Toda la vida 6

No podían emitir palabra alguna, estaban agitadas. Pero las sonrisas que se lanzaban bastaba. Se dieron un beso y ambas cayeron en un sueño profundo aunque nada tenían que soñar. El sueño había sido cumplido. La meta había sido alcanzada. Habían hecho el amor.

Capítulo 6

Semanas después

Las chicas casi terminaban el colegio y estaban en pruebas de admisión para la universidad, estaban muy ocupadas pero siempre se veían aunque sea un ratito para decirse lo mucho que se querían. En el receso del colegio comían juntas como siempre, hablaban de cosas triviales y comentaban sobre las clases y los exámenes que se venían. Cuando Flavia iba a los ensayos con su banda, Sofía a veces la acompañaba. Iban tomadas de la mano como era lo normal entre ellas. Lo hacían siempre, se daban besitos en las mejillas, en la frente, a veces en el hombro y en el cuello disimuladamente. Yo creo que más de uno sospechaba que había gato encerrado pero nadie decía nada. Seguían ocultando su relación, porque Sofía aún no les decía a sus padres que viajaban muy seguido por motivos laborales. Flavia le tenía paciencia, igual lo único que les faltaba decir "somos novias". Lo demás estaba hecho, se trataban como tal. Flavia ni volteaba a ver a nadie, Sofía le encantaba que su novia tuviera sólo ojos para ella y viceversa. Tampoco intentaba tener sexo con Sofía, sabía que el momento iba a llegar, sólo tenía que esperar un poco más. Igual le encantaba estar con Sofía. Era como tocar el cielo con las manos. Imagínense cuando hagan el amor.

En el ensayo de la banda

-Siento que debemos cambiar la letra en el último verso. O sea, la estrofa está más que bien pero quiero que quede mejor. Hacer un cierre, no sé.

-Si pienso igual- suelta Antonella

-¡Mujeres! Nunca les gusta nada-comenta Felipe.

-Yo estoy de acuerdo con ellas y no me mires así- Manuel decía esto último mientras Felipe lo asesinaba con la mirada.

Antonella, Manuel y Flavia chocan sus manos.

-Bien, no creo poder terminar la letra en estos días, quizás la próxima semana lo haga.

-Súper. Yo podría ayudarte hermosa-sonríe Antonella.

-Seguro belleza-sonríe Flavia.

Sofía se encontraba en el ensayo, estaba sentada esperando que terminaran. No le caía bien Antonella, sentía que le gustaba su novia. Y cada vez que ella, saludaba a Flavia con un beso, un abrazo o le decía cosas lindas, arrugaba la cara. Sí, Sofía era extremadamente celosa.

Flavia volteó hacia donde estaba Sofía que le sonreía tiernamente. Le devuelve la sonrisa.

-Bueno, nos vemos entonces.

-Seeee-suelta Pipe.

-Dale-comenta Manuel.

-Seguro-espeta Antonio.

-Nos vemos hermosa-dice Antonella, abrazando a Flavia y dándole un beso en la comisura de sus labios.

-Uuuyyyyy. Agárrate Renata-dice riendo Pipe, como siempre de imprudente.

-Jajaja ¿qué tiene que ver Renata en esto?

-Que es tu novia pues.

-Jajajajajajaja- Flavia suelta una carcajada.

-¿De qué te ríes si se puede saber?

-Termine con Renata hace dos meses-cometa seria finalmente.

-¿Quéeeeeeeeee?-sueltan todos a la vez.

-Así es. Y me voy porque estoy apurada-recoge sus cosas y sale corriendo prácticamente. Los chicos la persiguen y sobretodo Antonella.

-No, espera. No nos puedes dejar así. Se supone que somos tus amigos. ¿Por qué no nos dijiste?

-No encontré un momento oportuno supongo.

-Sofía-llama Manuel.

La novia de Flavia se encontraba distraída con su celular y no había prestado atención.

-¿Eehh?

-¿Tú sabías que Flavia terminó con Renata?

-Sí obvio.

-Aishhh. No es justo, debiste decirnos-Pipe hace pucherito.

-Bueno nene, ya lo saben.

-¿Ah quién te estás tirando ahora?-comenta riendo Antonio.

Flavia ríe. Sofía la pulveriza con la mirada. Se pone seria.

-A nadie-suelta.

-Jajaja no te creo eso.

-Es verdad.

-Sofía. Tu debes saber-comenta Pipe-¿Está saliendo con alguien?

Sofía hace amague de hablar pero es interrumpida por Manuel.

-Jajaja la pregunta correcta es si se está tirando a alguien pendejo.

Sofía habla.

-Bueno...Todavía no-responde nerviosa.

Flavia ríe por lo bajo.

-¿Ven? No estoy "tirándome"-hace gesto de comillas con sus manos- a nadie.

-¿Hace cuánto terminaste con Renata? Que ahora que no está contigo puedo decir que está buena-dice Antonio.

Flavia arruga la cara.

-Hace dos meses. Y aunque no esté conmigo, más te vale que la respetes- suelta claramente enojada.

-Calma fiera. La respeto. Sólo dije que estaba buena.

Flavia aprieta la mandíbula. Sofía nota que está enojada y cruza sus brazos en señal interrogativa.

(¿Todavía le gusta?)

-Quién te cree a ti que vas a pasar dos meses sin sexo-dice Pipe.

-Pues yo le creo-dice Sofía sonriendo.

-¿Ah sí?

-Obvio. Porque está enamorada.

Flavia mira rápidamente a Sofía que le sonríe, le devuelve la sonrisa.

-¿De quién?-pregunta Antonella.

Ambas se miran con nerviosismo. Sofía decide responder.

-De mí-sonríe.

Flavia se queda boquiabierta.

Todos al unísono.

-¿Quéeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee?

-Sofía no...-Flavia es interrumpida por un beso robado de Sofía.

Flavia queda totalmente descolocada.

-Así es señores. Esta hermosa mujer que ven acá-señala a Flavia-es MI NOVIA.

Flavia sonríe. Sofía le ofrece su mano y ella la toma. La entrelazan.

-Y sí. Estamos juntas.

Ambas sonríen.

-Esto tiene que ser una broma-suelta Pipe-

-Bueno chicas, yo algo sospechaba por ahí-comenta Manuel riendo- me alegro por ustedes, aunque que desperdicio-se ríe divertido. Flavia le da un golpecito en la cabeza-aauchh. Es broma. Las apoyo chicas.

Ambas asienten y siguen sonriendo.

Antonella sale corriendo sin despedirse.

-¿Y a esta que le pasa?-pregunta Pipe- bueno, yo también las apoyo pues.

-Igual yo-termina diciendo Antonio.

Se despiden y se van.

En el auto de Flavia.

-¿Y eso?-pregunta sonriendo.

-¿Qué?

-Lo que dijiste.

-Ya me harté de ocultar que eres mía-dice esto último con mayor énfasis.

-Jajaja. Tuya-hace el mismo énfasis que Sofía.

-Perdón por tardar. Realmente quería hablar con mis padres primero, como quedamos. Pero se estaban poniendo fastidiosos ya. Y exploté-suspira.

-Está bien. Me alegra que lo hicieras. Aunque yo no te estaba presionando.

-Lo sé mi amor. Pero no aguantaba más, quiero poder besarte en la calle, en las fiestas, en todos lados, quiero tomarte de la mano y alejar a cualquiera que te vea-hace pucherito.

-Que linda eres. Pues ya podemos hacer todo eso y hasta más-sonríe pícara.

-Mmmju-mira por la ventana.

(Como le digo que me muero por estar con ella. Estos dos meses han sido una tortura, sus besos son tan divinos y.. Aay no Sofía. No le digas nada, que ella misma se de cuenta. No puedo creer que tenga tantas ganas de sexo. Aay Flavia).

-¿Pasa algo?

-No, nada amor. Estaba pensando que sería buena idea salir esta noche. ¡Es viernes!

-Si puede ser. ¿A dónde te gustaría ir?

-A un bar.

-¿A un bar?

Sofía asiente.

-Bueno no creo que podamos entrar a un bar. Aún somos menores de edad. Pero podemos ir a un club cerca de mi casa, el dueño es amigo de mi primo Ezequiel. ¿Te acuerdas?

-Sí claro, Eze.

-Bueno, es un club de ambiente. El tipo es gay.

-Nooo-suelta.

-Sip.

-Bueno vamos.

-Sip-

(No sé si sea buena idea llevar a Sofía. En ese lugar me conocen muy bien. Quien te manda a hablar. Aishhh).

-¿Qué tal si nos quedamos en casita?

-¿Qué? No.. Quiero salir amor. Tengo ganas de bailar contigo así pegadito-dice esto último con voz sexosa.

Flavia se muerde el labio inferior.

Justo estaciona su auto frente a su casa. Se quita el cinturón y se acerca a Sofía.

-Sofía no me provoques-suelta a raz de sus labios.

-Justamente eso quiero-Sofía termina la distancia entre sus labios y se funden en un beso apasionado.

Lentamente se separan.

Flavia suspira. Sofía ríe.

-Eres mala Sofí.

-¿Yo?-dice con una sonrisa inocente.

-Si. No sabes como me tienes- se muerde el labio inferior.

-¿Ya que no sé me dices?-se muerde también su labio inferior, mira fijamente a su novia.

-Jajaja naa. Sólo te diré que me tienes a pan y agua.

Sofía suelta una carcajada.

-Pobrecita mi novia bella-hace pucherito y le da un besito en la comisura de sus labios.

-Viste que eres mala. Igual yo te espero.

-Te prometo que esta noche va a ser especial mi amor.

-¿Especial?

-Mmmju.

-Bueno si tu dices.

Ambas sonríen.

Se despiden con un pico y quedan en verse a la noche. Sofía entra a su casa y Flavia arranca camino a la suya.

-Mamá, papá. Llegué.

-Hija, no te esperábamos tan temprano-dice agitada Camila.

-¿Estás bien mami?

-Si mi amor ¿por qué?

-Te noto agitada-dice con recelo.

-Sí bueno, tu papá y yo..

-Iiiiuuuuck mamá. No necesito saber eso.

-¿Qué? Iba a decir que estábamos haciendo una rutina de ejercicio-sonríe pícara.

-Aay no. Se pasan.

Camila ríe con gusto.

-¿Amor no vienes?-pregunta Gónzalo.

-Sí cariño, pasa que llegó Sofía.

-Aahh. Hola mi amor- se escucha desde la habitación.

-Hola pa. Bueno, me iré a mi cuarto. Esta noche salgo con Flavia. ¿Puedo no?

-Sí hijita claro. Tu padre y yo nos quedaremos hoy en casa. El lunes tenemos que ir a Londres por un nuevo contrato.

-Ah buenísimo. Entonces será mejor que me quede en lo de Flavia hoy.

-¿Por qué?

-Porque no quiero escuchar ruiditos extraños.

Camila se ruboriza.

-Sí, será mejor.

-Bueno, estoy arriba.

Sofía al llegar a su habitación empezó a buscar la ropa que se pondría en la noche. Quería estar hermosa para su novia. Después de 45 minutos apróximadamente ya había elegido todo. Se terminó decidiendo por unos jeans ajustados color negro, con una blusa azul. Y una chaqueta negra sólo en caso de tener frío aunque teniendo a Flavia cerca dudaba mucho que eso pasara. Tacones no tan altos color negro con brillos. Por último ropa interior negra a juego. Todo listo.

-Bueno Sofía todo está perfecto. Ahora lo más importante es arreglarte allá abajo- hace un gesto señalando a su entrepierna.

No es que Sofía no se depilara, de hecho lo hacía con cera. Pero no pudo depilarse hace dos días que era cuando le tocaba porque justo estudiaba para un examen. Así que le tocaba depilarse ahora. Sin más dilación, se quitó la ropa y se metió en la ducha de su cuarto. Aay cuánto agradecía Sofía tener baño en su habitación. Una vez dentro, hizo lo que tenía que hacer.

Casa de los Ferrari.

Suena la puerta cerrándose.

-Flavia... ¿Eres tú?

-Mmmju.

-Ven acá-suelta enojada su madre.

(Ahora que hiciste Flavia)

-¿Se puede saber qué es esto?

Su madre le muestra un sujetador.

-Ehhmm debe ser de Sofía- contesta relajada porque justamente era de ella. No solía llevar a chicas a su casa. Y sí las llevaba era un "toco y me voy" y claramente se encargaba de dejar su cuarto tal y como estaba.

-¿De Sofía? ¿Me vas a creer a mi estúpida?

-Hablo en serio. Déjame ver bien.

La madre le arroja el brassier.

-Sí, es de Sofía.

-Mmm ya- la madre la miraba con recelo.

-¿Tú y esa muchachita no estaran..-no termina la frase-Aaay que más da. Nada me gustaría más que alguien como Sofía o ella misma te hiciera sentar cabeza. Es la única que he visto más de dos veces. Y es porque es tu amiga.

-Bueno mamá, no empecemos por favor.

-Sí, si. Aprovecho para decirte que tu padre y yo saldremos esta noche. Nos quedaremos en casa de tu tío Alberto. Regresamos mañana en la tarde. ¿Vienes con nosotros?

-Ehhm no puedo. Voy a salir esta noche.

-¿Con quién? Si se puede saber.

-Con Sofía.

-Mmm bueno entonces sí te dejo. Cuídate. Y cuida a esa muchachita.

-Siempre madre.- le da un beso y sube a su habitación.

-Esta hija mía me va a volver loca un día de estos-suspira.

3 horas después.

-Hija nos vamos. Cualquier cosa me llamas. Cuídate por favor. La nana se queda contigo.

-Esta bien. Que les vaya bien.

Flavia sube a su habitación, se quita la ropa y se mete a bañar.

Al cabo de 20 minutos sale envuelta en una toalla.

-Bien Flavia. Hay que ponernos guapa esta noche.

Revisa el closet y saca una camisa manga 3/4 blanca ajustada al cuerpo. Pantalones negros, botas negras. Ropa interior blanca a juego.

Se viste, se arregla, se peina. Se deja el cabello suelto. Se maquilla un poco, se pinta los labios y por último se pone perfume. Ese que tanto le gusta a Sofía.

-Bueno creo que estamos guapas- sonríe al espejo.

Toma su bolso, su celular y sus llaves. Sale de casa, se sube a su auto y arranca camino a casa de Sofía.

Tocan el timbre.

-Ya voy-dice Camila.

Abre la puerta.

-Hola Flavia. Pasa adelante. Estás muy linda.

-Gracias Camila. ¿Tu hija?

-Está arriba. Tiene horas arreglándose. ¿Saldrá con un chico? Porque para que se arregle tanto.

-Jaja no, sólo salimos nosotras dos.

-Mmm bueno. Cuídala por fa- Flavia asiente- Sofía baja. Flavia llegó.

-Un momento mamá. Dile que me dé 5 minutos.

-Ya la escuchaste.

-Sí jeje.

Se quedan calladas un momento. Sofía baja casi corriendo las escaleras.

-Ya estoy Fla, disculpa por hacerte esperar- le da un beso en su mejilla.

-Tranqui. ¿Nos vamos?

-Sí dale. Mamá ya sabes me quedo con Flavia hoy. Vuelvo mañana como en la tarde supongo.

-Está bien. Cuidense chicas.

-Sí-al unísono responden.

Salen, se suben al auto y Flavia arranca.

-¿Así que te quedas conmigo esta noche?

-Sii mi amor.

-Buenísimo.

Sofía suspira y asiente.

-¿Sabes qué me pasó hoy?

-¿Qué?

-Llegué y tu suegra me hizo un interrogatorio sobre un brassier que había encontrado junto a mis cosas. No sé al parecer estaba arreglando la ropa y lo vió.

Sofía escuchaba atenta y ya se estaba molestando cuando Flavia continuó hablando.

-Te acuerdas que me dijiste que no encontrabas tu brassier rojo. Ese que tiene puntitos blancos.

-Mmmju.

-Ya lo encontramos. Seguramente en una de esas que te quedaste a dormir, lo dejaste en el cesto de ropa sucia que se yo.

-Ah puede ser. Bueno ya sabes donde ponerlo.

-Sí en el closet junto con tus cosas que está en mi habitación.

-Jaja exacto- Sofía sonríe.

Se quedaba tantas veces en la casa de Flavia que ya tenía su propio espacio para su ropa en el closet de su novia.

Llegan al club, entran sin problemas y sin hacer cola porque Flavia muestra la identificación especial que le dió el amigo de su primo para que pase sin contratiempos.

Llegan a la barra.

-¿Qué te sirvo preciosa?- pregunta una bartender que miraba de arriba a abajo a Flavia.

Sofía arrugó la cara.

-¿Amor que vas a tomar?

-Lo que tu tomes mi amor estará bien.

-Bien. Por fa me traes dos cuba libre.

-Enseguida bebé- se pone a preparar las bebidas.

-No puedo creer que todas te coqueteen BEBÉ-suelta Sofía celosa.

-No todas amor.

-Mmmju.

Flavia sonríe.

-Celosita me saliste.

-Nada que ver.

La chica les entrega las bebidas

-Gracias-dice Flavia.

-Lo que tu quieras. No dudes en pedir-sonríe.

Flavia le devuelve la sonrisa.

Sofía arruga la cara.

-Me das un beso mi amor-dice Sofía acercándose a Flavia. Notando que la chica pudo escuchar por suerte.

-Por supuesto-Flavia le da un pico a Sofía.

-No, así no. Así.

Sofía agarra ambas mejillas de Flavia con sus manos y le come la boca literalmente. Flavia no pudo hacer más que corresponder encantada de la vida. Después de unos segundos se despegan.

-¡Sofí!- Flavia mira sorprendida a Sofía.

-Te quiero amor- la abraza y mira de re ojo a la bartender que veía el espectáculo. La chica baja su mirada y pone a preparar algunos tragos.

Las chicas hablaban amenamente, bebían su trago tranquilamente. Aunque Sofía bebía más rápido y pronto se lo terminó.

-¿Tenías sed?-

-Mucha.

-Jaja Sofía ésto-agita el vaso-se toma lento. Es fuerte, no quiero llevarte cargada a mi cama.

Sofía asiente.

Si Flavia supiera que Sofía usaba el alcohol para animarse y envalentonarse. Iba por el segundo trago y ya estaba medio mareadita. Flavia apenas empezaba el segundo.

-Vamos a bailar.

-En un rato amor.

-Mejor ahora ¿sí? Mira que esa canción me gusta.

-Jaja está bien caprichosa.

Se levantan y tomadas de la mano se dirigen a pista de baile.

Sofía entrelaza sus manos en el cuello de Flavia, mientras que ésta pone sus manos en su cintura. Empiezan a moverse acorde al ritmo de una canción de Wisin y Yandel-Tu nombre. Flavia se mordía el labio inferior y Sofía ladeaba la cabeza disfrutando el ritmo. De repente se voltea y se pega a Flavia, su trasero quedaba pegado a la pelvis de Flavia, que tomaba a Sofía de la cintura y la pegaba más, como si eso fuese posible.

-Me vuelves loca Sofía-susurrando en el oído de Sofía. Lo que provocó que automáticamente Sofía se moviera más sensual y Flavia ni corta ni perezosa se movía a la par. Disfrutaba cada roce con su novia. Siguieron así un par de canciones más. Ambas se encontraban ya excitadas pero seguían moviéndose.

-Vámonos ¿sí?

-¿Te quieres ir ya?

-Sí, no aguanto más estar así contigo-con voz medio entrecortada-quiero que estemos a solas-le lanza una mirada a Flavia que capta enseguida.

La toma de la mano y la jala fuera del club. Se suben al auto y se dirigen a casa de Flavia. Durante el camino ninguna hablaba, creo que la excitación hablaba por ambas que se lanzaban miraditas cómplices.

(No puedo creer va a pasar. Me muero por ser su mujer ¡oh dios! ¿Cómo será Flavia en la cama?)

(Flavia contrólate. No es que vayan a hacerlo. Sofía simplemente se quería ir porque está cansada. Sí, eso).

Rápidamente llegan, salen del auto. Entran a la casa y corriendo suben las escaleras hasta llegar a la habitación que al entrar, cierran la puerta de inmediato y Sofía aprovecha para arrinconar en la pared a Flavia. Se comienzan a besar apasionadamente. Sofía tenía su mano en el cuello de Flavia y ésta depositaba sus manos en la espalda baja de Sofía. Jugaban con sus lenguas, se mordían sus labios. Flavia instintivamente bajó sus manos al trasero de Sofía. Cuando se da cuenta, quita sus manos.

-Perdón yo..-Sofía interrumpe.

-Shhh. Tócame- toma las manos de Flavia y las pone en su trasero. Se vuelven a besar, pasan así un par de minutos. Ambas estaban excitadas a más no poder. Pero más Flavia que no sabía que hacer.

-Amor..-beso-amor-beso..Sofía para- Se despega de ella.

-¿Qué pasa?

-No puedo continuar.

-¿Por qué, qué pasa?

  • Sofía si seguimos así no voy a poder aguantar más. Ya sabes.

-Es que no quiero que aguantes nada.

.Pero...-se quedó pensando unos segundos.

-Amor-toma las manos de Flavia y las besa-quiero estar contigo. Y antes de que digas que preferías adornar la habitación de flores para que fuese más romántico. Te digo que este momento es romántico, no me importan las flores, no me importan las luces. Si estoy contigo todo es perfecto. Y no aguanto más, en serio. Me muero por ser tu mujer.

Se miran fijamente. Más nerviosas no podían estar.

-¿Estás...mmm... Estás segura Sofí?

-Más que segura. Lo deseo amor. Te deseo-se muerde el labio inferior.

-Te quiero tanto Sofí-se abrazan y vuelven a besarse.

Poco a poco entre beso y beso llegan al borde de la cama. Flavia besa el cuello de Sofía y ésta gime casi en susurro. Flavia comienza a desabotonar la camisa de Sofía, todo sin despegar sus bocas.

-Eres tan hermosa Sofía. No sabes cuánto te deseo-le dió un beso rápido-me encanta tu cuerpo amor. Eres una diosa.

-Mmmju-seguían besándose- tu eres hermosa mi vida. Házme tuya.

Flavia termina de quitarle la camisa a Sofía y ve lo que tanto había deseado. El brassier le quedaba tan bien a Sofía, pero Flavia no hacía más que pensar en como quitárselo. Poco a poco, la sienta en la cama. Se medio agachó para quedar a la par de su boca y la besa nuevamente, pasa a su cuello, lo recorre primero con besos cortos, luego con su lengua. Sofía gemía aunque bajito. Igualmente era música para los oídos de Flavia. Se puso de rodillas frente a Sofía y miró sensualmente el pecho de ésta. Se mordía el labio inferior. Sofía se encontraba con las piernas abiertas y Flavia en medio de ella, acariciaba su espalda, mientras besaba el canalillo de Sofía. "Aay Sofí hueles tan bien" "Me encantas" "Tú me encantas, sigue por favor". Flavia le quita los tacones a Sofía y sube con besos por sus piernas obviamente por encima del pantalón. Cuando llega a la par de su sexo, para y se dirige a la boca de Sofía, la besaba con lengua, se comían la boca literalmente. Sofía tomó la iniciativa y empezó a desabotonar la camisa de Flavia, que miraba atenta a lo que hacía su novia. Sofía de los nervios no podía desabotonar los últimos dos botones. Flavia rió contagiando a Sofía y provocando un "déjame a mi hermosa". Flavia se levantó y quedó frente a Sofía que se mordían los labios. Se terminó de quitar la camisa y la arrojo a un lado, hacía esto mirando con lascivia a su novia. Procede a quitarse las botas y las arroja también por ahí. Pone sus manos en su pantalón para desabrochárselo pero no lo hace.

-¿Lo haces tú o lo hago yo?-la mira con deseo.

-Yo amor-

Sofía se para y lleva sus manos al pantalón de Flavia, lo desabrocha rápidamente hasta quitárselo. Sofía mira de arriba a bajo a su novia, se la come con la mirada. Flavia lleva sus manos al pantalón de Sofía.

-¿Puedo?

Sofía asiente embobada.

Flavia procede a desabrochárselo, se lo baja hasta que Sofía misma se lo termina de quitar y lo patea por ahí. Flavia se arrodilla y le susurra un "abre un poco las piernas". Sofía lo hace con tímidez pero confiando en que su novia sabe lo que hace. Flavia besa la pierna izquierda de Sofía, va subiendo con besos hasta llegar un poco más arriba de sus rodillas. Repite el mismo procedimiento con su pierna derecha mientras va acariciando la pierna que acaba de dejar. Sofía se estremecía con cada caricia, con cada beso. Estaba extremadamente excitada y tenía un poco de verguenza además. Flavia estaba a punto de verla por primera vez completamente desnuda.

Flavia se levanta y lleva sus manos al brassier de Sofía y rápidamente se lo quita. La mira con lascivia y se queda un rato observando.

-¿Te gusta lo que ves?-pregunta tímidamente con una mezcla de picardía.

-Me encanta mi amor.

La besa en la boca mientras lleva sus manos por primera vez a ese par de gloriosos pechos que gritaban ser atendidos. Masajea suavemente, con sus dedos juega con sus pezones. Sofía gemía en la boca de Flavia y ésta estaba encantada de escucharla. Besa el hombro de su novia, pasa por su cuello y va bajando hasta llevar al pecho derecho de Sofía, lo observa unos segundos antes de abalanzarse sobre el y besarlo. ¿Besarlo? Flavia hacía de todo, lo mordía, lo besaba, lo succionaba y jugaba con su lengua en el, mientras hacía ésto, seguía acariciando el otro. Se fue al otro pecho y repitió el mismo procedimiento. Sofía disfrutaba y era tanto el placer que puso su mano en la cabeza de Flavia cuidando que no dejara de hacer lo que estaba haciendo. "Aaahhh" soltó Sofía. Ya no podía contenerse más, estaba perdiendo la poca cordura que le quedaba y quería más. Flavia la llevó a la cama y la hizo acostarse en el medio, se subió también, le pidió a Sofía que abriera un poco más las piernas y coloco una de las suyas en medio de las de su novia. Besó nuevamente sus labios y empezó a bajar, besó otra vez su cuello y luego se dirigió a sus pechos, volvió con el mismo tratamiento por un par de minutos más y emprendió un viaje al sur. Besó su abdomen, se detuvo a jugar con su lengua en su ombligo y empezó a bajar nuevamente. Sofía estaba inquieta, expectante al próximo paso de su novia. Siente que Flavia deposita un beso en su ropa interior. Y que luego roza con sus dedos la tela de la misma "Aaahh". "Estás tan húmeda mi amor". Se levanta y Sofía queda descolocada (¿Por qué se detuvo? Ah ya). Flavia hace el amague de bajarle las bragas a Sofía pero antes la mira como pidiendo permiso. Sofía asiente sonriendo. Un poco más y sí, adiós bragas. Flavia tenía ante ella a una hermosa mujer completamente desnuda y como por si fuera poco la mujer que amaba. Sí, leyeron bien. Flavia amaba a Sofía, sólo que no sabía como decírselo aún. En fin, sigamos. Flavia se quedó mirando por unos segundos el sexo de Sofía. Se mordió el labio inferior para posteriormente pasar su lengua. Se acercó nuevamente. Emprendió un caminito de besos por sus piernas mientras seguía subiendo y llegaba al lugar que quería llegar. Cuando estuvo frente a ese sexo perfectamente depilado, brillante de deseo y por demás húmedo, se acercó. Se llenó de su olor y depositó un suave beso en su monte de venus. Poco a poco con sus dedos fue abriendo sus labios mayores y pasó su lengua por toda su zona. Repitió esto unas dos veces más. Sofía se movía a cada roce con la lengua de su novia y gemía repetidamente. Y cuando sintió que la lengua de Flavia tocó ese botoncito ya hinchado, literalmente pegó un brinco. Flavia puso sus piernas por sobre sus hombros y la agarró fuertemente para que no pudiera moverse. Y ahora sí, comenzó la "dura" tarea de comerle el sexo a su novia, la lengua de Flavia recorría toda la zona aunque dedicaba más tiempo a su clítoris. Quizo explorar un nuevo lugar que seguramente Sofía agradecería. Llevó su lengua a su entrada y comenzó a entrar. "Aahhhh". Sofía no sabía lo que su novia le estaba haciendo pero era algo que la hacía ver estrellitas, sentía cosquillas por todo el cuerpo y era tanta la excitación que ella misma empezó a masajear sus pechos. "Oh por dios" "Que me haces" "Flaviaaaa". Flavia seguía en lo suyo, volvió a su clitorís y cuando sintió que su novia tendría por primera vez un orgasmo, movió con más vehemencia su lengua hasta que sintió como su novia se corría en su boca. "Aaahhhhh". A Sofía le temblaba hasta el alma, sentía cosas que no podía explicar con palabras, sentía liberación, relajación, sentía que todo le daba vueltas también, seguía en su ensoñación hasta que sintió que su novia subía con besos hasta llegar a su boca. La besó con ternura y le dió a probar su propio sabor.

-Te adoro Sofí. Estoy tan enamorada de ti.

-Yo te adoro a ti mi amor. ¿Me puedes explicar qué me hiciste?

Flavia ríe.

-¿Por qué?

-Porque no quiero dejar de sentir esto que siento contigo. Ni quiero dejar de sentir lo que acabas de hacerme-se tapa la cara con sus manos.

Flavia vuelve a reír.

-No tengas pena, mi amor-le quita las manos de la cara-espero que te haya gustado porque aún no terminamos.

-¿No?-espeta sorprendida.

-Pero estoy como cansada.

-Jaja es normal. Pero tienes que saber que esto recién comienza.

Besa con suavidad los labios de su novia. Sofía le corresponde, entregándose por completo. Flavia empieza a jugar con sus dedos en el sexo de Sofía, que instintivamente abría más sus piernas. "Mmm" "Me encantas Sofí" "Aaahhh" Gimió en la boca de su novia.

Flavia coloco su dedo medio en la entrada de su sexo.

-Amor, lo que voy a hacer te va a doler un poquito pero luego va a pasar. No tengas miedo. Y.. te doy permiso de que me muerdas pero no tan fuerte ¿sii?

Sofía asiente.

-¿Duele mucho?

-No, sólo un poco. Lo haré con suavidad te lo prometo. Confía en mí.

-Confío en tí mi amor. Soy tuya.

-Te amo Sofí.

Sofía sonríe ampliamente. Era la primera vez que se lo decía.

-Mi amor yo también te amo.

-Te amo tanto.

Acto seguido, se besaron tiernamente, demostrándose todo el amor que se tenían. Flavia comenzó nuevamente a jugar con sus dedos y cuando sintió que el momento había llegado, empujó un poco. Sofía gimió. Empujó un poco más. Entró en ella. Se movía con cuidado, lentamente comenzó a empujar más hasta que sintió que iba a traspasar ese umbral que tanto le hacía ilusión. Empujó más hasta que lo atravesó. Sintió como Sofía le mordía el labio fuerte pero aguantó. Sabía que le dolería. Se quedó un momento sin moverse. Besaba tiernamente a Sofía.

-¿Te duele?-la miraba con ternura.

Sofía sacudió la cabeza en señal negativa.

-Voy a moverme un poco ¿sii?

Sofía asintió.

Flavia procedió a entrar y salir del cuerpo de su novia y al parecer ya había pasado el dolor porque Sofía instintivamente se movía más y más. "Oohhh". Gemía y Flavia gustosa la escuchaba.

-¿Te gusta mi amor?

-Mmmju... "Aahhh". Sigue.

Estuvieron unos minutos más así.

"Oohhh mi amor". "Mi amor mi amor". Flavia empezó a moverse más rápido, entraba y salía una y otra vez, sabía que su novia pronto iba a terminar. "Aaaahhhh". Sofía nuevamente sintió esa sensación de tocar las estrellas, se dejó llevar. Flavia seguía acariciando el sexo de su novia.

-Mi amor te amo.

-Yo también mi vida.

-No puedo creer que esperé tanto tiempo para estar contigo.

Flavia ríe.

-Yo no sé como aguanté tanto tiempo-ambas sonríen.-Me gustaría intentar una cosa.

-¿Qué amor?

-Confía en mí.

Flavia se quitó las bragas y brassier. Sofía la miraba atenta y con lascivia. Después de todo, por fin la veía completamente desnuda. Flavia se acomodó de modo que el sexo de Sofía bailara con el suyo. Cuando estaban en perfecta sincronía comenzó a moverse. Primero lo hacía lento, luego tomaba un mejor ritmo. Ahora sí ambas gemían. Sofía rápidamente siguió el ritmo y juntas apostaban por cambiar las estrellas de lugar, a querer entrar en el Olimpo y jugar con los rayos de Zeus. "Aaahhh Sofí". "Mmm". "Aaahhh".

-Mi amor.

-Aahhh.

-Amor llego.. amor..

-Yo también Sofí, no pares de moverte. Sigue así mi amor.

Ambas se movían con vehemencia, con ganas, con deseo y es que estaban a punto de hacer volar miles de cometas por el cielo. Llego el momento. El reloj se detuvo, la Tierra dejó de girar por un segundo y los cuerpos de Flavia y Sofía se perdieron en un orgasmo descomunal. Sí, llegaron juntas.

Flavia como pudó se acostó al lado de Sofía y se abrazaron. No podían emitir palabra alguna, estaban agitadas. Pero las sonrisas que se lanzaban bastaba. Se dieron un beso y ambas cayeron en un sueño profundo aunque nada tenían que soñar. El sueño había sido cumplido. La meta había sido alcanzada. Habían hecho el amor.