Todo esta permitido cap 4
Damián le mete la polla en la boca de ella. Yo se la chupo a Manuel mientras le follo ahora el culo con dos dedos, ella ya está demasiado cachonda para quejarse y Manuel dándose cuenta, la agarra de las caderas y le mete la cabeza de su polla, somos una masa de brazos, piernas, cuerpos y bocas
Mis cuatro hombres siguen tratándome de maravilla, hacen que me sienta una princesita. Hace meses que lo pasamos de maravilla juntos.
Por las mañanas lo primero que hago siempre es desayunar con Gonzalo, me encanta hablar con él, me enriquece. Es un hombre muy culto y respetuoso, además me vuelve loca tanto con sus manos, como con su boca y que decir de su polla…
Cada mañana me deja en el trabajo, donde Manuel me espera para que le traiga el café, ahora siempre se lo llevo yo. De Manuel me encanta su manera cariñosa de hablarme cuando le chupo la polla y se corre en mi boca encantado, agradecido me deleita devolviéndome el favor y me hace gemir sobre su gran mesa de despacho, con su secretaria fuera sin imaginar que su estirado jefe está comiéndose mi coñito con deleite.
Igualmente visito semanalmente la empresa de Damián y Ernesto, a veces follamos los tres en el despacho de alguno, otras veces en cualquier parte de la empresa, a Damián le encanta que se la chupe en los baños y a Ernesto le gusta subirme la falda y follarme apoyada en la fotocopiadora, con su secretaria fuera.
Además están los encuentros de los cuatro juntos, donde lo pasamos genial, pensareis que soy lo más parecido a su puta, pero no es así. Soy su consentida.
Esa semana he estado algo pachucha y no he ido a trabajar, ni a desayunar, ni de visitas. Todos me han llamado varias veces cada día, preocupándose por mí. Me han mandado flores, cestas con comida y hasta bombones.
El jueves desayuno con Gonzalo y este me invita a comer, me deja en el trabajo donde lo primero que hago es ir a llevar el café a Manuel.
-hola Victoria –me saluda feliz de verme- te he echado de menos
-yo también
-ya estás bien cariño? –me dice en su tono amable como siempre-
-si
-comemos juntos?
-como con Gonzalo, te apuntas?
-claro preciosa, ahora le llamo
Mientras se toma el café, me pide como siempre que me siente un poco en sus rodillas, llama mientras a Gonzalo con el manos libres, quien encantado le dice que podríamos llamar también a los otros dos, quedando en eso, nos despedimos y los llamamos, se apuntan también después de preguntar por mi salud.
Llego al restaurante indicado y los cuatro ya me esperan en un reservado.
-hola
-hola pequeña –contestan todos-
Mientras comemos, hablamos de trabajo, de mi gripe y del último libro que Damián me ha mandado y hemos leído todos. Al final de la comida me piden que vaya a una dirección. Esta bastante cerca de donde vivo y de la oficina. Llego en un taxi, no salgo con ellos para no llamar la atención. Llego al sitio impaciente por encontrarme a solas con ellos.
Me abre Gonzalo, dentro los otros tres se pasean por el apartamento, por cierto como todos los sitios donde me han llevado es exquisito, tanto la decoración como el apartamento en sí.
Manuel se acerca y me pasan unos papeles, mientras me dice antes de dármelos
-te gusta Victoria?
-claro es precioso
-pues firma el alquiler y puedes mudarte cuando quieras
Me quedo alucinada, el alquiler de ese apartamento en esa zona debe ser astronómico
-es demasiado –les digo con sinceridad-
-nada es demasiado para nuestra chica –dice Gonzalo y asienten todos-
-me vais a malcriar
-eso queremos –dice Damián-
-por qué no te doy la tarde libre desde ahora y nos preparas algo de beber? –Dice Manuel-
-si hay algo yo encantada
Voy a la nevera y veo que hay de todo, está llena
Les preparo unos mojitos y los cinco bebemos, me dicen que tienen que irse a trabajar, que me instale y que el viernes podríamos estrenarlo con una cena. Me parece bien y después de varias caricias, besos y dos orgasmos míos me dejan desnuda en el sofá y pegajosa de mojito. Me voy a la ducha y por supuesto como siempre han pensado en todo, toallas, mi perfume preferido, mis geles y champús, todo. Me ducho y voy a la habitación donde una enorme y preciosa cama con dosel preside la estancia. Me visto sin ropa interior y tras avisar a mis compañeras y pagar dos meses de alquiler por las molestias, me llevo mis cosas a mi nuevo apartamento. Lo coloco todo emocionada y a media noche esta todo en su sitio. No tengo demasiada ropa sobre todo los regalos de ellos y poca cosa más ya que solo llevaba unos meses viviendo con las chicas y aun no me había llevado mucho.
El viernes salgo temprano y preparo la cena, todo está listo a las nueve. Media hora después llegan Manuel y Gonzalo, diez minutos después los otros dos, todos me traen algún regalito para la casa. Lo tengo todo organizado.
-señores pasen a la habitación de invitados, desnúdense y pónganse la ropa que les daré para que estén cómodos.
Me siguen y le entrego a cada uno un pantalón de pijama y una camiseta. Todos están ya quitándose los trajes
-la ropa interior también, veréis unas cestitas allí (les señalo el sitio) cada una con vuestro nombre, allí podéis dejar ahora la ropa y cuando os vayáis esta.
-victoria me dejas de piedra –dice Manuel poniéndose su pantalón que le queda perfecto de talla-
-eso me gusta, me encanta sorprenderos, allí hay perchas para las chaquetas y pantalones, eso colgarlo sobre cada cesta, para no liaros.
-piensas en todo –dice Ernesto-
-cenamos ahora? –pregunto-
-si Victoria, tenemos que contarte algo
Me cuentan que ha venido de visita la mujer digamos que estaba en mi sitio, la que me hablo Gonzalo el día que me propuso entrar en esto. Me piden si quiero conocerla, que ella sabe de mí y yo muy intrigada acepto cenar con todos al día siguiente. Mientras cenamos me cuentan que ha sido su amiga especial durante cinco años, pero que ahora se ven muy poco porque se ha mudado a casa de su hermana y vive lejos.
Todos tienen prisa esa noche, pero les apetecía cenar conmigo para estrenar el apartamento. Les doy las gracias por todo y Damián es el primero en tener que irse, le acompaño a cambiarse de ropa y cuando se baja el pantalón me dice:
-quieres hacerme un favor?
No necesito que me lo pida, me arrodillo, él pone sus manos en mis hombros y durante el siguiente cuarto de hora se la chupo hasta que se corre en mi boca.
-gracias cariño, eres la bomba.
Luego se van Ernesto y Gonzalo y mientras se la chupo a Ernesto, Gonzalo me folla. Ambos se corren al mismo tiempo uno en mi boca, el otro en mi coñito. Luego se despiden de Manuel que no tiene prisa y se van.
-me alegro que no haya malos rollos entre vosotros
-son muchos años nena, ya estamos acostumbrados. Es más a mí me gusta ver cómo te hacen y les haces cosas a ellos, hasta si no estoy me lo imagino y me pone. –Dice Manuel-
-tu puedes quedarte más rato?
-puedo quedarme hasta que quieras
-pues quédate toda la noche
-bien
Nos vamos a la cama, nos desnudamos por completo y empezamos a acariciarnos bajo las sabanas, Manuel sabe cómo acariciar el cuerpo de una mujer y yo he descubierto lo que le gusta a él. Me subo sobre su voluminoso cuerpo y cabalgo con su polla bien dentro de mí. Él se agarra a mi culito y me lo aprieta. Luego me pone a cuatro patas y me la mete en el culo, me folla despacio pero profundamente agarrándome de las tetas, yo me corro varias veces, cuando el empuja fuerte y me llena el culito de leche. Nos abrazamos y le pido
-es más guapa que yo?
-no victoria, ninguna es más guapa que tu
-gracias Manuel
-es la verdad cielo
Esa noche me visto impecablemente, quiero estar arrebatadora. Cuando llego ya están todos hablando, se levantan, me saludan y ella se da la vuelta, tiene un bonito cuerpo, es una mujer menuda y sin demasiadas curvas, le calculo unos cuarenta y cinco años. Parece simpática. Se acerca y me besa las mejillas.
-qué guapa eres Victoria, que suerte han tenido estos señores.
-gracias
-Marta, me llamo Marta.
No sé cómo paso pero al final de la noche los invito a tomar la última en mi casa, llegamos y los hago pasar.
-siéntate con Marta, nosotros nos encargamos
Salen del salón y supongo que prepararan unas bebidas, al rato regresan con las bebidas y se han cambiado, llevan la ropa que les compre para estar cómodos.
-que guapos.
Al momento veo que Gonzalo, acaricia la rodilla de Marta y sube por su muslo, desde mi sillón tengo una vista perfecta de su mano, que desaparece bajo su falda, ella abre las piernas y él le toca el coño. La escena me deja alucina, estoy celosa, excitada y muy rara.
-podemos jugar todos Victoria, te importa?
-no, claro que no –miento-
Van a por los colchones y los plantan en el comedor, la tumban sobre ellos y empiezan a desnudarla, Damián besa su boca, mientras Gonzalo sigue entre sus piernas, le abre los labios y hunde su boca, no puedo apartar la vista, me gusta y me disgusta a partes iguales, Ernesto se saca la polla y se la pone en la boca, ella lame todo el tronco de esa rica polla. Manuel me mira y los mira a ellos, se acerca a mí y me pide:
-te disgusta?
-no lo se
-date una oportunidad, tan solo mira hasta que estés preparada no te metas, ellos te dan espacio por eso precisamente
Dicho eso se une al grupo, frotándole el pene por los labios del coño que Gonzalo ha excitado anteriormente, me mira y se la mete de un empujón esa polla que ayer follaba mi coñito ahora está dentro de esa mujer, que a juzgar por sus ruiditos se lo está pasando genial.
-qué bueno llevaba meses sin sexo chicos, ya había olvidado el peligro que tenéis. Yo creía que iba a pasar del sexo y miradme aquí pidiendo guerra, tendré que venir de tanto en tanto a por más de esto. Me dejaras Victoria?
-yo no mando
-estas enfadada? –pide ella-
-no
Durante la siguiente hora, mi enfado da paso a la excitación, ellos me miran mientras le dan placer a ella. Ahora como tanto les gusta uno a uno se la folla llenándole el coño de semen, los cuatro se corren dentro de ella mirándome, sabiendo que me excita verlos. Cuando terminan se sientan y sin decirme nada me miran.
Ella se pone de rodillas y viene hacia mí.
-levanta el culito –me pide mientras lo hago me quita las bragas mojadas-
Me abre con dos dedos y empieza a lamer mi coño, su lengua plana pasa de arriba abajo sin dejar un milímetro de mi rajita sin lamer, ellos miran y empiezan a tocarse.
-Marta a que esta rico el coñito de Victoria? –Le dice Manuel-
-si así chúpaselo bien, le encanta –le dice Gonzalo-
-métele dos dedos veras que caliente y estrecha es –esta vez es Ernesto-
-seguro que ya está churreando eso me enloquece de ella –ahora es Damián-
Me corro en su boca y ella no deja de lamerme, me penetra con tres dedos hasta ponerme de nuevo a punto:
-ven quiero que saborees su semen
Se abre de piernas y ya no disimulo, me lanzo y empiezo a lamerla, noto el semen que se escurre de su interior, absorbo su clítoris y lo fricciono entre mis dedos, hasta que grita y jadea
-que bien chupas niña. No me extraña que los tengas coladitos por ti muñeca. Sigue
Se corre otra vez en mi boca cuando la mordisqueo.
-Victoria ponte como una perrita, enseñémosle a Marta como tienes de goloso el culito
Me pongo y Manuel se pone detrás, me abre y le dice:
-ven marta chúpala, mójame el agujerito y veras como recibe.
Noto su lengua fina en mi culo, mientras Gonzalo me muerde, Ernesto se coloca debajo y empieza a lamer mi coñito, Damián ante mí me hace chuparle la polla, Marta deja de lamer y Manuel empuja en mi culo, ahora Gonzalo muerde mis tetas y ella mira tocándose.
Me deshago de todos y le digo muy seria a Marta.
-ponte a cuatro patas, quiero que te follen el culo
-a ella le duele –dice Manuel-
-me da lo mismo, Marta a cuatro patas he dicho
Ella dejándolos alucinados se coloca a cuatro patas. Le abro el culito con dos manos y empiezo a lamérselo.
Ernesto se coloca bajo ella y empieza a lamer su coño, yo me meto su polla en mi coño, sin dejar el culo de ella, la imagen nos excita a todos, Gonzalo colocándose detrás me folla en culo. Me encanta sentirme doblemente penetrada.
Damián le mete la polla en la boca de ella. Yo se la chupo a Manuel mientras le follo ahora el culo con dos dedos, ella ya está demasiado cachonda para quejarse y Manuel dándose cuenta, la agarra de las caderas y le mete la cabeza de su polla, somos una masa de brazos, piernas, cuerpos y bocas dándonos placer todos.
Manuel empuja del todo y ella grita mientras él se corre en su culo, Ernesto también se corre en mi coño lamiendo a Marta, al momento Gonzalo me llena mi culo de leche y Damián se corre en su boca.
Mientras nosotras dos jadeamos alguno de nuestros múltiples orgasmos de la noche.
Dormimos todos en los colchones, mezclados, pegados y abrazados. Gonzalo es el último en dormirse, me coge la cara y me besa los labios.
-has estado fantástica si tuviera fuerzas ahora volvería hacerte el amor, estas divina.
Me despierta el timbre, alguien abre la puerta y el olor a café inunda la estancia. Mis cuatro hombres hacen el desayuno, ya no hay rastro de Marta.
Esa mañana me duchan Damián y Ernesto mientras Manuel y Gonzalo preparan el desayuno.
En la ducha Damián me besa, mientras Ernesto me masturba, hasta hacerme correr, luego me secan y mientras ellos me dan el desayuno a la boca, Manuel me come el coñito y Gonzalo me muerde las tetas hasta que entre jadeos vuelvo a llegar al final.
-me vais a matar
-si mi niña a polvos –me dijo Manuel-