Tour MUY ESPECIAL

Un terapeuta descubre que las limitantes corporales no impiden el placer sexual para un invidente y un silente

Como recién graduado terapeuta, Emilio decidió tomar un tour para personas handicapped para conocer la adaptación de este grupo social a los retos de la urbanidad. Desde las primeras horas de ir en el transporte terrestre le cautivaron sus vecinos de asiento quienes además de sus talentos únicos eran gays, Emilio disimulaba su observación pues se percataba que los demás no hacían muestras de molestia por como aquellos se besaban y acariciaban.

No solo sus manos eran el medio de comunicación entre ellos ya que traían un pequeño ordenador que expresaba lo escrito con las teclas con relieves de Braille, de tal manera que Octavio escuchaba lo que Ignacio quería expresar sin voz pues era silente.

En una de las escalas del trayecto, Emilio regreso a su asiento encontrando una nota que le invitaba a convivir con Octavio e Ignacio en su cuarto de hotel; Emilio respondió afirmativamente usando el idioma de las manos típico de los silentes.

Vaya que ese si es AMOR VERDADERO!- pensó Emilio- Como era posible que las manos de Octavio pudiesen traducir la belleza física de Ignacio y era una lastima que este no pudiera deleitarse con aquella voz de tenor que tenia Octavio- se asombraba y contaba las horas para estar con ellos en su cuarto de hotel

El vehículo se detuvo en la entrada de un hotel después de recorrer varios kilómetros teniendo como testigo una LUNA LLENA; la guía coordino la asignación de los cuartos y Emilio siguió a sus anfitriones, a penas ingresaron los tres al cuarto y empujaron a Emilio a un sillón para que desde ahí observara su sesión erótica.

Octavio tomo el control de la situación besando cada poro de la piel de Ignacio dedicando mayor tiempo en succionar los genitales, aquella lengua recorría aquella zona con una familiaridad; era evidente que no era su primera vez.

Emilio usaba el ordenador para hacerles preguntas interrumpiendo aquellos sus caricias para responderle.

Por que me habían elegido a mi para ser testigo de su amor?- pregunto Emilio por el ordenador

Nos dimos cuenta de tu interés en nosotros y creímos que deseabas participar en nuestras convivencias sexuales- expreso el ordenador después de que Ignacio tecleara

Respeto sus preferencias pero soy heterosexual- aclaro Emilio- Soy terapeuta y quería conocer como era su adaptación a un mundo tan adverso y poco amigable ante ciertas minorías- escribió Emilio en el ordenador

Con toda confianza te puedes retirar- dijo Octavio

Pero Emilio no se fue así que presencio el orgasmo en aquellos cuerpos desnudos y destilando pasión por sus poros, a pesar de esta muestra de placer no provoco reacción en Emilio ya que actuó como un observador imparcial.

El tour continúo después de recorrer aquella pequeña ciudad y en la siguiente escala volvieron los tres a pasar la noche, de tal manera que en cada escala Emilio fue testigo de diferentes posturas, roles e iniciativas de Octavio e Ignacio para demostrar su cariño.

El trayecto estaba por concluir y Emilio ya no podía ocultar su satisfacción como voyerista con aquellos compañeros de viaje deseando demasiado ser invitado a participar con ellos pues ya estaba cansado de masturbarse a solas después de aquellas sesiones.

En la ultima escala, Emilio se quito la ropa quedando en bóxer de algodón con abertura frontal para masturbarse delante de Octavio e Ignacio mientras tenían sexo sin lograr ser invitado a participar aunque Emilio logro eyacular delante de ellos.

Sin éxito alguno se fue hacia su cuarto asignado y resignado a que no se lograría algo más.

Por ser la ultima escala, cada pasajero tenia su propia fecha de salida del hotel; Emilio como no veía a Octavio e Ignacio pensó que ya se habían retirado así que se fue al bar para convivir con personas fuera del contexto al que había convivido en aquel tour sin el plan de conseguir alguna dama para cuestiones sexuales.

Después de deleitar su oído con la música de jazz que era su favorita se retiro del lugar para irse a su cuarto, su sorpresa fue indescriptible después de percatarse que ahí estaban Octavio e Ignacio recostados en la cama invitándolo a colocarse entre los dos.

Ignacio se enfoco en el torso de Emilio y Octavio de la cintura a los pies, Emilio estaba embriagado de tanto placer; su cerebro apenas podía procesar las sensaciones recibidas de las terminales nerviosas de su cuerpo alteradas por las manos y lenguas de aquellos.

La eyaculación se hizo presente e Ignacio esparció aquella crema viril por el torso de Emilio para que luego Octavio aplicara de nuevo sexo oral en aquel falo que había estallado recientemente, Mientras tanto, Ignacio exploraba el ano de Emilio quien no ponía resistencia a ello a pesar de sus firmes preferencias sexuales.

Así que Ignacio consiguió dilatar aquel orto primero con su lengua luego con sus dedos y por ultimo con su falo cubierto por un condón de látex especial para sexo anal, Emilio miraba el techo mientras era penetrado por Ignacio y succionado por Octavio hasta lograr otra eyaculación.

Aunque Emilio estaba completamente satisfecho, no era así para Octavio y Emilio; así que Emilio dirigido por Ignacio se sentó sobre los genitales de Octavio siendo penetrado por este. Los movimientos circulares y laterales de Emilio impedían que Ignacio pudiese succionar así que opto por colocarse detrás haciendo una doble penetración en Emilio por el ano.

En esa noche, Emilio no solo había estrenado su trasero sino que también había disfrutado de dos penes simultáneos; después de logrado el clímax en Octavio e Ignacio los tres durmieron en la cama hasta despertarse en la tarde estando Emilio solo en aquel cuarto.

En una hoja tamaño carta Octavio e Ignacio le agradecían por haber hecho de este TOUR ALGO MUY ESPECIAL dejando anotado sus datos pues lo invitaban a pasar unas semanas en su casa; invitación que Emilio obviamente no rechazo laborando en un hospital ubicado en la misma ciudad donde había terminado el TOUR, por eso Octavio e Ignacio no se hospedaron en ese hotel.