Traicionada por una amiga

lo que me paso en mis vacaciones por intentar ayudar a una amiga, cuando era esta la que cospiraba contra mi.

Después de un año entero sin parar de trabajar, por fin se acercaban las tan ansiadas vacaciones, ya solo quedaban 15 días para irme con mi chico a descansar a la playa, cuando me llama para darme según él una buenísima noticia. Había sido contratado y empezaba mañana mismo a trabajar. La noticia en cualquier otro momento habría sido excepcional, pero a mi enseguida se me vino a la cabeza el tema de las vacaciones y cuando le pregunte por ellas, él me dijo que por supuesto se tenían que anular que acababa de empezar para pedir vacaciones a los 15 días. Eso enturbió mi radiante día de agosto, así que me fui a trabajar con cara de pocos amigos, al llegar a mi trabajo, mi compañera Ana me lo noto, pero no era el momento de contárselo, así que la respondí que no me pasaba nada, y comencé con mi trabajo. Ya en la hora del café con más tiempo y estando yo más calmada le conté mi problema, ella le quito importancia y me dio una solución ya que le ocurría algo similar porque su novio tampoco podía coger vacaciones para la fecha que cerrábamos. Ella me invito a casa de unos familiares suyos que tienen en la playa, que en esas fechas al ser final de verano la tienen vacía. Así podríamos ir las dos de vacaciones solo de chicas. Yo la dije que me lo tendría que pensar, y que ya le contestaría.

Después de hablarlo con mi chico, decidí que estar en la playa aunque fuera sin él sería mejor que quedarme en casa sola todo el día. Lo cual a él le pareció estupendo.

A la mañana siguiente se lo comuniqué a Ana que le pareció estupendo, me dijo que lo pasaríamos muy bien, que nos íbamos a montar la fiesta del año. Yo en esos momentos me empecé a arrepentir, a pesar de que éramos compañeras de trabajo, y nos llevábamos muy bien somos demasiado distintas. Ana es una chica de 22 años, morena con un cuerpo atlético del cual le gusta presumir, viste con ropa ajustada, y pequeñas minifaldas, le gusta ir de discotecas techno, hace más o menos un año que esta con su novio Paco que la trata como una reina.

Yo en cambio soy rubia y con un cuerpo más voluptuoso, que suelo tapar con ropa holgada tengo 25 años y llevo una vida más tranquila sobre todo estos últimos años que llevo con mi novio.

El día del viaje llegó y tomamos un autobús de madrugada, lo que hizo que llegáramos para la hora de comer a la playa, después de dejar nuestras cosas en el apartamento, nos bajamos a tomar el sol a la playa un rato, después subimos a ducharnos y arreglarnos para la cena. Salimos a cenar a un restaurante que estaba a unos 200 m del apartamento, después de la cena Ana insistió en que saliésemos a tomar unas copas, yo no estaba totalmente de acuerdo, ya que debido al viaje me encontraba bastante cansada, pero como era su invitada, tuve que acompañarla.

A pocos metros del restaurante, nos paró un chico de unos 20 años que resultó ser un relaciones públicas de una discoteca cercana, a la cual fuimos invitadas a tomar unos chupitos.

El chico presto mucha atención a Ana o más bien a su minifalda que ocultaba pobremente su culo, y después del segundo chupito se la llevo a bailar y a los dos minutos estaban fuera del local. A mí me dejaron sola con el camarero y los pocos clientes que había debido a que era un día de diario y temporada baja.

A las dos horas llegaron cogidos de la mano, y Ana sin carmín en los labios, no era difícil intuir lo que había pasado, yo mientras tanto había estado mandando mensajes a mi chico para combatir la espera. Sugirieron ir a otra discoteca pero yo le pedí a Ana que fuésemos a casa que ya era bastante tarde, ella al ver mi cara acepto. El muchacho nos acompañó a casa y en la puerta del apartamento se despidió de ella con un interminable morreo y sobeteo. Ana ante la expresión de mi cara le pidió que se marchara. Nos fuimos a dormir y a la mañana siguiente nos levantamos tarde y bajamos a la playa.

Tomando el sol, empezamos a hablar, yo le recrimine que me hubiera dejado sola la noche anterior y su actitud con el chico, le recordé que tenía novio, a lo que ella me contesto que estaba de vacaciones y que había venido a pasarlo bien que no fuese tan muermo y me divirtiese. Después de decirme eso se levantó y se fue a meter en el mar.

Al salir del agua fue a darse una ducha justo al lado de un grupo de chichos de más o menos su edad, se ducho de forma bastante insinuante lo que hizo que los chicos se fijaran en ella, después de esto se acercó a mí se tumbó en su toalla y se puso a tomar el sol haciendo topless cosa que termino de animar a los cuatro chicos para acercarse a conocernos.

Los cuatro chicos eran unos futuros bomberos que estaban allí preparando unas oposiciones, se notaban por sus cuerpos musculosos y por qué los cuatro eran físicamente parecidos. Después de un rato de charla habíamos quedado para vernos por la noche. Ana dio su teléfono a uno de ellos para que concretara el lugar.

Nos fuimos a casa para prepararnos para salir por la noche, después de ducharnos, vestirnos y maquillarnos estábamos dispuestos a salir, Ana esa noche había decidido ponerse un vestido corto y muy escotado, vamos que tapaba poco más que el bikini que llevaba puesto en la playa.

La pregunte que donde íbamos ella me dijo que de botellón a la playa. Llegamos y allí estaban los cuatro esperándonos con unas botellas y vasos.

La noche empezó bien tomamos unas copas y charlamos un rato, la verdad que parecían simpáticos esos chicos. Poco a poco uno de ellos se acercaba a Ana hasta que en un despiste se habían perdido separándose del grupo, no lo suficiente para que se viesen sus siluetas al fondo de la playa, estaba claro que no habían perdido el tiempo. Se estaban dando el lote, incluso en un momento pareció que ella le estaba haciendo una felación.

Cuando volvieron y visto que ya era tarde y que habíamos bebido un poco de mas, decidimos irnos a casa, nos acompañaron hasta la salida de la playa y de ahí nuestros caminos se separaban tres de ellos giraron a la derecha y el otro chico Ana y yo tomamos dirección al apartamento. Yo suponía que se repetirá la escena de la noche anterior con beso de despedida en la puerta, pero me equivoque ya que Ana invito a entrar a su ligue, cosa que a mí me pareció fatal y se lo hice saber llevándomela a hablar a solas. Le dije que además de pensar en su novio y lo que estaba haciendo, no conocíamos a ese chico lo suficiente para dejarle entrar que estábamos solas, ella me dijo que dejase de ser tan ñoña y que la dejase en paz y se fue con el chico.

Yo entre en mi habitación y me puse el pijama para ir a dormir, como hacia tanto calor, opte por una camiseta de tirantes nada más.

Mire mi móvil y vi que tenía un mensaje de mi novio preguntándome que tal iban las vacaciones, y empezamos un intercambio de mensajes donde yo le contaba mis peripecias, en esto que Ana me empieza a Llamar a gritos, Laura ven rápido y salí de la habitación tal y como estaba con mi camiseta de tirantes y el móvil en la mano.

En el salón me encontré a Ana y al primer chico medio desnudo sujetados por otros dos de los chicos uno de ellos portaba un cuchillo que estaba en la garganta de Ana. El chico que faltaba estaba detrás de mí y cuando salí me sujeto e me inmovilizo. Entonces sonó mi móvil y el me lo quito de las manos era un mensaje de mi novio diciendo que tratase de pasarlo bien. Él se rio y dijo:- Trataremos de complacer a tu novio.

Yo pregunto qué pasaba, que hacían allí. Uno de ellos me contesto que ellos eran un grupo y como tal todos tenían que ser iguales, y si uno de ellos tenía algo, lo tenía que compartir. Yo les pedí que me soltasen y que se fueran. Ellos dijeron que se irían solo cuando hubiesen acabado de hacer lo que tenían que hacer.

Pero ¿a que os réferis? le pregunte yo. Uno de ellos me dijo, Te lo voy a explicar, como te he dicho somos un equipo y compartimos las cosas buenas como las malas, al igual que el botellón lo hemos pagado entre los cuatro, pues las chicas deben ser para los cuatro, os hemos repartido Juan y Jorge se quedan con Ana y Jesús y yo nos quedamos contigo, y hasta ahora la cosa no ha sido muy equilibrada. Ya que Juan y Jorge han disfrutado de la vista de las tetas de Ana y nosotros no de las tuyas.

Pero vosotros estáis locos, dije yo, no pienso enseñaros nada que os creéis que soy un objeto para que me intercambies,

A lo que Jorge que tenía a Ana sujeta y con un cuchillo en su garganta, me dijo si no quieres que le pase nada a tu amiga será mejor que nos hagas caso, y apretó el cuchillo en el cuello de Ana.

Ella me dijo, Laura por favor haz lo que te pidan, por favor.

Yo les dije que lo haría pero que no nos hiciesen daño, sentaron a Ana y Juan en unos sillas y los ataron y ellos se sentaron en el sofá, me soltaron y me dejaron enfrente de ellos, me dijeron que me quitara la camiseta.

Yo no quería pero al ver las lágrimas de Ana, solo podía pensar que esto era culpa suya, pero no se merecía sufrir algún daño solo porque yo no mostrara mis tetas, total con la camiseta que llevaba poco las ocultaba, así que cogí el borde de la camiseta y me la quite rápidamente quedándome ante ellos solo con un pequeño tanga negro.

Bueno ya está, les dije ya las habéis visto os podéis iros. A lo que Jaime me dijo si es verdad, pero si recuerdas esta noche en el botellón todos hemos visto como Ana hacia algo mas con Juan, así que uno de nosotros dos tenemos que conseguir lo mismo de ti, para que veas que contamos contigo, puedes elegir a cuál de los dos se la comerás.

Mi cara cambio de tono, al oír semejante barbaridad una cosa era tener que enseñar las tetas y otra muy distinta hacer una felación. No podía reaccionar cosa que advirtieron y me hizo saber Jorge, que nuevamente amenazo a Ana. Vamos Laura decídete o no querrás que le pase algo a tu amiga Ana, decía mientras apretaba el cuchillo nuevamente contra su garganta.

Yo reaccione, diciendo que no sabía a cuál que lo decidiesen entre ellos, había que ganar tiempo. A lo cual Jaime pregunto a Jesús ¿cara o Cruz?.

No podía creer que se estuviesen jugando a cara o cruz a quien tendría que hacer la mamada, pero era verdad salió cara y gano Jesús, el cual se levantó del sofá y se acercó hacia mí, yo pretendí que me siguiera a la habitación ya que tenía que hacerlo lo mínimo era sin público. Pero los demás protestaron argumentando que cuando fue con Ana todos lo vieron,

Así que me hicieron ponerme de rodillas frente a Jesús de tal forma que todos lo vieran, Jesús se bajó los pantalones y sus bóxer dejando a relucir un gran pene que como todo su cuerpo estaba depilado, el cual estaba ya en un estado de semi-erección debido supongo a mi estado semidesnuda, empecé a acariciarle el pene con la esperanza que todo pasara rápido, hasta que me dijo que empezara ya a comérselo. Puse mi lengua en la base de su pene, junto a los testículos los lamí, lo que era agradable al estar depilados, y fui subiendo poco a poco hasta llegar al glande, cerré mis ojos y empecé a engullir lentamente el pene. Trataba de imaginar que ese pene era el de mi novio y que era él el que estaba allí con migo en la playa como desde un principio tenía que haber sido, casi lograba evadirme de ese momento, sino fuese porque Jesús se dedicaba a sujetar mi pelo para que todos pudiesen ver bien mis movimientos. De repente hoy unos clicks, y Ana riéndose y diciendo ha salido bien, a lo que Jaime contesto que sí.

Abrí los ojos y mire hacia el sofá Jaime tenía en sus manos mi teléfono y el suyo e incluso el de Ana, Jorge estaba desatando a Ana y a Juan y todos se reían.

Trate de liberarme pero Jesús empujo mi cabeza con sus manos, diciendo no pares ahora, y haciendo que su glande entrase hasta mi campanilla, cosa que hizo que me dieran arcadas.

Ana le dijo: Tampoco hace falta que la ahogues, además ya tenemos suficiente.

Jesús me soltó, y yo con cara de extrañada mire a Ana pidiéndola explicaciones que era eso, mientras ellas se morreaba con Juan.

Ana me dijo:- Mira cómo sé que tú eres muy chapada a la antigua, no se me ha ocurrido otra forma mejor de asegurarme de que cuando volvamos de vacaciones no le cuentes nada a mi novio. Si dices algo las fotos y el video que te hemos sacado llegaran a las manos de tu novio. Y no creo que le guste que le hayas puesto los cuernos, jajaja.

Yo le dije que no le había puesto los cuernos que todo lo había hecho por ella para que no le pasara nada, y que los podía denunciar por ello. A lo que me respondió que sería mi palabra contra la de todos. Y se fue a la habitación con Juan.