Tiempo de libertad 5

Miguel tiene su primer toma de contacto con la Leona… aunque

TIEMPO DE LIBERTAD -5

Las imágenes que tome con el móvil del encuentro con Violeta, las descargue en el ordenador para editarlas y dárselas a Alma, para que hiciese con ellas lo que le diese la gana, aunque pixelé mi cara junto con la de los dos camareros, la de Violeta en cambio se veía a la perfección, ya que suponía que Alma se las mandaría a todos y todas sus compañeros de clase. Sandra estuvo alucinando en colores durante un buen rato cuando Alma le enseño las imágenes.

El lunes volví a la oficina esperando tener una semanita tranquila pero no hubo forma. A Helena se le acumulo el trabajo, lo que quería decir inequívocamente que a su secretario le pasaba tres cuartas de lo mismo como es normal. De forma que estuve liadísimo toda la semana, con lo que no pude tomarme ni un solo día para "conversar" con Estela, algo que esta lamento profundamente por lo que me dijo.

De mis compañeras, Carol seguía con su meditado y estudiado plan, pero lamentablemente cuando no era por una cosa, era por otra y no acababa de cuajar en un polvo entre los dos, y eso que creerme que le tenía ganas. Lo cierto es que pensándolo detenidamente, creo que me estaba empezando a desmandar con las mujeres, y lo peor de todo es que me estaba gustando hacerlo, me encantaba estar entre sus piernas.

Durante toda la semana Helena se empezó a mostrar un pelín irritable, y cada vez más a medida que esta avanzaba. Por otro lado parecía que pasaba algo en el departamento, se hablaban de nuevas contrataciones para ampliarlo y de su reestructuración, o lo que más de uno se temía, que llegara algún enchufado y pretendieran cederle alguno de los grandes clientes de los demás ejecutivos... que por las trazas y los movimientos que se veían era lo más probable, afortunadamente mi cuenta pese a su cuantía era una de las discretas, mas aun dada su obligada rentabilidad segura.

A mediados de semana estuve cenando con Alma y Sandra, por lo visto se había roto el compromiso de Violeta, su prometido se empeño en tener sexo con ella esa noche y se encontró con alguna que otra sorpresita en el cuerpo de su recién estrenada prometida, aunque lo de estrenada es un decir. Parece que el maratón que se pego conmigo y con los dos camareros dejaron profundas huellas en su cuerpo y orificios... de modo que su prometido la pego la patada en el culo. El escándalo que se organizo fue tal que según Alma la buena de Violeta se había mudado y todo, cambiado de numero de teléfono... y sin habérselo dicho o dado a nadie, se había esfumado según parecía.

- Yo : Creo que con lo de volver a llamarla para otra juerga me pase...

- Sandra : Si, yo también creo que si... y eso que no sabe que la grabaste…

- Alma : Anda y que se joda la puta esa, por una vez que pruebe de su propia medicina, que ya iba siendo hora...

- Sandra : Por cierto Miguel, ¿Te gusto follarte a Alma? (Me miro fijamente)

- Yo : Si, lo cierto es que si, me encanto follàrmela... (Le sostuve la mirada)

- Alma : Sandra te prometí que no volvería a pasar más, que solo fue un calentón...

- Yo : Por cierto que también me encantaría follar contigo Sandra...

- Sandra : Y no sería mejor con las dos a la vez...

- Yo : Pues mira, ya que lo dices si, seria genial poder follar con las dos a la vez, pero eso mejor después de follar nosotros dos solos, ¿no crees?

- Alma : Miguel… ¿sabes que tienes una cara que te la pisas?.

- Miguel : Lo sé, pero os lo estoy diciendo en serio, me gustaría follar con las dos, y no creo que os sorprenda mucho, ¿o no?

Después de esta conversación ambas se dieron un morreo de escándalo, luego se levantaron y se marcharon a su casa, no sin antes darme un besito en la mejilla y decirme con voz pastosa que se iban a casa a follar entre ellas pensando en mí y en mi polla... Lo que es de ser unas hijas de puta, porque digo yo que les hubiese costado cumplir sus fantasías en ese mismo momento, si mi polla y yo hubiésemos estado encantados con ello.

El viernes por la noche salí con mis vecinitas y su grupito al que poco a poco me había ido incorporando casi sin saber cómo, lo cierto es que por lo que vi en el grupo el único Heterosexual que había salido allí del armario era yo, el resto en su inmensa mayoría juraría que lo practicaban pero no lo decían... que manda cojones con el grupito, eran el mundo al revés.

Una que me mato fue que me fui un momento al servicio y cuando regrese me encontré con que Alma estaba enseñando el video de su "amiga". Menudo cachondeo que tenía todo el grupito con la forma que tenia la niña de, según ellos, estar recibiendo y comiendo salchichón en barra... Incluso una de ella tuvo la ocurrencia de decir que esperaba que estuviese cuidando su línea no fuera a engordar durante los siguientes nueve meses. Estuvieron todos de lo mas graciosos con el video, al final les tuve que decir que se cortaran un poquito después del quinto pase de la película, aquello parecía un cine en sesión continua.

Por cierto que no veáis también el cachondeo que se tiraron todos a mi costa, o más bien a costa de mi "salchichón", ellas se reían, pero ellos empezaron ponerme ojitos, según decían les había gustado mi embutido y no les importaría en lo mas mínimo darle un mordisquito para "matar el hambre". También estuvieron preguntándonos por el camarero del pollòn, ese sí que tuvo un éxito apoteósico, Alma incluso intento hacer una subasta con la dirección del local donde trabajaba el pobre tipo... y ellos empezaron a organizar una porra para ver quién era el primero que se lo calzaba... menudo grupito. Ese viernes la Leona no apareció, aunque por lo que me comentaron era más posible que apareciese un sábado que un viernes.

El sábado por la mañana estuve todo el día tranquilo y relajadito justo hasta el momento en que mis dos queridísimas vecinitas hicieron su aparición en mi casa. Desde ese mismo momento se me termino el día tranquilo, según ellas teníamos que hablar sobre qué hacer con la Leona, que era lo que había pensado para poder entrarle sin que huyera al verme ya que "según yo" la conocía. Estuvieron toda la tarde intentando sacarme información de quien era sin conseguir nada de nada, las pobres se iban frustrando por no poder sacarme nada de nada, y no os digo cuando empecé a pincharlas con ello... Cenamos algo ligerito y ellas se marcharon para arreglarse, cuando regresaron a buscarme me encontraron "arreglado" y se enfadaron, ya que ahora sabían de sobra que tenia ropa mucho mejor que esa, pero me negué en redondo, como podéis imaginar debía de mantener mi fachada de currante ante Helena.

Cuando nos reunimos todos empezamos a darnos una rondita por diversos locales por si hubiese aparecido el día anterior en alguno de ellos, al comprobar que no nos fuimos al que íbamos siempre y al que ella solía ir cuando iba de caza, esperaba tener suerte ese sábado. Estuvieron todos dispuestos a echarme una manita para que me acercara a ella, gracias a dios uno del grupo conocía al encargado de poner la música, así que tuve una idea genial. Cuando entrara ellos se encargarían de tenerla ocupada y lejos de depredadores, en ese momento se hablaría para que tres canciones después pusieran dos temas lentos que es cuando yo aprovecharía para aparecer ante ella abrazándola aunque opusiese alguna resistencia, de ese modo podría hablar con ella sin que pudiese escapar por tenerla bien sujeta. Tendría dos canciones completas, un poco más de cinco minutos para conseguir salir de allí con ella.

Qué bonito es hacer planes, y que fácil resulta que se joda todo desde el principio. Efectivamente esa noche entro "la Leona" con sus ojos brillantes y su andar felino... nos pusimos todos en movimiento pero antes de que mis amigos pudiesen llegar a ella ya estaba rodeada de pretendientes, los dejo a todos de lado en cuanto pudo, mis amigos incluidos, para ir a por algo de bebida a la barra. Se fue a detener justo a mi lado, yo estaba allí esperando el momento que habíamos preparado para ir a por ella, que por cierto estaba por llegar, ya que la segunda canción solo estaba terminando. Estaba acodado en la barra rezando para que no se diera cuenta de que era yo ya que seguro que saldría de allí disparada nada mas verme... pero no tuve esa suerte...

- Helena : Oye perdona, te importa echarte un poco hacia a...

- Yo : (No me quedo otra que moverme con lo que me vio bien visto) Claro Leona, ahora mismo...

Helena se quedo con la boca abierta de la sorpresa, no sé si por verme allí o por haberla llamado Leona... Lo cierto es que yo pensaba haber tomado la iniciativa con ella al sorprenderla así, y resulto al revés. En ese momento empezó a sonar una canción lenta, la leona... perdón, Helena me cogió por una mano y me arrastro a la pista de baile como si fuese un pele, en parte por la sorpresa por su acción, ya que no me lo esperaba para nada, esperaba una batida en retirada y no esto otro...

- Helena : ¿Qué coño haces tú en un local de estos?

- Yo : Tomar algo con unos amigos y amigas, ¿que quieres que haga?

- Helena : ¿Eres Gay?

- Yo : ¿Y tu puta?

Me soltó con la sana intención de sacudirme pero no le permití mover casi la mano, se la sujete con fuerza al ver sus intenciones... simplemente la dije un seco "estate quieta y sigue bailando, no des el espectáculo"...

- Helena : Me has insultado cabròn

- Yo : De eso nada, solo te he puesto en tu sitio, eso ha sido una bordería

- Helena : Pero qué coño dices, esto es un local de ambiente, solo era la pregunta obvia...

- Yo : Y tú eres "la leona", cada noche que apareces por un local te vas con uno o con varios a sus casas a follar, independientemente de que sean hombres o mujeres... la pregunta por tanto también era obvia, ¿no?

- Helena : Touche, estamos empatados en preguntas incomodas, ¿y ahora?

- Yo : Pues ahora en cuanto te canses de seguir bailando nos podemos ir a tu casa, a mi casa o a un hotel a follar, donde tú prefieras...

- Helena : Pero tú qué coño te has creído anormal

- Yo : Pues que o nos vamos a follar los dos, o el lunes toda la empresa conocerá a la leona... eso me he creído, zorra...

- Helena : De acuerdo hijo de puta, iremos a un hotel que yo te diga... por fin vas a poder follarte a tu jefa...

- Yo : Y para qué coño quiero yo follarme a esa estúpida, a quien yo me quiero follar hasta reventarla es a la Leona, a la otra te la dejas en casita... guapa…

Vi como me miro sorprendida tras eso, no dijo ni media, solo siguió bailando conmigo hasta terminar la canción. Tras ello me cogió por la mano llevándome con ella, Alma y Sandra me guiñaron un ojo cuando pase por su lado, también me dieron las cabronas de forma disimulada un azotito en el culo como gesto para desearme suerte. Creí que Helena no se había dado cuenta, pero no, se dio perfecta cuenta de todo...

- Helena : Y esas... ¿amigas tuyas?

- Yo : Si, y tranquila que nadie sabe quién eres, para mis amigos solo eres la leona, nadie te conoce...

- Helena : Y no podrías mejor intentarte follar a alguna de ellas y dejarme a mí en paz...

- Yo : No, la verdad es que no, en estos momento a quien de verdad le tengo ganas es a ti, además a una de ellas ya me la he follado y la otra... bueno eso quiero también, de hecho en ello estoy. (Vi que respingaba un poco por la respuesta)

Me llevo a un hotel en las afueras, bueno más que un hotel eso era un picadero, pero tampoco iba a ponerle pegas para nada. Me registre, pague por adelantado y cogiéndola de la mano subí con ella a la habitación. Entramos dentro y según cerramos la puerta se empezó a desnudar diciéndome que me desnudara también a ver si terminábamos pronto para que se pudiera volver al local de nuevo a buscar a alguien... No lo pude evitar, me empecé a reír a carcajadas después de escucharla, y no veáis que cara de mala ostia que puso la jodìa con mis risas...

Cuando me acerque a ella e intente besarla retiro la cara diciéndome que sin besos, que solo era sexo, que me diese prisa en metérsela y correrme, para luego poder ocuparse de ella misma. Tanta bordería me empezó a joder a base de bien, así que pensé que si la señora quería eso, eso era lo que le iba a dar. Una vez los dos desnudos la abrace haciendo que girara sobre si misma dándome la espalda, entonces la apreté contra mi mientras la empezaba a besar y morder el cuello, una de mis manos sujetaba las dos suyas contra sus pechos con todas mis fuerzas para evitar que se soltara.

La otra mientras había acudido rauda a su coño, acariciándola, rozándola, masturbándola e introduciéndose mis juguetones dedos en el, que se empezaba a mojar a toda velocidad. Poco a poco y aun intentando evitarlo, algunos gemiditos ahogados se escaparon de su garganta, su culo estaba pegado a mí. La polla la tenia durísima, situada entre mi estomago y su espalda, parecía que estuviese intentando hacer palanca para que nos separásemos y poder buscar como entrar en la Leona. Empecé a moverme despacio, intentando que esta abandonara su sitio para ir bajándose, al final logre meterla entre sus cachetes... rozándola, acariciándola, calentándola.

Mientras mis dedos la trabajaban el coño y mi polla se restregaba por su culo la otra mano estaba ocupada sujetando sus brazos juntos por las muñecas, entonces la deje libre yendo mi mano a magrear sus pechos, en especial sus mas que endurecidos pezones. Sus manos se movieron rápidas, una de ellas fue directamente a mi cabeza supongo que para evitar que dejara de besarla el cuello, mientras que la otra acudió a cogerme la polla, no la deje llegar ni a un sitio ni a otro, cuando estaba a punto de llegar a cogérmela, la empuje sobre la cama con cierta energía, trastabillo por la sorpresa, quedando de rodillas sobre ella, que era lo que yo quería.

Antes de que pudiese reaccionar me situé tras ella, puse mi polla en la entrada de su coño y se la metí hasta el fondo, dejando escapar Helena un jadeo increíble al sentirse penetrada hasta lo más hondo de un solo empeñon. Enseguida empecé a moverme en su interior mientras ella se limitaba a gemir y jadear, fuera de eso no dejaba escapar ni una sola silaba. Estaba claro que estaba intentando contenerse todo lo posible con sus expresiones de placer. Me dedique a follàrmela todo lo mejor que sabía hacer, además estaba dispuesto a poner toda la carne en el asador con ella, era como una especie de reto.

Seguía fòllandomela sin cesar, manteniendo un ritmo cómodo para mí y que veía que a ella le gustaba pese a que intentaba disimular todo lo posible. Alcanzo un orgasmo donde ya no pudo controlarse más soltando un alarido de placer, agitándose por completo, calendo derrengada sobre la cama, saliéndose mi polla de su coño al caer Helena jadeando. Me tumbe con cuidado sobre su espalda, sosteniéndome con mis brazos mientras la besaba el cuello y el principio de la espalda, pasándola la polla por entre sus piernas, frotándosela con cuidado de que no la resultara incomodo en ese primer instante tras el orgasmo.

Enseguida note cuando empezó otra vez a mojarse, ella no decía ni media, pero mi polla poco a poco empezaba a chapotear cada vez que se paraba a restregarse en su coño. Me di cuenta de que estaba mordiendo la almohada intentando ahogar sus gemidos... me sonreí para mí al ver sus esfuerzos por no dar su brazo a torcer y abandonarse a disfrutar conmigo como su solo fuese uno más, solo se estaba limitando a dejarse follar por mi sin participar, o al menos intentaba hacerlo lo menos posible. También me di cuenta de otra cosa curiosa, tanto se estaba oponiendo a mí, tanto era su afán por evitar gozar y que yo me enterase, que lo único que estaba logrando era agudizarlo más, hacerlo todo más intenso cuando la alcanzaba el placer del orgasmo.

Cada vez que le pasaba la cabeza por su raja y apretaba un poquito su coño con la punta de la polla, este parecía que este quisiera tragársela entera de un solo bocado, juraría que sentía como si intentara succionármela para dentro. Después cuando la sacaba, pasaba la puntita que estaba completamente empapada por su clítoris, frotándoselo con ella, provocándola una cadena de jadeos y escalofríos en toda ella. Tras eso mi polla pasaba de nuevo al inicio para ir a pararse en la estrecha entrada a su culito, que también parecía palpitar con vida propia.

Poco a poco empezó a meterle cada vez mas trozo en el coño, ella empezó a arquear el culo cuando se lo punteaba, retirándome después, poco a poco su cara empezaba a mostrar desagrado por la situación, por no estar metiéndosela hasta hacerla reventar y estar en lugar de eso jugando con ella como un gilipollas. Me acomode para poder sostenerme solo con una de las manos, la otra la pase por debajo de su cintura hasta alcanzar su clítoris, que empezó a pellizcar con suavidad... cuando se arqueo al sentir el primer latigazo de su clítoris fue cuando se la metí hasta dentó, empujándola sobre la cama con mi embestida...

De sus labios esta vez se escapo un "Argghghhhhhhhhhhhhhhhhhhh" de placer contenido seguido por varios gemidos que intento ahogar con la almohada una vez más procurando a la vez estarse lo más quieta posible. Empecé a moverme dentro de ella a la vez que con mi mano seguí trabajándola el clítoris sin cesar, poco después se corría otra vez, esta vez fue como una eyaculación por la cantidad de flujo que expulso, mi polla al entrar y salir de ella empezó a desparramarse por su perineo con rumbo a su culito… toda su espalda estaba perlada por el sudor… esa imagen me puso todavía más caliente si cabe pese a todo el trote que ye llevaba.

Cuando ambos descansamos un poco, le hice darse la vuelta y me situé sobre ella, mirándola directamente a la cara, a los ojos, y en esa posición volví a entrar en su interior, mientras nuestros ojos estaban fijos en los de otro. Una vez dentro del todo me empezó a mover despacio, delicadamente, suavemente... se mordía los labios para no soltar ni media, yo solo la miraba. Poco a poco fui acercando mi cara a la suya, su boca no se abrió, según me acercaba mas su boca se cerraba con más fuerza... y sus labios se apretaban más para no dejar escapar el más mínimo ruido... aunque sus ojos delataban lo que estaba sintiendo. Lentamente mi boca se fue abriendo mientras que aceleraba las embestidas... cuando pensó que iba a besarla en los labios lo que realmente hice fue coger su barbilla con mi boca, acariciándose con los dientes... mientras que me movía todavía dentro de ella, acompasándose por completo de forma instintiva a mis embestidas para intentar lograr un mayor placer... se arquero de repente, dejando escapar un nuevo gemido seguido por un grito ahogado de placer, mientras que yo me vaciaba dentro de ella por completo.

Quedamos ambos jadeantes, sentí como instintivamente me abrazo nada mas corrernos los dos... sentí como su boca se entreabría jadeante, sentí su aliento en el lóbulo, sentí como resoplaba por el esfuerzo. Esto solo duro unos segundos, ya que enseguida que se dio cuenta abandonando su postura, relajando los brazos a lo largo junto a su cuerpo, retomando su aparente frialdad conmigo. Cuando me levante ella hizo lo propio, aunque supongo que debió de pensar que aquí se terminaba todo porque hizo intención de coger sus ropas cuando la sujete por la cintura desde atrás, cogiendo con mis manos sus dos pechos, diciéndola al oído...

- Yo : Todavía no hemos terminado Leona... ahora quiero tu culito...

No sé que pensaría ella, pero lo cierto es que no dijo ni media palabra al respecto, ni a favor ni en contra, solo se dejaba magrear los pechos. Mis dedos se cerraron sobre sus pezones, sujetándolos entre el índice y el pulgar, frotándoselos como si fuesen los diales de una radio... tardo un buen rato en volver a perder su compostura, empezó pronto otra vez a gemir y jadear de forma contenida. La volví a tumbar sobre la cama, entonces una vez colocada fue cuando situé mi polla en su culito, la puntee un pelín y le dije al oído...

- Yo : Prepárate Leona... te la voy a meter hasta el hígado... te lo voy a destrozar...

Empecé a empujar lentamente introduciéndola el inicio del glande mientras veía como sus manos apretaban con fuerza los bordes del colchón y como mordía la almohada y su cuerpo se tensaba por completo a excepción de su culito, que intentaba mantener relajado para evitar que se lo destrozara al meterle la polla. Me di cuenta en ese mismo momento que estaba perdiendo la partida con ella... me la estaba follando pero yo no lo estaba disfrutando para nada y no me refiero a lo físico, era otra cosa, era como... no se... quizá como follarse una muñeca hinchable, pero de carne y hueso, era follarse a un ser sin alma, ella solo se dejaba hacer... y esa sensación no me gustaba nada, ni en lo más mínimo, no era eso lo que quería con ella. Me di cuenta de que debía de cambiar de táctica con ella si quería algo más.

Si quería disfrutar con ella fòllandomela no podía seguir así, desde luego que chantajeándola podría follàrmela todo lo que me diese la gana, pero no veía incentivo ni aliciente en algo como esto de ahora, tenía que cambiar de táctica o no conseguiría nada de nada. Me levante retirándome y dejándola sorprendida por completo. La dije que se duchara ella primero se quería, que luego lo haría yo, no dijo ni media, se limito a recoger su ropa interior e irse hacia la ducha. Espere a asegurarme que se estuviese duchando y el agua hiciese bastante ruido, me asalto una sospecha al ver cómo me miro antes de entrar al baño, así que me asome por la puerta para ver que hacía y vi que era lo que sospechaba, estaba bajo la ducha esperando claramente a que yo entrara para terminar lo que deje a medias cuando me levante, incluso prácticamente ya se había colocado en la posición perfecta para que pudiese “sorprenderla”, pensé que desde luego iba dada conmigo, si creía que me podría manipular así de sencillo.

Recogí toda su ropa, dejándosela bien colocada sobre una silla, y luego puse su bolso sobre una mesita. Después salí con cuidado de cerrar la puerta sin hacer ruido, al llegar a la recepción pedí papel y un sobre, deje una nota para que le entregaran cuando fuese a devolver la llave. Aproveche la circunstancia de que acababa de dejar un taxi a unos clientes para irme en el. En el escrito que le deje, le decía que no se preocupara, que no diría nada a nadie sobre ella y lo que había pasado entre los dos, que no sufriese por su reputación de fiera. Después la desee buena caza cuando regresara a por alguien, también le asegure que no se preocupara, que para asegurarme de no dejarla mal, esa noche no me buscaría a nadie más para poder desahogarme del calentón y me iría directo para casita. Si no me equivocaba mucho, esta aparente “cortesía” por mi parte hacia ella se la tomaría mal, pero que muy, muy, muy, muy mal.

Al día siguiente aparecieron a comer mis dos vecinitas, nada más sentarnos con unas pizzas empezaron el interrogatorio. Pero no como yo creí que lo harían, por cómo era la leona follando, como había sido la noche, si de verdad era para tanto, si era tan fiera como se decía, etc… Pues no, no me asaltaron con nada de eso, sino que empezaron preguntándome directamente qué coño era lo que le había hecho a la Leona para dejarla en el estado en el que llego después de haberse ido conmigo, lo que me descoloco por completo, no sabía a qué se referían, de modo que les pedí que se explicasen. Por lo que me dijeron, la Leona regreso al local de un humor de perros, entro directamente buscando presa, pero por alguna razón ninguna le parecía convincente para esa noche pese a que según mis vecinitas le entraron varias y varios de lo mas “jugosos”... Pero no hizo ni caso de nadie, era como si su pensamiento estuviese en otro sitio, al final se fue sola y todavía muchísimo más cabreada de lo que entro. Según las dos jamás se había comportado así nunca, por mucho que su amante de turno le hubiese fallado, y mucho menos volver para luego irse sola... tras eso se me quedaron mirando esperando respuestas...

Solo me eche a reír a carcajadas al darme cuenta de que mi plan había funcionado a la perfección... le había sacado de quicio con mi notita, así que ahora me debía de tener entre ceja y ceja. Aunque ya veríamos por donde salía todo esto el lunes cuando coincidiéramos los dos en el trabajo.

CONTINUARA