Torrente: operacion Rescate de el Fary

¿hay gilipollas después de la muerte?

Yo me levantaba de mi cama, me desperezaba feliz, los pájaros cantaban, el cielo era azul, cantando y bailando iba a ver la única carta que le habían enviado y…….

Los pájaros lloraron.

Las nubes presagiaban tormenta.

La carta era del banco, el euroibor había subido y en vez de 900 euros mensuales tenia que pagar 2200 ¡quincenales!.

Bueno, un mes en el que hay que subsistir con un garbanzo diario, ¡que larga se va haciendo la hipoteca!.

Llamo al teléfono de una chica que conocí en una discoteca, ¡que curvas! ¡que ojos! ¡que pechos! Me había gastado 70 euros en invitarla a copas y a bares y

¡era el teléfono de un camionero de Huelva! ¡de los que siempre huelven!.

Decidido, voy a hacer una tesis, ligues o putas ¿qué sale más barato? Yo ya lo tengo claro, las prostitutas salen más baratas, ahora solo queda document……..

¿qué ha pasado? ¿algo me golpeó? Solo veo una sombra oronda con olor a whisky barato.

-¿quién es usted? Le pregunté adolorido.

-chaval, tenemos una misión que cumplir, me decía mientras me apuntaba con un revolver.

-¡oiga! ¡POR FAVOR! ¡NO DISPARE! ¡¿QUÉ QUIERE DE MI?! ¡POR FAVOR! ¡NOOOOOOOOOOOOOO! – suplicaba inútilmente antes de oír la detonación del arma, el fogonazo del cañón, era curioso, el momento de tu muerte transcurre a cámara lenta, ves perfectamente como la bala atraviesa el cráneo y destrozaba tu cerebro, después, te sientes libre, ves tu cuerpo inerte, veo como el que me mató se apuntaba el revolver en la cabeza y se la volaba desparramando sus sesos.

Yo….. nunca había sentido tanta paz. Me elevaba por los aires, había como un agujero de gusano y al final una luz, una luz que me ilumina, mi piel siente un calor delicioso, mis oídos música celestial, mi nariz un delicioso olor a jazmín, en mi boca siento platos deliciosos que no había probado nunca.

Unas alas blancas salen de mi espalda, siento que puedo volar, que no he de preocuparme nunca más.

-AAAAAAAAUUUUUUUUUUUAAAAAAAAOOOOOOOOIIIIIIIIIIIIIGGGGGGGGGGGHHHHH – grité yó cuando algo me agarra de los huevos y vi una mano roja perteneciente a un orondo demonio con una cara conocida.

-¿To-Torrente? – pregunté.

-pues si, chaval, ahora aletea que hemos de rescatarle – decía Torrente.

-¿rescatar a quien? – pregunte.

-¿a quien va ser? Chaval, al mejor, al maestro, al number one ¡AL FARY! – decía Torrente que con su apariencia de demonio parecía un cerdo con sobrepeso.

-¿me matas y ahora me pides que te ayude? ¡tus muertos! – decía yo.

Y en los muertos de Torrente me estaba cagando cuando me apretó los testículos con fuerza, aletee con fuerza, ¡que larga se hacia la subida! ¡SOBRETODO CON 250 KILOS DE DEMONIO AGARRÁNDOTE LOS HUEVOS!.

Cuando llegamos pensé en el papa, decía que los ángeles no tenían sexo, se equivocaba, claro que tenían, aunque yo ¡YA DESEABA NO TENERLO! Miro mis testículos y ya me imagino si se enteran los escritores de Todorelatos, allí esta Caja, el de los cojones largos.

-uf, desde luego, agotador subir a este sitio ¿eh? – decía Torrente mientras se secaba el sudor?

¡EL CANSADO! Mis alas casi se me fracturan por el esfuerzo, mis testículos parecían una comba y además ¡HEMOS DE IR A POR UN CANTANTE! la muerte no da miedo, es la otra vida la que si da miedo, sobretodo si empieza así.

-bueno chaval ¡a rescatar al Fary! – decía Torrente.

-¡una mierda! ¡¿por que no te suicidabas tu?! – le pregunté.

-intenté vender mi alma al diablo, pero ya se la vendí para que mi amado atleti fuese doblete de liga, entonces pensé, ya que me debías una pajilla – decía Torrente.

-pues buscas al Fary tu solo, yo me voy a disfrutar del lugar – le decía con desprecio.

Torrente me cogió de los testículos y amenazaba con tirarse conmigo hacia el infierno, lo único que podría hacer para evitarlo era batir las alas mientras el me agarraba.

Con argumentos tan aplastantes fuimos a buscar al Fary, había ángeles de todo tipo, animales y humanos, entre los humanos había de toda las razas.

-joder, hasta aquí hay inmigrantes de mierda – decía Torrente señalando un grupo de ángeles de color.

Lo que si me fijé eran unas luces que brillaban, pregunté a uno de los ángeles, este me dijo que esas luces eran también seres vivos que habitaban en la tierra, pero que la forma que tenia yo ahora era una forma residual que se había adaptado al cuerpo y que a través de los siglos me convertiría en una luz blanca.

La verdad es que eran hermosas, iba a tocar una de ellas, esa luz se me acercaba aceptando que la tocara, pero cuando iba a tenerla, algo tiró de mis alas.

-¡venga chaval! Que no tenemos todo el día – decía Torrente.

¡por que no seré Budista! ¡podría reencarnarme en un animal y sentirme libre y feliz en vez de pasarme la eternidad con un residuo del régimen franquista.

Santo cielo, había hermosos platos de comida (tres meses a base de verduras debido a la hipoteca te hace echar de menos algunas cosas) hermosas ángeles que superaban incluso a las modelos del playboy ¡y me guiñaban un ojo! Amigos, mascotas y compañeros de juergas que se mataron de accidentes que me saludaban ¡¿Y HE DE PERDER EL TIEMPO CON UNA BUSQUEDA ABSURDA?!.

En ese momento una joven de cabellos pelirrojos nos cerró el paso, me sonaba su rostro y me daba la sensación de que tenia un gran poder.

-deteneos, se vuestro objetivo, no permitiré que cumpláis esa locura – decía la ángel pelirroja.

-bueno, nos detendremos si nos la chupas, putita – decía Torrente.

Esa ángel frunció el ceño y dijo con voz poderosa.

-¡como te atreves humano! ¡yo anuncié á llegada de Cristo! ¡yo dicté el Corán a Mahoma! ¡robo las almas de los no bautizados del purgatorio para ponerlas en los vientres de las embarazadas! ¡¿así me lo agradecéis?! – decía la ángel que ya recordé su nombre, Gabriel.

-o sea que fuiste tu la que hizo esa mierda de religión de moros – decía Torrente apuntándola con su tridente.

Cuando leí las historias de Gabriel, no me parecía concebible una parte de ella, pero se había confirmado, desplegó 140 pares de alas diez veces más grandes que las mías y con un batir de ellas formó un huracán que nos envió a la otra punta del cielo.

Yo aterricé (mas bien me estrellé) en una nube, entonces oí la canción de torito bravo, siguiendo la canción, me encontré con ¡El Fary! ¡CON 7 HERMOSAS MUJERES QUE CON SU VISIÓN ME LEVANTÓ EL RABO HASTA SUPERAR LA ALTURA DE MIS HUEVOS! (eso tiene mérito debido a lo mucho que Torrente me los estiró) voy a verle y le dije.

-siento mucho decirle esto señor Fary, pero he de llevármelo a la tierra porque un energúmeno me ha enviado a buscarle.

Las chicas al oírme se me lanzaron a por mi, acariciándome, sobándome y dándome las gracias, porque.

¡ELLAS HABIAN COMETIDO PECADOS ESPANTOSOS Y HABIAN SIDO CONDENADAS A SER LAS CHICAS DEL FARY!

La verdad, feo, no es, eso si, tampoco era para tirar cohetes.

A pesar de las quejas del Fary, me lo llevé de allí, no tardé en comprobar que Torrente había hecho amigos ¡todo el ejercito de ángeles iban a por el y nos rodeó! Estabamos perdidos, no había nada que hacer hasta que.

Se me encendió la bombilla.

Cogí un limón y abriendo la boca del Fary le exprimí el limón, depositando el ácido liquido en su boca y les mostré al Fary a los ángeles.

Estos, espantados por el deformado careto, huyeron del lugar (aquí en el cielo solo están acostumbrados a las cosas bonitas).

Bueno, ahora íbamos a irnos a la tierra cuando.

¡Vimos a Dios!

No podría describirlo, pero, sentía el corazón lleno de gozo, de alegría.

-escúchame, luz de los cojones, ¡nos vas a resucitar a nosotros y al Fary ipso facto! ¡cagoen Dios!

El corazón se me salía por la boca ¡que coño le pasa a ese hijo de puta llamado José Luis Torrente! No pude mas que decirle a Dios que lo perdonara, que no sabe lo que hace.

-esa frase es mía – decía Jesucristo con una sonrisa.

Iba a disculparme por eso, pero antes de decir nada me respondió.

-tranquilo, si no os he tenido en cuenta, los latigazos y la crucifixión ¿cómo te tendré en cuenta esto?.

Lo raro es que no tuviese en cuenta la crucifixión ¿no habéis visto la pasión de Mel Gibson? Pues miradla y veréis que faena le hacen.

Dios nos dijo que Fary le había llegado su hora, que se había ganado su premio eterno y también, ¡que era la primera persona que venia aquí desde la llegada del Papa Juan Pablo II.

Pero Torrente…….

¡se sacó la pilila! (si, pilila, cualquier pene menor a 8 centímetros es una pilila) y ¡SE ORINÓ SOBRE DIOS!

Mi corazón ya iba a 300 por hora, me cagué hasta que se me salió el sistema digestivo por el culo, temblaba tanto que si me ponen un vaso de leche en mis manos se convierte en yogur, ¿creéis que Dios está enfadado? ¡pues claro! Es bondad, pero también sabe hacerse respetar, con una potente voz nos anunció un castigo que duraría toda la eternidad ¡¿POR QUE TENIA QUE CONOCER A TORRENTE?! ¡¿POR QUÉ?!.

15 días después

Dios nos resucitó, la verdad es que el castigo que nos impusieron era raro, pero supongo que es por "la gracia de Dios".

Yo que antes era un hombre, ahora soy una chica, aparentemente de 22 años, de grandes senos y cintura de avispa y piernas torneadas, seria eternamente una mujer, ¿pero me quejo? Noooooooooooooo.

Enciendo la tele.

¡pierda 4 kilos en una semana! ¡tendrá el tipo del verano! – decia una chica de buenas medidas en un anuncio de dietas.

Yo me reía, ¿cómo conseguí esa cintura de avispa, pues con la hipoteca, pedid una hipoteca y vereis como os moris de hambre.

Ahora ponían las noticias

-nueva ola de inmigrantes en España, millones de inmigrantes de todas partes del mundo vienen, pero no a trabajar, han tomado España como un destino sexual, pero no con las mujeres españolas, sino por una sola mujer, estos son algunos de los viajeros.

Mobutu M’pongo (Sudáfrica): la vagina de Torrenta es mágica, puede curar el SIDA solo con follar a pelo.

Ernesto López (Ecuador): ¿qué no conocen a Torrenta? ¡la maravillosa Torrenta! ¡¿pero que mundo vive usted?!

Mohamed Rashid (Argelia): Torrenta no es una mujer, es un regalo del cielo para que los hombres podamos disfrutar de sus hábiles artes.

Manuel Méndez (Méjico): no solo te cura todos tus males, sino que además coge rico, cuando digo que Torrenta coge rico, LO HACE RICO RICO.

Tras apagar la tele y cortar un trocito del único garbanzo de mi plato, vi que Dios le había dado fama a los colectivos sociales que Torrente odiaba, hasta jugadores y Ultras del Real Madrid y del Barcelona se pasaban para follarla, si, Dios es bastante gracioso, intento coger una carta que coloque a un lado de la mesa.

¡joder! Estas tetas no te facilitan algunas acciones, tengo que usar la otra mano para cogerla.

Miro la carta.

La vuelvo a mirar.

¡no puede ser!

La miro otra vez y leo en voz alta.

Aviso de embargo.

¡ME VAN A EMBARGAR MI CASA! ¡YO QUE HE TENIDO QUE COGER TRES TRABAJOS! ¡ QUE HE TENIDO QUE SUBSISTIR CON UN GARBANZO AL DIA! ¡ME VAN A EMBARGAR! ¡SE VAN A ENTERAR ESOS MIERDAS!

Cogí ropa nueva para ir a ver a los del banco, la verdad es que los senos incomodaban un poco y como era ahora de menor tamaño, la ropa me quedaba enorme.

Nada me quedaba bien, no tuve más remedio que ponerme una camiseta y unos pantalones vaqueros e ir para alla.

Mientras caminaba con rapidez, podía oír de los hombres,

-¡preciosa! ¡yo me ofrezco para satisfacerte todo el tiempo.

-preciosa, ven conmigo y jamás pasaras hambre.

-si te mueves en la cama tan bien como te mueves caminando me ofrezco a hacerte mujer.

Me incomodaban esos comentarios, pero tenían esa gente sus motivos, no tenia sujetador y la camisa no era gruesa, por lo que mis senos se notaban como si estuviesen desnudos y….

¡la camisa tenia un texto que rezaba "alejaos, llevo 5 minutos sin sexo"! ¡con las Os sacando lengua de forma lasciva!, desde luego me estaba jodiendo mucho este castigo, debo cambiar totalmente mi vestuario.

Al llegar al banco, pedí explicaciones a los del banco, solo me daban largas, exigí hablar con el director, pero decían que estaba ocupado.

En ese momento, el teléfono del cajero sonó, me extrañó que hablase de forma tan respetuosa, en ese momento me señalaron el despacho del director.

Yo pasé con rapidez y empecé a gritarle que había pagado sus abusivos plazos RE-LI-GI-O-SA-MEN-TE y que me iban a embargar la casa sin motivo.

El director era un cincuentón que se conservaba bien, pelo corto y canoso, sus arrugas denotaban una juventud muy movidita, iba impecablemente vestido, un cuerpo en forma, el típico banquero perfeccionista y disciplinario con sus empleados.

-según esos documentos, parece que tiene razón, ha habido un error en los pagos, me encargaré de subsanarlo, no se preocupe, no la embargaremos – decía el banquero.

Ya me calmaba, es más me parecía un tío de puta madre.

-sin embargo, comprenderá que nosotros no podemos hacer nada para modificar los plazos, el euribor es algo que está fuera de nuestro control y que depende de muchos factores y hay muchas posibilidades de que vuelva a subir – decía el banquero.

¡que deprimente es comprar una casa! Tendré que comerme las uñas y los cabellos que me crezcan y beber el agua del water para subsistir.

El banquero me miró a los ojos y me preguntó.

-¿le cuesta llegar a fin de mes?.

-un poco, pero hace tres días me pegué un pequeño capricho cuando encontré tres hamburguesas en un cubo de basura – decía yo recordando ese día como el más feliz de mi época de hipotecado.

-tenemos métodos para evitar estos pagos tan… abusivos, con el dinero que se ahorrará podrá comprarse nuevo vestuario, podrá ir de fiestas, dedicarse a su hobby – decía el banquero.

Mis ojos brillaban con esperanza, ¿irme de juerga el fin de semana? ¿comprar videojuegos? ¿escribir un libro y mandarlo a la editorial? ¿ligar y follar como un cabrón? Dios mío, se me había olvidado completamente estos placeres.

-¿qué métodos son estos? – le dije ilusionado.

-verá, me gustaría que viniese a mi casa, allí doy una fiesta, habrá marisco, caviar, angulas, cochinillo, pavo, sushi, pastel de carne…. Decía el banquero.

¡si no paraba de decir platos de comida me deshidrataría! Estaba babeando, podía decir definitivamente adiós a las privaciones.

-aquí está mi dirección y dinero para que se compre un vestido y un traje de baño, tengo una piscina con jacuzzi que seguro que le sienta bien – decía el banquero.

¡que tío mas amable! Hasta que cuando bajé mi vista para ver el dinero y la dirección ¡vi mis tetas! ¡pues claro que el hijoputa era amable conmigo! ¡yo era ahora una chica! ¡y me tiraba los tejos!.

-espero impaciente su visita, confío que lleguemos a un acuerdo – decía el banquero mientras me besaba la mano.

Cuando salía, mi mente estaba debatiendo entre ser la puta de ese banquero o mantener la dignidad y pagar la puta hipoteca o en caso extremo, ser del movimiento okupa.

Dios te da castigos chungos, realmente chungos.