Tiempo de cambios (2)

Jenny ya ha empezado a tomar decisiones... pero no parece que vayan a dar el resultado que esperaba.

  • Señor Alvarez, tiene una llamada de la señora Fernández

  • ¿Fernández? ¿Qué Fernández?

  • La señora Jennifer Fernández

Oh, dios! la histérica esa otra vez... joder, ya me había olvidado de ella... tampoco he podido localizar a Diego aún. En fín.

  • Vale, pásamela... Hola Jenny, ¡cuanto tiempo! Se me pasó llamarte. ¿Has podido solucionar algo?

  • Te llamo para decirte que estoy de acuerdo

  • ¿Perdón? ¿que estas de acuerdo en qué?

  • En lo que me dijiste. Seré tu puta.

¿Qué se puede contestar a una proposición asì? Sinceramente ya ni recordaba que la idea fue suya. ¿Cómo se te queda el cuerpo? Pasada la sorpresa inicial, la mente empieza a elucubrar sin freno.

  • ¿Seguro? ¿Estás convencida?

  • Si, necesito tu ayuda, seré lo que quieras... pero ayúdame

  • No te hagas la lastimera... ya no me convence, Jenny.

  • ¿Qué quieres que haga?

  • Ya te diré. Esta tarde nos vemos

  • ¿No puede ser ahora?

  • Ahora estoy trabajando... pero tampoco tengo porque darte explicaciones. A las 4 estaré allí.

  • Te espero.

Lo dicho. La mente se dispara. Mil pensamientos en tropel. Mil dudas. No todos los días recibe uno una oferta como esa... ¿te arrepientes? ¿pasas? ¿será una broma? ¿hay truco?...

  • Laura, por favor, ¿puede venir un momento?

Vamos a ir ordenando las ideas, calculando las consecuencias... No en vano es su rabajo diario, por lo que le contratan. Debería serle también útil en este caso.



  • Hola, pasa

  • No, no te me hagas la amorosa... guarda tus besos para otro

  • ¿Porqué me tratas así?

  • Perdona pero he venido para hablar de “negocios”...

  • Pero yo te quiero mucho

  • No hagas pucheros, no te va a servir de nada.

  • Entonces ¿qué quieres? ¿vamos al dormitorio?

  • No, por ahora prefiero ir al salón

  • Yo creía...

  • No se que planes te has hecho, pero por ahora... Vamos al salón.

Carlos se sentó en el sillón y Jenny fue a hacer lo mismo en el sofá juanto a él.

  • No, no te sientes. Prefiero verte, te has puesto muy sexy para mi ¿no? pues deja que te vea... bien, girate... ¿te da vergüenza?

  • Es que nunca...

  • ¿Nunca te has exhibido? No te lo crees ni tu... o que nunca te has ofrecido como... ¿cual era la palabra?

-...

  • No te he oido, ¿cual es esa palabra que me has dichopor telefono?

  • Puta

  • Eso es... ahora dilo completo... quieres ser...

  • Tu puta

  • Tu solita...

  • ¡Quiero ser tu puta! ¿Contento?

  • Eeeeps... cuidado niña. Si no lo tienes claro me lo dices y me voy...

  • Disculpa

  • Me vas a salir muy cara... No serás la puta más cara que he conocido, pero al menos ellas eran profesionales, tu... por ahora solo una calientapollas

  • Carlos, por favor.

  • Nada de favores. Como dicen “esto no es personal, son solo negocios”, así que vete acostumbrando a reprimir tu carácter.

-...

  • No murmures, no me gusta. Pero mejor calla y ponte en bolas

  • ¿Es así como quieres...?

  • Es exactamente lo que quiero... ver lo que voy a “comprar”

  • Carlos...

  • Mira... creo que aún no lo has pensado bien, mejor me voy y ya te lo...

  • No-no, por favor, no te vayas.

Con la cabeza gacha, Jenny fue sacándose el sueter, por encima de la cabeza, y mostrando un escaso sujetador de encaje que ser inferior a lo que reclamaban sus pechos... la minifalda fue cayendo piernas abajo...

  • Es el peor estriptis que he visto en mi vida... ¿Ya está? ¿Porqué paras? No quiero ver tu ropa interior, quiero ver que hay debajo.... Estupendo. ¿estan operadas esas tetas?

  • N-no

  • Pues mis felicitaciones... las había adivinado bastantes veces, pero al natural ganan... ¿Y esa mariconada de recorte de pubis?

  • …¿No te gusta?

  • Es gracioso pero lo prefiero sin pelos... pero eso lo dejaremos para luego, me tienes la polla a reventar, así que ven y arrodillate.

  • Yo creía que ibamos a follar..

  • Tú creías, tu creías... ya supongo que te has hecho muchos planes pero no has contado conmigo... Yo pago, yo pido... de rodillas.

  • Me da asco

  • ¿Qué? ¿Me estás diciendo que nunca se la has comido a Diego? No me extraña que te haya dejado... lo siento pero eso es imprescindible para cualquier puta... ¡Arrodillate!

Jenny se acercó y quedó de rodillas entre las piernas de Carlos... con su brazo se cubría el pecho.

  • ¿Y? ¿He de decirtelo todo? ¿Tampoco sabes abrir una bragueta? Sácamela ...y acércate que quiero tocar esas tetas.... Oh, dios... que bueno...están deliciosas. De vicio.

  • No puedo, Carlos, no puedo hacerlo

  • A ver, Jenny, me vas a comer la polla... y me la vas a comer muchas veces, así que vete acostumbrando a su sabor... saca la lengua y repasamela de arriba abajo

  • Voy a vomitar

  • Pues vomita... al final te acostumbraras.

  • Ese líquido...

  • Como sigas poniendo esa cara de asco me vas a destrempar y me largaré... ¿te molesta ese líquidito? Ya está, ves, como maquillaje te queda genial... Comienza ya o largate y dejame en paz

Jenny comenzó a recorrer con la punta el tronco...

  • ¡Que no es un polo, tía!.... A ver,¡abre ya la puta boca!

En cuanto Jenny entreabrió su boca, Carlos cogió su cabeza con ambos manos y la encajó en su polla. La movió arriba y abajo varias veces mientras Jenny intentaba detenerlo forzando con sus manos sobre los muslos y las arcadas se sucedían... Carlos la tomó del pelo y le miró fijamente

  • ¿Ya has visto como se hace? Pues ahora tu solita... No, no, no quiero que me des una paja... las putas manos en la espalda... ¡cómeme la polla!... Eso es, mucho mejor... Más adentro, puta... tienes una boca deliciosa, creo que no aguantaré mucho

  • Por favor, no te corras en...

  • ¿Porque dejas de mamar, puta?... Eso... está bien, ya te acostumbraras a beber leche pero ahoraaaa...

Cogiendola del pelo la separó justo cuando la polla comenzaba a escupir... su leche inundó la cara de Jenny

  • Joder!... si que tenía acumuluda.... sht-sht-sht!!... ni se te ocurra.. no te limpies aún... me gusta la imagen... ¿dónde tienes tu móvil?

  • No, Carlos

  • Si, Jenny... Ya no me digas nada más... ahí... lo veo, no te muevas... Mmm... deliciosa... esto vale para salvapantallas, ni se te ocurra borrarla... Vamos, dale un beso a la polla y guárdamela... espera, quieta... vale, sigue... ahora me enviare las fotos al mio... ni se te ocurra borrarlas de tu móvil.

  • ¿Me puedo limpiar ya?

  • Un momento, ya te destapo yo el ojo... listo, pero déjate el resto, ya que vamos a hablar de negocios, mejor que lleves puesto tu “uniforme de trabajo”