Tocando la guitarra hice dos amigas nuevas

Un joven toca su guitarra en el parque cuando se encuentra con tres patinadoras muy sexys, las cuales le escuchan tocar la guitarra y le invitan a una cerveza en un bar, pero antes tienen que ir a su casa a quitarse los patines y él las acomp

El otro día estaba aburrido en casa y viendo que había un buen día salí con mi guitarra. Caminando me puse en un banco a la sombra de un árbol a tocar mi guitarra, enfrente estaba la pista de patinaje donde uno niñatos estaban patinando. Al poco tiempo los niñatos se fueron y aparecieron dos chicas, una morena con una top naranja y unos shorts verdes apretados a su trasero y una chica rubia con una camiseta blanca que ponía SQUAD con la bandera de república checa debajo un pantaloncito negro ajustado y ambas con calcetines altos y patines en línea, al poco apareció una tercera castaña con tambien un top muy provocativo patinando como las otras.

Ellas patinaban por toda la pista pasándolo bien y riéndose yo mientras tocaba la guitarra y ensayaba varias canciones. Las chicas se dieron cuenta de mi presencia y empezamos a jugar a un juego. Ella pasaban delante mío y se reían pasaban una y otra vez y me saludaban y yo a ellas. Luego la rubia pasaba saludando y cuando me sobrepasaba inclinaba su trasero para que viera lo ajustado que se le estaba el pantaloncillo. La morena hacía lo mismo y ambas se reían de mí, supongo de la cara que tenía y lo malo que me estaban poniendo, la castaña también pasaba por delante mía y hacía lo mismo. La rubia llevó el juego a un punto más y ahora me saludaba y me lanzaba besos con las manos yo me reía y seguía cantando y tocando. La morena, la castaña  y la rubia se pusieron ha hacer un trenecito con el cual me enseñaban el canalillo de sus pechos sobre todo la morena que era la que más me excitaba, así estuvieron jugando conmigo y yo con ella toda la mañana.

Cuando se cansarón de patinar se sentarón a mi lado la morena y la rubia, la otra se quedó de pie escuchando lo que tocaba. Cuando terminé  me presenté.

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Soy Simon.

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Yo Joanna - dijo la rubia.

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Yo Qatia - dijo la morena

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Yo Vanesa - dijo la castaña, le dí dos besos a las tres y luego la castaña me dijo.

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Toca algo que marcha - y empecé a tocar varios compases para que ella bailara las otras dos se quedaban mirando mis manos.

Cuando ya lorenzo apretaba y tenía la boca seca las chicas propusieron si nos íbamos a tomar unas cervezas, yo acepté, pero antes tenían que pasar por su casa a quitarse los patines y me dijeron que las acompañara la castaña también tenía que ir a cambiarse y quedamos con ella el en bar que conocían las tres.

A los pocos minutos llegamos a la casa de las chicas, la iba a esperar fuera convencido que no vivían allí y se habían quedado conmigo pero al abrir ella me dijeron que entrara porque  necesitaban apoyarse en mí para no caerse. Nada más entrar en la casa ellas se quitaron los patines y me dijeron que me sentara mientras ellas se cambiaban, Qatia fue a cambiarse, Joanna me dijo que le tocara algo con la guitarra y comencé, Qatia que casi había salido de la habitación volvió y se sentó a mi izquierda mientras que Joanna se había sentado a mi derecha, ambas descalzas.

Estuve tocando varios acordes y veía como Joanna se acercaba mas a mi y miraba a Qatia lanzando miradas de complicidad. El siguiente paso de Joanna fue ponerme su mano encima de mi hombro y pegar sus pechos a mi codo, como si no quisiera la cosa, luego Joanna me tocó el pelo por la nuca y miró a Qatia, algo planeaban. Qatia se levantó pero solo para poder sentarse y pegar más su cuerpo a mi podía sentir su pechos cerca de mis hombros y Joanna con una caricia bajó su mano por mi pechos.

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Increíble - dijo Qatia animada por los acordes.

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Si, te gusta? - le dije parando de tocar.

Los tres reímos, estaba empezando a tocar otra canción cuando Joanna acariciando mi pecho me dijo

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Espera - y con su manos apartó la guitarra de mi pierna y mi pechos poniendo atras mio.

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¿ vas a tocar tu? - le dije entre risas sabía lo que quería, pero no me imaginaba que me iba a tocar a mi.

Joanna y yo nos empezamos a besar mientras que Qatia se había levantado del cheslong donde estábamos sentados los tres, pensé que se habían hablado en miradas y que Joanna iba a ser la afortunada o yo el afortunado, entonces le puse la mano en la nuca a Joanna y nuestras lenguas empezaron a  jugar a tocar a la otra. Al instante sentí a Qatia volver a sentarse a mi lado y empezó a acariciar mi cuello , dejé de besar a Joanna para besar a Qatia sin pensarlo, me había tocado el premio gordo. Ella era mas fogosa que Joanna. Besando introducía su lengua e intentaba atrapar la mía en su boca, Joanna mientras besaba mi cuello con sus labios y lamía mi cuello.

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Increible - dije y todos reímos.

Dejé la boca de Qatia para besar a Joanna otra vez , me gustaban mas los besos de Joanna eran más dulces pero Qatia que estaba cachonda no quería esperar más así que bajó por mi cuerpo desabrochando mi camisa y mi pantalón, luego  bajando la cremallera sacó mi polla ya erecta en mis calzoncillos, Acogió a mi polla en su boca mientras que yo seguía besando a Joanna, Qatia comenzó a lamer sin dejar trozo de piel sin humedecer con su lengua, tragandosela entera en su boca  mientras que se tocaba los pechos, pellizcando sus pezones por encima de la camiseta naranja.

Joanna  vio lo que su amiga había sacado de mis pantalones y se fue a compartir el premio con su amiga, yo me eché en el cheslong y ambas a cuatro patas comenzaron a comerme la polla en dos tiempos cambiandose de turno cada dos por tres. Con la visión de las dos amigas comiendome la polla yo comencé a acariciar sus traseros  y acariciar sus pechos por encima de la ropa. Qatia que era la que estaba más excitadas se quitó su camiseta y sus sostén, luego me puso las tetas en la cara para que las besara cosas que hice mientras que Joanna se ponía al dia con mi polla. Le baje los pantaloncillos a Qatia lo justo para meterle un dedo en su coño húmedo. Joanna alertada por los gritos de placer de Qatia no tardó en dejar de mamarme la polla y empezar a quitarse la ropa, como su amiga para que con mi otra mano le hiciera sentir el mismo placer que a su amiga.

Tras largo rato hurgando en su coños me tocó a mi meter mi polla en caliente y que mejor sitio que el coñito de una de mis nuevas amigas. Me daba morbo el de Qatia que era el más prieto pero cuando sacando los dedos de sus coñitos me proponñia metersela a Crisitina Joanna se me ofreció y así se zanjó cual coñito me iba a follar primero. Joanna se puso a cuatro patas y yo me puse detrás de ella apuntando con mi polla a su coño, Qatia que estaba sentada sobre sus rodillas miraba la acción sin perder detalles. Poco a poco introduje mi polla en el coño de Joanna con el sonido de su suspiros de fondo, una vez dentro todo fue muy monótono con un compás binario de dentro fuera dentro fuera ante la mirada de morbo de Qatia quien se excitaba con escuchar a su amiga y ver como se la follaban en vivo y en directo. Cuando lo gritos de Joanna me hizo saber que había llegado al máximo de su placer y se sacó mi polla de su coño, supe que era el turno de Qatia la cual se puso decúbito supino sobre el cheslon con las piernas abiertas, tomé mi polla y apunté hacia su coño introduciendo con facilidad debido a la humeda de mi polla y del coño de Qatia. Los gemidos de placer de Qatia no eran tan sonoros como los de Joanna pero su respiración si parecía que se iba a desinflar con tanto expiración de aire. Al poco le dije que me iba a correr y ella me dijo que parara. Paré. Ella se sacó mi polla de su coño y me pidió que me tumbara decúbito supino y ella se puso arriba comenzando a montarme como un caballo salvaje de una forma muy violenta tanta que casi temo por la integridad de mi polla pero afortunadamente no pasó nada y ambos tuvimos un gran orgasmo.

Tras varios minutos para recuperar el aliento no aseamos y salimos al bar donde nos esperaba Vanesa, ella con solo mirar las caras de sus amigas supo que es lo que habíamos hecho sus amigas y yo hacía un momento.