Trazos - primera imagen
Después de pensarlo mucho me he decido a compartir con vosotros algunas de mis experiencias, todas ellas son reales lo cual implica que oculte u omita nombres. Cómo podréis observar no son exactamente relatos, más bien son trazos sueltos de historias que se irán complementando.
Después de pensarlo mucho me he decido a compartir con vosotros algunas de mis experiencias, todas ellas son reales lo cual implica que oculte u omita nombres. Cómo podréis observar no son exactamente relatos, más bien son trazos sueltos de historias que se irán complementando.
Espero vuestras opiniones y críticas.
La imagen era perturbadora, magnifica, excitante y pavorosa. Mi perra tumbada sobre la mesa boca arriba, las piernas abiertas, flexionadas y con las rodillas casi a la altura de sus preciosas tetas. Un cordel atado a cada dedo gordo del pie y del otro extremo una pinza metálica dentada mordiendo cada uno de sus pezones.
La perra abre su coño con las manos al máximo para que pueda decorarlo a mi gusto con cera mientras le follo el culo con mi polla.
Con cada embestida mueve sus piernas lo que provoca constantes tirones en sus pezones, con cada tirón una contracción marca su cara, con cada tirón un gemido se escapa de su garganta.
El olor de la habitación es intenso, el sudor y el olor a sexo inundan nuestras fosas nasales mientras la música de fondo nos transporta al nirvana, los jadeos, los gritos, las exhalaciones y el verbo sucio y depravado de los dos conforman la orquesta de nuestro encuentro.
Sus pezones y coño están rojos por la intensidad del castigo, su coño parece un manantial que no deja de chorrear y empapa mi polla alojada en su culo, noto que se acerca inexorablemente su orgasmo y el mío, los jadeos aumentan de volumen y nuestros cuerpos empiezan a convulsionar mientras mi polla llena el culo de mi perra de semen.
Los cuerpos empiezan a relajarse, las respiraciones se acompasan y nuestras miradas se encuentran, saco la polla de su culo con cuidado y recojo con mi mano todo el semen que brota del interior de mi perra, se lo acerco a la boca y con avidez lo recoge todo con la lengua y se lo traga, acto seguido es el turno de mi polla, la cual limpia con esmero y ternura con su boca.
Le quito las pinzas de los pezones y desato los cordones, la incorporo y nuestra miradas vuelven a encontrarse de nuevo, la lujuria deja paso a la ternura.
Rodeo su cintura con mis brazos y nos besemos, la acompaño al baño y sin decirle nada se pone de rodillas, alza la mirada y abre la boca para recibir su primer baño caliente. Agarro mi polla y apunto en su dirección para que reciba su primera ducha caliente, termino y se levanta muy despacio, sus músculos están algo entumecidos y necesitan relajarse y recuperarse.
Le cojo la mano y nos metemos en la bañera que he preparado para ella, y durante un largo rato me dedico a enjabonarla y a relajarla, a mimarla y a masturbarla, a cuidarla y agradecer su entrega constate.