Trío con dos chicas. R. interactivo (cap 10)

OPORTO, JUEVES 18:00

¿Qué hacemos en la tierra de Aura? Pues sí, lo has adivinado, nos casamos pasado mañana. Hemos llegado esta mañana con un coche de alquiler, Aura, mis dos compañeros de piso y yo. Hemos cojido dos habitaciones dobles en un hotelito en la zona de Maia, ya que aunque Aura podría quedarse en casa de su familia se ha tomado muy en serio lo de no separarse de mí.

Me he traído el portátil para adelantar algo de trabajo y tener luego más tiempo libre. Así que hoy me he quedado todo el día trabajando en el hotel mientras Aura se ha llevado a los chicos para enseñarles la ciudad.

Acaban de regresar.

-Bueno, pues te la devolvemos sana y salva- me dice Rodrigo mientras me da una palmada en el hombro - Ahora salir vosotros que tienes que despejarte un poco.

Ellos se van a cenar por su lado. Me quedo con Aura en mi dormitorio. Después de todo el día sin verla tengo ganas de ella. Ya se ha vestido para salir de fiesta y está impresionante. Lleva una camiseta escotada, una minifalda holgada y una chaqueta blanca con un bolso de cuero a juego.

La cojo suavemente de los brazos y la tumbo en la cama. Me tiendo sobre ella que me mira radiante mientras me baja la cremallera y me saca el cipote. Yo la meto las manos bajo la falda y le quito las bragas. Compruebo la humedad de su rajita que no me defrauda. Sin prisa y sin pausa, la penetro y empezamos la noche haciendo al amor.

Luego salimos hacia un centro comercial cercano. No se si se ha dado cuenta de que ha salido sin bragas, que han quedado sobre la cama. Me encanta.

En el centro comercial comemos una pizza y luego nos hacemos regalos íntimos en una tienda, seleccionamos un bonito conjunto de lencería de color verde esmeralda para Aura y un tanga rojo para mí.

-¿Por qué no te lo pruebas? - Le digo con un guiño.

-Con la ropa íntima no se puede hacer eso, creo.

-Vamos a los probadores a ver.

Entro con ella en un probador pero ni me molesto en sacar el conjunto de la bolsa. Pongo a Aura contra el espejo y le meto la mano bajo la falda.

-Estás loco - me dice riendose - y yo sin bragas por la vida, que vergüenza.

-Mira cómo me tienes - me saco la polla para demostrarselo - hoy tengo un hambre voraz.

-Mira que nos van a echar...mmmm…… sigue...es una locura pero me encanta.

Me vierto en su interior. a falta de bragas que lo contengan, el esperma le chorrea por las piernas abajo. A la salida del probador la dependienta nos mira con desconfianza. Es imposible que no se haya dado cuenta, hemos entrado sin nada que probar y Aura huele a lefa de lejos.

Luego cojemos un taxi y vamos a un local de música latina junto a la playa en Vila do Conde. A estas hora aún no está muy lleno pero ya se va animando. Varias parejas se acomodan en las mesas de la la terraza con vistas al mar mientras en la pista se agolpan bellas mujeres muchas de ellas de apariencia brasileña y de otros países del trópico y en la barra se acodan tipos solitarios esperando su oportunidad.

Nos acercamos a la barra y encargamos dos bebidas. Aura se va al baño. Desde aquí puedo ver la cola y preveer que tiene para rato por lo que me acomodo junto a la pista donde puedo comprobar que a este local acude lo mejorcito de la zona. Parece que tuvieran prohibida la entrada a las feas.

Una hermosa mulata me mira y se acerca bailando al son de una sertaneja. Es casi tan alta como yo y tiene unas curvas de infarto como atestiguan todas las miradas que se clavan en ella como saetas. La situación es un poco violenta con Aura a menos de diez metros pero creo que no va a pasar nada grave. Maliciosamente pienso que hasta puede ser interesante.

Cruzo con ella una mirada firme a los ojos y se la sostengo mientras me acerco a ella.

-Hola, me llamo Diego ¿Hablas español?

-Un poco. Me llamo Izabel ¿bailas?

Aunque no se me dan bien estos ritmos de acordeón hago lo que puedo mientras una jovial Izabel me va corrigiendo y llevando el paso.

En eso estamos cuando regresa Aura, pone la cara de sorpresa que yo ya esperaba y con el gesto torcido se acerca a nosotros con determinación y espeta a Izabel:

-Desculpe, é meu namorado.

-Não acredito - responde Izabel dándole la espalda mientras trata de alejarme de Aura.

Jamás la había visto como ahora. Su mirada inyectada en sangre refleja una ira que parece haber desatado todas las furias del infierno. Llega a la carrera y le da un empujón a Izabel que casi la tira al suelo.

-¡¡¡Cadela safada!!!

-¡Ehhh! Você ficou louca? - grita Izabel mientras se abalanza sobre Aura y la agarra del pelo.

Me cuesta separarlas, pero a la fuerza lo consigo.

-Estaros quietas las dos. Solo es un baile, no pasa nada.

Izabel vuelve a cojerme de los brazos y sigue bailando mientras mira a Aura de reojo. Aura no puede creer lo que está viendo. Creo que le faltan 10 segundos para empezar a llorar. Cuento mentalmente hasta cinco y entonces doy el golpe de efecto. Me separo de mi acompañante

-Lo siento Izabel, estás muy buena y aquí hay docenas de tíos esperando para decirte algo………

Cojo a Aura de los hombros

-...............pero yo estoy muy enamorado de la única mujer que da sentido a mi vida.

La beso con ardor mientras noto como poco a poco desaparece la tensión de sus músculos y acabo arrancandole una débil sonrisa.

-Eres un dulce cabronazo, pero como alguna se te vuelva a acercar, la saco los ojos.

Nos vamos a una mesa en la terraza para tomarnos nuestra copa relajadamente. Es un lugar agradable, separado de la playa apenas por un seto. Corre una brisa fresca pero que no nos incomoda.

Suena mi móvil. Es Rodrigo. Hablamos apenas un minuto.

-¿Qué quería? - pregunta Aura.

-Me ha hecho dos proposiciones, te cuento porque no se si te van a gustar.

-No me asustes.

-La primera, junto con Luis nos quieren regalar el viaje de novios. No se, me parece un poco caro para ser un regalo aunque sean los dos.

-Aceptalo, si te lo regalan es porque ellos quieren y pueden, no les hagas el feo. ¿adonde vamos a ir?

-A una isla del Caribe colombiano. Una semana.

-Suena bien. Dales las gracias de mi parte. ¿Y la segunda propuesta?

Carraspeo antes de decirselo.

-Pues que quieren llevarme mañana de despedida de soltero. Imaginate.

-¿Y cual es el problema?

-Aura, en esas despedidas puede pasar de todo. ¿Y si quieren llevarme de putas?

-Pues te vas de putas, lo único que te pido es que te pongas un condón.

-¿Estás hablando en serio?

-Mi vida, el sexo de pago no tiene nada de sentimental, es sexo puro y eso no nos va a afectar para nada. Además son tus amigos, quiero que no les dejes de lado solo porque vayas a casarte. No solo mañana, llamales de vez en cuando. Y mañana dale una alegría a ese pajarito - añade agarrandome el paquete que encuentra otra vez endurecido,

-Vaya, tanto hablar de sexo y mira - me dice con un gesto de asombro.

Estamos en un rincón relativamente discreto, separados de la mesa de al lado por un macetón con un arbusto frondoso aunque no totalmente ocultos de miradas de la gente que pasa. Sin pensarlo mucho Aura se agacha sobre mis rodillas como si estuviera cansada, me saca la polla y se la introduce en la boca succionando lentamente tratando de no hacer movimientos bruscos que puedan llamar la atención.

Afortunadamente no necesita mucho tiempo y rapidamente le lleno la boquita con mi espeso fluído. Lo saborea y toma un trago para pasarlo.

-Aura, ¿te he dicho en los últimos cinco minutos cuanto te quiero?

-Pues no, me tienes abandonadita, jajaja.

Salimos del local y damos un paseo por la playa. El mar está sereno y la luna casi llena se refleja sobre la bruma que crean las olas al romper. Caminando llegamos a un extremo de la playa, rincón rodeado de rocas y alejado del alumbrado público. Y el vernos en esa ocasión enciende nuevamente nuestros instintos. Nos desnudamos por completo y nos tumbamos en la arena sin miedo de ensuciarnos. El calor de nuestros cuerpos contrarresta la frialdad de la arena mojada. Retozamos en ese ambiente percibiendo el olor salobre de las algas arrastradas por la marea, en la penumbra solo rota por el reflejo plateado de la luna.

Nuevamente nuestros sexos se unen y renace la chispa que nunca se apaga, nuevamente hacemos el amor con el deseo de que nunca termine.

Después nos bañamos en el agua fría para limpiarnos los restos de nuestros fluídos, de la arena y hasta alguna concha que se nos ha incrustado. Con la ropa en la mano paseamos el camino de vuelta mientras dejamos que la brisa nocturna seque nuestra piel, vistiendonos antes de llegar a las zonas más concurridas.

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VIERNES 20:00

Hoy por la mañana he ido a la sucursal local de mi gimnasio para entrenar un poco y hacer una clase de pilates y me he llevado a Aura. Nos hemos complementado muy bien, ella me traducía las indicaciones del monitor y yo le corregía la posición de la espalda.

Luego hemos comido en casa de su familia con una larga sobremesa y a media tarde hemos regresado al hotel.

Ahora nos vamos de despedida.

Empezamos tomando unos vinos en la ribera de Gaia y luego me llevan a un local de strippers. Sentados en una mesa en la oscuridad apenas quebrada por las luces de neón contemplamos el escenario donde diversas chicas semidesnudas bailan ante nosotros.

Después de un par de copas, Luis me dice que han contratado una sesión especial para mí con una stripper dominicana. Me suben al escenario, me sientan en una silla y veo acercarse a una hermosa mulata cubierta apenas por un tanga y un sujetador rosa. Su cuerpo exhuberante rezuma sensualidad por cada poro de su piel. Se pone ante mí y comienza su baile, primero de frente moviendo las tetas frente a mi cara a escasos centímetros, luego se da la vuelta y meneando voluptuosamente el culo acaba por sentarse en mis rodillas.

Ni que decir tiene que mi polla está como una estaca. Entonces se da la vuelta sentada en mis rodillas y mirandome de frente, se quita el sujetador. Dos maravillosas tetas con marcadas y negras areolas saltan ante mi vista. Me siento la polla palpitar. Ella se levanta, se da la vuelta y me dice:

-Tirame del tanga hacia abajo.

No creí que llegaramos al desnudo integral pero hago lo que me dice, la despojo del tanga, contemplo su culo macizo y delicioso y no puedo evitar tocarselo.

-¡Eh! - me advierte - solo cuando yo te lo diga.

Se da la vuelta y descubro que realmente no está del todo desnuda, lleva un cubre-vaginas, la minúscula prenda que suelen llevar las bailarinas del carnaval de Río en el sambódromo para justificar que su desnudez no llega al 100%. Algo que apenas le tapa la rajita dejando las depiladas ingles a la vista.

Se sienta de nuevo y se frota contra mí.

-Ahora cariño, puedes hacer lo que quieras, tus amigos te han pagado barra libre.

La masajeo las tetas, el culo y me atrevo a llegar más lejos, mi dedo bucea tras esa miniprenda que le cubre y se introduce en ella. No me atrevo a mucho más, estamos en un escenario ante decenas de mirones salidos.

-Diego, no te cortes - escucho a mis amigos de lejos.

Recuerdo que aquí no me conoce nadie y si hago algo inapropiado será la propia chica la que me lo diga, de lo contrario, adelante con los faroles.

Me saco la polla dejandola a su vista. Ella la contempla un instante.

-Buen instrumento cariño. ¿Quieres meterlo en mi chuchita?

-No se si puedo - respondo.

-Normalmente no pero eres un tipo chévere y voy a hacer una excepción.

Saco del bolsillo un condón y me lo coloco rápidamente. Levanto un poco su cobertor y le introduzco mi virilidad arrancandole un pequeño susurro de placer. Yo me mantengo quieto pero ella comienza a moverse de adelante a detrás, mientras termina de introducirse la polla. Sus sabios movimientos de caderas me llevan al éxtasis

-Ese es mi chico - escucho de lejos a Rodrigo jaleado por varias voces en portugués.

Finalmente estallo en una gran corrida que queda atrapada en el condón. La chica me da un beso, se levanta y se retira lo que me deja en una posición algo ridícula en medio del escenario, con la polla flácida de la que cuelga un condón lleno hasta los topes y rodeado de un coro de carcajadas ante mi grotesca visión.

-Anda, bájate ya. Si estos tíos quieren  reírse que vayan al circo- me dicen mis amigos mientras me ayudan a recomponerme

De regreso al hotel se lo cuento a Aura. Ella me besa, me desnuda y me pide los detalles. Recreamos cada paso en una deliciosa reconstrucción de los hechos y descubro que con ella es mucho más placentero.

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SABADO 12:00

En el pórtico de la iglesia se agolpa una gran cantidad de gente. La mayoría me son desconocidos ya que por mi parte apenas están mis amigos y un puñado de familiares lejanos puesto que apenas tengo familia.

-Bueno campeón, llegó la hora - me dice Rodrigo - ¿Nervioso?

-No lo parece - apostilla Luis - Pues como se suele decir en estos casos: Game Over.

Le río el chiste y saludo a mis primos. Un poco apartada encuentro a Raquel. Lleva un bonito traje morado con una falda que resalta cada curva de ese culazo. No puedo evitar mirarlo y creo que ella se ha dado cuenta aunque no lo dice. Tengo que empezar va aprender a evitar las tentaciones, por Dios, dentro de una hora seré un hombre felizmente casado.

-Hola Diego. Me alegro de que vayáis a hacerlo.

-Y yo de que hayas venido.

-No podía faltar, seguís siendo mis dos personas más queridas. Lo malo es que no voy a poder quedarme mucho. Tengo que coger un vuelo esta noche.

-¿Te vas de viaje?

-Inesperadamente. Resulta que he cumplido cinco años en la empresa y mis compañeros decidieron hacerme un regalo. Pensé que sería un cuadro o un reloj o algo así. Y resulta que ha sido un crucero de 14 días que sale de Miami.

-Menudo regalazo.

-Ya te digo. Mira, ahí llega la novia.

Un coche clásico adornado con flores se detiene junto a la iglesia y de él desciende Aura con un vestido blanco de novia. Está guapísima. No puedo evitar pensar que el blanco es el color de la pureza y recordar la intensa vida sexual de Aura en las últimas semanas, lo que me hace sonreír. Es más, lo que más me apetecería hacer ahora es pasarme el día follando con ella dentro de ese cochazo.

En fin, el destino nos ha traído hasta aquí, esto supone un punto de inflexión en nuestras vidas y desde ahora tendremos que ser más serios. O no.

Recibo a Aura de mano de su padre y nos adentramos en la iglesia en nuestra nueva vida de pareja. Juntos para siempre.

Realmente estoy satisfecho, Aura me llena completamente y ha superado todas mis expectativas. Sé que voy a ser plenamente feliz con ella. Pero siempre me quedará la duda de si realmente esta es la única vida que hubiera valido la pena vivir.

Supongo que esto es lo que tiene la existencia humana, para conseguir lo que quieres tienes que renunciar a algo. Pero ¿Y si no fuera así? ¿Y si pudiésemos tenerlo todo?

¿FIN?

Pues sí, este podría ser el final pero aún tengo tema para un par de capítulos. Si te ha gustado este final, déjalo aquí. De lo contrario te espero en el capítulo 11