Trío 2
Por fin paso una noche entera con ambas y siente dos pollas dentro de ellas, la mía en sus clitos y la del arne en sus coñitos.
Después de ese día quería poder disfrutar de ellas mas tiempo y poder follarmela a las dos. Nos creamos un grupo en el Telegram, aquí se puede poner contraseñas y no verse nada, estábamos a diario contándonos lo bien que lo habíamos pasado y que lo teníamos que repetir. No podía dar crédito, ellas querían repetir. Yo solo pedía que no tardase mucho y que pudiese hacerlo ese día.
Al cabo de una semana, María Dolores nos invitaba a cenar a su casa, su marido se iba a ver a la familia. Yo ese viernes no iba a ver a mi pareja, trabajaba de noche. Ya solo quedaba Loli, a ver como lo hacía para venir, sino iría solo y me la montaría con María Dolores. Quedamos el viernes a las 9,3. Yo ese día me prepare y me acicale bien, olía a gloria, jajajajajjaja. Mande un mensaje al grupo y decía:
“Abre que voy para arriba”
Subí y me encontré la puerta abierta y la luz apagada. Entre y cerré la puerta y hay estaba ella con un vestido transparente donde se podían ver sus preciosos pechos y una tanguita negra de encaje. Me fui para ella y la besé con pasión sacándole un suspiro, mientras le acariciaba los pechos. Estando besándonos, oímos un mensaje en nuestros móviles, al mirar era Loli, que decía que le abriésemos. Al abrir, al momento se oyó como se abría su puerta y se oía decir: “Llegaré tarde”
Al entrar venia con un vestido mono, pero traía una bolsa. Al cerrar la puerta y besarnos, se quito el vestido y se puso un vestido idéntico al de María Dolores, tampoco llevaba sujetador y su tanguita era blanco con encaje. Joder mi polla se puso dura.
La cena fue rápida, queríamos irnos a la cama, pero antes ellas me dijeron:
“Siéntate en el sofá y disfruta del espectáculo”
Las dos se pusieron a bailar para mí sensualmente, se acariciaban y se miraban a los ojos, poco a poco se fueron acercando hasta fundirse en un tierno beso, sus lenguas seguían dentro, solo se mordían los labios, hasta que Loli saco su lengua y se lanzo por la de María Dolores. Comenzaron a acariciarse los pechos a darse mordiscos por el cuello y por los pezones que querían estallar. Yo comencé a quitarme la correa y las dos me dijeron: “Noooo, estate quieto, disfruta viéndonos”
Ellas si comenzaron a desnudarse, bueno, a quitarse el vestido, con que sensualidad lo hicieron. Se las veía salidas y deseosas de sexo. Loli comenzó a acariciar el cuerpo desnudo de María Dolores, está se dejaba y gemía de placer mientras me miraba. Loli, mordía sus pezones y mama de los pechos turgentes de ella. María dolores me miraba y se metía en dedo en la boca insinuante. Loli bajo su mano hasta la tanguita de ella y al sentir la mano, suspiro y se corrió, estaba loca y super caliente.
Ahora fue el turno de Loli, María Dolores fue buscando los pechitos tiernos de ella, y mamaba como sino hubiese un mañana, mientras mordía los pezones y la besaba con ansias. María Dolores fue mas atrevida y bajo hasta poner su lengua a la altura del tanguita de Loli, al pasarla por él, suspiro y chillo de placer.
Se pusieron de pie, comenzaron a besarse y a juntar sus pechos rozándose los pezones, me miraron las dos y me dijeron: “Nos vamos a la cama”
No me lo pensé dos veces, salte como un resorte y me fui con ellas hacia la cama. Me dijeron que ellas me desnudarían. Loli desde mi espalda comenzó a desabrocharme la camisa mientras me mordía el cuello, María Dolores me desabrochaba los pantalones, sobándome la polla por fuera. Me dejaron solo con los boxes y con mi polla dura como el mármol. Me tumbaron boca abajo y comenzaron a besarme y a recorrer mi cuerpo con sus bocas. Cuando llegaron a los boxes, con sus dientes lo bajaron dejando libre mi mástil. Se miraron y sonriendo dijeron: “Aquí hay uno que tiene ganas de juerga jejejejeje”
Loli paso su lengua por mi polla, mientras María Dolores lo hacía por mis huevos, estaba en la gloria. De vez en cuando sus lenguas coincidían en mi glande y se besaban con él, estaban hambrientas de sexo. Estaba a punto de reventar, y dije: “Ahora a quien le toca disfrutar tumbada”
“Yo” dijo Loli. Ocupo mi lugar y empecé a acariciar sus pechos con mis manos mientras María Dolores la besaba. Me fui para un pecho para poder mamarlo con gusto y ella se fue para el otro, en el canalillo nos encontrábamos y nos besábamos. A veces subíamos hasta los labios de Loli y nos besábamos los tres. Me fui para su ombligo pasándole la lengua y haciendo que gimiese de placer, mientras María Dolores mordisqueaba su tanguita por fuera, notando lo húmeda que estaba. Me fui para ayudarla, le fuimos bajando poco a poco el tanguita, dejando al descubierto un perfecto coñito depilado, brillante y deseoso de ser comido. Mire a María Dolores, sonreímos y nos lanzamos como lobos a comérnoslo. Loli chillo, se tuvo que tapar la boca con la almohada, no paraba de chillar y de gemir, se corría como me gustaba a mí, soltando fluidos que disfrutábamos los dos y besándonos para mezclarlos. Deje a María dolores saboreando y me fui para besarla y que ella probase sus propios fluidos, quería más, solo me dijo: “Folladme los dos”
María Dolores al oírlo sonrió y le dijo: “Eso vamos a hacer” se bajo de la cama y cogió algo del armario. Traía un arne con una polla, joder con mi vecina. Me miro y me dijo: “Lubrícale el culo que te la vas a follar por ahí, yo le follare el coñito” Loli al oír eso, la miro y dijo: “Me entrara, no he probado nunca una doble penetración”
“Yo tampoco” dijo María Dolores. Me miro y me dijo, si este tiene fuerza lo probaremos las dos.
Yo comencé a lubricar con mi saliva y lengua el culito de Loli que gemía como una loca. María Dolores le comía el coño y le dijo: “Móntate encima mía”. Ella se tumbo y Loli se fue dejando caer poco a poco introduciéndose la polla en su coñito, mientras María Dolores le comía los pechos. Yo fui poco a poco metiendo mi polla en el culo de Loli, me miro y con cara de lujuria me dijo: “Rómpeme el culo, no tengas piedad”.
No me lo pensé y se la metí del tirón, el chillido que pego tuvo que oírlo el marido y todo el vecindario, fue un chillido de dolor, pero a la vez de placer. Se movía cual diosa era. Yo viendo esta situación no iba a aguantar mucho, y se los dije: “Aguanta un poco que estamos a punto de corrernos nosotros también”. Al oír como ellas chillaban de placer no aguante más y comencé a llenar ese culito que tanto me gustaba con mi semen caliente, que comenzó a salir por los laterales. Caí rendido en la cama, viendo como ellas se besaban y se comían los pechos mutuamente. Con las pocas fuerzas que tenia me fui al baño a lavar mi polla. Cuando llegué las encontré a las dos abrazadas y dormidas. Se acurruque junto a ellas y me dormí también. Esperaba que la noche no hubiese terminado. Y no termino, porque me despertó una boca que chupaba mi polla y la intentaba poner dura. Era Loli, quería mas guerra. Ahora era quien tenia puesto el arne, mientras María Dolores le chupaba la polla de plástico. Aquella visión hizo que mi amigo se recuperase y dijese ella: “Prepárate para sentir dos pollas dentro de ti”.
Esta vez se tumbo boca arriba Loli y María Dolores fue bajando y metiéndosela poco a poco, yo mientras jugaba con su culito lubricándolo y sacándole gemidos. Loli mamaba de los pechos de ella, mientras se movía sintiendo la polla dentro de ella, yo sin pensármelo puse la mía en su culito y cuando se movía hacia atrás empujé con fuerza metiéndola de golpe, casi se desmaya al sentirla dentro. Se corrió como nunca, solo pudo decir: “Diossssssssssssss, no paréis”
Yo estaba seguro que tardaría mas en correrme, no hacia ni media hora que lo había hecho, pero movía el culo y las veía besarse y gemir a las dos que cuando ellas se estaban corriendo por enésima vez, solté un chorreón de semen en su culito que la hizo estremecerse. Caí rendido y esta vez no tuve fuerzas para ir a lavarme, Loli se levanto y me la lavo con una manopla y toalla y después la rechupeteo, mientras se quitaba el arne y le daba a comer su coñito a María Dolores. Mientras caía en los sueños de Morfeo, vi como ellas hacían un sesenta y nuevo y como ambas gemían y llegaban al orgasmo al unisonó. No oí ni ví más. Al cabo de unas horas me desperté y me encontré a Loli durmiendo a mi vera desnuda, se oía la ducha. Me acerqué y vi a María Dolores en ella, no me lo pensé y me metí con ella. La abrazaba por detrás mientras mis manos acariciaban sus pechos y le marida el cuello. Ella gemía y culeaba hacia atrás. Mi polla comenzó a despertarse y al sentirlo me dijo: “Tú guerrero quiere mas guerra”. Se volvió, me miro y comenzó a bajar hasta metérselo en la boca mientras me miraba. Vaya mamada que me estaba haciendo, yo hice lo mismo con ella y le comí con frenesí su coñito arrancándole varios orgasmos. Me paro y me dijo: “Métemela”
No le hice esperar, me puse de pie y se la ensarté en su coñito, que estaba húmedo y caliente por dentro. Así nos pillo Loli que se había levantado y nos dijo: “Joder y no avisáis”
“Ven”, le dije
“Ya es tarde y me tengo que ir”
“¿Te vas a ir oliendo a sexo?”
“Es verdad, ustedes seguir que me ducho y me voy”
Yo seguía con el mete saca a María dolores que no hacia nada mas que correrse, a ver entrar a Loli la beso, pero esta tenia prisas se ducho y nos besó y se fue.
Seguí un rato bombeando hasta que no pude mas y llené ese húmedo coñito con mi semen. Ella bajo y me limpio la polla con su boca, besándome a continuación. Nos secamos y nos fuimos a la cama, hoy no dormiría ni ella ni yo solos. Pero el sueño nos venció y nos quedamos profundamente dormidos.
Lo que ocurrió al despertarnos lo contaré en otro relato y espero no tardar tanto. Abrazos a mis admiradores y besos dulces y tiernos a mis admiradoras jajajajajajaja.