Travesuras con mi primo.
Iniciando unas vacaciones con mi hermana, su novio y un primo, mi hermana me pide que la deje dormir con su novio y yo salgo ganando. Breve, pero espero que les guste.
Una ocasión en mis años de universidad, nos fuimos de vacaciones mi hermana Bety, su novio Arturo, mi primo Jesse y yo. Mi primo vive en Estados Unidos y estaba pasando unos días en México, así que nuestros padres nos pidieron que nos lo lleváramos de vacaciones (a Acapulco); otra razón para que fuera con nosotras era que nos cuidara y no hiciéramos nada indebido. Jijiji, si supieran.
Jesse es mi primo en segundo grado, es decir que es hijo de un primo de mi mamá, y ya que siempre ha vivido en Estados Unidos nos vemos poco; pero cuando nos veíamos había mucha atracción. Le traía muchas ganas y él a mi. Cuando supe que iría con nosotras pensé que esta sería una buena oportunidad para, por lo menos, aventarnos un buen faje.
Nos quedamos en el Hotel Pierre Marqués, que está en una zona no tan poblada de Acapulco, al menos así era hace algunos años. Teníamos sólo una habitación, con dos camas matrimoniales, y Bety –por supuesto- quería dormir con su novio, así que me pidió que la dejara quedarse en una cama con Arturo y yo en la otra con Jesse. Accedí, aunque me hice la difícil para negociar y sacarle algo, además ella no sabía de mi atracción hacia Jesse; gané por partida doble. Y todo empezó la primera noche.
Ya que iríamos a playa, me llevé una pijama muy ligera que consta de un minishort holgado y una blusita de tirantes, el conjunto es blanco y semitransparente. Me lo puse y me acosté, Jesse ya estaba en la cama y les pedí a los hombre –Arturo y Jesse- que se taparan los ojos en lo que me acostaba; así lo hicieron y me metí rápido en la cama. Nos pusimos a ver la tele y luego de un rato me quedé dormida, de repente –no sé cuánto tiempo después- sentí un ligero roce en mis piernas, subía por mis muslos hasta la cadera, luego por encima de mi short delineando mi panty hacia mi panochita y luego hacia mis nalgas…acariciaba mis nalgas con el dorso de la mano. Me desperté por completo y vi que la tele seguía prendida, Bety y Arturo dormidos. Me quedé quieta, excitándome; mi primo me estaba manoseando, me hice la dormida y lo dejé hacer.
Se acercó más a mi, se hizo hacia arriba de la cama –hacia la cabecera- me destapó un poco de arriba y me bajó uno de los tirantes; como yo estaba de lado dándole la espalda sólo podía bajarme uno. Volvió a acariciarme las nalgas con el dorso de su mano y rozándome lentamente se dirigió a mi panochita. Delineaba mi panty con los dedos y luego acarició la concha por encima de mi pijama suavemente; moví un poco las piernas para dejarle más espacio de maniobra y enseguida me arrimó su paquetote en las nalgas. Sentía cómo se endurecía y crecía su reata. Yo estaba ardiendo, quería gritarle que me cogiera, pero mi hermana estaba dormida en la cama de enfrente. Jesse restregaba su reata en mis nalgas, en el canal de mis nalgas sobre la pijama.
Eres mucha tentación, prima…-me susurró- quiero tocarte las nalgas con mi verga…quiero acariciarte el culo…-yo sólo asentí con la cabeza- Sabía que estabas despierta…agárramela, acaríciala…-moví la mano hacia atrás y le agarré el paquete, estaba enorme y se me hizo agua todo; seguía observando a Bety y Arturo para que no nos cacharan- sácamela…-obedecí y le saqué la verga de su boxer; empecé a pajearlo, él metió la mano en mi panty y me acarició la concha. Me abrió más las piernas para poder acariciarme, masturbarme, dedearme- …estás empapada, prima…andas bien caliente…yo también…te gusta jalármela, verdad?
Sssshhhhhhh…nos van a oir, Jesse –le susurré.
Por qué crees que dejé la tele prendida? Además llevan rato jetones…-me metió los dedos en la conchita y yo lo pajeaba; me agarraba las tetas con una mano y con la otra me dedeaba. Luego de unos minutos, me quitó la mano de su verga y la metió en mi pijama para acariciar mis nalgas con su reata- Te quiero coger, prima.
No, no…ahorita no…
No se van a dar cuenta…-entonces mi hizo más a un lado la panty y el short y acomodó su verga como si fuera a metérmela- métetela…
No, Jesse…ahorita, no.
Sólo un poquito…-me acariciaba la concha con su verga y con su mano presionaba como si fuera a meterla- ándale, prima…métetela…-me agarró la mano y la llevó a su reata para que yo me metiera su verga- ahhhhh…qué rico…métetela, Tere…métetela, ándale…-le obedecí, y es que en efecto moría por sentir esa reata dentro de mi. Me la metí lentamente y resbaló delicioso, yo estaba empapada- mmmm…qué rica panochita tienes.
Ay…-ahogué mi exclamación lo más que pude; era excitante la situación, pero también frustrante no poder coger a gusto. Mordí la almohada, le agarré las nalgas empujándolo hacia mi y yo movía la cadera hacia atrás para que me penetrara más; estaba buenísimo mi primo!
Estás suavecita…-empecé a apretarle la reata con mi conchita y le puse una de sus manos en mis tetas, en mis pezones para que los pellizcara- aprietas muy rico, prima…coges mucho, eh…¿te gusta que te agarren las tetas,Tere? –asentí- ¿qué te pellizquen los pezones? –asentí de nuevo.
Ssshhhhhhh…acaba-después de unos pocos minutos sentí cómo se hinchaba y palpitaba su verga- No te vengas adentro, eh…
No quiero eso…quiero esto…-en ese momento me la sacó, me bajó la pijama con todo y panties y se vino en mis nalgas; me las llenó de leche calientita y la embarró en todas mis nalgas untándomela con la verga, después me embarró de las misma forma todo el camino desde mi culo hasta mi conchita- Qué rico…por fin se me hizo, primita –a mi también, pensé; aunque tenía pensado algo más libre, duradero y fuerte…Pero las vacaciones apenas empezaban y no sería la única vez con mi primo.