Tercera clavada anal a rosalia...

Ayer domingo..., Rosalía la madurita sevillana de 67 años vuelve a disfrutar de mi polla en con su culo..., y en sus pechos con Marga.

Hola de nuevo amigos.

Por tercera vez consecutiva hicimos disfrutar a esta viuda inigualable.

Les cuento los detalles...

Desde el pasado lunes nos mandó mensajes..., de agradecimiento y preguntando por la madre de Marga, que como saben tuvo un percance la semana anterior.

Cuando nos recibió, descubrimos gratamente que algo está cambiando en esta renovada viuda, ya que de vestir algo tradicional paso a tener un vestido más juvenil y un corte de pelo a escala que fue la delicia de Marga.

Desde un primer momento me dejaron casi solo, se abrazaron, rieron y cuchichearon maliciosamente mientras me miraban.

Luego Marga me diría, que Rosalía quería saber si el hecho de haber estado solos el sábado de la otra semana, la había molestado en algo.

Cuando descubrió que Marga es una auténtica mujer liberal, se relajó y mucho...

Como sabia la hora exacta de nuestra llegada, pues le avisamos de la previsión horaria del GPS, nos había preparado de comer una excelente paella de marisco.

Por nuestra parte llevamos nuevamente vino del que le había gustado a nuestra sensual amiga.

Nos refrescamos y comimos.

Después de comer, sobre las cinco decidimos irnos a la cama a disfrutar. Ese es el objetivo primordial de nuestras reuniones sexuales y no nos reunimos a perder el tiempo...

Ver nuevamente desnuda a Rosalía con ese cuerpo maduro, gordito sin exageración, pero muy sensual nos excito tanto a Marga como a mí.

Sin darme cuenta estaban ambas mujeres abrazadas y besándose con pasión, mientras me dejaban de libre..., tocándolas, besándoles sus cuerpos y lamiendo por turnos sus sexos.

No tenía prisa y jugaba a hacer que sus sexos deseasen llegar al orgasmo...

Si notaba que Marga iba a correrse, dejaba de comerle el coño y pasaba al de Rosalía..., haciendo lo mismo...

Estuve pasando de una a la otra durante al menos una hora...

Estaban ambos coños chorreando entre sus lubricaciones y mi saliva.

Ellas por su parte pasaban de comerse la boca a comerse sus pechos.

Los pechos de Rosalía son inmensos lo que da mucho morbo a Marga.

Los pechos redondeados con pezones grandes de Marga también seducen mucho a Rosalía que cada vez es más lesbiana...

En un momento en que se dejaron de abrazar para exigirme sus primeros orgasmos mientras ambas me miraban exigentes..., contemplaba a dos bellas mujeres sensuales y en espera...

Me acoplé entre ambas y metí mis dedos en sus coños al mismo tiempo.

Mis dos dedos corazones se meneaban al unísono entrando y saliendo de sus húmedos y palpitantes coños...

Se debieron de poner instintivamente de acuerdo..., ya que ambas se empezaban a correr juntas..., momento en que unieron sus manos fuertemente, cerraban los ojos y sus caderas se arqueaban de modo reflejo...

Excepcionalmente los dedos de Rosalía como saben..., se doblan de un modo muy peculiar...

Seguía dándoles sin parar con mis dedos a ambas, cuando recordé que a diferencia del coño de Marga, el de Rosalía es más sensible...

Cuando ambas llevaban el tercer orgasmo cambie de juego...

Como tenía mis dedos viscosos y llenos de líquido vaginal y olorosamente agradable..., reforcé aquello con saliva y busqué sus meritorios anos, diferentes de color pero ambos hambrientos de placer...

Sé sin duda de las reacciones orgásmicas de Marga cuando meto mi dedo en su culo..., pero como dos almas gemelas..., el culo de Rosalía empezó a temblar como nunca...

-       Joder, José Miguel que gusto me estás dando... Este culo mío cada vez está más cachondo...

Nos relataba Rosalía mientras tenía ese primer orgasmo anal con mi dedo, que durante toda la semana había disfrutado especialmente con su aparatito en su culo recordando la clavada de la semana anterior...

Nos decía que la sensación tan placentera de su culo es tal, que necesita anteponerla al placer de su coño..., pues este se fatiga mucho antes, mientras que su culo es de menor sensibilidad ante la irritación...

Suplicaba ya mi polla...

No podía decir que no..., como pueden ustedes suponer.

Las sensaciones anales de ambas empiezan a ser muy similares..., pero con una sutil diferencia..., Marga no necesita polla en el culo, mientras Rosalía..., si y mucha.

Nos colocamos en posición...

Rosalía a estilo perrito, mientras debajo de ella Marga atendía sus soberbias y enormes tetas que cogía con ambas manos, llegando a comerle sus pezones al mismo tiempo..., haciendo juntar las dos tetas con sus manos diligentemente.

Mientras Rosalía gemía de placer con la comida enérgica de sus pezones, yo con mis dedos, y el eficaz aliado de mi amigo...,  el bote de lubricante..., empezaba a dilatar el culo de Rosalía cada vez mejor preparado.

Mi polla dispuesta ansiaba entrar en aquel túnel de placer en el que sin duda echaría mi leche acumulada...

Cuando mi polla sin apenas esfuerzo ya..., entró en aquella soberbia cueva trasera sevillana..., el gusto que sentía en mis huevos..., me indicaba una tromba de leche inmediata...

Esperé unos segundos a sentir un nuevo orgasmo anal de Rosalía para correrme..., quería intentar que la sensación de leche caliente iniciará un segundo y consecutivo orgasmo anal...

Esperé paciente e impacientemente al mismo tiempo...

Le follaba el culo despacio, pero sin pausa...

Mi polla la observaba aparecer y desaparecer alternativamente mientras ese orificio anal  recientemente desvirgado...,  se abría clamorosamente ante la entrada de mi excitada y durísima polla...

Su respiración anunciaba el orgasmo...

Sus jadeos sin duda se incrementaban...

Marga incremento sus lamidas, sus aprietes de senos y sus mordisquitos de pezones...

La cadera enorme de Rosalía zigzagueaba cada vez más...

Los dedos de los pies iniciaban su dobladura...

Apreté un poco el ritmo...

Me sentía correr, pero quise aguantar y congestione los músculos interiores de mi pelvis...

Rosalía ya no aguantaba más...

-       Uhm..., me corro..., uhm..., que gusto... Joder... dale más fuerte José Miguel, por favor...

Eso estaba esperando...

Empecé a darle más fuerte..., más fuerte..., mucho más...,  mientras ella se corría como una posesa viciosa...., sin emitir un grito de placer entrecortado pues se mordía los labios...

Nos diría luego que no quería alertar a una de sus vecinas que esta algo mosqueadas con nuestras visitas... Le diríamos que seguro que es envidia..., y que la próxima vez la invite a follara con nosotros también...

Volvamos al súper orgasmo anal...

Se estaba corriendo sin duda..., luego diría que fue el mejor orgasmo anal que había tenido hasta ahora...

Yo por mi parte, le empotraba toda mi polla con fuerza... y después de unas cuatro embestidas no podía aguantar más...

Mi leche inundo aquel culo en cinco oleadas contadas e inigualables...

No suelo alterarme mucho, pero mi respiración subía de intensidad mientras descargaba la leche...

Rosalía nuevamente arqueaba sus caderas y gemía placenteramente mientras entrecortadamente decía...

-       Otra vez..., joder otra vez..., la sensación de sentir la leche me hace correrme otra vez... joder... coño..., que gusto... joder, coño... Guau...

Lo escribo y solo de recordarlo en esta mañana de lunes..., me hace remover mi polla y que babosee...

No se me olvidaría lamer y tragar  aquella buena ración de leche cuando instantes después le dije que mi bosa esperaba sus posaderas...

Se reía...

El sexo seguía fluyendo...

Rosalía seguía disfrutando...

Así transcurriría toda la tarde... orgasmo vaginal va..., orgasmo anal viene...

Rosalía estaba radiante al final de la tarde noche...

Disfrutamos mucho los tres...

Marga también tuvo lo suyo y mientras me la follaba o le comía el coño, Rosalía se prestaba a lamerle sus tetas y comerle su boca como una experimentada lesbiana bisexual...

Los orgasmos pasaban y el tiempo también.

Nos teníamos que despedir...

La tristeza de Rosalía por tener que irnos, se tornó alegría cuando le dijimos que queríamos que pasase el puente del día 15 con nosotros en casa..., y de paso visitar Aranjuez, que nos pilla relativamente cerca...,  que siempre había deseado visitarlo.

Tendríamos dos o tres días enteros de placer..., si viene el viernes y se va el lunes...

-       Gracias, sois geniales... Me estáis haciendo la mujer más feliz del mundo.

Le anticipamos que invitaríamos a nuestro amigo Gabriel otra máquina folladora...

Su cara era una inmensa luz...

Rosalía..., está descubriendo una nueva vida a sus 67...

Hasta pronto amigos...

PEPOTECR.