Tio Roge - Se Despierta la Bestia

Tio Roge. Siempre fue un macho bien grandote y con muchos problemas de genio, dominancia, y personalidad machista. En su batallón le decían La Muralla porque media 194cm de altura con 97kgs. “Si lo que ella quiere es construcción, entonces yo le doy cabilla”

Mi tio Rogelio (Roge) fue el primer macho que de veras cambio algo en mi.

Cuando yo estaba en la secundaria, Tio Roge regreso de sus años en el servicio militar ya cuando estaba en los 30, se instalo en casa de una muchacha a unas cuadras de mi casa pero siempre estaba metido en mi casa comiendo de la comida de mi madre o haciendo ejercicios en el patio. Su presencia era bien sentida donde quiera que estaba y yo siendo tan afeminado criado por mi madre bajo su falda, siempre me sentia que me deberia esconder y quitar de su camino.

Yo nunca habia ni besado a una chica y no tenia interes alguno en las mujeres excepto ponerme sus ropitas sexy y bailar o cantar.  Todas mis amigas eran niñas ya que yo era muy afeminado y temia estar con los varones.  Mi cuerpo era bien femenino tambien ya que tenia caderas y cachetes bien altos con ojos verdes y pestañas largas. No habia desarrollado pelos ni musculos ni voz de macho... tal parecia que mientras mas me adentraba en la pubertad mas yo me feminizaba. Mis compañeros de clase me decian que caminaba como hembra moviendo las caderas y que yo me reia como mujer. Eso me molestaba pero tambien me exitaba porque me gustaba la manera en que ciertos muchachos en la escuela que eran mas mayores y machos me miraban o me hablaban mal.

Lo totalmente opuesto a mia era mi tio Roge. Siempre fue un macho bien grandote y con muchos problemas de genio, dominancia, y personalidad machista.  En su batallon le decian La Muralla porque media 194cm de altura con 97kgs. Ademas, siempre fue bien extrovertido y siempre tenia que dar su opinion en todo ya que los otros chicos lo respetaban. A veces sus amigotes parecian mas sus fanaticos interesados en su opinion en todo:

"Oye, Roge, que tu crees de estos zapatos que me mandaron del yuma?" y "Roge, mi socio, y cuantas veces te has singado a la jebita aquella que conocimos en el Malecón?"

Y mi Tio dominaba y manipulaba como un conductor de orquesta en toda situación.  Todos (y especialmente TODAS) hacían lo que el quería, al final. Y si había otro macho alfa en el grupo donde estaba el con chicas, buscaba la manera de deshacerse de ellos asi fuera a golpes.

Yo odiaba esa cualidad de alfa pero también era una que me llamaba mucho la atención: su habilidad de manipular toda situación a su manera y conveniencia.  Ropas, trabajos, mujeres, citas.  Yo me acuerdo un dia llegaron dos muchachas con el amigo de mi tio Cesar.  Cesar era de la misma edad de mi tio y aunque no era tan apuesto y galansón, era musculoso, de estatura mas baja aunque aun alto, y bien machote con una barba. Cesar le presento las chicas a Tio Roge y mi tio le respondio, “tu crees que la tuya es la mas linda? Ni pinga! Esa es pa' mi!” Y de la mano alejo a la chica de Cesar y la abrazo y la toqueteo. La chica enrojecida sonreía pero se derretia.

Las mujeres siempre fueron su debilidad y desde temprana edad fue mujeriego y jugador y repartidor de pinga. Roge lo conocian por robarle las novias a los amigos y hasta a veces quitarles la virginidad a chicas de buena familia. Roge singaba en un parke, encima de un árbol, en el techo de una casa, y DONDE FUERA! “Si lo que ella quiere es construcción, entonces yo le doy cabilla” y se agarraba la pinga por el pantalón mientras sacaba la lengua larga y puntiaguda que tiene.

Despues de haber dado sus años de servicio militar, el regreso diferente y cambiado. Era mas adulto, mas macho, mas grueso.  Sus piernas y muslos eran gruesas y muscolusas y cubiertas en pelo negro obscuro. Su cuerpo era bien grandote tambien con una espalda ancha y un pecho bien marcado cubierto de pelos hasta su cuello.

La primera noche de vuelta, recuerdo se quedo dormido y sus pies colgaban de la cama por ser tan altote. Siempre dormía en una cama pequeña en el cuarto de atrás y me encantaba admirar su cuerpo ya cuando estaba dormido en sus calzoncillos. Sus piernas y muslos eran gruesas y muscolusas y cubiertas en pelo negro obscuro que se oscurecia mucho mas en los bordes del calzoncillo.  Su cuerpo era bien grandote tambien con una espalda ancha y un pecho bien marcado cubierto de pelos hasta su cuello. Siempre tenia una cadena gruesa de oro y un reloj en la mano izaquierda que era gigante y exagerado. Tio Roge no creia en afeitarse el cuerpo y decia que las mariconas eran las que se afeitaban.  Sus cejas negras y gruesas casi uniendose con una sombra de barba que nunca se borraba.  Sus biceps y brazos eran grandes y siempre se quejaba que no cabian en camisas de mangas largas.  Sus brazos tambien eran peludos y se extendia hasta sus manos y hasta sobre sus dedos de las manos y sus grandes pies.

“Como has cambiado desde la ultima vez que te vi.” Dijo mi tio con la voz ronca y los ojos todavía cerrados.

“Tio! Me asustaste!” dije bien mariquita.

“Bueno, veo que algunas cosas no has cambiado. Sigues siendo la copia idéntica de tu madre. Ven y acuéstate con tu Tio favorito que ya no me quieres como antes.  De chiquito eras bien apegado a mi, hasta me decias PAPITO cuando estábamos solos pero ahora estas distante. “

“Pero yo si te extrañe! No tenia a nadie con quiein jugar pelota,” dije yo.

“A ti nunca te gustó jugar pelota, ni futbol ni nada de nada. Lo tuyo siempre fue dibujar vestiditos, y jugar con las pinturas de uñas de la vecina.” Dijo el.

“Y que mas iba a hacer yo cuando tu y ella estaban en el otro cuarto haciendo cuchi-cuchi?

“SINGANDO! Lo que hacíamos ERA SINGAR, COGER, HACER EL AMOR!!! Lo que quiere toda jeba que le haga un macho!”

“Bueno, a la vecina esa la hiciste llorar y gritar, a veces parecía que la estabas matando por los aullidos que pegaba.”

“Y buen bollo que tenia para comérselo, y con mi lengua la volvia loca estilo centrifuga!” Y saco la lengua y la dejo caer hasta su quijada, y movia la puntica como una serpiente.

Yo me quede mirándole la lengua desde mi lado donde yo estaba acostado y entonces Tio paro de mover la lengua y me miro la cara de arriba abajo… y con voz baja dijo… “Tienes las cejas depiladas, eh?”

Enseguida mis manos volaron a las cejas y las taparon.

El me quito las manos de las cejas agarrándome por mis muñecas y trayendo mis brazos a mi lado. Y con voz fuerte, “DEJAME VER!”

Entonces acerco su cara a la mia para inspeccionar mis finas y afiladas cejas. Con la punta de sus dedos recorría la forma de la ceja mientras su aliento caliente caía sobre mi cara.

“Te gusta tener cejas femeninas y sexy… y mira que carita tan suavecita tienes aunque ya estas en edad para tener barba… pero no, tu barba no tienes, verdad? Porque tu eres mas delicada, mas suavecita.”

Yo no dije nada y me quede paralizado.

“Hasta tus labios se hinchan como los de una jebita. “ Y procedio a tocar mis labios con su dedo pulgar. “No es cierto, bebe?”

Entonces cuando no contesté, me dio una bofetada bien fuerte.

El ruido me asusto y salte, mi Tio con una mano me apretaba la cara y el cuello y ahora tenia su cara contra la mia y se veía doble ante mi como dos machos viriles endemoniados.  Entonces volvió a preguntar, TE GUSTA SER PUTA Y FEMENINA? Y gritado, “DIME!!!!!!”

“Si, Tio! Si!” dije yo.

“Si, que, de que? Puta!”

“Si me gusta ser femenina.”

“Dimelo otra vez y dilo con voz bien putona.”

(voz cortada) “Si…me…gusta…ser femenina.”

(BOFETADA)

“SI ME GUSTA SER FEMENINA!”, grite yo.

“Aprende a hacerme caso porque yo no soy un amiguito tuyo de la escuela que tu le mamas la pinga, yo soy una BESTIA cuando no obedeces. Ahora quítate toda la ropa y arrodíllate en la cama.” Dijo Tio bajándose de la cama y dejándome en ella.”

“Que haga que cosa, tio?” Pregunte con sorpresa.

Mi tio me agarro el moño de pelo por detrás y me arrastro al piso donde me arranco la camiseta que tenia puesta y la ripio. Me quito los shorts a la fuerza y me quito las medias mientras yo simplemente me dejaba llevar con sumisión.

“ahora ponte de rodillas y para el culo bien parado.”

Enseguida lo hice.

“Asi me gusta que seas.”

Entonces mi tio camino hasta detrás de mi donde había unas puertas dobles grandes que se abrían a la terraza y el parque donde estaban muchos vecinos y compañeros de la secundaria jugando pelota y haciendo ejercicio.

Sin pestañar abrió las puertas y en menos de 2 segundos había mas de una dozena de machos mirando a mis cachetes y raja.

Cuando me fui a mover mi tio me puso su mano levemente en mi hombro y no me movi.

“Tranquila. Tranquila. No te muevas."

(Continuara)