Tremendo culo en el metro

Era un día como todos en donde sali a entretenerme en el metro en una mañana muy temprano, recién había terminado mi trabajo (cesante) y me calentaba la idea de apoyarse en un duro culo en los tumultos del metro.

Tremendo culo en el metro

Era un día como todos en donde sali a entretenerme en el metro en una mañana muy temprano, recién había terminado mi trabajo (cesante) y me calentaba la idea de apoyarse en un duro culo en los tumultos del metro.

Eran eso de las 8:00 A.M. y me dirigí al metro a ver que resultaba hoy de mi salida. Acostumbrada a dar vueltas y vueltas en el metro en búsqueda de tumultos de gente y punzarme a una linda lola.

Ya estaba en la estación esperando que viniera el siguiente metro y observaba a mi alrededor como esta la vista en cuanto a culos, bueno había de todos los gustos, tales como grandes, medianos y chicos. Pero en realidad nada interesante como lo que andaba buscando porque de donde yo tomaba el metro no se iba muy lleno. Así decidí andar unas 10 estaciones y venirme de vuelta porque en las combinaciones siempre se aglutinaban mucha gente.

De ida solo apoye mi duro pene sobre un hombro de una secretaria que venía media dormida sentada. A lo cual no reclamaba, parece que le gustaba así que me fui apoyado ahí hasta realizar el cambio de anden en una estación antes de la combinación. Esto fue una preparación preliminar.

Ya tenía la estrategia definida a aplicar, me subía en una estación antes del tumulto y me quedaba en una posición estrategica hasta que venía los culos a mi.

A todo esto, no les conté que yo me iba vestido con terno para pasar más piola en vista que cuando uno se pone buzo las minas se urgen y se nota mucho la erección.

Además que con mi pantalon de tela igual siento bien al culito que me quería punzetear.

Bueno, llegue a la estación entró un tumulto de gente y vi que se acercaba a mi un culo de proporciones, se veía muy duro y grande. Esto me calento a mil, mi verga empezaba a crecer sin siquiera rozarlo. Me puse listo para recibir ese culo que se me venía. En eso la empujan y ella me pone todos sus gluteos sobre me verga dura. Que a todo esto yo me la acomodo con la mano en los bolsillos para que que apuntando hacia arriba. Calculando que la mina es media alta, en casos que es chica la dejo hacia abajo.

Mi bulto estaba muy duro y pegado a ese delicioso culo. Mi pene se hundía en ese culo. En cada vaiven del metro lo presionaba y lo soltaba. Yo llevaba una mano afirmandome arriba y la otra a mi lado.

Ya teniendo esto como antecedente y la mina no reclamaba empezé a aplicar mi estrategia. Se lo puse todo y ella no reclamaba, incluso me di cuenta que más me paraba la cola. Llevaba unos pantalos de color crema que eran de tela, o sea era evidente que sentía todo lo que tenía atras.

A medida que avanzaba el metro se iba bajando gente en cada estación y quedaba espacio libre para que ella se cambiara de lugar perfectamente pero se mantenía inmobil.

Leyendo relatos aquí me di cuenta que muchos de ustedes bajan las manos y empiezan a tocar las nalgas, por lo cual me animé a hacerlo y con mi mano derecha empecé a rozarle el gluteo derecho, una sensación espectacular.

La sensación de que los gluteos tuvieran atrapado a mi pene duro me hacía bombear mi pene. Estaba duro y duro. Recorri ambos gluteos con mi pene como si lo estuviera inspeccionado.

Seguí en las mías dandole duro y muy duro hasta que quedo tan poca gente que ella se puso al frente mío, me pego una mirada a la cual yo timidamente mire a otro lado. Para luego bajarme.

Ahora, ahí no termina la historia. Llegué a mi casa muy caliente, compre el diario y empece a llamar a agencias para traermme una putita a mi casa pero con la restricción que tuviera un culo de proporciones. Y lo hice me traje una mina que tenía unas tetas inmensas y culo pero gigante, era de medidas 100-70-105.

Esta es otra historia de como se lo mande a guardar a esta mina despues que me mostró su culo y me la chupó.