernas a los lados, acercó su verga a las tetas para empezarla a pasar entre las dos, haciéndose una paja rusa que le dicen, yo seguía lamiéndole las tetas pero como esa verga intrusa se asomaba entre ellas terminé pasándole la lengua cada vez que se acercaba a mi boca.

Cada vez que esa verga pasaba en el medio de las tetas terminaba pegando en mi boca dejándome allí algún resto del precum que la pija de Pierre tan fácilmente elabora y expulsa cada vez que se excita en demasía.

Realmente me estoy excitando demasiado al recordar todo esto, por lo que no voy a tener más remedio que hacer algo, dejaré el relato por acá y cuando me "alivie" intentaré retomarlo...

A lo mejor llamo a Pierre por teléfono y lo recordamos junto pajeándonos como lo hicimos tantas veces en el pasado...

Ya estoy de vuelta..., más aliviado y con la mente refrescada por los comentarios de Pierre, efectivamente lo llamé, recordamos juntos el episodio que estaba narrando, pero lamentablemente mi mente me falló en algunos detalles de lo que conté anteriormente y como no son muy importantes por ese motivo no los corregiré.

Pierre me hizo recodar que cuando le lamí la pija entre medio de las tetas de la chica él se decidió a metérsela porque no aguantaba más la excitación, su verga estaba totalmente empapada de precum y saliva, la sacó bruscamente de entre las tetas y levantándole las piernas se la enterró en la cocha la cual estaba suficientemente lubricada por las lamidas que anteriormente le había dado.

Ella buscó su boca y mientras hacían intercambios de saliva y demás arrumacos orales, le pasó las piernas por atrás de la espalda, así de esa manera Pierre se la pudo enterrar hasta le fondo.

Yo estaba muy excitado porque volver al lamer esa verga después de tanto tiempo me había puesto así y al oír todos los gemidos de ella cada vez que Pierre se la sacaba y luego se la volvía a enterrar con violencia, diciéndole muchas palabrotas no pude soportar tanta tensión y me coloque detrás de él.

Él le separó las piernas para que yo por sobre su hombro pudiese ver el mete y saca, vi como su pija se deslizaba dentro de esa concha bastante rasurada y luego miré maravillado como se perdían todos esos centímetros de carne dura y palpitante en las profundidades del cuerpo de su amiga.

Como pude le separé las nalgas a Pierre para pode mirar desde atrás como se la metía, fue inmensamente placentero y grato poder ver la raíz de la verga de él cuando se hundía entre los pliegues de los labios vaginales de ella y al mismo tiempo poder disfrutar viendo su culito prieto y rosado con las bolas duras colgando entre los labios que se engullían su verga.

Fue bárbaro!!! Poder ver como ese tronco duro se perdía allí dentro, luego empecé a tocarle los huevos, que estaban durísimos por los contraídos que la excitación los había puesto, después comencé a empujar su verga contra el cuerpo de ella y con mi mano la fui sacando y poniendo logrando que Pierre suspirase y gimiese por el placer que sentía a través de las terminales nerviosas del cuerpo cavernoso de su pene.

Gemían como locos, cosa que aproveché para tocarle el culo a Pierre sin que ella se diese cuenta porque no quería que se enojase porque él le había contado algo de lo que hacíamos pero nunca le contó hasta que extremo habían llegado las cosas entre nosotros.

Mi pija estaba durísima pero nadie le hacía fiestas, yo no aguantaba más quería meterla en algún lado o que alguien me la chupase porque quería descargar mi semen hirviente y este se negaba a salir sin que alguien lo obligase a manar de alguna forma especial.

El esfínter anal de Pierre estaba terriblemente contraído por la fuerza que éste estaba haciendo al metérsela a ella y al mismo tiempo esa fuerza contraía su culo rechazando mi dedo que trataba de abrirse camino entre los pliegues sin poder lograr que este se abriese para dejarlo pasar.

Él se dio cuenta de mis intenciones y que yo no daba más, lo más fresco metía y metía, y yo sin hacer nada más que unas pocas tocadas de verga, culo y bolas, por suerte me salvó su voz agitada a que me ordenó:

-Laméme las bolas!!!

Como pude me ubiqué entre sus piernas, comencé a lamer la base de su verga hasta que mi lengua fue hacia atrás y me puse a lamerle las bolas, seguí hacia arriba hasta que llegué a su ano, a él le encanta eso y como ella no se daba cuenta de lo que sucedía allí atrás me dediqué de lleno a lamérselo y a meterle mi dedo, por suerte al aflojarlo empezó a entrarle.

A pesar de que a él le gustaba eso, por momento sacaba el culo de mi dedo porque no quería que ella se diese cuenta y pensase que él era puto, pero ella no podía darse cuenta de que él tenía un dedo clavado en su orto porque estaba con las piernas levantadas totalmente excitada y a punto de tener un orgasmo muy fuerte.

Pierre estaba recaliente, por eso le metí el dedo ahora si hasta el fondo y lo empecé a mover allí hasta que él contrajo el esfínter, luego dio un alarido a la vez que mi dedo era apretado por las contracciones de éste haciéndome dar cuenta que su eyaculación había comenzado

Ella se retorcía debajo de él y sus piernas muy fuertemente apretaban la espalada de Pierre contra su cuerpo, haciéndome sentir en mis propias narices el temblor de sus pies al producirse su orgasmo.

A los pocos instantes todo ese ajetreo de movimientos, espasmos, temblores y demás cesó tan rápidamente como había comenzado dejándome a mí con la verga dura porque nadie había tenido la amabilidad de hacerme algo para lograr que yo también acabase esa excitante sección de sexo en trío.

Al verme así en esas condiciones Pierre me agarró la pija para hacerme una paja, la cual no fue muy larga porque casi inmediatamente un caudal de leche blanquecina apareció por mi uretra empapando las tetas de ella casi en su totalidad.

Quedamos solos porque ella se fue a lavar toda mi leche que le chorreaba desde sus tetas mojándole el pubis y la leche de Pierre que se escurría por los labios de su concha de una manera terriblemente excitante mojándole los muslos casi hasta las rodillas.

-Sabés Omar gocé muchísimo, hacía tiempo que no me pasaba algo igual!!!

En cuanto terminó de decirme esas palabras me dio un beso de lengua, haciéndome excitar nuevamente y como él tenía la verga bastante dura me puse a chupársela un poco, cuando oímos que ella volvía nos separamos fingiendo ser "santitos".

Al encontrarnos en ese estado, ella que no era tonta nos dijo:

-¿Qué hicieron mis pibes que tienen la poronga en ese estado?

Muy cómplices nos miramos, pero no dijimos nada porque ella muy rápidamente se puso a chupar la pija que un rato antes había estado en mi boca.

Estábamos los dos hincados sobre la colchoneta, yo mirando muy atentamente como ella se agachada para ponerse a chupar la verga de Pierre, este comenzó a pajearme un poco para que mi verga recuperase la erección porque al parecer la fiesta iba a durar mucho más que un simple polvo.

Repentinamente Pierre la empujó dejándola caída de bruces sobre la colchoneta, luego procedió a separarle las nalgas, le untó el agujero del culo con una crema clavándole todos sus centímetros de pura verga francesa, los cuales desaparecieron en el diminuto orto de ella.

Diminuto!!! Eso parecía al verlo tan apretadito pero no lo era tanto ya que se tragó esa verga como si nada, claro Pierre la cogía todos los días y quién sabe cuantas veces por día, por eso ese culo engañaba por fuera aparentaba ser pequeño pero por dentro tenía una capacidad enorme como para albergar cualquier verga por grande que fuese.

Pasó una mano por debajo de ella y le metió dos dedos en la concha, cosa que yo aproveché y me puse a lamer nuevamente el culo de Pierre, después con una mano comencé a pajearme sobre sus nalgas y con la otra le metí dedos en el orto para hacerlo gemir de placer como lo había hecho un rato antes.

Él aceleró los movimientos de mete y saca, lo que me hizo acelerar también las metidas de dedos en su orto, hasta que no aguanté más, pajeándome más rápido y en el momento que sentí que mi leche iba a hacer acto de presencia apoyé la verga en su culo y allí sobre él le largué toda mi descarga.

Me encantó ver como mi leche se deslizaba por sus bolas mojando en su descenso el culo de ella y lo poco que quedó sobre su agujero con mis dedos me encargué de hacerlo desaparecer dentro de ese orto que deseaba tanto.

Cuando él sintió que tenía el culo y las bolas mojadas se quejó, pero al momento sacó la pija del culo de ella diciéndome:

-Date vuelta!

Pensé que me la iba a meter a mí porque tenía una cara de excitación morbosa como nunca antes le había visto, pero por suerte solamente me largó la leche sobre mi culo, mientras ella miraba y se pajeaba el clítoris a dos manos.

Terminamos los tres llenos de leche, por lo que fuimos juntos a ducharnos, él me enjabonó la pija y ella se la enjabonó a él, luego de secarme me fui a mí casa a descansar de tan agotadora jornada laboral.

De este hecho ha transcurrido mucho tiempo, lo recordamos con Pierre cuando lo llamé para pajearme con su narración cuando lo empecé a escribir.

En esa época le pedí una foto de ella como recuerdo y por suerte me la dio, hoy la comparto con mis lectores.

Mientras nos pajeábamos por teléfono, le pregunté por ella, me respondió que en aquella época vino el marido a buscarla y se la llevó con él para la Argentina, Pierre nunca concretó un trío con el marido aunque a ella sé o había planteado.

OMAR

Como siempre espero comentarios en omarkiwi@yahoo.com