Trío con la comadre María Esther y Nena
Somos pareja swinger y he llevado todas nuestras aventuras en el mundo swinger a relatos, este es el quinto relato, espero les guste, comenten y le den like... Podríamos cuadrar un intercambio o un trío... ...
Para aquellos días yo trabajaba en una empresa de seguridad como Supervisor de Operaciones y me quedaba mucho tiempo libre para subir a mi casa a tomar café y pasar un rato con Nena, pero siempre que llegaba Nena estaba en casa de la comadre viendo TV, no me explicaba porque si en la casa había TV, un día llegue y mientras tomábamos café y comíamos pan en la casa de la comadre me confesaron que se la pasaban viendo un programa en Caracol que se llama "Escuela para Maridos" y que ahí habían pasado un capítulo donde una pareja hacia un trío y que eso ayudo a fortalecer el matrimonio (no sé a qué se debía ya que nos la llevamos muy bien, pero tampoco dije nada).
Al cabo de unos días la comadre discutió con el marido y este se fue unos días para donde la familia de él, ese día Nena me dijo que comprara algo para beber y acompañar a la comadre en su despecho. Yo llevé una botella de Ron Cacique para mi y una caja de cerveza para ellas pero al final terminamos bebiendo primero la cerveza y luego el ron.
Entre charlar, bailar y tomar se nos fue pasando la noche y cada vez la conversación y los bailes fueron subiendo de tono, la comadre que tiene 24 años es de piel blanca, pelo largo hasta donde empieza sus nalgas, nalgas que tiene bien redonditas y paraditas y poco cenos, con una sonrisa que me mata.
Estaba vestida con una blusa blanca semitransparente sin sostenes que dejaban ver sus pequeñas tetas pero sus rosados y erectos pesones y una falda gris de tela de franela.
Ellas estaban tan tomadas y calientes de la conversación y los bailes ya muy super sensuales que yo tenía mi pene a todo lo que podía estar erecto y más al bailar reguetón con la comadre que me restregaba su gran culo y al hacerlo se le subía la falda quedando solo separado su sexo del mío por mi pantalón, bóxer y su diminuto hilo que se le perdía entre esas nalgas blancas y apetecibles.
Yo estaba en medio de la sala de la casa parado solo viendo como la comadre "bailaba" resttegandose lo más que podía a mi, cuando siento a Nena tras de mí bailando, estaba yo en medio de las dos cuando la comadre se para frente a mí y veo las manos de Nena tocando por encima mío a la comadre, le tocaba los cenos, las piernas y su culo subiendole la falda, la comadre con los ojos cerrados se dejaba tocar por todos lados hasta que se le escapó un gemido y se me abalanzo a besarme, sentí que me agarraba el pene y vi que eran las manos de Nena que me estaba tocando y bajandome los pantalones y bóxer dejando libre mi pene, la comadre al ver esto se agachó y sin más ni más se metió a la boca mi pedazo de carne, con su lengua jugaba con mi cabeza y con las manos me tocaba las bolas y me hacía una paja fenomenal, mientras tanto o Nena me despojaba de la camisa, yo me perdí en las sensaciones que estaba sintiendo con la mamada.
Mientras tanto Nena se desnudó completamente y se paró detrás de la comadre y la levantó le saco la blusa y está al estar frente a mí me guiño el ojo y me empezó a besar sin soltar mi pene, Nena la terminaba de despojar de su falda e hilo, está al sentirse libre de ropa se me pego a mi cuerpo poniendo mi pene entre sus piernas alzando una y Nena agachada aprovecho para chuparme el pene y la pequeños y rosados labios vaginales de la comadre.
Me sentía en el paraíso...
Nena alternaba entre hacerme el oral a mí y a la comadre, alternando también entre masturbarme y meterle dedo a ella.
La comadre y yo nos besábamos tan apasionadamente como si el mañana no existiera.
Yo ya estaba a punto de venirme y la comadre le chorreaba las piernas de sus fluidos vaginales (ya había tenido al menos 3 orgasmos que le había provocado Nena).
Yo agarre a Nena y la arrecoste contra la pared frente a la comadre y de espaldas a mí y me agache a chuparle su gran totona desde atrás abriéndole bien las nalgas mientras ellas se besaban y tocaban sus pechos, estando así no tarde mucho en arrancarle un sabroso orgasmo a Nena quién me baño mi cara con sus fluidos (como les comenté en relatos anteriores, Nena es multiorgásmica).
Me incorpore y penetre a Nena de un solo golpe hasta el fondo y está soltó un gemido aferrándose a la comadre quien le estaba dando unos masajes en el clitoris a Nena.
Le di entre 10 a 15 nombradas fuertes a Nena y deposite todo mi semen dentro de la caliente vagina de Nena, me separé de ellas quienes siguieron besándose.
Me senté en un mueble a ver aquel espectáculo cuando las dos me miran y sin más se fueron a nuestra habitación, yo tomé un trago de Ron y me fui a seguir viendo.
Cuando entré a la habitación Nena estaba acostada en la orilla de la cama y la comadre hincada de rodillas entre sus piernas limpiandole toda la leche que yo minutos antes le había depositado a Nena.
Ver aquella escena me dio mucho morbo que levante a la comadre y la puse en cuatro para que siguiera limpiandole la totona a Nena quién lo estaba disfrutando a mil ya que se retorcía en la cama y se aferraba a los cabellos de la comadre con una mano y con la otra a las sábanas. Y fue ahí donde por fin probé lo dulce de esos pequeños, rosados y suaves labios vaginales de la Comadre María Esther (hasta ahora lo confieso pero desde que conocí a la comadre le traía unas ganas inmensas y nunca le había insinuado nada ya que no sabía cómo reaccionaria, pero mi paciencia por fin obtenía frutos).
Me aferre a darle el mejor oral a la comadre que le arranque uno, dos, tres y hasta cuatro orgasmos haciéndole tembrar las piernas y obteniendo como recompensa el fruto de sus entrañas, ese líquido viscoso, cálido y dulce que me regaló producto de mi buen trabajo con la lengua.
Así mismo como la tenía me levanté y puse la cabeza de mi miembro en toda la entrada de su vagina y sentí como se le erizaba la piel a ella quien levantó más la pompa invitandome a entrar en ella volteando la cara toda mojada de los orgasmos que le había arrancado a Nena y guiñandome un ojo.
Yo se lo empecé a meter poco a poco hasta tenerlo todo adentro y así me quedé por un instante sintiendo el calor que emanaba y cubría todo mi pene, se sentía apretado (a pesar de tener 3 hermosas niñas mi comadre).
Después que me deleite con aquella sensación que me producía la pequeña vagina de la comadre empecé un vaivén lento provocando pequeños gemidos de mi comadre, cosa que me excita, y entre más gemía ella más aumentaba yo las embestidas, no tardó mucho en emitir un grito de placer y caer rendida encima de Nena que solo se deleitaba con las caras y sonidos de placer que hacía la comadre.
Yo se lo saqué e invite a que se acomodarán las dos bien en la cama una encima de la otra frente a frente y bien abiertas, me pare y detalle aquellos dos monumentos de vaginas, una con grandes labios toda inchada y otra pequeña, ambas a mi disposición.
Sin más que todo el morbo que me daba ver a mi esposa y a mi comadre en la misma cama, desnudas y besándose, me monte y empecé a penetrarlas, dos a tres bombeadas a una e igualmente a la otra...
Me sentía en el paraíso...
Ya Nena le ardía la vagina de tanta acción y se levantó y dirigió al baño cuando escuché la regadera.
Mientras tanto empecé a besar a la comadre quien no dudó ni espero nada para montarse y darse unos buenos sentones hasta venirse de nuevo, yo la agarre y voltie y quedamos de misionero y empecé a darle sin piedad, le agarre del cuello con una mano y con la otra le subí una pierna a mi hombro, la ahorcaba pasito y luego más fuerte hasta verla roja no la soltaba, agarre la otra pierna de ella hacía mi hombro y le coloque debajo de su espalda baja la almohada para levantarla más y así tener a mi entera disposición toda su cavidad vaginal.
Entrando así le empecé a dar lo más duro que podía y no se hizo esperar un mega orgasmo que me empapó todo mi vientre y piernas, le escurría por sus nalgas hasta llegar a mojar la almohada. Le segui dando hasta que sentí como las paredes de su vagina me apretaban el pene y así llegamos los dos al éxtasis, luego me acosté todo cansado encima de ella y nos besamos tiernamente al voltear y acostarme en la cama vi a Nena sentada en una silla con las piernas posadas en la orilla de la cama dándose dedo (de verdad se me había olvidado por completo ella) que al ver ya libre a su comadre no dudó en abalanzarse y chuparle todos los fluidos que emanaban de su preciada cuevita...
Nena le limpio bien su vagina y luego se acostó a mi lado quedando yo en medio de las dos.
Nos quedamos rendidos, no sé cuánto tiempo había pasado cuando me desperté con sed, me levanté con cuidado fui a la cocina a saciar mi sed, al regresar no estaba mi comadre, me asomé al baño y la ví, el simple hecho de verla desnuda hizo que mi pene se pusiera a mil...
Me fui y la agarre y la puse contra la pared, le abrí sus nalgas y desde esa posición la penetre, le jale sus cabellos con una mano y con la otra la agarre de la cara y la empecé a besar mientras la penetraba sin compasión, se vino, tuvo un orgasmo que hizo que sus jugos bajaran por sus piernas que temblaban, yo seguía dándole hasta que ella me suplico que ya le dolía mucho, yo seguía dándole y noté como se le bajaron las lágrimas mientras gemía, volvió a tener otro orgasmo, con su voz entre cortada me dijo que la estaba lastimando, le tape la boca con mi mano y seguí dándole pero esta vez no tan fuerte, ella empezó a lamerme la mano, se la quite e introduje dos dedos en su vagina sin sacar mi pene, veía su gestos de dolor mezclados con placer, saque mis dedos y se los di a probar, ella se los chupo con desesperó y volví a meterle los dedos y empecé a moverlos dentro de ella junto a mi pene, estuvimos así no más de dos minutos y sentía como emanaba sus fluidos tibios hasta que acabe dentro de ella, me separé y ella cayó hincada en el piso, sus piernas no daban para más, la alce con mis brazos y la lleve hasta la cama donde dormía placenteramente Nena y ahí la acosté y yo al lado de ella quien me abrazó y dormimos profundamente.
Me desperté a eso de las 9am solo en la cama, me pare y salí a la cocina y solo vi a Nena haciendo el desayuno, me acerque la bese desde atrás y le pregunté por la comadre a lo que me dice que fue a hacer comida y que ahora venía a hablar con nosotros porque ella quería ser mi novia...
Desde ese día María Esther paso a ser mi novia y mi comadre... Casi todas las semanas hacemos tríos o Nena nos canta la zona mientras ella y yo nos consentimos en nuestra habitación o en la cama que ella comparte con su esposo... A veces cuando está cocinando llegó de sorpresa y le alzó la falda o le hago el short a un lado y la penetró hasta venirnos los dos...