Traumatico incesto

Cogí a mi hijo, aún no podemos superarlo.

No pude controlarlo

Mi nombre es Andrea, soy divorciada 41 años, sicóloga. Me conservo bastante bien, soy alta, pelo rubio ceniza, ojos verdes, mucho gym, nada de grasas. Desde mi ruptura matrimonial, hace casi un año, vivo dedicada a mi único hijo, Osvaldo ( Ova )

Un chico alto, fachero, deportista, 19 años, estudiante de leyes, maravilloso con un solo defecto ; es enfermo de tímido. Solo tiene un amigo, jamás novia, súper introvertido. Ahora se que cuando paso " el hecho " era virgen. Su carácter tímido y retraído me producía una inmensa ternura, siempre lo abrazaba, besaba sus mejillas, en fin es y era mi adoración de Madre, jamás lo vi de otra manera. Nuestra vida cambio para siempre un viernes en la tarde. Volví de mi trabajo y encontré a mi hijo amarrado en mi cama, desnudo, sobre el a medio vestir, Ana, nuestra mucama Paraguaya, una pendeja bonita, haciéndole sexo oral. La sorpresa fue para todos, me abalance sobre Ana, a gritos, patadas, empujones la eche de la Casa con su equipaje a medio embalar y algo de plata en los bolsillos. Le gritaba puta, cerda, a mi bebe, puta, es mío, es mío, yo lloraba, Ana solo trataba de huir. Lo ultimo de ella fue un grito " incestuosa quieres su virginidad para vos ". algo de esa frase golpeo mi subconsciente, al entrar a la pieza vi en mi hijo un hombre desnudo, su virilidad virgen y erecta aun la quería solo para mi. Mi hijo se había soltado una mano y trataba desesperadamente de soltarse la otra, con estos movimientos bajaba el cubrecama dejándome ver su pene tieso, gordo y grande. Me excite, estaba con una furia incontenida, me abalance sobre el, lo golpeaba, porque, porque, porque le gritaba, solo alcance a escuchar como un susurro su respuesta

Mama perdóname quería perder mi virginidad

Me quede helada un segundo, luego perdí el control, mirándolo fijo le dije

me la vas a entregar a mi

se asusto, mas su erección no bajo, abrí un poco las cortinas para que entrara algo de luz y luego frente a el empezó todo. . . . . . . . . . . . . . . . deje caer mi falda, sin quitarle la vista desabotone mi blusa, luego el corpiño, quede solo con un diminuto tanga negro frente a el, me comía con la mirada, tartamudeaba

que me vas hacer Mama

shhhhh, vas a regalarme tu virginidad, Mama te va a dar mucho amor

avance sobre el, lo bese introduciendo medio a la fuerza mi lengua en su boca, luego mi lengua se comió su boca en forma salvaje, el gemía y susurraba, no, no, Mama es incesto, no, es incesto

se que es incesto hijito, lo vas a gozar mucho

volví amarrar su otra mano y mi boca bajo, lo introduje de a poco, lamía todo su ser, sus bolas, su ano, su cabezota rica, mi hijo gemía de caliente y de susto, repetía, incesto, incesto, incesto, con espasmos me regalo el primer semen de su vida a una mujer, la misma que lo parió, el morbo me hizo orgasmar con un gutural aggggggggggggg. , tragué lo que pude y lo bese, abrí con mi lengua su boca, no oponía ya resistencia. lave su cuerpo con esponja y agua tibia, mi hijo no hablaba, yo quería mas

te gusto bebe, te gusto lo que te dio Mama, ahora Mamita te va a meter en ella

volví al sexo oral, cuando la sentí muy dura me monte sobre ella, mi hijo me miraba fijo, gemía, balbuceaba, incesto, incesto, yo le gritaba, si, si, incesto pero ricoooooooo, lo cabalgaba con brutalidad, sacando casi dos tercios de su verga para volver a caer ensartada, mis senos los alternaba en su boca, estaba con una calentura bestial, me vine con gritos sobre el, lo bese,

Ova, amor dale tu leche a Mama

Mi hijo gemía, yo seguía cabalgando, no lograba que acabase, otra vez la lujuria se apodero de mi, lo desamarre frenéticamente, lo acosté y monte mi coño en su cara, le gritaba abrele la boca a Mama, vamos come bebe, come, chupaba fuerte, me producía dolor y placer, volví acabar esta ves en su cara, le ordene que me limpiase con la lengua, luego le hice besar mi ano, mi cuerpo de rodillas, de espaldas sobre el, con su vista fija en la unión de ambos introduje su verga en mi ano, quede empalada, me lo cogía rico, con dolor, suave, ambos gemíamos, sentí su leche llenar mi culo, embestí dos, tres, cuatro y volví acabar. Caí a su lado hecha mierda, primera vez en mi vida que había tenido mas de dos orgasmos seguidos y eran producto de haberme cogido a mi hijo. Lo abrace, quedamos largo rato en silencio. le hable despacito

te gusto mi amor

su respuesta fue llena de culpa

te goce, pero no podemos, es incesto

quieres parar

no Mama, voy a seguir solo el fin de semana

ya veremos Ova

porque Mama, porque lo hiciste

rompió a llorar muy despacio, yo lo besaba, mi lengua empezó a recorrer todo su cuerpo, puse mi pelvis sobre su boca de tal forma de quedar en posición 69. , fue un largo 69, el tímidamente buscaba mas rincones de mi cuerpo, ya me lamía el ano, yo hacia lo mismo, después lo puse sobre mi, rodee sus hombros con mis piernas y empuje su ser por segunda ves en mi vida sobre mi.

Esta vez los orgasmos de ambos fueron tremendos. El fin de semana fue así, lo obligue a decirle a su Papa que estaba enfermo, fue solo sexo, con mil y una perversiones, el seguía con esa culpa de incesto, incesto,. El lunes cuando volvimos a nuestras actividades, reflexione y la culpa me invadió. También el placer, era adicta a el. No concebía una relación normal, deseaba que todos los ámbitos de su ser fueran solo para mi. Ese lunes en la noche el se resistió, lo forcé, prácticamente viole a mi hijo. luego después de dos días sin hacerlo ( me contuve porque estaba con mi regla ) el se me vino encima, no le importo mi regla, me lamió aun con sangre, cogimos toda la noche en forma sádica.

De esto hace dos meses, su personalidad conmigo cambio, para el soy un objeto sexual al cual le puede realizar todas las aberraciones inimaginables, lo mío es distinto, tengo un amor enfermizo hacia el. Ambos estamos yendo a una sicóloga, ella insiste en que para diagnosticar causas debe hablar con mi ex esposo. Ova y yo se lo prohibimos, seguimos cogiendo con muchas ganas pero con mucha culpa. El incesto es morboso, ardiente, no tiene limites pero es muy difícil de llevar. Yo no solo he entregado mi cuerpo, a cambio del placer he perdido en parte mi rol de Madre.