Tomame

Te busque desde siempre y jamas imagine que seria en aquel lugar donde te encontraria.

Te busque desde siempre y jamás imagine que seria en aquel lugar donde al fin podría encontrarte.

Hasta hace poco descubrí que lo que necesitaba en mi vida para ser totalmente feliz era a esa persona que volcara mi corazón y me desarmara con una simple mirada, un breve roce, una palabra, un beso apasionado; mas aun, descubrí que ese ser no era cualquiera si no que era alguien muy parecido a mi, alguien que seria la expresión misma de la belleza y que únicamente la encontraría dentro del maravilloso mundo de mi genero. Comencé mi búsqueda luego de saber que esa era mi felicidad, intente distinguir de entre las multitudes esa luz que resplandeciera en medio de la penumbra mas mis ojos no lograron iluminarse en ningún momento. Luego de mucho tiempo y de muchos lugares, me dispuse a darme un descanso y me aleje de todo aquello. Volví a mi vida cotidiana y continué la rutina establecida; justo cuando estuve a punto de rendirme te vi.: un dia entre a un sitio que parecía muy tranquilo (justo lo que necesitaba) ya que me disponía a tomar un café mientras disfrutaba de un buen libro. Luego de unos minutos y algunas páginas recorridas entraste al mismo establecimiento y ocupaste una mesa cercana a donde yo me encontraba.

De un momento a otro todo cambio, no pude evitar contemplar ese hermoso cuerpo enmarcado por un rostro precioso que estaba coronado por un cabello negro intenso que hacia resaltar cada una de las facciones de aquel ángel. Nariz fina, labios rojos y carnosos que invitaban a ser probados eran algunos de tus atributos mas era tu mirada la que en verdad me tenia hechizada, esa profunda mirada expresada a traves de unos ojos vedes oscuros que hipnotizaban con solo verlos. Era tan evidente el estado de desconcierto en el que me encontraba que sin notarlo comenzaste a sonreírme, lo que por cierto me termino de derribar ante ti pues jamas había tenido la gracia de ver sonrisa más perfecta que aquella.

Te acercaste a mi mesa y preguntaste sin no me importaba que me hicieras compañía; lo único que pude hacer fue asentir mientras sentía como un fuego quemaba todo mi cuerpo. Conversamos, reímos, disfrutamos de cada momento que estamos compartiendo, luego de una larga plática notamos que el tiempo se nos había pasado mientras nos sumergíamos en temas y miradas más candentes…….la química y energía que fluía entre nosotras era muy muy fuerte.

Tenias que irte- dijiste- yo por supuesto me ofrecí llevarte (como perder aquella oportunidad); llegamos a tu casa y cuando pensé que no volvería a verte al despedirte pronunciaste la frase que nos llevo a la perdición: -quisieras pasar y tomar la ultima taza de café?- pero claro-respondí

Apenas cruzamos el umbral de la puerta sentí como me jalaste hacia dentro y me arrinconaste en la pared… no aguantaba mas- susurraste cerca de mi oído- y me besaste. No puedo describir lo que sentí en ese momento, una corriente calida recorrió mi ser mientras empezabas a besar mi cuello y rozar mis senos con tus manos….nos separamos y te disculpaste mas lo único que pude hacer fue decirte que no tenias por que hacerlo pues yo quería sentirla así tan cerca de mi desde el momento en que entro en el café; la bese apasionadamente, busque su lengua y la masaje con la mía, sentí su aliento mezclarse con el mio y fundirse cual soplo divino.

No aguantamos mas y nos arrancamos la ropa y recorrimos cada parte de nuestro cuerpo con nuestras manos, con nuestras lenguas, con nuestras narices, con nuestra piel...sentimos el calor, el latido de nuestros corazones, el pulso acelerado cada vez que nuestros cuerpos se unían.

Te bese, te olí, te lamí, te ame como nunca antes lo había hecho. Te entregue todo ese fuego intenso lleno de pasión que quemaba mi interior por poseerte.

Ahora estoy aquí, leyendo y escribiendo esta historia que espero, deseo, ansió que alguna vez suceda contigo ser sublime que estas ahí al igual que yo esperando por aquella noche soñada.