Tres tristes trios

Como muchos hombres una de mis mayores fantasias era mantener un trio, pero a diferencia de otros, mi mente soñaba con mi mujer, yo y otro hombre montandonoslo.

Como muchos hombres una de mis mayores fantasias

era mantener un trio, pero a

diferencia de otros, mi mente soñaba con mi

mujer, yo y otro hombre

montandonoslo.

Alguna vez con teresa lo habia hablado pero mas

en broma que en serio, cuando

tonteabamos sobre nuestras fantasias. Quiza

despues de 15 años de relacion ya era

el momento de plantearlo en serio, asi que una

noche despues de hacer el amor, se

lo solte, sin mas, de repente.

  • Me encantaria hacer un trio

  • ¿A que viene eso?

  • No se, me encantaria hacer un trio.

  • Pues a mi no. No me apetece que te folles a

otra delante de mi.

  • Vale, solo era algo que tengo ahi pendiente

  • No digas tonterias, me dijo ella y me comenzo

a lamer la polla buscando un

segundo asalto.

Echamos un segundo polvo, que para mis cuarenta

y tantos bien llevados no esta

nada mal. Y volvi a insitir. Esta vez inclui un

elemento desestabilizante

  • ¿Y si no follaramos con otros?¿Te atreverias

con el trio?

  • Dale con el trio. Que NO. No quiero verte con

otra.

  • Pero yo si quiero verte con otro

  • ¿Quieres que me lo monte con otro?

  • ¿Por que no? Pero que no te folle. Puede ser

hasta divertido

  • Y que le dices al tio, puedes hacer lo que

quieras menos follartela, llegado el

momento y bien cachondo acabaria queriendo

follar.

  • Yo me encargo de eso. Venga

Ella habia empezado a ceder, yo lo tenia

planeado en mi mente.

  • ¿Y quien seria? Me tiene que gustar

  • Claro. Pero tiene que ser alguien que no

vayamos a ver mas.

  • Y como lo consigues

  • Por internet.

Yo ya llevaba algun tiempo en algunos chats

preparando el tema y habia un par de

tipos que estaban dispuestos. Ambos estaban en

ciudades lejos de la nuestras

ciudades, ya habia comentado con ellos mi

fantasia y estaban dispuestos a

participar, como premisa les habia dicho que

solo podrian meterle mano a mi mujer,

le pase fotos desnuda de ella y aceptaron al ver

lo bien que se lo podrian pasar con

las hermosas tetas que calzaba mi chica. Solo me

faltaba que me enviaran una foto,

uno de ellos se nego, pero el otro fue mas

valiente y si lo hizo, una foto normal y

otra de su polla que me pidio mi mujer. Ella al

ver ambas acepto.

Todo habia sido como queria. Me apetecia follar

a mi mujer mientras otro la sobaba

y le lamia los melonazos. Estaba como loco por

cumplir mi deseo. Intentando

mantener al maximo el anonimato quedamos con el

individuo en una ciudad a mitad

de camino entre ambas. Reserve en un bonito

hotel y solo faltaba esperar el dia.

Yo estaba inquieto, deseoso, expectante con la

libido subida por las nubes, sin

embargo mi mujer estaba muy tranquila,

sonriente, parecia dominar la situacion.

  • Espero que me guste, dijo en el momento de

entrar en la cafeteria donde habiamos

quedado

Se habia vestido con una blusa de  escote

desmesurado que enseñaba el canalillo y

marcaba las boobies en exceso, unas sandalias

con plataforma la hacían alta y  muy

atractiva para tener ya los cuarenta. Un pedazo

de mujer

Reconocimos al jorge porque llevaba un polo

color rojo, tal y como habíamos

quedado los tres vasodilatador de ese color.

Portaba en sus manos un enorme ramo

de rosas rojas que al presentarse le entrego a

ella.

Era un chico normal, más bajo que yo,  con

barriga de cuarentón, gafas  y poco

pelo. No era resulton pero tenia los rasgos

suaves, nariz pequeña y ojos hundidos,

cara triste y morena.

La primera expresion de mi mujer fue de

decepcion al verlo, pero sonrio cuando vio

las flores, estaba  expectante.

Se presento y nos saludamos, la miro de arriba

abajo, el canalillo, los muslos al aire

y antes de sentarse dijo

  • Estas de maravilla. Mejor que en las fotos.

Menuda MILF me voy a trajinar.

Eso no le gusto demasiado a mi chica. Tomamos

una copa y charlamos. Ella quería

saber porque le apetecía hacerlo y si estaba

dispuesto a no follar.  De pronto corto la

conversacion y sin venir al caso dijo

  • Una paja si me harás ¿no?

  • Pues,...

  • Mujer, mientras este tocandotelas me la vas

meneando. Me gustaria mucho. Follar

no te follo, pero una mamada tambien caera. ¿No?

Hubo un silencio de unos segundos, esto se nos

iba de las manos. Yo no sabia que

decir, pense que seria un hombre mas calmado. Pero

de principio venia motivado. Ha

estas cosas hay que venir con una buena paja

hecha ya en casa y sin soltar libido por

las orejas.

  • Según se presente.

  • Lo que mas me gustaria es que me hicieras una

cubana. Nunca me han hecho una

buena cubana y me lo imagino viendo esas tetazas

tan enormes que tienes, la haras

de maravilla. Se me pone dura de solo pensarlo.

  • Pues mira, ni cubana , ni paja, ni nada, no me

gustas y no voy a dejarme sobar

por un tio que no me gusta

Cuando se pone asi da miedo.

  • Vale tranquila. Yo solo estoy aqui para

haceros un favor, a mi que me cuentas. Fue

este quien me dijo que viniera a tocartelas.

  • Pues nada, no vas a tocarlas hoy.

  • Vale, vale, sin problema, pero sin que os

ofenda que esta situacion no es normal,

que le digan a uno que puede tocar unas tetas

asi porque si, y encima sin poder

follar.

  • Tu eres idiota

  • Tranquilos, no montemos en espectaculo. Te ha

dicho que no quiere, te lo adverti

por chat, si no le gustabas, no habria nada

  • De acuerdo, pero si he venido hasta aqui y me

he gastado el dinero era para algo,

no para irme con las manos vacias por que a una

tetona no le guste.

  • Mira, aqui con disimulo, se las tocas por

encima y te largas.

Teresa se inclinó dejando los pechos por debajo

de la mesa, el hombre alargo las

manos y las sobo por encima apretándolas con las

manos abiertas.

  • coño, vaya tetas.

  • Ya esta. Venga

  • Que sepan y no se molesten que tu eres una

puta y este un cornudo consentido.

Acabo de decir esto mientras se levanto y se

largo sin despedirse. Yo me quede

parado, sin una reaccion clara, apure mi copa  y

sonreí.

  • vaya imbéciles te buscas.

  • La verdad es que si. Te aseguro que hasta

ahora era un tipo muy simpatico.

  • Ademas no me gustaba, vaya enano. A mi me

gusta ese.

Señalo a un chico con traje y corbata de una

mesa cercana a la nuestra. No era muy

alto pero tenia una buena pinta, cuerto delgado

y fibroso de deportista, tendria por

los 30 y algunos.

  • A ese si le dejaba yo que me metiera mano.

Me levante la cogi de la mano y nos acercamos a

la mesa donde estaba el, justo en

el momento que una chica morena muy guapa se le

acerco, el nos saludo a nosotros

y despues le dio dos besos en la mejilla a ella.

  • ¿Pasas a recoger a los niños a las siete?

  • Si, yo pasare

  • Te dejo aquí la merienda y la mochila con la

ropa

Nosotros estabamos como pasmarotes de pie frente

a ellos escuchando la

conversación, que situación tan ridícula. No

sabia si retroceder a nuestro sitio, si

largarnos o si esperar. La mujer nos miro y nos

saludo.

  • Hola. Me voy que tengo prisa. Y salio

corriendo a toda velocidad sobre sus tacones

  • ¿Que tal?

  • Hola

Momento de incertidumbre. Con tremendo pibon

estaba casado el tipo. Mire a Teresa y

le dije de largarnos de ahí

  • Siempre preparando cosas para los niños.

  • Si, siempre me toca recogerlos a mi los

viernes. ¿Tienen hijos ustedes?

  • Si, tres. Vaya lio.

  • Ya lo creo. Yo no se si tendre. Mi hermana

siempre va acelerada. Ya la habrán

visto.

Eso cambiaba las cosas, el tipo bueno que le

gustaba a teresa no estaba casado. Asi

que nos presentamos. Tenia que buscar una excusa

rapida para entablar

conversacion pero surgio sola

  • los he oido discutir con ese hombre. ¿Algun

problema? He visto como los insultaba

  • No, nada importante

  • Si hay que ponerle una querella, soy abogado y

extendió su mano dándonos su

tarjeta.

  • No, que a veces te crees que la gente es de

una forma y luego resulta de otra

  • Lo conocimos en internet, dijo Teresa

entrometiendose en mi comentario

  • No te puedes fiar de internet.

  • Ya, pero teniamos preparado algo y nos hacia

falta una persona asi

Me di cuenta como un par de veces miro el

canalillo de mi mujer con mucho

disimulo, era una persona que sabia estar.

  • ¿Se puede saber que era?

  • Nada una idiotez que se le ocurrio a mi marido

y yo acepte. Le apetecia ver como

alguien me metia mano.

  • Vaya dijo el chico sorprendido

  • No es eso exactamente. Quedamos en hacer dos

trios uno con una chica y otro con

un chico

El abogado no parecia extrañarse, trataba la

conversacion como si fuera habitual.

Quiza acostumbrado por su trabajo a escuchar

montones de historias inauditas.

  • Todos los hombres tenemos la fantasia del trio

pero normalmente es con dos mujeres,

no dos hombres con solo una.

  • Tambien lo haremos. Es nuestro objetivo de

estas vacaciones. Le aclaro ella.

  • La unica condicion que ponemos es que el

tercero no podria follar. Añadi yo, muy

tajante

  • ¿Te apetece? le pregunto ella muy seductora

  • Pues asi de repente. Porque no, bueno. Pero no

tenemos mucho tiempo a las seis y

media tengo que ir por mis sobrinos.

  • ¿A que esperamos entonces? añadio mi mujer muy

contenta y cachonda

  • Cuando quieran.

  • Voy yo delante a prepararme,. dejarme quince

minutos. los espero en la

habitación.

Salio de la cafeteria moviendo las caderas, el

abogado se quedo mirando el culo con

atención

  • ¿que te parece mi chica?

  • Esta muy bien. ¿Que edad tiene?

  • No se te ocurra preguntarselo a ella. Reimos

los dos. 40 años.

El chico y yo nos  quedamos unos momentos

charlando, le explique que lo que me

gustaria es verla como la toca, sobre todo las

tetas, pero que no podia follarsela por

muchas ganas que tuviera.

  • No me gustaria que esto acabara mal. le dije

con tono amenazante

  • Tranquilo, si la regla es no follar, respetare

la regla.

El chico no me dejo pagar, se acerco a la barra

y pidió la cuenta. Muy elegante por

su parte, aunque esa mañana no se levanto

pensando que iba a manosear a una

señora de tetas grandes, gratuitamente.

El hotel estaba justo al cruzar la calle.

Subimos los dos por el ascensor hasta la

habitación 29, el parecia muy seguro.

  • Vamos a pasar un rato divertido, le dije. ¿Te

gustan las tetas grandes?

  • A quien no

  • Pues ya veras

  • Me he fijado y si parecen grandes.

  • Centrate en las tetas me gustaria sobre todo

que te centraras en las tetas. A ella le

pone mucho que se las toquen

  • Encantado.

  • Si vieras que algo no te gusta de lo que hago,

lo dices.

  • Tranquilo, dejemonos llevar. La que manda es

ella.

Llamamos antes de abrir la puerta: - Un momento

dijo ella... Ahora. Adelante

Estaba tumbada de lado sobre la cama con tan

solo el tanga y sus zapatos de

plataforma, que sensual, con su inmenso busto al

descubierto.

  • ¿Que tal chicos?

  • Pues mejor ahora que antes.

  • ¿Dispuestos?

El chico se emociono al ver ese par de

ejemplares al aire

  • Vaya, que bonitas

  • Y que grandes

  • Demasiado grandes añadio ella.

Nadie dio el primer paso, el chico la miraba

ensimismado.

  • Adelante, todas tuyas.

  • Tan rapido, deja que te mire, da un paseo por

la habitacion, luce ese cuerpazo.

  • ¡ja, ja! Cuerpazo. Eso quisiera yo.

  • Sera cuestion de empezar, dijo el chico tras

mirar el reloj. El tiempo se echa

encima y tengo que recoger a mis sobrinos en

treinta minutos.

El estaba desosó,  al verla desnuda, para el era

un regalito, distinto a las modelos y

pijillas con las que solia estar. Una mujer con

todas sus carnes, una autentica mama.

Su mente solo pensaba en hacer suyas esas tetas,

esos muslos, ese enorme culazo,

en retregrase por toda ella, en que se la mamara

tragandoselo todo.

Ella, tambien se sentia cada vez mas cachonda,

el muchacho actuo muy inteligente

dejando que se exhibiera, le encanta. Paseo

delante de nosotros, simpatica y

arrogante con sus tacones, elevada por el

ambiente libidinoso que transmitia la

habitacion. Estabamos muy cachondos, al igual

que yo, que me baje los pantalones y

comence a sobarmela mientras la veia pasear

haciendo posturas y sobandose las

tetas, estaba muy crecida.

Se acerco al chico y le quito la corbata y la

chaqueta, momento en que sus manos

entraron en contacto por primera vez con los

melones de mi chica, los acariciaba

mientras ellas sonreia y despacio le desataba el

nudo de la corbata. Como me

encanto esa escena, ver al tipo sobandola,

disfrutando de tan colosales moles de

manera furtiva, deseoso, pero cauto, suave,

hacia circulos con una mano en cada

pecho, con ligeros apretones, sin gran presion;

como si tratara de reservar la pasion

para mas adelante. Dejo uno de los pechos para

palpar la nalga izquierda, sin soltar

el otro, por supuesto, lo acaricio por encima,

despacio, con deleite. En ese instante

me fije en el, note que le importaba poco lo que

tenia delante, mas era un trozo de

carne que una persona, sin mirarla a la cara,

solo pensaba en sacarle la maxima

sensacion a sus manos. Ella se sentia dichosa al

ser acaricida por un extraño. Se

puso de espaldas a el inclino ligeremente su

espalda, el lo sobaba a dos manos. He

de reconocer quetiene un culo grande, digamos un

pandero, voluminoso, forma de

balon, blandito, con su celulitis incluida,

huella de los tres partos que lleva a sus

espaldas

  • Azotamelo. "Plis", mas fuerte, "Plas"

Una fuerte palmada y luego un par mas en cada

nalga.

  • Asi. Me gusta. Muy bien

Teresa lo cogio de la mano y lo tumbo en la

cama, yo me quede desnudo, me

acerque, pero me dijo que esperara, asi que me

estaba de espectador sentado en el

sillón frente a ellos sin perder detalle,

logicamente sin dejar de acariciarme el pene

que comenzaba a subir de tamaño.

El chico se quito la camisa y ella empezo a

lamerle los pezones, luego le puso las

tetas en la cara, las movia de un lado a otro

dandole bofetadas, luego le dejo que

jugara con ellas, que se explayara tocandolas,

sintiendolas, lamiendo sus pezones y

mordiqueandolas a su gusto. Cualquiera no se

vuelve loco con ese par de ubres a su

disposicion. Estuvo ocupado un tiempo intentando

cazar los botijos en su bamboleo

hasta que ella se volvio y le puso el culo en la

cara, le saco la polla, dura como un

martillo y comenzo a mamarsela mientras el le

comia el coño con deleite.

Estaba presenciando un 69 con mi mujer entregada

a ello lamiendo con pasion y

desenfreno el rabo de aquel tipo, ayudandose de

la mano para acariciar de arriba

abajo el tallo, el gemia mientras le merendaba

las partes bajas. Las tetazas le

colgaban y se movian en cada sorbido.

  • Que polla mas gorda. Que rica.

El con una mano pellizcando fuerte cada gluteo

para mantenerlo abierto, devoraba el

clitoris de mi mujer, la estaba poniendo a mil,

no me extranaria que se corriese.

  • Necesito que me follen, quien sea que me folle

  • A mi me encataria hacerlo, pero no me esta

permitido, hizo un intento el chico.

Yo me levante con el rabo a mil, ella ya me

esperaba de piernas abiertas en la cama

y se la meti hasta el fondo, no paraba e gemir y

gritar desinhibida, no era eso muy

normal en ella. Le pidio al chico que se pusiera

detras de su cabeza, le agarro la

polla y comenzo a pajearlo

  • Tocame las tetas, tocame las tetas. Que polla

mas buena, que ricura

No tardo en metersela de nuevo en la boca con el

abogado practicamente sentado

en su cara. Ella gemia y gemia, solto el rabo

cansada de mamarlo y  chafo sus tetas

para que lo metiera entero, el tipo se follo las

tetas con deleite, empujado con

fuerza. Ella con el culo en su cara le rozaba el

ano con la lengua. Los gemidos de los

tres se entrecruzaron, ella fue la primera en

correrse, lo notamos todos, sacamos las

pollas y como en las peliculas porno nos

corrimos ambos en sus tetas, primero yo y

luego el.

  • se me hace tarde, ya son y media. Mis

sobrinos

Salio corriendo a vestirse, casi sin mirar a

tras, ni decir adios. Monica y yo nos

reiamos tumbados en la cama, ella con la leche

de otro y yo con los cuernos

puestos.

  • Que bien me he quedado. Voy a ducharme. Me

hubiera encantado follarme a este

tipo. Por cierto ¿Como se llamaba?

  • Ni idea

  • Le sabia bien hasta el culo, reimos los dos,

casi me lo he comido entero.

  • Que bruta eres.

Luego se ducho y salio del aseo mojada, con la

melena humeda, la toalla amarrada

a la cintura y sus botijos colgantes hasta casi

la cintura, frescos y jugosos. Me

encanta verla en toples.

  • ¿Quieres un bocadillo?

  • ¿De que lo has pedido?

  • Son los que habia en la mochila

  • ¿se dejo la merienda de los niños? ¿Y te la

estas comiendo tu?

  • Tu veras el tipo se da la gran fiesta con mi

mujer, y yo no voy a comer su

bocadillos

  • No tienes verguenza. Me recimino entre

sonrisas

  • Preparate me voy a vengar de esto. Ves

buscandote una buena amiga y jovencita,

me toca trio a mi.

  • De jovencita nada. Otra con tetas grandes pero

de mi edad.

  • Tambien es buena opcion

  • Tranquilo, ya esta seleccionada.

  • La conozco

  • Creo que si. Se llama Julia.