TRAICIONADA (segunda parte)

Finalmente nos detuvimos y sentí cuando me quitaron las correas que me mantenían sujeta a la silla y desataron mis pies, cada  uno me tomo de un brazo y me obligaron a caminar con ellos, yo forcejeaba pero era inútil no podía hacer nada por detener la marcha mientras bajábamos una escalera

Marion: esta estúpida ya me esta hartando,  sujétala fuerte John en un segundo regreso.

John: sé lo que estas pensando y aun no es tiempo para eso.

Marion: pero que bien me conoces, cualquier momento es bueno John y además que de una buena vez sepa lo que le espera.

Esas palabras me llenaron de angustia y escuche como Marion corría por las escaleras no tardo ni un minuto en regresar y pidió a John que me sujetara bien, así que él me dio la vuelta y me apretó contra la pared, sentía el frio muro contra mi cara y mis senos se aplastaban fuertemente, enseguida Marion me bajo el pantalón hasta los muslos y yo comencé a gritar desesperadamente bajo  todas esas capas de cinta que tenia sobre mi boca, era la sensación más horrible de toda mi vida, no veía nada y no podía hacer nada por evitar que me hicieran lo que ellos dos desearan, seguidamente comencé a sentir una cosa fría y dura que subía por mis piernas haciéndome estremecer,  ahora el miedo se convertía en desesperación y de nuevo comencé a luchar, asi que John de nuevo puso su mano sobre mi  boca y me apretó con todo su cuerpo contra la pard haciéndome arquear  la cabeza hacia atrás, me dejo totalmente inmovilizada, Marion no se detuvo hasta llegar a mi entrepierna, corrió mi ropa interior y en un segundo  introdujo esa cosa hasta el fondo llenando por completo mi vagina, de mi boca amordazada salió un fuerte grito que no fue más que un gemido y comencé a llorar, más que del dolor,  por la rabia y la impotencia por estar así en ese momento,  tiro de unos cables y los subió por el medio de mis nalgas, para luego  acomodar mi ropa interior, subir mi pantalón y finalmente con cinta unió mis piernas a la altura de los muslos. En ese momento me soltaron, y quitaron la bufanda que cubría mis ojos, John bajo adelante y Marion se hizo tras de mi ordenándome seguirlo,  trate de caminar pero me tocaba mover solo la parte de abajo  de mis piernas dando pasos pequeños, apenas podía bajar los escalones, al tercer escalón que baje me detuve y me negué a bajar más, John se regreso y me trato de alzar pero Marion lo detuvo.

Marion: crees que hice todo esto para que la cargues,  el juego comienza desde ahora, ya verás cómo nos divertimos con mi linda amiga.

Enseguida se acerco y me dio un beso sobre la cinta que cubría mi boca al tiempo que yo movía mi cara hacia un costado,  sentí enseguida un fuerte corrientaso dentro de mí que me hizo gemir y caer sentada sobre el escalón.

Marion: cuando se me dé la gana de besarte te quedas quieta,  ¿de acuerdo perra?

Y de nuevo unió los dos extremos de unos cables  que tenía en su mano y que iban hasta el aparato ese dentro de mí y nuevamente sentí que me estallaba por dentro.

Yo: mmmmmghtmmmmmmmghtghtmmmghtmmmmghtmmm

John: ya déjala  llevémosla abajo estoy ansioso de mostrarle el cuarto que le preparamos para sus vacaciones.

Marion: no seas impaciente, tenemos mucho tiempo para disfrutar de esto, sabes se me acaba de ocurrir algo, no la bajaremos, ella bajara sola, álzala y llevémosla hasta arriba de nuevo

Ahora si que estaba asustada, esa sensación fue lo peor que jamás había sentido, no paraba de llorar y me temblaban las piernas, cuando estuvimos en el primer escalón de arriba, Marion tomo cinta y ato cada extremo del cable a una de mis piernas por debajo de mis rodillas luego metió su mano en mi pantalón y movió una ruedita unida a los cables.

Marion: bueno ahora si veremos cuanto tardas en llegar hasta abajo,  tienes  un máximo de 8 minutos si para ese momento no has bajado se activara el aparato que tienes dentro y ya sabes lo que pasa, pero esta vez no se detendrá tan rápido, además esos dos cablecitos de tus piernas si se unen,  activaran también el juguete.  Buen viaje princesita.

Yo negaba con la cabeza y suplicaba bajo la mordaza, pero ella solo dijo “el tiempo corre dale baja” , comencé a bajar con mucho cuidado de no dejar que los cables se tocaran entre si, pero esa era una labor casi imposible estando con las piernas atada como las tenia, logre bajar el primer escalón sin problemas, en ese momento John saco una cámara de video y comenzó a gravarme y riendo dijo “esto toca tenerlo como recuerdo” yo levante la mirada para hacerle una mirada de odio y perdí el control de mis piernas haciendo que los cables se unieran, el aparato dentro de mi se activo, pero esta vez no fue tan fuerte como en la ocasión anterior esta vez comenzó a emitir una suave corriente que me acariciaba por dentro, dos escalones más abajo, se tocaron de nuevo los cables y la sensación dentro de mi ahora era más fuerte y tenia intermitencias, unas veces rápido y continuo, otras lento o pequeños toquecitos aleatorios, ahora mi vagina respondía al estimulo y comencé a excitarme, me recargue al muro  tome aire, el calor que  producía mi excitación comenzó a sacarme las primeras gotas de sudor mojando  mi cara y mezclándose con la lagrimas que salían de mis ojos, apenas estaba por la mitad del trayecto y ya no podía ni pensar, esa cosa dentro de mi me hacia estremecer obligándome a  tocar los cables en cada escalón, el ritmo del aparato cambiaba y emitía diferentes tipos de sensaciones,  faltaban solo 5 escalones cuando caí sentada y apoyando mi cabeza contra la pared me deje llevar de un orgasmo insoportable que me hacia gemir y convulsionar, escuchaba las risas de Marion y de John

Marion: pero mira se ve que está divirtiéndose con  nuestro juego,  ya cuando lleguemos a su cuarto sabrá lo que es diversión de verdad;  ya de pie que te quedan 2 minutos.

Tome aire y me pare de nuevo, baje el siguiente escalón sin dejar de sentir que  mi excitación subía nuevamente, ya cuando me quedaba un escalón sonó una alarma y esa cosa dentro de mi esta vez comenzó a vibrar además de los pulsos eléctricos de diferentes frecuencias que me habían hecho llegar al orgasmo unos escalones más arriba, la sensación fue increíble en solo unos segundos ya estaba a punto de un nuevo orgasmo, Marion metió su mano y lo apago.

Marion: que te crees que esto es para que lo disfrutes, ya tendrás unos cuantos de esos y nos suplicaras que se detengan, por ahora ya no mas, vamos John levanta esta tonta que no fue capas de llegar hasta abajo.

El me tomo en sus brazos y yo solo me deje descolgar estaba exhausta y casi ni podía respirar, ella abrió una puerta y el entro cargándome, la  habitación estaba toda forrada en pieles,  las sillas, la cama, los cojines,  las cortinas eran de piel, entre los dos me desnudaron, amenazándome que si me resistía pondrían ese aparato dentro de mí en descargas fuertes, ya cuando estaba desnuda forraron mis manos con unos guantes circulares que me mantenían la mano cerrada,  eran de piel tanto por dentro como por fuera,  me colocaron unas botas igualmente peludas,  luego me colocaron un pañal de cuero ajustando el aparato en mi interior, me obligaron a abrir la boca y me metieron una bola roja en ella ajustándola con una correa a mi nuca, no me incomodaba, mas bien era pequeña, me daba la sensación de tener algo en la boca pero no de llenarla, luego pusieron una correa ancha cubriendo mi boca en su totalidad.

Me alzaron y me dejaron sobre la cama, aun con lo asustada que estaba y después de todo, la sensación de suavidad de esas pieles me hacia relajar y me excitaba, por primera vez desde que me atraparon me sentía bien, bueno si a mi situación se le podía llamar bien.  Me arroparon con la colcha y antes de dejarme sola

Marion: será mejor que no te bajes de la cama, o te juro que te ira mal, igual a donde irías.

Lamio mi mejilla y luego llenaron mis oídos con algodón, me pusieron una máscara que al igual que los guantes y las botas era de piel en su interior  que apenas dejaba mi nariz al descubierto, la ajustaron, sentí el aparato dentro de mi vibrar suavemente, empecé a relajarme no escuchaba ni veía nada solo sentía las pieles acariciándome por todas partes y esa suave caricia en mi interior producida por el huésped que ahora vivía dentro de mi allí abajo, finalmente entre en un profundo sueño.

Continua………….