Transitando las ruinas...

Recorrer cada día los mismos caminos, las mismas calles, las mismas plazas donde nos encontrábamos, donde nuestros abrazos eran eternos, eran

Observar esos lugares donde mi alma deseaba estar unida a ti en todo momento, sentir esa fundición entre los dos para siempre. Observar que en estos momentos nuestros lugares están vacíos

Escuchar las canciones que deseaba susurrarte al oído cuando mas te extrañaba, cuando nos unía nuestra esencia invisible viajante entre la gigantesca masa de gente, y escuchar solamente tu voz en mi mente era el aire que dejaba respirar a mi alma

Recordar los momentos previos a cada vez que nos encontrábamos en el lugar de siempre y a la hora de siempre, recordar esos momentos donde mi único deseo era embellecerme para ti, sentirme deseado por ti

Pasar por ese lugar donde hicimos tantas veces el amor (O por lo menos así lo sentía yo). Anhelar otra vez el estar contigo acurrucados entre nuestras ropas, enredados por nuestras piernas, donde cada uno seguía el movimiento natural e impulsivo que nos guiaba hacia el éxtasis del placer

Complacer a mi derrumbado corazón con solo recuerdos que existen entre las ruinas, recuerdos que sobreviven a tu avasallante ser

Habitaste en mi corazón, habitaste en mi alma, habitaste en todo mi ser. Tu lugar en mi era el descanso de mis males. Males que con el tiempo se fueron acostumbrando a ti, hasta tal punto que los acompañaste en su recorrido

Leguas y leguas de amor estaban en un camino que creí que recorreríamos juntos, que tu farsante cara me demostraba día tras día que así seria

Ahora estas disfrutando de tu libre y asombrosa vida, donde tus grandes amigos te acompañan en las mentiras que tu me propusiste, y que no tuve otra alternativa que aceptarlas, porque nunca te sentaste enfrente mío y me las dijiste