Timidez - 1
Me gusta una compañera de trabajo con la que llevo meses tonteando Me entero por casualidad que un cabròn de la oficina se la ha beneficiado
TIMIDEZ - 1
Me encontraba en mi mesa de trabajo, metiendo datos y más datos en el ordenador, mi altamente gratificante y emocionantísimo trabajo. Para ser sinceros justo el que yo quería hacer, fácil, simple, sin necesidad de comerse el tarro... Mi profesión es informático y realmente soy muy bueno, modestia aparte, en realidad me dedico por libre a probar los sistemas de protección de grandes empresas que me contratan para ello. Tengo una cierta reputación en ese círculo, solo cobro si obtengo resultados por lo que mis tarifas son altísimas realmente.
Podríamos decir que a mis 30 años tengo suficiente dinero ahorrado ya como para poder vivir desahogadamente toda mi vida. ¿Que porque trabajo entonces?, simple, por mantenerme ocupado y no cebarme con mis aficiones deportivas. Me gusta el paracaidismo, volar ala delta, submarinismo, esquí acuático (aunque siempre acabo dándome la leche padre), motocross, circuitos en Quad, escalada, barranquismo, descenso de rápidos, el puenting, el esquí (incluso alguna vez he practicado el esquí extremo), el senderismo, las acampadas... en definitiva todo lo que sea un choque de adrenalina o estar en la naturaleza.
Mi vida hasta hace tres años transcurría entre entrenar artes marciales, estar encerrado en casa con mis ordenadores trabajando horas sin parar y mis aficiones. Haciendo Ala Delta tuve un accidente muy grave, la verdad es que por mi total y absoluta culpa, no estaba a lo que tenía que estar pensando en un trabajo que había aceptado y perdí sustentación de golpe con lo que me fui para el suelo prácticamente a plomo. Logre enderezar el vuelo en el último minuto pero no puede evitar dármela muy fuerte contra un peñasco de mala manera. El resultado fue que rompí el casco, gracias a él sigo vivo, y que pese a las protecciones me fracture cinco costillas y me fisure dos más, también me fastidie una de las rodillas haciéndome trizas el menisco, pese a todo tuve muchísima suerte de no quedar con secuelas o de haberme matado tras el golpe. Tras recuperarme el primer fin de semana volé otra vez un ala delta, salte en paracaídas e hice puenting... para no acojonarme, para pasar el miedo tras el accidente.
Como podéis suponer de deporte nada de nada en una larguísima temporada, y mucho menos del que yo practicaba, por lo que mis amistades me empezaron a presionar para que según me repusiera me buscara algo para trabajar, lo que fuera, pero que me mantuviera fuera de casa y ocupado pero sin hacer burradas, por lo menos hasta que me recuperara del todo. Hace un poco más de dos años que encontré este y aquí sigo. Cuando me empecé a recuperar como tuve que dejar las artes marciales me apunte a un gimnasio... originalmente pensé en dejarlo todo y volver a lo de antes en cuanto me recuperara de todo, pero entre pitos y flautas, dado que al estar haciendo esto mi mente permanecía ocupada, que en mi verdadero trabajo empezó a estar más desahogado y que parecía que a mis aficiones me parecía sacarlas ahora más el gusto, continúe en mi puesto y con esta vida. Después... después llego Miriam a la oficina.
Hace casi nueve meses que llego, una morenaza de escándalo, con un cuerpazo de infarto, no es que por su forma de vestir en la oficina se adivine o algo así, sino que como llevo como mas de tres meses tonteando con ella, quedando para ir al cine, a cenar, a bailar y a nada mas debido principalmente a mi timidez o estupidez con las chicas, sobre todo con las que me gustan, que no sabría bien como calificarlo a estas alturas, con mi físico, con mi forma de ser y con mi edad era como para matarme.
La verdad es que salimos por ahí como amigos pese a que me encantaría ser mucho más que eso para ella pero como siempre mi maldita timidez… Como os diría que es como mujer… alucinante, explosiva, bellísima, buenísima, es increíble como esta, como engaña en el trabajo pese a que se ve que es preciosa, que diferencia de ir con ropa holgada a llevar faldas o pantalones ajustados, y blusas o jerséis que remarcan sus encantos en lugar de disimularlos…
Hoy Jueves tengo encima un marronazo de escándalo... o quizá dos, aunque el segundo quizá más que marrón sea cierto enfado divertido con una chica que ha llegado a la oficina ese mismo lunes, una chavala muy maja llamada Sara, junto a ciertos temores con ella porque cuando esta cerca siempre a cabo en bronca con su hermana.
El miércoles por la noche al final decidí echarle cojones a la cosa y pasarle a Miriam algo que descubrí accidentalmente esa misma mañana, la verdad es que se daban todos los ingredientes para poder hacerlo anónimamente y sin que nadie supiera que realmente era cosa mia, pero joder es que era muy fuerte, sobre todo para mi... pero como ya lo había hecho echándole unos huevos raros en mi tratándose de la mujer que me gustaba, ahora estaba temblando por ver como salía el asunto.
El día anterior por la mañana cuando fui al servicio aproveche la coyuntura para meterme en unos de los baños y mandar un mensaje de texto a una amiga para quedar con ella, ya que Miriam por segundo fin de semana consecutivo no podía quedar conmigo porque según me dijo tenía que ver a unas amigas que hacía tiempo que no veía... La verdad es que nunca había quedado para ir con sus amigas también, o ella conmigo y mi grupo de amistades así que no lo vi raro, sobre todo por su cara la mar de seria cuando me lo dijo... pensé que quizá alguna de ellas tuviera problemas o algo así por como estaba, pero… no pensareis que me iba a atrever a preguntarla, ¿no?
Esa misma mañana me había mandado un mensaje una amiga para quedar con ella el viernes por la noche, quería salir conmigo a hacer alguna locura, hacia poco que había roto con su novio y no le apetecía salir con sus amigas como siempre, así que todo me apunto a mí. En un principio dije que no, pero minutos después fue cuando Miriam me dijo que teníamos que suspender lo del viernes, así que decidí quedar con Blanca. El problema vino cuando tras mandarla el mensaje para aceptar quedar con ella entraron tres compañeros de la empresa, o mejor dicho, dos compañeros y un hijo de puta.
Según entro con los otros dos y empezó a hablar tuve la suerte, la precaución o la mala ostia de poner mi móvil en grabación de voz, mi móvil es de última generación con tarjeta externa de memoria de varios gigas de capacidad, con lo que iba muy sobrado para ello. Empezó a contarlos como había quedado el viernes anterior a cenar con Miriam, que había anulado su cita con un pardillo con el que salía de vez en cuando que también era de la oficina según parecía, ósea yo mismo. Estuvo contándolos como se estuvieron los dos riéndose de mi por lo paradito que era ya que llevaba todo ese tiempo sin decidirme a atacarla, después empezó a contarles intimidades de lo que paso esa noche con Miriam.
Empezó por como la convenció para llevársela a un hotel tras cenar, como ya en el ascensor del hotel al subir solos empezó a calentarla metiéndola mano por todos sitios, como ella se dejaba hacer, mojándose cada vez mas... como hizo que le tocara la polla por encima del pantalón para que fuera viendo de lo que iba a poder disfrutar. Como entraron en la habitación quitándose la ropa a toda prisa, como la muy zorra (todo esto palabras de él, que no mías) tenía las braguitas completamente empapadas. Como hizo que le chupara la polla, lo puta que según él era chupando como la chupaba.
Después hubo diversos comentarios entre ellos sobre la boca que Miriam tenia, como parecía hecha para comer pollas, como les hubiera gustado a los otros dos que también se la comiera a ellos. Sobre el polvazo que tenia la muy puta (palabras de ellos) pese a intentar disimular lo buena que estaba, algo que riéndose el hijo de puta les dijo que estaba todavía mejor que todo eso. Después este hijo de puta, Ramón, empezó a contarlos como se la metió por el coño hasta dárselo de si con su pollòn, lo cerradita que estaba cuando se la metió, como gritaba (repito, todo esto según él) como una perra, que era toda una zorra en la cama... Como la intento romper el culo pero no se dejo, alegando que la haría mucho daño con su pollòn, como en cambio la hizo chuparle la polla otra vez, pero en esta ocasión como le sujeto a la muy zorra (todo os recuerdo que según él) la cabeza para evitar que se quitara y así obligarla a tragarse su lefa... Después riéndose les conto que se levanto corriendo para ir al servicio a escupir todo lo que no se trago, como cuando volvió la muy guarra encima se hizo la estrecha, y que enfadada se quejo de lo pasado, diciéndole que no volviera a molestarla... vistiéndose y marchándose muy cabreada. Todo esto contado entre risas de los tres. En fin que hizo una descripción en toda regla entre las risas, chanzas y comentarios de los otros dos.
Al comentario de uno de los otros dos de que se le había fastidiado entonces el poder seguir follándosela, riéndose le dijo que esa era una zorra necesitada de hombre, y que ya no podría pasar sin que se la follara mas veces, por lo que dijo habían quedado también para este fin de semana y muy ufano les comento también que ya había dado puerta a la cita con el memo también ese fin de semana para quedar con él. Me di cuenta que fue eso mismo lo que había hecho esa misma mañana cuando cancelo nuestra cita habitual para ir al cine y demás. También les dijo como ese fin de semana le pensaba romper ese culazo tan impresionante que tenía esa zorra la gustara o no, porque después se iba a dedicar a la nueva zorrita que había entrado en la empresa, por Sara... que fue quien realmente me decidió a cometer la tontería que había hecho.
Sinceramente en casa estuve pensando sobre el que hacer con lo que sabía, por una parte no era cosa mia el meterme por medio, por otra pensé en que se jodiera la idiota de Miriam, sinceramente me sentó fatal todo lo que el otro conto de ella y de lo que hablaron de mi principalmente, pero en fin. Al final por culpa de Sara termine editando el audio que grabé, pasándolo por toda una batería de programas profesionales de edición de audio para poder dejarlo lo más nítido posible, eliminando el eco del baño de caballeros y demás. Cuando termine con eso y dado que habíamos estado teniendo problemas con la intranet, por lo que los correos mandados a uno podían aparecer en el de cualquiera, era mi oportunidad de hacerlo anónimamente. Lo edite y lo prepare como si me hubiera sido mandado a mi por correo en lugar de al suyo por alguien anónimo debido a los continuos errores en la intranet de la empresa, dado que después de uno recibido erróneo era obligatorio notificarlo lo normal dado su contenido era ponerlo a salvo en un pendrive para dárselo a ella después, ya que era suyo, un plan mas estúpido imposible, pero lo hice.
Ahora iré con Sara. Desde que entro ese lunes a trabajar fue todo un enigma para mí. Nos fue saludando a todos según iban presentándola a la gente con una solo excepción, yo. A mí se me colgó al cuello llamándome por mi nombre, Miguel, sin que nadie me presentara y dándome un par de besazos con una cara entre picara y juguetona, diciéndome al oído al ver mi perplejidad que no me pensaba decir quién era, que tenía que averiguarlo... no veáis el cachondeo que se paso la niña conmigo a costa de esto, al punto que me pareció incluso que era una broma que alguno de mis compañeros me estaba gastando, pero no, como suele suceder cuando menos te lo esperas o no lo estas buscando encuentras las respuestas.
Estaba pensando en el tema de Miriam y qué hacer con un cabreo de aúpa cuando mi vista por azar se fue a fijar en una foto que tenia sobre un mueble, en la parte más alta del mismo... una de tantas, pero esta tenía una particularidad especial que aparecía Sara junto con su hermana y conmigo, fue un flash, porque esa jovencita de la foto solo se daba un aire a Sara, pero su hermana Eva si se parecía mucho a la actual Sara. Por eso llevaba dos días pensando en que Sara me era tremendamente familiar pero no sabía porque, no terminaba de ubicarla, incluso como dije antes pensé que todo era una broma de mis compañeros o algo así.
Sara llevaba siete años estudiando fuera, hacia todo ese tiempo que no la veía, la ultima vez era una chica que se estaba desarrollando, una "enana" y ahora sin embargo era toda una mujer, guapa, simpática y con una alegría desbordante, ahí descubrí que ella quien era ella, la que fue mi novia por siete horas... y que me costó una de las broncas más gordas que recuerde con Eva, su hermana y mi mejor amiga, que bronca no tuvimos que estuvimos casi seis meses sin hablarnos para nada.
Estuve con Sara en esa época en una fiesta de una amiga suya, me hice pasar por su novio, yo tenía 22 añitos y ella 16... Fue de traca la impresión que causo en la fiesta con su "novio", 1.89, moreno, ojos negros, delgado, fibroso ya que hacia artes marciales, inteligente y pegado a ella como una lapa, como si la adorara... la jodìa triunfo, y su hermana casi me mata cuando se entero de lo que habíamos hecho los dos. Cuando regresamos se le había ido la mano un poco con la bebida, porque allí bebió hasta el apuntador por muy menores que fueran, y la deje en su cama durmiéndola, yéndome yo a mi casa.
A los tres dias tenia a Eva en mi casa intentando sacarme los ojos por lo de su hermanita... me prohibió volver a aparecer por su casa y todo, no quiso saber nada de nada hasta que casi seis meses después apareció de improviso en mi casa pidiéndome perdón por el malentendido... Por lo que se ve cuando su hermana la dijo como me había liado para hacer de su novio, Eva la puso a caldo por obligarme sabiendo como sabia que al ser su hermana no la diría que no, que como se la ocurría hacerme eso, que era una cría... por lo visto Sara enfadada la dijo que cuando por la noche me la folle no le parecí tan cría, fue cuando se lio la de dios y se vino a por mí.
Yo le jure a Eva que era mentira, su hermanita se negó a rectificar porque seguían enfadadas. Sara se fue a estudiar fuera y dejo el pastel. Como Eva al final me termino por enfadar también a mi nos terminamos llamando de todo sin dar marcha atrás ninguno de los dos y como dije antes casi seis meses sin hablarnos. Cuando por fin a su querida hermanita la dio por preguntar por mi y se entero que llevábamos sin hablarnos desde que dijo aquello... bueno que se lio entre las dos otra vez, pero al menos sirvió para que Eva y yo hiciéramos las paces. Saber quién era Sara y que estaba en el punto de mira de ese cabròn fue lo que me cabreo hasta el punto de decidirme a dar el paso y pasarle el archivo a Miriam. Quiero aclarar que lo de meterme por medio con el hijo de puta este no solo fue por Sara, sino que también principalmente por su hermana Eva ante todo, que era mi mejor amiga y no podía permitir a semejante cerdo ponerle las manos encima.
Y ahora tenía otra vez a la caprichosa hermanita de Eva a mi lado, cada vez que pasaba eso terminaba discutiendo con Eva... no sé porque me dio que me olía otro marrón con Eva estando Sara tan cerca de mí, y si no al tiempo. Según entre y la vi inclinada con el culo en pompa sacándose un café de la maquina, como estábamos solos no me corte ni un pelo con ella, le pegue una sardineta en el culo que la hizo soltar un chillido de dolor, cuando se revolvió cabreada y lista para soltar un guantazo al gracioso, la cogí por las manos riéndome, diciéndola que eso era por el lio que monto entre Eva y yo, después la explique qué sabia quien era, como lo había descubierto... evidentemente si me atreví era por la confianza que siempre nos habíamos tenido, que manda cojones hacer eso después de siete años como si no hubiera pasado tiempo, pero bueno, salió bien y se lo tomo bien.
Pero a lo que iba ahora, a Miriam. Esa mañana le deje mi pendrive encima de su mesa cuando pase por su lado rumbo a las maquinas de café, la dije que había un archivo de audio que habían enviado a su correo pero que había acabado en el mío, dado que eso como dije antes era habitual no sospecho nada. Yo tengo un problema con las mujeres, y es que pese a que hablo con ellas sin problema, soy divertido, gracioso y demás... cuando llega el momento de ese último paso me corto, según un amigo que es sicólogo eso es por mi miedo al compromiso o algo así, para mí que son pamplinas, que me rajo y punto, me acojono con ellas. Por eso llevaba tanto con Miriam y nunca había intentado dar ese último paso, porque cuando iba a darlo me faltaba el valor, al final lo de siempre, llega un capullo y me la levanta, el sino de mi vida.
De hecho puedo aseguraros que no recuerdo haberme ido a la cama con una chica y que no fuera ella la que hiciera ese último movimiento. Según las que se han acostado conmigo soy guapo, estoy bueno, soy buen amante, las hago disfrutar como enanas en la cama, por lo que mi autoestima debería de estar por las nubes, pero sin embargo, me acojono vivo con ellas cuando llega ese último pasito y no lo doy. De hecho confianza, lo que se dice confianza con una chica, únicamente con mis amigas... o con Sara ahora por ejemplo, ya que la que conocía desde que era una mica de 4 o 5 años.
Me metí en mi ordenador sin atreverme a mirar a Miriam, ni os cuento el vuelco que me dio el corazón cuando vi por el rabillo del ojo que se ponía los auriculares de su MP3 conectados al ordenador sin duda para oír la grabación... por la cara que puso a los veinte segundo ya supe que sí, que la estaba escuchando. Su cara iba del rojo al blanco cadavérico según lo que escuchara en ese momento... Realmente no me molesto el que se liara con otro, bueno la verdad es que si me molesto un poco bastante, pero como ya he dicho me las han dado así muchas veces como para no estar acostumbrado a ello pese a todo.
Me jodío que me mintiera, pero sobre todo con quien se fue a liar, un guaperas bocazas al que conoce toda la empresa de qué pie cojea... se folla a alguna y al día siguiente lo sabe hasta el apuntador porque es incapaz de callarse, de hecho en los dos años que llevo allí he visto como ha sido el directo responsable de un divorcio y dos rupturas... Las parejas de ellas trabajaban cerca y se terminaron por enterar, eso si él no dio la cara ni una sola vez, claro que si la hubiera dado se la hubieran partido, ya que incluso alguno de ellos estuvo buscándole con tan sanas intenciones. A las tres las jodío la vida por bocazas, aunque no negare que en realidad toda la culpa fue de ellas por permitirlo, dos no follan si uno no quiere, salvo que sea una violación claro.
Gracias a dios llego la hora de irse, pero debía de recuperar mi pendrive porque entre otras genialidades le había dado el que tenia la copia de mi agenda personal y la necesitaba, cojonudo, cuando vi que Miriam venia hacia mi mesa la dije en voz alta que lo dejara sobre mi mesa que iba al baño un momento, despidiéndome de ella hasta el día siguiente, salí escopetado lo más lejos posible de allí para que no me pillara, sinceramente estaba acojonadito de tener que hablar con ella de eso y que me pidiera explicaciones o algo. Estaba de los nervios, medio histérico. Cuando regrese para mi "alegría" solo quedábamos tres personas en la oficina, Miriam, Sara y yo... antes de que Miriam pudiera decir nada hablo Sara... gracias a dios porque me sirvió para recuperar en algo mis "huevos".
- Sara : Este Sábado me voy con vosotros, ya se lo he dicho a mi hermana.
- Yo : Oye Sara que no quiero líos con Eva, que sabes cómo se pone luego conmigo...
- Sara : Que pasa, que vas a dejar tirada a tu novia...
- Yo . Eso ni me lo mientes, que sabes lo que paso luego y como nos la jugaste, estuvimos seis meses sin hablarnos por lo de la fiesta a la que me deje convencer para ir como tu novio...
- Sara : Y bien que me divertí... se les hizo el coño pepsicola a todas mis amigas esa noche al ver al morenazo que me había ligado...
- Yo : ¡¡¡¡SARAAAAAA!!!! (Me puse como un tomate)
- Sara : Jajajajajajajajaja, cortado, que eres un cortado... este sábado voy con vosotros y se acabo, además iré con Eva de forma que no puedes decir nada de nada... chispas.
- Yo : Tu padre guapa...
Lo de chispas vienen por los amigos que van conmigo a nuestras citas con el deporte, me llaman así porque dicen que tengo que tener algún cable en cortocircuito en el cerebro dando chispazos para tensar la cuerda como la tenso... siempre doy un paso más, según ellos algún día daré el paso demasiado largo y me matare. Por eso me pusieron ese mote.
Como Sara y yo nos íbamos juntos dándonos puyazos Miriam salió a mi encuentro con una cara que ¡joder!, no sabría decir si enfadada, consternada, dolida, asustada... era desde luego rarísima de narices...
- Miriam : Miguel podemos hablar un momento...
- Yo : Claro...
- Miriam : (Mirando a Sara) A solas, por favor...
- Sara : Yo me voy, recuerda Miguelito que el sábado estoy con vosotros... no pienso dejarte ni a sol ni a sombra, serás mi guía...
- Yo : Y un cuerno, eso que lo sea tu hermana...
- Sara : Jajajajajajaja, no te lo crees ni tú, adiossssss...
- Yo : Y una mierda, le dices a Eva que esta noche ceno con vosotras en vuestra casa, que prepare algo... eso de que te vienes que me lo diga ella... además...
- Sara : Ya ha llamado a Blanca, con la que por cierto me ha dicho que te vas mañana los dos solitos, para que reserve mas habitaciones para todos para cuando lleguemos el sábado...
Cuando dijo lo de Blanca Sara lo hizo con retintín, pero con un retintín cargado de mala leche, mientras Miriam ponía una cara aun más extraña.
- Yo : Te repito que eso que me lo diga Eva esta noche... y entonces veremos...
- Sara : Jajajajajaja, me voy antes de que te enfades más... (La cabrona me saco la lengua y salió corriendo hacia el ascensor a la carrera mientras se reía).
- Miriam : Veo que te llevas muy bien con la nueva, ¿no? (El tono de voz era... raro, aunque con la que debía de tener encima tras lo que tuvo que oír no me extraño en lo más mínimo)
- Yo : Normal, es la hermana pequeña de una de mis mejores amigas...
- Miriam : Ya... ¿Has oído el archivo, verdad?
- Yo : Si, lo siento pero pensé que era para mí, no me fije mejor en la dirección a la que estaba dirigido hasta casi el final, pero aun así lo escuche del todo, supongo que fue la curiosidad, eso fue algo imperdonable, lo siento muchísimo Miriam, de verdad. Por su puesto no te preocupes que por mí no sabrá nada nadie...
- Miriam : No me importa eso, veras lo que dice de ti...
- Yo : Mira no tiene importancia, no puedo decir que sea mentira del todo... soy muy tímido con las chicas aunque no lo parezca, es normal que te cansases de mí, no te hagas sangre por eso...
- Miriam : No me canse de ti para nada Miguel, la verdad es que...
- Yo : Mira Miriam, de verdad déjalo, que no tienes que darme explicaciones... soy muy tímido para según qué cosas y siempre me ha pasado factura, esta es una más de esas y ya está. (Vi que de repente me miraba con cara de curiosidad)
- Miriam : ¿De verdad eres tan tímido?
- Yo : Mira...
Levante mi mano izquierda, poniéndola horizontal, se veía claramente como me temblaba el pulso una autentica barbaridad. Miriam había salido conmigo muchas veces al cine, me había visto muchísimas veces las manos en esa posición al tenderla las entradas, estar de broma, etc... Nunca me habían temblado y eso lo sabía ella de sobra. Era muy consciente de ello también porque en cierta ocasión tuve que ayudarla con una bombilla de su coche y me comento que no me temblaba la mano ni por casualidad al ver como tenía que hacerlo todo a pulso, ya que me costó dios y ayuda poder cambiarla, ya que no había por donde coño meter la mano y si esta me hubiera llegado a temblar lo más mínimo no hubiera podido ni de broma sin despellejármela entera... y creo que quienes tenéis coches modernos sabéis a que me refiero.
- Yo : Esto es por estar hablando contigo de todo esto… imagínate hablar de algo más personal o… bueno déjalo, no te preocupes por eso Miriam…
- Miriam : Pero...
- yo : Déjalo estar de verdad, que no pasa nada Miriam, estoy ya acostumbrado a estas cosas, es mas... no sé ni cómo tengo las agallas de seguir aquí contigo y no salir corriendo, es superior a mí con una chica cuando la cosa se pone seria... y más cuando me gusta...
No dije nada más, me puse colorado como un pimiento morrón, tartamudee un "lo siento llevo prisa… tengo que irme" y la deje allí plantada con la palabra en la boca. Salí hacia mi coche con paso rápido mientras vi como Miriam se quedaba allí parada mirándome alejarme, su cara era indescifrable, pero aun así, en ese momento hubiera jurado que volvía a mirar de forma rara, muy rara la verdad, aunque con la espantada que estaba dando...
Todavía me quedaba el viernes, y lo que es peor, con las prisas por escapar me deje el pendrive en la oficina, supuse que encima de mi mesa, donde le dije a Miriam que me lo dejara... con todo esto ni me acorde de cogerlo, que bien, y como podréis suponer no tenía la menor intención de regresar para recogerlo, ¿a qué no?.
CONTINUARA