Todo vale
En la guerra todo vale.
Las balas silbaban a su alrededor, mientras el polvo de los ladrillos y la tierra inundaba el aire sin dejar ver nada. La mayoría de sus hombres habían caído bajo el fuego enemigo, el país había entrado en una escupida guerra civil y la mayoría se habían visto envueltos sin ni siquiera encontrarle sentido.
De repente las balas dejaron de sonar, y solo se escucho el silencio, y el sonido de sus propias respiraciones, agitadas por la tensión de la batalla.
Se encontraban en el interior de una fábrica en la cual se encontraba un centro de operaciones del enemigo. Hizo señas a sus hombres y se dispusieron a entrar en la estancia, de la cual solo unos minutos antes, habían salido cientos de balas rozando sus cabezas he incluso hiriendo de muerte a muchos de ellos.
El iba a entrar por la puesta lateral, mientras los otros 2 que quedaban entraban por la principal, allí no había nadie, a cada lado de la estancia, una escalera que subía hacia la zona de oficinas del edificio, ordenó a sus hombres que subiesen mientras el inspeccionaba la parte de abajo. A los pocos segundos oyó un grito ahogado, se dispuso a subir a toda prisa, y volvió a oír otro grito y un disparo. Corrió lo más rápido que pudo, y allí en una habitación encontró el cuerpo sin vida de uno de sus compañeros.
El miedo inundaba su mente, su respiración se agitaba mientras los latidos de su corazón golpeaban su pecho. Paso a la siguiente estancia y vio como de detrás de una mesa, salía un charco de sangre, se acerco con sigilo y allí encontró el otro cuerpo de su otro compañero, tenia el cuello cortado de lado a lado.
Cada vez estaba mas aterrado, empezó a notar como sus piernas temblaban, cuando oyó el ruido de unas cajas a unos metros frente a el. Se acerco, y allí tumbado vio a un soldado del ejercito enemigo, su cara estaba cubierta, por una máscara anti gas. Su pierna derecha estaba atravesada por un balazo.
Apunto con su arma al hombre que estaba en el suelo. Estaba apunto de dispararle y acabar con su miserable vida, cuando recordó las ordenes que le habían dado. Debían intentar conseguir rehenes y sacarles toda la información posible, en esta guerra valía todo.
Mientras le apuntaba, le ordeno que se incorporase y se diese la vuelta. Saco unas esposas y le ato las manos a la espalda.
Con todos sus compañeros muertos y en ese recóndito lugar con un prisionero, se dispuso a pedir ayuda por radio pero la radio no funcionaba. Estaba atrapado en ese lugar hasta que su ejército se preguntase que había sido de ellos.
En un acto de bondad, y a la espera de los refuerzos, se dispuso a curarle la pierna a su prisionero, que ahora yacía inconsciente en el suelo, pues debía salvarle la vida ya q muerto no le servia.
Le rasgo el pantalón, y se encontró con un muslo totalmente depilado, con una piel morena tostada al sol. Le extraño, pero simplemente se dedico a curarle la pierna, cuando acabo le ato a una tubería, y se fue a buscar comida.
Cuando llego su rehén había despertado, y al verlo pego un respingo, sobre su sitio, y con impotencia se encontró con una huida frustrada por las esposas que sujetaban sus manos a la espalda.
Le saco la mascara de la cara, y bajo ella descubrió el rostro de una mujer, era súper atractiva, pero el solo podía pensar en que esa zorra había matado a sus compañeros.
Le quito las esposas. Y le cogio del pelo tirándole en medio de la estancia. Desnúdate le dijo o te mato. Ella se negó y le escupió en la cara. Lleno de ira el la propino un tortazo en la cara, que la hizo caer al suelo.
Zorra si no lo haces tú tendré que hacerlo yo, y seguro que no te va a gustar. La volvió a coger del pelo y la levanto de nuevo. Hazlo le dijo, y le volvió a pegar otro tortazo. Esta vez comenzó a quitarse la ropa, y poco a poco fue descubriendo un cuerpo, que pocas veces había visto. Era alta delgada, con unas tetas pequeñas, pero firmes, y con un culo redondito, que a el por un momento le excito, su cuerpo era perfecto, si la hubiese conocido en otra situación, habría pensado que era una modelo. Su pelo era oscuro, casi negros y sus ojos del mismo color.
La mujer se quedo en ropa interior, y el odio se veía reflejado en sus ojos. Quítate todo dijo el, pero ella se negó, pero tras un par de totazos, accedió a hacerlo. Te matare dijo ella, como he matado a tus amiguitos. El sintió como un calor le subía por el pecho hasta la cabeza, y enloquecido la cogio atándola sus manos a la espalda y le pego contra una pared con su cara pegada a ella y agarrándola del pelo.
Le separo las piernas con gran violencia y le dijo, vas a pagar por lo que has hecho puta.
Voy a cachearte. Ella intento resistirse pero fue imposible. El comenzó a tocarle todo su cuerpo desnudo mientras ella se retorcía intentando escapar, sus manos recorrieron sus pechos haciendo verdadero hincapié en sus pezones. Fue bajando sus manos y se topo con el fantástico culo que había visto, metió su mano entre sus piernas y se encontró con su coño, comenzó a tocarlo mientras ella gritaba y le decía de todo.
Cállate perra y cogiendo la camisa que hace unos minutos cubrían esos hermosos pezones se la puso en la boca a modo de mordaza.
La excitación y la lujuria empezaron a poseer su cuerpo, tocando su coño bien depiladito. Bien puta de momento parece que no escondes nada, con una mano separo sus labios y con la otra le empezó a acariciar el clítoris. Su coño inconscientemente empezó a mojarse, por el tacto de los dedos del hombre sobre el.
Así que te gusta pedazo de puta eh? Te estas mojando entera, vas a sufrir guarra, vas a pagar. Y con los labios bien separados, comenzó a meterle un dedo por su rajita mojada, ella lanzo un grito q la camisa bien atada a su boca amortiguo. Siguió metiéndole el dedo y jugueteando con su interior, el coño estaba cada vez más mojado, luego metió otro dedo y luego otro y otro. Le había dejado la raja bien abierta, y su jugo rebosaba de ella, chorreando y empapando el interior de sus muslos.
Ella comenzó a sentir en la espalda, como se clavaba el miembro de el. Por lo que sentía notaba que era un miembro grande, mas de lo normal. Entonces sintió mucho miedo, estaba totalmente segura de la suerte que iba a correr.
Dejo su coño bien abierto y chorreando, y deslizo su mano hacia atrás, con gran brusquedad, le introdujo un dedo en el culo, ella intento gritar de nuevo, pero fue en vano.
Vaya culo mas rico que tienes zorra, yo no te matare, pero vas a desear que lo haga.
Mientras le introducía un par de dedos por el ojete y los giraba en su interior, la agarro de su larga melena morena y la arrastro asta una mesa donde la puso, con los pies en el suelo y el tronco tumbado boca abajo. En esa posición, su culo quedaba bien expuesto a los deseos de el. Que cada vez eran mayores y más evidentes.
Cogio unas cuerdas y abriéndole bien las piernas ato cada una a una pata de la mesa, dejándola bien abierta.
Se agacho tras de ella y comenzó a lamerle el coño por detrás, saboreando sus jugos, y jactándose de lo sabrosos que estaban, siguió lamiendo su clítoris y su raja, subiendo y bajando, incluso llegando al culo, saboreando su agujerito, que había quedado un poco abierto después de haberle introducido los dedos.
Se subió encima de la mesa, de rodillas. Agarrándola del pelo, la incorporo, aunque aun tenia sus piernas atadas a la mesa, y con su pistola en una mano y su melena en otra le dijo, con una voz dulce, pero con un fondo malicioso, ahora princesita, me la vas a chupar, y lo vas a hacer muy bien, porque si intentas algo, te voy a pegar un tiro en la puta cabeza, además con esa cara de zorra que tienes seguro que te encanta comer pollas ¿verdad? Y dicho esto le introdujo su verga en la boca. Ella comenzó a lamer y a metérsela y sacarla mientras sentía el frió metal de la pistola rozando su sien. Mmmm muy bien guarra, que bien lo haces, ves como te gustaba. Tranquila que vas a poder chuparla muchas más veces, no quieras comerla toda ahora. Cómeme los huevos, chúpalos bien, métetelos en la boca. Y ella con las lágrimas ya asomando en sus ojos, obedeció sin rechistar.
Después de esto volvió a taparle la boca con la camisa, y salio de la habitación, dejándola allí indefensa, y con todo su sexo bien expuesto. Ella oyó como los pasos de el se dirigían al exterior de la nave. Era su oportunidad de intentar escapar, retorciéndose y contorsionándose, consiguió aflojar las ataduras de sus piernas, finalmente se soltó, y saliendo de la habitación, comenzó a correr con su cuerpo desnudo y su pierna magullada lo mejor que pudo, salio de la nave, y por un momento la sensación de libertad inundo su cuerpo, pero duro escasos segundos, porque su huida fue frustrada, el con gran agilidad corrió hasta ella y la agarro de la cintura, placándola y tirándola al suelo.
Puta zorra, intenta escapar eh? No me puedo ir ni a mear, pues la próxima vez tendré que mearte encima para no perderte de vista. Y agarrándola fuertemente la volvió a llevar a la estancia de su cautiverio. La volvió a atar tal y como estaba anteriormente.
Ahora puta vas a aprender que no puedes escapar, y que mas te vale que colabores y si quieres empieces a disfrutar, pero realmente eso me importa una mierda.
Se quito el cinturón que agarraba sus pantalones, y le empezó a azotar su lindo culo. Ella empezó a gritar y a moverse intentando liberarse, y el cada vez le daba mas fuerte, le propino muchos golpes incluso alguno fue a parar a su coñito, que aun estaba húmedo. Su culo comenzó a ponerse rojo y ella lloraba por el dolor.
Muy bien zorra, ahora te voy a quitar la mordaza, quiero oírte mientras te follo, ese lindo culo.
Se la quito y le pregunto que si alguna vez le habían follado el culo, que tenia pinta de ser muy guarra, y ella llorando le dijo que no y le suplico que por favor no lo hiciera.
Suplica perra que eso me gusta, y hoy lo vas a probar, seguro que te gusta guarra y te mojas como una perra en celo. Te lo voy a hacer bien fuerte para que notes como mi polla te rompe el culo.
Vamos a probar ese coñito rico, le empezó a meter su pedazo de polla por la rajita que rezumaba líquido de su interior caliente, ¿te gusta eh guarra? Sabes que si. Ella intento resistirse, pero su chocho, súper sensible poseyó sus sentidos, y sin casi darse cuenta empezó a gemir de placer, cada vez estaba mas y mas mojada. Su mente estaba confusa y dividida, ¿como podía sentir placer, con aquel hombre? Un enemigo que la estaba obligando a hacer todas esas cosas, pero con esa polla tan grande y apetitosa, y ese cuerpo. En ese momento se dio cuenta de lo q estaba pensando, no podía sentirse atraída por el, e intento desechar esa idea de su cabeza, pero su cuerpo fuera de si seguía sintiendo ese exquisito placer. Sintiendo un calor que le llenaba el cuerpo y notando como su coñito se estremecía, se corrió dejando mojadísima la polla de su enemigo.
Ves perra, pero si te has corrido y todo, y sacando su rabo, metió su mano entre las piernas de su mujer, y se empapo los dedos con su flujo, mira perra que corrida mas rica, chúpame los dedos guarra, prueba lo perra que eres, y con un tortazo consiguió que ella accediese, y así empezó a chuparle los dedos como si de una polla se tratase. Muy bien puta, ahora tu culito virgen va hacer q me corra.
Cogió su rabo con la mano, con la otra separo las nalgas de la mujer, y posando la cabeza de su miembro sobre su ojete dijo, vamos haya perra, que sepas que te va a doler, espero que no llores porque si lo haces tendré que castigarte, los soldados no lloran.
Y dicho esto le metió todo su miembro en su lindo culo del tirón, notando la presión que hacia en su polla ese culo recién estrenado. Ella grito, y noto como algo se desgarraba dentro de ella, y un dolor intenso le oprimía el vientre, el empezó a meterla y a sacarla muy fuerte sin compasión, y ella notaba mas y mas dolor, no pudo evitarlo y comenzó a llorar, y a suplicar clemencia, esto lo único que hizo fue incrementar el deseo del hombre, que siguió dándole mas y mas fuerte, mientras le pegaba azotes acompasados con el ritmo de sus caderas. Ya sabes lo que te dije perra, has llorado y en cuanto acabe con tu culo recibirás tú castigo.
Y así siguió dándole mas y mas, el dolor de su culo poco a poco fue haciéndose mas débil, y así mientras el tocaba su coño húmedo, comenzó a sentir un placer morboso, difícil de contener, notaba como le rebotaban los huevos del hombre, y se sintió sucia como una perra, por el placer que estaba sintiendo, en el transcurso de la enculada, volvió a correrse un par de veces.
El ya estaba a punto de correrse, saco la polla y se corrió sobre la mesa donde ella estaba recostada, salpicando también su cara. ¿Tienes hambre perra? Pues quiero que dejes la mesa reluciente, así que cometelo todo, aquí empieza tu castigo.
Ella no pudo negarse, pues sabia que el estaba armado, y después de lo q le había hecho ya podría ser capaz de cualquier cosa, así que pasando su lengua por la mesa comenzó a comerse la corrida, que aun estaba caliente. Mientras ella comía y comía el semen, el la empezó a azotar el culo con la mano abierta, y así estuvo un buen rato, mientras ella lloraba, por la humillación que estaba sufriendo, y por el dolor corporal que había recibido.
Después de esto, la desato de la mesa, y con las manos aun atadas a su espalda, la dejo descansar sobre unos cartones, allí la dejaría dormir. Llego la noche y los dos se dispusieron a dormir, esperando la llegada de un nuevo día. Ella no podía permitir que ese cerdo la volviese a violar, ni siquiera ella sabia como pero consiguió pasar sus piernas entre sus brazos y llevar sus manos aun atadas al frente de su cuerpo, y así mientras el exhausto por la batalla y la follada dormía profundamente, le quito las llaves de las esposas, y el arma que dormía al lado de el. Pero ella no se fue, se desato y tranquilamente cogio su ropa, se vistió, y se sentó en una silla frente a su captor, esperando que este despertara.
Abrió los ojos y fue a coger su arma, pero esta no estaba, se dio la vuelta sobresaltado, y allí vio a la mujer apuntándole con el largo cañón de su pistola.
Date la vuelta cariño le dijo ella, y con las mismas esposas con las que había atado sus manos le ato las manos a una tubería que pasaba por el bajo techo de la habitación.
Le quito los pantalones, y allí quedo su polla ahora flácida expuesta para ella. Ahora se sentía poderosa, y un sentimiento de venganza recorrió su cuerpo.
Cogio un palo y abriendo sus piernas ato sus tobillos cada uno a un extremo, dejando sus piernas bien abiertas.
Se acerco a el jugueteando con la pistola en sus manos, viendo como el ratón había cazado al gato, la frágil mujer que la había poseído el día anterior había desaparecido, y daba paso a una mujer segura y con un sentimiento de poder y venganza que reflejado en sus ojos hizo q el hombre temblase.
Le agarro de los huevos que colgaban entre sus piernas, y los apretó un poco, lo justo para que a el le doliese, pero al mismo tiempo sintiese placer, por lo que su polla empezó a erguirse.
Así me gusta, va a ser una pena desperdiciar una polla así, pero bueno cambiando de tema. ¿Alguna vez te han dado por el culo? Pues yo te lo voy a romper. Y dicho esto, le puso el seguro a su pistola y se la metió del tirón al hombre, tal y como el había hecho con su polla, el día anterior. Las lágrimas aparecieron en los ojos del hombre. Pero nene tú no te vas a correr. Ahora mismo podría pegarte un tiro en el puto culo, y acabar con tu mísera vida, pero voy a ser buena, y simplemente te voy a dejar aquí colgado, no me manchare las manos con tu sangre, porque aunque a la fuerza, ayer me hiciste gozar como una perra.
Le beso en los labios y desapareció, dejándole allí colgado, con el culo recién roto y su polla toda tiesa.