Tía querida

Sobrino consuela a tía viuda.

Viviamos en casa: Papá y Mamá, mis tios: Pedro -hermano de Mamá- y Gloria -hermosa señora de 50 años, con lindas lolas, hermosa cola y una piernas bien formadas y yo, hijo y sobrino único que al inicio de esta historia tenia 17 años.

En mi adolescencia miraba a Gloria y el poder vislumbrar el contorno de sus lolas o el tamaño de sus lolas, me producian una calentura que concluia en una masturbacion en mi cuarto.

Yo, siempre fui colaborador en las cosas de la casa, pero me esmeraba mas cuando ayudaba a mi tia Gloria.

Pedro fallecio de imprevisto. Un ataque cardiaco, terrapia intensiva. Velatorio. Cementerio.

Gloriabquedó sola y continuó viviendo en casa. Su soledad nos acercó mas. Pasabamos largo tiempo conversando sobre trivialidades, pero, yo, miraba, admiraba y deseaba ese cuerpo de mi tia.

Una tarde de sabado -pareciera que los fines de semana son propicios para la melancolia- nos encontrabamos solos -mis padres viajaron hasta el lunbes siguiente-y Gloria en su cuarto sollozaba, casi en silencio.

Entré a su cuarto y la encontré sentada frente a su escritorio, cubierta por un desabillé blanco que tenia un buen escote adelante -permitia mirar el canal de sus pechos- y la espalda semicubierta. Sus muslos estaban casi decubiertos y su pelo caia sobre sus hombros. Mirarla me puso al mango. Me acerqué y parado a su lado la abracé por los hombros, quedando su cabeza, casi sobre mi miembro que estaba duro. Le pregunté que le pasaba, ella contestó que extrañaba a Pedro, yo acariciaba sus hombros y acercaba mi verga a su rostro. La abracé hasta pegar su cabeza contra mi cuerpo y le dije al oido: Gloria, ya va a pasar, veni, y la puse de pie. ella, con un brillo en los ojos accedió y al pararse me tomó de la cintura. En esa posición, la miré a los ojos, tomé sus caderas y apreté su cuerpo contra el mio tratando de colocar mi verga sobre su monte de venus, le dije: Gloria, lo que necesites, puedes pedirme, lo que necesites. Ella, dejó mi cintura, tomó mi rostro y me besó deliciosamente en los labios. . Sos un amor, sobrino, sos un amor. Besé su cuello, acaricié sus nalgas jugando con el borde de su tanga y le contesté Yo quiero ser Tu AMOR, mientras mi mano apretaba su culo y mi boca buceaba entre sus lolas.

Sos un chico muy joven, pero, a mi me gustas mucho, decia mientras su boca besaba mi cuello y su mano desprendia mi camisa. Cuando mi mano llegó a su concha la encontré muy mojada, meti el dedo por el borde de la tanga, lo humedeci, saqué y lo lami. Esto?:es por mi ? pregunté. Si amorcito, hace mucho que estoy caliente por vos. fue su confesion. Quité su camison, su tanga y la acosté sobre el lecho. Besé sus ojos, sus mejillas, su cuello, mientras mis manos recorrian su cuerpo, acariciando sus pechos, su abdomen y su clitoris en forma sucesiva. Gloria suspiraba primero, jadeaba despues y cuando yo apretaba su clitoris llegó a un orgasmo delirante. es hermoso, amor, es hermoso. La abracé.

Ella me pidió me desvistiera y cuando lo hice, ella se levantó, caminó unos pasos y me preguntó: alguna vez, pensaste que podias tenerme en la cama? mi respuesta fue afirmativa: hace mucho tiempo que pienso que este momento debia llegar. y vos? pensaste que ibas a coger conmigo? Pensé muchas veces, respondió, me masturbé recordando tu cuerpo de varon joven, pero, no creia que tuvieras la madurez como para hacerme gozar. Me equivoqué. Recien comenzamos y ya tuve tres orgasmos, no quiero pensar cuantos tendré hasta la noche. Yo agregué: o hasta la mañana, Me beso intensamente y sus caricias se repartieron desde mi cuello hasta mis testiculos. Lamió mi verga, cuando estaba al palo se sentó sobre mi, se la puso despacio dentro de su concha mojada y caliente y sus pechos estaban colgados sobre mi. Los apreté con ganas y acariciaba sus pesones. Gloria entró en una serie de orgasmos y yo al borde de la eyaculacion. Voy a acabar, le dije y ella, entre orgasmo y orgasmo me gritó: llename de leche, amor.

Me dejé llevar y ella me condujo al septimo cielo. Eyaculé en forma abundante y espeso. Ella, me acariciaba las tetillas y decia: es hermoso sentirte adentro, amor, ahora soy tuya, amor, siempre voy a ser tuya.

Nos abrazamos, y dormimos un par de horas. Sentí caricias en mi pene y desperté. Gloria me estaba haciendo una fellatio con suma delicadeza. Acaricié su cabeza para demostrarle que estaba despierto y tomé sus pechos para apretarlo y acariciarlos suavemnet en forma alternativa. Gloria gemía y dejando por un monento su juguete bucal dijo: quería desayunar leche fresca y siguió su labor. Fue divina, me hizo acabar como nunca lo habia hecho y se tomó toda la leche, no derramó una sola gota.

Nos abrazamos, nuestros besos eran interminables y comencé a recorrer su cuerpo desde la cabeza al clitoris. Abrió las piernas, me ofreció su vulva apetitosa y comencé, suavemente a chuparla. Gemia, gritaba, lloraba y llegaba al orgasmo en forma repetitiva. sus jugos chorreaban sobre mi boca y sus manos se enredaban en mis cabellos. Mucho, amor, dame mucho! eran sus gritos. Llegó a un orgasmo final estentoreo y quedó como desvanecida. Volví a su lado, la besé suavemente y ella me ofreció su boca. Nuestros jugos se combinaron en nuestros labios con un efecto afrodisiaco. Gloria: sos un angel, te adoro. eran mis palabras. y ella, no se quedaba atras con sus elogios: sos un macho con todas las letras, Gracias, por hacerme tu mujer. Volvia a besarla y mis manos se posaron en sus gluteos, para acariciarlos con frenesi. . Te gusta mi cola ? preguntó y antes de que le contesté me dijo, mientras besaba mi oreja: esta noche, lo vas a estrenar. esta virgen y a vos te lo voy a dar.

habra otro capitulo sobre GLORIA de COGERSE A LA TIA.