Tesoro en konoha parte9
Historia basada en el anime naruto
"No, no soy un héroe… Shizune-neechan, yo, yo no hice nada, fue Itachi Uchiha quien te salvo… Yo, yo no soy ni un héroe, ni mucho menos, seré uno para esta ald Dijo el rubio intentando apartar la mirada de la kunoichi, esta solo acaricio la mejilla del chico, en un gesto cariñoso. "Esta bien, Naruto-kun… Esta bien, solo quería que lo supieras." Naruto sonrío ante el gesto cariñoso de la asistente de la Hokage, en ese momento fueron entrando sus amigos, y hasta algunos de sus senseis. Hubo todo tipo de reacciones, algunas positivas, otras negativas, sin duda las que mas sufrieron fueron Hinata, Sakura y Tsunade. Y pasaron varios días, y finalmente el rubio pudo salir del hospital, pero con la condición de que no hiciera nada peligroso. Las cosas se calmaron en la aldea, en cierto modo, pero la vigilancia en las calles, era mucho mayor, los aldeanos notaban mucho la presencia de los anbus patrulla por la noche, se había instalado una ley marcial, que la Hokage tuvo que aprobar, aunque no lo creía oportuno, bajo la presión de Danzo, los consejeros y en ultima Señor feudal. Naruto regresó a su casa, en cierto modo se sentía extraño. Algo desorientado, habían pasado muchas cosas los últimos días, y aunque las cosas parecían mas tran confiaba, tenia miedo de que le ocultaran información, para protegerle. Y se encontraba pensativo en su casa, tumbado en la cama. Cuando entonces, un ruido le asusto, alguien estaba golpeando la ventana de su habitación, el rubio asustado fue a mirar quien fue que golpeo la habitación, la sor mayúscula, cuando vio a la Sannin, en su ventana. "¿Tsunade-chan, que haces aquí?." La rubia sonrío levemente. Naruto rápidamente dejo entrar a la Hokage, apresuradamente. La rubia entró y cerró la ventana. Naruto la miró confundido y con una sonrisa, ya que no esperaba se abalanzó sobre el, y lo besó con locura. "Te extrañaba, te extrañaba horrores." Susurro ella en un audible susurro, que al rubio le provoco un fuerte sonrojo en sus mejillas. Naruto acaricio la mejilla de la rubia. "Yo también te extrañaba, estaba… estaba preocupado." Dijo el correspondiendo al abrazo de la mujer "Estoy aquí para cuidarte… En calidad de enfermera particular." Susurro ella juguetona con un tono pícaro, en su oreja. El rubio dejo escapar una risita. "¿En serio?... Nunca, he tenido una enfermera personal." Tsunade acaricio los labios del chico, con su dedo índice. "Prohibido hablar, eres mi paciente y hasta que yo no diga lo contrario, no podrás hablar." Naruto se callo al instante, mirando a la rubia. Esta lo arrastro de nuevo a la cama, ella se subió encima de el, y no paso mucho tiempo, cuando ambos, empezaron y pronto estaban haciendo el amor, salvajemente, llevados por una pasión de deseo y lujuria durante horas, sin descanso, como dos amantes. A la mañana siguiente, la Hokage tan pronto amaneció, se marcho de la casa del rubio, silenciosamente. El rubio durmió unas pocas horas, y después acudió al entrenamiento con su equipo, Después al acabar el entrenamiento, el chico fue a saludar a la Hokage, esta lo una sonrisa, y allí estuvo unos minutos. Después regreso al entrenamiento con su Kakashi y Sakura. Y al acabar casi al anochecer, el joven regresó a su casa… Por la noche finalmente, ya entrada la noche a visitarlo y así permanecieron juntos toda la noche, entregándose al placer del sexo. Los días pasaron poco a poco con esa rutina, por la mañana Naruto y Tsunade mantenían una relación amistosa, casi familiar, muy cercana a madre e hijo, y por la volvían auténticos amantes. Paso rápidamente un mes… Aquella tarde, la Hokage estaba reunida con el señor feudal, y sus consejeros y Danzo. En una de las salas privadas. "Ha pasado un mes del ataque de Itachi Uchiha, y del apuñalamiento de Naruto Uzumaki." Dijo uno de los consejeros. "Creo que es hora, de volver a nuestro proyecto, debemos volver a las actividades programadas, y que las mujeres vuelvan a ser mujeres del pueblo." Finalmente dijo uno de los consejeros, Tsunade sintió un escalofrío en su interior, ella temía que tarde o temprano esto podía suceder, y le asustaba las consecuenc traer en el rubio.
"Creo que no es muy buena idea, por ahora… Debemos esperar." Danzo río suavemente. "¿Esperar? ¿Esperar a que Hokage-sama?... Acaso, usted ¿esta pensando en renunciar a su obligación?." Tsunade encaro al anciano, con una mirada de desprecio. "¿Cómo te atreves a decirme eso?." Danzo solo negó con una sonrisa. "Hokage-sama, no olvide que estamos en crisis, y debemos promover un aumento de natalidad, para disponer en un futuro de una sólida base de ninjas, es una lab importancia… Insisto en que deberíamos rebajar la edad de los 16 años, a los 13 o los 14, y empezar a concienciar al pueblo sobre nuestra actividad." Tsunade golpeo la mesa, muy molesta por el comentario de uno de los consejeros. "¡NO DIGA ESTUPIDECES… SON NIÑOS!" Danzo carraspeo. "No Tsunade-sama, son aldeanos de Konoha, y lo único que queremos, es instarles a que cumplan un servicio por su aldea… Estoy totalmente de acuerdo con el co Tsunade miro con aun más desprecio al anciano. "Si Sarutobi-sensei estuviera aquí, el se opondría totalmente a esto." "Pero el ya no esta entre nosotros, Hokage-sama… Debe asumir, la vida sigue, y el pueblo necesita desesperadamente un aumento de natalidad." El señor feudal asintió ante las palabras de Danzo. "Eso es cierto, somos el País de Fuego, somos el País más fuerte, y nuestra aldea, es la aldea más poderosa, debemos asegurar el futuro de nuestro pueblo, creo q dice Danzo y sus consejeros." Tsunade quedo sorprendida, no daba crédito, el Señor Feudal que siempre había sido un hombre mucho mas neutral y calmado, apoyaba la idea fanática de Danzo. "No, no, no puede permitir esto… ¡Es horrible!" Dijo Tsunade escandalizada y horrorizada… Danzo solo le dedico una sonrisa cínica a la Hokage. "¿Por qué?... ¿Por qué va a ser horrible? No vamos a obligar a ninguna persona a hacer algo en contra de su voluntad, solo deseamos que el pueblo se conciencie d grave que tiene la aldea, y que debemos solucionar nosotros mismos. ¿Es que usted no lo ve así Hokage-sama?." ¡No seas tan cínico Danzo!" El Señor feudal tosió para que todos le escucharan. "Tsunade-sama, comprendo su postura, pero creo que la propuesta de Danzo tiene su lógica, deliberare sobre ello y tomare una decisión, y se la comunicare en los a todos ustedes." "Cambiando de punto, ¿Cómo va el asunto de Itachi Uchiha?... ¿Tenemos novedades?." Pregunto seriamente el señor Feudal, uno de los consejeros respondió. "No, señor, no tenemos nada… Pero estamos investigando, y pronto daremos con el." Danzo clavo sus ojos en los de Tsunade. "Yo sin embargo creo que este asunto, no lo estamos tomando por el camino correcto, y si la Hokage estuviera dispuesta a colaborar, seria mas fácil." Tsunade sintió un escalofrío ante las palabras de Danzo, ella se dio cuenta, que ese viejo sabia mas de lo que aparentaba. "Bueno, bueno… Sigan investigando el asunto de Itachi Uchiha, y en unos días, les daré mi decisión sobre el asunto que hemos tratado, doy por acabada la reunión Todos estaban saliendo del lugar con sus pensamientos, Tsunade muy preocupada, se llevo la mano al pecho… Ella estaba tremendamente preocupada, de repente nausea muy fuerte, y comenzó a vomitar. Danzo, el señor feudal y los consejeros se la quedaron mirando. "Tsunade-sama, tiene mala cara, creo que debería ir al hospital, ver que la sucede." Dijo el señor feudal con palabras amables, esta negó nerviosa. "No, no es nada… Les pido disculpas, no se que me paso." Tsunade se marcho en silencio, un escalofrío recorrió su cuerpo, otra vez esas arcadas y esos vómitos, ella trago saliva, muy asustada y preocupada. ["Si es lo que creo que es… Dios mío…¿Qué hare?.] Mientras en otro lugar… Danzo estaba pensativo, junto con los dos consejeros de Konoha. "No tengo pruebas, pero estoy completamente seguro que fue ese mocoso, el fue quien acabo con la vida de aquellos anbus, y de que Tsunade lo esta protegiendo Dijo el viejo, como reflexión uno de los consejeros lo miro serio. "Es una acusación muy grave, si fuera cierto… Implicaría que uno de nuestros ninjas, especialmente el, por ser el contenedor del zorro de nueve colas, es un traido propia Hokage lo esta encubriendo." Respondió uno de los consejeros. "Si lograra demostrarlo, podría hacer que el señor feudal le despojara del titulo de Hokage a Tsunade, y yo podría ser el próximo Hokage… Y esta aldea prosperaría que debe, aseguraría el futuro de Konoha y yo seria su rey." Fueron las palabras de Danzo, mientras en su mente comenzó a maquinar un plan para arrebatarle el puesto de Hokage a Tsunade. Varias horas mas tardes…
Tsunade se encontraba en la clínica, ella había ido para confirmar lo que ella sospechaba, su mano temblaba con el test de embarazo que claramente indicaba "Posi "Es, estoy embarazada… Estoy embarazada, voy, voy a ser madre." Pronuncio la rubia mientras lloraba, entre la emoción y terror, ante la idea de ser madre, ella deseaba ser madre, pero ella no esperaba serlo hasta dentro de unos el, fuera mas adulto. Ella sintió muchas dudas, estaba aterrorizada, tenía mucho que pensar mucho que decidir, sin dudas esto la cambiaria la vida por completo. "Debo decírselo, el debe saberlo… Pero, pero es tan joven… ¿Cómo lo tomara?." "Yo, yo no puedo hacerle esto, es, es tan joven… Dios mío, ¿Qué debo hacer?." Tsunade se quedo con las dudas en su mente. Al llegar la noche… Naruto esperaba a Tsunade, en su pequeño apartamento, hoy no había podido verla durante el día, por la reunión, y el estaba ansioso de estar "¿Dónde estará metida?." El rubio estuvo esperando cerca de una hora, a medida que esperaba su preocupación aumento, así que decidió ir averiguar, si había pasado algo. Sabiendo la ley m por la ventana, intentando moverse con el mayor sigilo posible. Tuvo que esquivar varias patrullas de anbus, que vigilaban la aldea… El se dirigió directo a la mansión de la Hokage, se sorprendió que no tuviera apenas vigilancia, preocupación y el deseo de ver a la rubia, le hizo restarle importancia al asunto. El joven se coló finalmente en la mansión, y busco la ventana de su dormitorio. El llamo suavemente, esperando que ella estuviera allí. Nadie respondió, mas asust colarse dentro, y empezó a buscarla, cuando oyó ruidos en el cuarto de baño. Naruto corrió hacia el cuarto de baño, al llegar a este, vio que allí estaba Tsunade vomitando, el chico desesperado corrió a sujetarla, quien se sostenía difícilmente cerca del inodoro. "¿Tsunade-chan?... ¿Que te sucede?." La rubia que no tenía buena cara, solo miro al chico con lágrimas, y los ojos muy enrojecidos, su rostro pálido como un fantasma. "Na, Naruto-kun, yo, yo, yo… Perd, Perdóname… Yo, yo, yo… Es, estoy embarazada." CONTINUARA…